Buenos días/tardes/noches gomitas bebés, y a los nuevos lectores también. Espero que una vez más hayan disfrutado de mi historia, es la tercera que publico.

Aquí encontraron algo corto, fácil de leer, pero entretenido (en el sentido de que te vas a quedar súper confuso hasta leer este análisis). Lo más importante, es el mensaje que creo les dejó, de que las "relaciones de pareja" a la edad de menos de aproximadamente 19 años... son básicamente (¿cómo decirlo sin que suene radical?) nada. (Bueno, sí fue radical).

A esa edad nadie está buscando un para siempre, y aunque alguien parezca ser diferente, o estés dispuesta a cambiarlo, tú tampoco estás buscando eso, incluso si no te das cuenta.

Habrá algo, por muy pequeño que parezca, que echará a perder todo en segundos, y la vida seguirá, como si nunca pasó nada.

Dicen que el amor no tiene edad, pero la mentalidad y responsabilidad para cuidarlo, sí que la tiene.

Esta es mi opinión, y busqué la forma de compartirla con ustedes, dándoles algo que leer. No significa que no me guste escribir sobre parejas jóvenes, ya que en mi cabeza sí puede terminar bien y, en la vida real pueden existir excepciones (hay gente que empieza en el bachillerato y se casa).

Si es primera vez que me lees no olvides pasarte por el resto de mis historias, todas dejan un mensaje, aunque esta es la primera donde lo explico. Y las demás (quiero creer yo) no tienen unos diálogos tan infantiles cuanto esta, ya que la misma es basada en niños-jóvenes.

Lo que quise decir con todo esto es:

¡Sonríe! No todo en la vida es ese chico que no te mira, o esa chica que ya no contesta tus mensajes. El mundo tiene mucho que ofrecerte, por eso has llegado hasta aquí.

—Miss Bookworm✒