T.2 ~vacaciones~
____
Abrí mis ojos ligeramente, sentía dolor por todas partes, sobre todo mi cuello.
Mis manos me dolían, todo mi cuerpo dolía.
Traté de levantarme pero el dolor me lo impidió.
-mierda – vi a Sebastian levantarse de la silla apresuradamente
-¿_-____? – sus manos se acercaron temblorosamente hasta mi rostro acariciándolo lentamente
-si ¿Qué sucede?
Sebastian me abrazó fuertemente dejándome casi sin aire
-m-m-m-me ahogo
-pensé que te había perdido, no quiero que me vuelvas hacer esto – Sebastian se separó de mi permitiéndome respirar mejor.
-¿d-dónde estoy?
-estas e la clínica, te desmayaste después de la pelea con tu madre.
-¿y ella?
-ella también fue internada en este hospital
-me quiero ir
-no puedes
-no quiero estar en el mismo lugar que esa zorra
Nos quedamos en silencio, eso me enojaba aún más.
-ayúdame a escapar de aquí Michaelis
-no lo voy a hacer – su rostro mostraba la determinación, miserable no me va a ayudar.- solo falta un día para que te den de alta
-¿cuantos días estuve inconsciente?
-4 días, de verdad me asustaste demasiado
-si supongo que puedo soportar un día en esta cosa- respiré profundamente y vi hacia la puerta de mi habitación.- no los quiero volver a ver en mi vida
-dudo que ellos quieran dejarte en paz
-los odio, ¿q-que ha sucedido con mi trabajo?
-vino un tal Christofer y te trajo una flores las cuales quemé.
-Christofer, es tan buen chico ¿Por qué las quemaste idiota?
-porque si, ¿debo tener otra razón para quemar flores?
-¿celos?
-supongo – Sebastian se acercó a mi rostro y con su dedo índice recorrió mis labios, deseaba que me besara en ese momento, pero la desgraciada de la enfermera entró en ese preciso momento.
-creo que ya podemos darle de alta, sin embargo, debe venir a control cada dos meses – vendrá a control su madre, no quiero venir a esté hospital jamás- ahora debemos aplicarle una infección
-¡la madre que te pario! ¡Me llegas a tocar con esa aguja y te juro que te tiro por la ventana!
Sebastian
-¡¡pero si tengo agujas incrustadas en mis venas!! - _____ agarró las intravenosas y las arrancó-¡¡mierda!! – su velocidad era impresionante, nunca la vi tan asustada
-ven tranquilízate – traté de agarrarla pero se escabulló de mis brazos.
-me vas agarrar para que la discípula de satanás y su arma mortal se metan en mi piel
-no lo haré
-¡no me mientas Michaelis! - ____ corrió de nuevo, pero esta vez la enfermera corría tras ella
-señorita Michaelis por favor
-espere, espere, espere ¿Cómo me llamó?
-¿u-ustedes no están casados?
-¿Quién le dijo a usted esa barbaridad? Sebastian te voy a aniquilar…- cuando menos pensé, la enfermera le había inyectado en el brazo –m-m-m-m-m-m-me ¡dolió! Moriré de tétano, hepatitis B ¡SIDA!
-son agujas perfectamente esterilizadas, no tiene por qué preocuparse
-¿a usted quien le asegura eso? ¡Nadie! - _____ se acostó en la camilla y se puso las manos como si la fueran a enterrar.-Sebastian, acércate
Caminé hacia la camilla y agarré las manos de _____.
-espero que sepas hasta el último día de mi vida que es hoy por culpa de la enfermera que…te odio
-no seas exagerada, ya te van a dar de alta.
-está bien, pero necesito unas malditas vacaciones.
Después de hacer unos cuantos trámites, salimos del hospital.
-¿A dónde vamos de vacaciones?
-eso es una sorpresa – esperemos que todo salga de acuerdo a lo que he planeado.
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