27. Incertidumbre
Jungkook había estado casi muriéndose de los nervios durante un día y medio completo, desde que Jimin sugirió que Wooyoung y él debían de hacerse pruebas de enfermedades de transmisión sexual.
No era algo en lo que a él le agradara pensar, sabía que era un tema serio y no le había dado la importancia que realmente requería.
Al principio era un tema que no le interesaba, estaba claro que tenía la opción de utilizar protección pero no le había importado demasiado hacerlo. Después de todo, él siempre había sido así.
Antes de estar con Jimin, había ocasiones donde estaba tan drogado y ebrio que su cabeza no estaba completamente en sus cabales como para responsabilizarse sobre sus acciones, el usar un condón era lo último que se le ocurría al momento de follar y desquitarse. La mente se le nublaba por completo.
Y entonces, luego de Jimin todo volvió a ser igual de caótico. No sólo no se cuidaba al estar con Yugyeom o Wooyoung, sino que tampoco lo hacía al estar con otros hombres.
Los primeros meses que había pasado en su nuevo vecindario fueron los más determinantes de su conducta sexual. Salía casi todas las noches, bebía y se drogaba, y terminaba buscando a cualquier tipo que pudiera permitirle descargar toda la angustia acumulada, aunque al otro día se sintiese como una completa basura.
Era así, Jungkook estaba en una etapa de impulsividad extrema que muy poco sana era.
Habían sido épocas locas y muy duras, donde terminó cada vez más y más metido en la oxicodona al no encontrar una salida, y finalmente llegando a un punto donde ya no le interesaba tener sexo con otros más que con Wooyoung o Yugyeom.
Habían sido los primeros dos o tres meses de su nueva vida en aquella pensión, rodeado de adictos y de personas que buscaban sexo fácil y Jungkook se había aprovechado de eso.
Grave error.
Porque ahí estaba, sudando terriblemente mientras veía a Wooyoung entrando a otro de los consultorios, obviamente separado del suyo.
Tenía miedo por ambos. Se arrepentía de lo tan imprudente que había sido, porque ahora quería tener una vida normal, hacer las cosas bien de una vez por todas para salir de toda esa locura interminable de miseria y desprecio propio. Necesitaba salir de toda esa enredadera que le asfixiaba.
Quería poder estar con Jimin y sabía que antes de poder tener sexo con él regularmente tenía que enfrentar esta situación que le ponía los nervios de punta. Era lo más sensato.
No se esperaba tener que contar, casi todo, con lujo de detalles, incluso aunque Jimin se lo había dicho, no se sentía cómodo al contar sobre su rutina sexual.
Claro que a la doctora no le interesaba qué pasaba personalmente entre él y sus parejas, el punto era que si no tenía una sola pareja y mantenía relaciones sexuales sin protección con distintas personas, entonces eso significaba tener altas probabilidades de riesgo.
- ¿Por cuánto tiempo has mantenido estas relaciones sexuales poligámicas? – preguntó con una planilla donde tenía las preguntas sobre el escritorio. El pelinegro estaba sentado frente a ella, observando cómo anotaba cosas a medida que iba respondiendo.
- Casi tres meses.
- ¿Nunca te has realizado pruebas para corroborar la presencia de alguna enfermedad de transmisión sexual?
- No.
- ¿En el tiempo que has mantenido estas relaciones, has tenido algún síntoma tale como fiebre, fatiga, dolores de garganta, sudoración, dolor muscular? – ante la pregunta permaneció unos segundos pensando en ello. La realidad era que había tenido síntomas como esos, pero todos se los debía a la abstinencia.
- He tenido episodios con esos síntomas... pero los he sufrido porque tengo una adicción... estoy por empezar rehabilitación en una clínica.
Le explicó a la doctora sobre sus hábitos, las cosas que le llevaron a practicar actividades sexuales riesgosas y de más. También el hecho de que luego había mantenido relación con dos personas, con las cuales usó condón sólo las últimas veces y una de ellas estaba allí para hacerse los estudios también.
La mujer le hablaba con calma y paciencia, le sonreía en ocasiones, quizás notaba lo nervioso que Jungkook se encontraba, permanecía sentado con sus dedos entrelazados y mordiéndose el interior del labio.
- ¿Has tenido algún tipo de molestias en las zonas de contacto sexual? Como por ejemplo irritación, ampollas, sarpullido, o algún tipo de erupción.
- No.
- Bien, proseguiré a explicarte. Hay distintos tipos de pruebas, según el caso y el tiempo que la persona ha estado teniendo relaciones sexuales riesgosas – ella apoyó sus manos sobre el escritorio y le habló de la forma más clara posible, podía ver perfectamente la inexperiencia en el tema, no era poco común que los jóvenes no tuvieran consciencia sobre los cuidados necesarios de su cuerpo a la hora tener relaciones. Era lamentable pero cierto – Es muy importante, Jungkook, utilizar condón en todas las ocasiones y durante todo el acto en caso que tengas una vida sexual activa y con distintas parejas. Es necesario que en caso de tener una relación monogámica y estable, ambos deben saber cuál es su situación de salud para poder confiar plenamente en que tendrán relaciones de manera segura. ¿Comprendes?
- Entiendo... - asintió y la doctora prosiguió.
- En caso de que no utilices condón o sospeches de que en algún momento del acto pudo haber existido algún tipo de descuido, puedes ir a cualquier clínica a hacerte un examen rápido dentro de las 24 hs, también existen más pruebas dependiendo del tiempo que ha transcurrido desde ese último contacto sexual. Es importante saber que hay enfermedades que son detectables luego de varias semanas, y algunas presentan síntomas por un tiempo pero luego pueden permanecer asintomáticas incluso hasta por años.
- ¿Eso... puede significar que tengo algo y no lo sé?
- No descartamos la posibilidad, pero por suerte, ya que has pasado los dos meses de haber mantenido estas relaciones, podemos realizar pruebas más avanzadas que podrán decirnos con certeza si contraes alguna de estas enfermedades incluso si no posees síntomas. ¿Está bien? – Jungkook asintió con la cabeza, algo perdido entre tanta información.
Sí, había entendido a la perfección, pero estaba muy abatido con la situación.
Jungkook se sentía pequeño frente a las charla conscientizadora de mujer. No obstante, la forma en la que le hablaba le transmitía un poco de tranquilidad. Cuando ella le había notado demasiado tenso porque la incertidumbre le rebosaba de los poros, por lo tanto le comunicaba que en caso de que alguna de las pruebas dieran positivo que iban a proceder a indicarle el tratamiento adecuado, que si lo seguía al pie de la letra y cumplía con todas las indicaciones que todo estaría bien.
Fue de esa manera que prosiguieron con el examen físico, examen de orina y por último el sanguíneo.
Se le había hecho todo demasiado tedioso, hacía años no pisaba un consultorio médico, no recordaba si quiera la última vez que había tenido que sacarse sangre. Para su gusto era bastante invasivo, quizás porque no estaba acostumbrado, pero la doctora le hablaba o hacía preguntas que le mantenían bastante entretenido en responderlas.
Wooyoung tuvo que pasar por el mismo proceso, aunque responder preguntas y contar el detalle de ser un trabajador sexual no se le había hecho para nada agradable o cómodo.
Cuando ambos chicos salieron, a distintos tiempos, se juntaron con Jimin quien estaba ya haciendo un surco en el suelo de tanto caminar en la sala sin parar.
Aunque tenía mucha intriga no quiso acosarles con preguntas ni hacerles sentir más ansiosos, él sabía que la espera no era fácil pero de nada servía ponerse inquieto o a la expectativa de los resultados, debían mantener la calma y esperar pacientemente.
De todas formas, para su fortuna, las pruebas tendrían resultados dentro de las 48 hs luego de realizadas, por lo tanto no sería demasiado el tiempo que pasarían esperando por una noticia.
Jimin les invitó un café con algo dulce para hacerles olvidar un poco los nervios por los que habían pasado y aún aguardarían en ellos hasta saber si estaban libres de alguna enfermedad. No estarían tranquilos hasta ese momento, pero haría lo posible por distraerles, incluso aunque él mismo sentía que no podía soportar el galopeo de su corazón y la sudoración de sus manos.
Pero esa situación no era para nada fácil, Wooyoung se encontraba en un estado de ansiedad bastante complicado, el cual al principio había pasado desapercibido por sus compañeros, pero para el día siguiente Jimin terminó por ver cómo el peligris perdía sus peldaños por completo.
- ¿Y qué sucederá? No hay forma... no hay manera que no tenga algo, Jimin...
- Tranquilízate, no hay que saltar a conclusiones antes de tiempo – intentó acercarse a él pero éste se alejó, la inquietud le ganaba, había demasiadas cosas en su cabeza y aunque intentase hacer lo que su amigo le decía no podía converncerse.
- No intentes hacerme sentir mejor, sé que mi situación es complicada, no saldré de esta, estoy jodido – refregó las palmas de sus manos contra su rostro, caminando nerviosamente por la habitación.
Jungkook había salido a hacer las compras mientras que Wooyoung estaba contándole a Jimin sobre sus preocupaciones y no pudo ya guardarse todo lo que le estaba dando vueltas sin parar.
- Lo digo porque en serio lo creo, Woo. No tienes que apresurarte, debemos esperar por los resultados.
- Darán mal, Jimin – negó con la cabeza mientras le miraba con sus ojos desesperados – Darán malditamente mal.
- No lo sabes.
- ¡Sí lo sé!
Jimin se sorprendió cuando alzó la voz. Era la primera vez que Wooyoung se alteraba hasta el punto de gritarle, nunca habían si quiera discutido por algo.
- Me han pegado cosas antes... no eran graves... pero he tenido que tomar medicación por ello...
- Eso no significa nada, fuera lo que fuera que tenías, la medicación ayudó.
- Aun así, llevo años siendo prostituto... ¿Te piensas que no puedo tener algo sin darme cuenta? El maldito VIH es asintomático por un largo tiempo, podría habérmelo agarrado hace... no sé, cuatro años o tres y ni saberlo... - Jimin sabía que había probabilidades de ello pero no quería si quiera susurrarlo. Wooyoung estaba escupiendo todas las cosas que se le venían a la cabeza como un grifo averiado – Ni mencionar que uso jeringas... estuve... estuve pensando y puede que hayan sido varias veces... no lo sé, ¿Entiendes, Jimin? ¡No lo sé!
- Pues no sabremos nada hasta que tengamos los resultados, Wooyoung. De nada sirve perder la cabeza ahora.
- ¡Pero no puedo estar tranquilo! ¿Entiendes? – su vista se nubló, notó la humedad en sus ojos y las lágrimas cayendo a los pocos segundos - ¿Qué pasa si tengo algo? Jungkook... Jungkook también lo tendrá... si me pegué esa maldita mierda... no hay forma que él no la tenga...
Jimin se quedó estático, sus piernas completamente inmovilizadas le mantuvieron derecho mirando cómo Wooyoung se sentaba en la cama con su cabeza entre sus manos y mirando al suelo, dejando sus lágrimas correr libremente.
Respirar era una tarea ardua en ese momento, su pecho estaba oprimido. Todo el caos dentro de Wooyoung se le había contagiado. Sabía que esa situación era una mierda, las probabilidades eran altas, estaban jodidos, ¿pero qué más podía hacer además de mantenerse positivo?
La pesadumbre que el peligris emanaba se sentía en el aire que respiraba.
¿Qué harían si estaban infectados? Mientras más tiempo pasasen sin tratar tal enfermedad era tiempo que iban perdiendo para combatirla.
- Cualquiera podría habérsela pasado a Jungkook...
- Pero si yo la tengo es obvio que se la pasé yo.
- Eso no podemos saberlo, él también puede pasártela a ti.
- ¡Por favor, Jimin! – esbozó en una amarga súplica – Si Jungkook tiene algo no hay manera que no sea yo quien se lo pegó, soy un maldito prostituto y un adicto, un maldito desperdicio, ¡tengo todas las de perder!
Justo para ese momento Jungkook llegó, encontrándose con la escena y preguntándose qué era lo que había ocurrido mientras él se había ausentado. Claramente parecía una discusión pero era casi inimaginable el pensar en aquellos dos peleando.
Jimin se acercó a Wooyoung y se arrodilló frente a él, tomando su rostro entre sus manos.
- Mi vida está desperdiciada, Jimin... no sé ni si quiera por qué lo estoy intentando...
- No digas eso – negó con la cabeza y secó las lágrimas del chico, pero éstas no dejaban de caer – Lo haces porque realmente quieres salir de esto, porque te mereces algo mejor.
- No lo merezco... no hay nada, no tengo nada... si yo... si llego a ser el culpable de haber contagiado a Jungkook...
- Se arreglará. Si así fuera, él puede recibir tratamiento, y dependipendo del tiempo que lleves, tú también, habrá una salida, lo haremos juntos.
El pelinegro no tardó más en acercarse y tomar lugar al lado del peligris sobre la cama y abrazarle. Las palabras sobraban en ese momento.
- Lo siento, Kook – susurró el otro entre sollozos – Fue un error que Yugyeom te trajera conmigo...
- No... - replicó abrazándole más fuerte – Lo hizo porque sabía que estaría en buenas manos contigo...
- Sólo fui... una mala influencia... - restregó sus dedos contra sus ojos. Jimin tenía sus manos sobre las rodillas del chico, dándole pequeñas caricias.
- No, fuiste la compañía que yo necesitaba... y te sigo necesitando así que sigue intentándolo, te quiero a mi lado. A ti y a Jimin, les necesito a ambos.
Jimin no tenía aire, las lágrimas se le habían soltado. Su corazón se le partía al ver a Wooyoung de esa manera y a Jungkook tan roto intentando repararle. Ambos hacían lo que podían, y era admirable la fuerza de voluntad y el apoyo que se daban mutuamente para no caer.
Les esperaba un largo camino por delante y Jimin ya sentía sus pies cansados, pero no podía detenerse, se sentía ante la responsabilidad de empujarles a ambos hacia delante costase cuanto costase, porque sabía que era eso lo que necesitaban para salir de aquel estilo de vida y sólo esperaba que en un futuro pudiera verles a ambos viviendo sus vidas como merecían.
Los corazones de los tres latían demasiado rápido en la sala de espera. La situación del día anterior había desmoralizado al grupo por completo, había plantado el doble de preocupaciones, o más bien las habían sacado a la luz.
Jimin no quería pensar mucho en la probabilidad de obtener malas noticias pero ver a Wooyoung tan desamparado y ahogándose sin poder nadar a tierra firme le había supuesto un fuerte golpe a su mentalidad optimista. Quería pensar en que iban a tener suerte, quería pensar en un milagro porque era cierto que Wooyoung tenía demasiadas cosas en contra pero quería creer en que el universo les ayudaría, y sino hallarían la forma de solucionarlo.
Tampoco podía culparle, el peligris jamás había estado en una situación tal, la presión ya había jugado demasiado con su sensibilidad y mente, era más de lo que pensaba podía soportar. Había estado un buen tiempo pensando de la mejor manera posible, poniendo en él mismo la fe que Jimin y Jungkook le decían que debía tener. Le imploraban que se tuviese más confianza y que no sea tan duro consigo mismo.
En algún punto Jimin notó que a pesar que Jungkook solía detestarse bastante a sí mismo, Wooyoung no estaba muy lejos de eso. No lo demostraba, siempre parecía estar constantemente escuchando y ayudando a quienes le rodeaban, pero detrás de eso había un alma que daba demasiado amor al resto y dejaba muy poco para sí misma.
Notó que era de esas personas que pensaban en el otro constantemente, se preocupaba por Jungkook como si no hubiese un mañana, podía casi ver su corazón en manos temblando cada vez que Jungkook estaba en aprietos o pasando por un mal momento. El punto de conexión que ambos tenían era tan fuerte y doloroso de ver. El dolor les había unido, así también como la miseria y la búsqueda de afecto y alguien en quien confiar.
Por eso a Jimin no le quedaba otra que sentirse tan terriblemente movilizado por ambos y sabía que de una u otra forma necesitaban estar juntos. Con el tiempo pudo darse cuenta de que los dos chicos habían forjado un lazo inquebrantable, y de otra manera que nunca imaginó, él lo había hecho con ellos.
Por eso no bajaría los brazos nunca y permitiría a sus dos compañeros perder la cordura si era necesario porque él estaría allí para que pusieran los pies sobre la tierra. Les tomaría fuerte de las manos y evitaría que se perdiesen por más tiempo. Ellos ya no estaban solos.
Los pensamientos de Jimin se vieron interrumpidos cuando ambos chicos se pusieron de pie frente al llamado de la recepcionista del laboratorio y les tendió un sobre grande a cada uno; portaban los resultados de las pruebas.
Se habían quedado inmóviles, sus ojos se encontraban y luego volvían a aquel envoltorio de papel en sus trémulas manos. Casi no podían percibir el papel en sus yemas, sólo un leve cosquilleo que se esparcía por todo su cuerpo y se revocaba en el estómago.
Jimin estaba expectante a cada uno de sus movimientos. Había estado ansioso por saber los resultados pero ahora que esos sobres estaban allí justo frente a él parecía que necesitaba más tiempo para procesarlo y prepararse. La vacilación en la actitud de los otros dos chicos evidenciaba el mismo sentimiento.
El sobre les quemaba en las palmas. Wooyoung sentía que realmente no quería saberlo, era ese su problema. No quería estar allí y había aceptado al pedido de Jimin de hacerse las pruebas porque no podía decirle que no, era así de simple. Pero se arrepentía, no importaba cuánto le dijeran que era lo mejor, prefería vivir en la ignorancia, porque "Ojos que no ven, corazón que no siente".
Por otro lado, Jungkook terminó sintiéndose más nervioso por el peligris que por sí mismo. Sólo quería que él estuviera bien, quería que viera que tenía que pensar mejor de sí mismo y hacer todo lo posible por mejorar, no quería que Wooyoung siguiera sufriendo y encontrándose con rocas en su camino que terminaran por tirar todas sus esperanzas a la basura.
Jimin sintió su presión bajar hasta sus pies cuando Jungkook y Wooyoung abrieron sus sobres con sumo cuidado, a una lentitud tortuosa que le hacía querer gritar.
Se mordió el labio con fuerza y todo su cuerpo se tensó.
Ninguno de ellos había notado la presencia de Yugyeom a unos pocos metros de ellos. Fue suficiente con ver el panorama para comprender la situación. No hizo más que quedarse de pie como si una pared le impidiera acercarse más.
Cada sobre contenía varias hojas, había sido un estudio completo, los análisis de sangre y orina no sólo podrían develar alguna posible enfermedad de transmisión sexual sino también alguna otra anomalía.
Jimin había comenzado a rezarle al cielo cuando vio a ambos leer con atención las páginas, barriendo con sus ojos cada palabra.
Jimin miró a Jungkook y este levantó su rostro justo a tiempo para unir sus miradas. Sus ojos negros y grandes le miraron con un brillo de ansiedad y Jimin aguantó el aliento, hizo un gesto esperando que le dijera cómo le había ido.
Jungkook apretó sus labios y una sonrisa temblorosa intentó mantenerse no tan notoria y asintió con la cabeza, Jimin comprendió qué significaba y no pudo evitar sonreír en respuesta. Jungkook quería abrazarle, su corazón estaba latiendo tan fuerte que sentía que caería al suelo. El alma le había vuelto al cuerpo al leer que había dado negativo para todas las pruebas.
Pero aún no podían festejar. Automáticamente miraron a Wooyoung, quien ya había pasado a la última página y sus ojos se llenaron de lágrimas.
- Mierda... - escupió con pesadez. Dobló sus rodillas y terminó de cuclillas en el suelo, cerrándose en sí mismo y llorando aún con los papeles en sus manos, ya bastante arrugados.
- Woo... - Jungkook se agachó y Jimin le siguió.
Fue entonces que Yugyeom se acercó, haciéndose presente entre los tres.
Sintieron cómo sus pechos se acojonaban del miedo al ver a Wooyoung escondiendo su rostro lleno de lágrimas entre sus brazos.
- Woo... lo resolveremos... por favor-
- No... - negó y levantó su rostro, secó sus lágrimas con los puños de su camisa y con una voz temblorosa soltó un débil susurro – Dieron... dieron negativas... todas las pruebas negativas.
Jimin soltó una exhalación equivalente al viento de un tifón y bajó su cabeza, sentía el mundo dando vueltas.
Jungkook reaccionó de inmediato abrazando con fuerza al peligris por el cuello, tan fuerte que Wooyoung sentía que podía quedarse sin aire, pero no le importaba, se sentía tan aliviado y tan bien en ese momento que un abrazo de Jungkook era todo lo que quería.
El rubio apoyó su frente contra la cabeza del peligris y tampoco pudo evitar que unas lágrimas rebeldes se le liberaran mientras abrazaba con fuerza a sus dos compañeros. Sentía que podía respirar, todas sus plegarias habían sido escuchadas.
Fue así que luego de ese emotivo momento lleno de nervios, se pusieron de pie, recomponiéndose de aquella noticia y Jungkook y Jimin aprovecharon a abrazarse con fuerza.
- Dios... creí que iba a morir... - soltó Jungkook con un jadeo. Jimin le besó la mejilla y sonrió sintiendo su pecho llenarse de luz.
- Yo igual... pero todo esto valió la pena... estoy muy feliz por ambos.
- No lo hubiéramos podido hacer sin ti.
Se separaron un poco, para volver su atención a los otros dos chicos que se miraban aún sin poder decir palabra alguna. La forma en la que Yugyeom miraba a Wooyoung retenía tantos sentimientos y palabras que querían salir pero mostrarlos se le hacía la cosa más difícil que alguna vez había tenido que hacer.
El cuerpo del azabache se ablandó cuando los brazos de Wooyoung le rodearon para brindarle un abrazo apretado y afectuoso.
- Lo siento... - Yugyeom se sintió herido por esas palabras. Cerró sus ojos y acunó su mentón en la curvatura del hombro del contrario – Sé... que siempre estás ahí para mí, y yo te hago sentir mal... pero realmente te quiero.
- Haces mal en disculparte... y haces mal si me quieres... - se alejó un poco del chico y a pesar que estaban siendo vistos por los otros dos "metiches", como Yugyeom les llamaba en su cabeza, no quiso guardarse su impulso y besó al peligris justo allí por unos segundos – No importa si no me amas, siempre estaré aquí.
- Sólo... dame algo de tiempo...
- No tengo apuro.
Y esa fue la primera vez que Jimin veía a Yugyeom sonreír sin malicia.
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Buen lunes 👏🏻
Los nervios ya se han terminado por ahora, tuvimos buenas noticias, ahora sólo resta que Jungkook y Wooyoung entren a rehabilitación.
Cada vez estamos más cerca del final. Estoy agradecida a todas las personas que han estado votando y apoyando esta historia, y a todas las que siguen uniéndose a la lectura. Lo aprecio mucho.
Pd: Vieron la bangbangcon ? Estuve sin dormir y a puro café en la madrugada pero fui feliz, lo disfruté muchísimo 💕
En fin, tengan buen comienzo de semana 💙
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