POV Sergio.

Han pasado cinco días, desde que converse con la Sra. Carlota. Me sorprendió muchísimo la proposición que me hizo, pero valdrá la pena. Además, si con eso me hace más dulces caseros, como ella misma me prometió ¡hago lo que sea! Me pidió que no le dijera absolutamente nada a Carolina, será divertido, ya que esa niña tiene la curiosidad a flor de piel. En estos cinco días que han pasado, ha buscado la manera de averiguar, aunque sea, una sola pista.

Flashback

Llamo a Carolina por el interfono, ya que necesito que me traiga unos documentos. Luego de hablar con ella, pasan unos dos minutos, y en seguida toca a mi puerta.

-Pase.-Primero asoma su linda carita por la puerta, y luego termina de entrar.

-Aquí tiene Sr. Hidalgo.-Me los entrega y le agradezco por traerlos. Me percato de que no se mueve de su sitio, con la vista ida, como pensando en algo.

-¿Está bien Carolina?-Reacciona de inmediato, y termina sonrojandose... ¿En qué estará pensando esta chiquilla?

-Sr. Hidalgo ¿Puedo hacerle una pregunta? A parte de la que acabo de hacerle claro...-Se encuentra nerviosa, creo saber por dónde va la cosa.

-Por supuesto que puede preguntar...-Su rostro se ilumina totalmente, seguro piensa que le diré lo que su abuela me dijo.-Siempre y cuando, no se trate de lo que la Sra. Carlota y yo hablamos.-

-¡¿Pero por qué no?! Mi abuela tampoco me quiso decir, me tiene rebanandome los sesos pensando, en qué carrizo le dijo mi abuela ¿Es algo malo? ¿Le pidió dinero? Si es por eso, Sr. Hidalgo usted me paga bien, tengo unos ahorritos en mi cuenta, no son muchos, pero no necesita darnos dinero ¡Ay que pena con usted!-Sigue parloteando y caminando de un lado a otro, parece que no se da cuenta de que está teniendo otro de sus vómitos verbales. Me causa gracia cada vez que se pone así.

-Carolina ¡calmese! No es nada referente al dinero, pero de igual manera no le voy a decir, le dí mi palabra a la Sra. Carlota y la cumpliré.-Me observa con incredulidad y luego indignada.

-¡No lo puedo creer! Mi jefe y mi abuela me ocultan cosas, es que ésto solo me pasa a mi.-Comienza otra vez su vómito verbal...

Fin del Flashback.

Duró todo ese día enfurruñada conmigo, me dio lástima ver su dulce rostro con un puchero interminable; pero sé que valdrá la pena. Observo mi reloj y me doy cuenta de que se me hace tarde, para hacer los encargos de la Sra. Carlota.
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Llego a casa agotado, no puedo creer que estuve toda la tarde de compras. Tenía años que no me preocupaba por estas cosas, ya que tengo una ama de llaves que las hace por mí. Pero esta vez sentí que tenía que hacerlo por mi mismo, es una ocasión especial. Subo las escaleras de mi casa, para ir directo a mi habitación, tomar una ducha y a dormir, mañana será un día bastante agitado y necesito reponer fuerzas. Antes de dormir pienso en lo que sucederá mañana, ruego a Dios que todo salga bien; al fin me siento parte de algo que creía haber perdido el día en que mi dulce madre falleció.

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¡Mamasitas y mamasitos! Nos leemos un domingo más, y como les prometí la semana pasada... ¡HAY MARATÓN!

Espero les guste tanto como a mi. Estaré publicando cada capítulo del maratón a lo largo del día, ya que aún hay algunas cosas que tengo que corregir, así que habrá un intermedio entre cada capítulo.

Gracias de nuevo por apoyarme en ésto, ¡los quiero a todos!

¡Hasta más tarde!