Sebastian

Llegamos al instituto y pudimos ver a todos nuestros compañeros actuando como una pareja de casados.

-          estas algo distraído cielo- me sorprendí al escuchar a Tn hablándome cariñosamente, de pronto me jalo de mi camisa y se acercó a mi oído- estoy acostumbrada a sacar muy buenas notas en todas las materias, y esta no va a ser la excepción, estoy tratando de actuar lo mejor posible y espero que cooperes- su tono amenazante no me aterraba, me excitaba aún mas

-          entonces actuemos los dos – agarre a Tn por su cintura y ella como buena actriz que es agarró mi camisa y  juntó nuestros labios – ¿sabes? Me excita cuando me hablas de esa manera tan amenazadora

Tn sonrió rápidamente, pero luego se tornó seria.

-          Deja de decir tales barbaridades- sabía que estaba a punto de reír   e iba aprovechar esa oportunidad.

Le di suaves besos en su cuello y ella empezó a reírse de manera descontrolada.

-          S-s-s-s-Sebastian – no podía pronunciar nada ya que la risa no la dejaba – d-d-d-d-detente  p-p-por favor – me detuve y pude deleitarme con una verdadera sonrisa por parte de Tn

-          Me encanta verte sonreír

-          Idiota

-          Parecen recién casados – exclamó el profesor Brown, me cagó el momento – muy bien estudiantes, a cada uno le daré el tipo de pareja  y ya tengo una la cual se va a air en un carro aparte y va a tener mejores beneficios- miré a Tn la cual me miraba de una forma que nunca lo había hecho

-          Tengo algo en el rostro – Tn se percató de que me estaba viendo y miró hacia el profesor

-          N-no, no tienes nada en tu rostro

-          La pareja de recién casados que desea tener bastantes hijos, esa pareja van a  tener una cabaña más amplia y va a estar más apartada que las demás. Esa pareja es: los Michaelis. Señor Michaelis y señora Michaelis, ustedes irán en el auto negro.

Asentimos al mismo tiempo y nos dirigimos hacia aquel auto.

Tn________

¡Dios! Estoy tan nerviosa.

Estar sola con Sebastian era algo que mi mente nunca llegó a imaginarse.

Alce la mirada hacia su rostro y él es la perfección personalizada.

Su nariz, sus labios ¡oh Dios mío! Sus hermosos labios y su cabello hacia un perfecto contraste con aquellos ojos penetrantes. Cuanto daría por besarlo de nuevo.

-          Lo se te soy irresistible – me alarmé y pegué un saltito ¿me habrá visto viéndolo y deleitándome con su simetría facial?

-          N-n-no lo eres idiota-  ¡no te sonroje, no te sonrojes! Demasiado tarde. – e-es solo que tienes algo en tu rostro- me empiné para retirarle la basura inexistente de su mejilla, cuando de repente me besó profundamente y no le importó que medio instituto nos estuviese viendo ( a decir verdad a mí tampoco)

-          Si querías un beso, solo me lo hubieses pedido – sonrió y entrelazó nuestras manos.

Cuando Sebastian hizo eso, un calor se extendió por todo mi pecho.

¿Qué significa esto?

Lamento comentarle que se acabó el maratón. Pronto hare otro, no se preocupen.

Espero que les haya gustado.

Y si quieren lemon, pronto lo habrá y bastante.

Hasta la próxima.

Adieu