Han pasado tres años y aún no olvido tu despedida, el día en el que fuiste, los momentos que pasamos juntos, tus caricias, risas, momentos lindos, como malos, cuando te conocí ese día gracias a Leni, la amiga de mi mejor amigo, aun lo recuerdo bien. Estábamos llegando a la casa de Lincoln e íbamos a hacer una maratón de juegos por la semana dura que a veces los jóvenes siempre nos quejamos, ya sabes, los profesores y todo eso. Y fue ahí cuando te conocí, me saludaste con una simple sonrisa y mirada, solo me quedé un tanto impactado por lo linda que eras, no lo pensaba en ese momento, pero fue ahí el comienzo, cuando empecé a enamorarte de ti poco a poco y me hacías conflictos internos entre tú y Lori, es más, había veces cuando la veía pasar cerca de mí, no sangraba o actuaba como un robot, se podría decir que para Lori era un grito de alegría, por fin podría comprar zapatos ahora sin ningún miedo, aunque hasta ella se quedaba algo curiosa por ese comportamiento tan normal en mí momentáneamente, obvio Lincoln se dio cuenta de esto debido a mi comportamiento.

—Oye Clyde dime algo, últimamente has estado comportándote un tanto extraño, ya no sangras tanto con Lori o actúas como robot o no hablas siempre de los hermosa que es ella—Decía su amigo mientras salían de la escuela caminando.

—¿A si? B-bueno no me había dado cuenta de eso q-quizás, es porque ando pensando en otras cosas viejo, oye amigo ¿sabes algo de la amiga de Leni?

—¿Cual amiga?

—Y-ya sabes la chica que conocimos cuando llegamos del colegio cuando estábamos cansados por el fin de semana.

—Trata de no tartamudear tanto, debes tranquilizarte, pero respondiendo a tu pregunta, la verdad no sé nada de ella, es más, solo la conozco de vista, cuando mi hermana trato de arreglar sus cosas con sus amistades, pero se me hace muy raro que específicamente cuando preguntas sobre eso, te entra ese extraño tartamudeo — Se expresaba el joven curiosamente, algo que asusto al moreno, debido a que esto ya no era la primera vez que sucedía esto —Clyde, ¿acaso sientes algo por esa chica?—Decía dándole una sonrisa burlona.

—..... ¿No?

—Por favor viejo, te conozco mejor que a ti mismo, se me hasta raro que te comportes así, mas con ese silencio ¿ella te gusta no?, la amiga de Leni que nos saludó cuando estaban en una pijama da con sus amigo y ...... Fiona, cuando llegábamos de hacer nuestro que hacer es—Decía ese Lincoln un tanto incomodado por recordar ese momento que tuvieron los dos con ella cuando trataron de salvar el trabajo de su hermana. Aunque más fue por culpa del joven.

—¡¿QUE?! N-no para nada, ella no me gusta. —Dijo el joven con un tono alterado.

—Entonces me explicas tu comportamiento que no has tenido con Lori desde que la conociste. ¿Me puedes explicar que ahora estas medio alterado? —Dijo el joven ya un poco cansado de que su amigo no se diera cuenta del comportamiento que estaba teniendo.

—Vamos viejo, tu sabes que me gusta Lori, es el amor de mi vida y no va haber nadie como ella—Decía el chico un tanto desesperado tratando de ser sincero y que le crea, pero su amigo no caería, no era un tonto, por algo era el hombre del plan.

Su amigo solo lo miraba un tanto serio.

—..... Clyde.

—YA OK, me atrapaste, si, si ok lo admito—Exclamaba— me gusta esa chica, pero no sé cómo acercarme a ella, además no creo que este interesado en mí. La diferencia de edad juega mucho en esto.

—¿Y eso quien lo decidió? Amigo, podemos intentarlo solo hay que preguntarle a mi hermana de ella. Y no creo que sea difícil, sabes que conmigo, con un gran plan bien hecho de mi parte, se pueden hacer buenas cosas, porque sé que tú también estarás para mi amigo, eres mi compañero —Decía Lincoln dando un puño al aire.

—Lo dices en serio

—Quiero creerlo en serio —Solo sonrió.

El joven solo dio una sonrisa y correspondió el puño, sabia también que el estaría para su amigo, para apoyarse uno al otro.

—Viejo en serio gracias, no me equivoque en elegirte mi mejor amigo. —Dijo agradecido el moreno

—Más bien agradece ese día en el que nos conocimos en ese Halloween, fue el inicio de nuestra amistad—Decía el albino para después seguir su camino de vuelta a casa.

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Mientras en el camino para llegar a casa poniendo los planes en marcha, nos encontramos momentos en el cuarto de Leni, que estaba por iniciar una conversación con ellos.

—Claro díganme que quieren preguntarme.

—Bueno esto es algo complicado Leni, no sé si te acuerdas cuando llegamos cansados a casa, pero tú nos presentaste a tus amigos antes de irnos arriba a mi cuarto.

—A si, si me acuerdo, aunque veo que Fiona aún está enojada con ustedes dos debido a ciertas cosas que hicieron —Dijo la rubia poniendo incomodos a ambos por ese momento de ayuda que quisieron ofrecer.

—Si bueno, ya veremos el modo de perdonarnos, pero no estamos para hablar de eso.

—¿Entonces de que es?

—Bueno tus nos presentaste a una chica de tez morena y queríamos saber su nombre.

—Mmmm Ok—decía la chica más intrigada.

—Y bueno, es algo raro de decirlo, pero Clyde gusta de ella, Leni, no sé si podrías ayudarnos, ya que tú la conoces mejor que nosotros

—N-no sé si será bueno o malo de que me guste una chica mayor que yo, pero queríamos saber si podrías ayudarnos —Dijo Clyde finalizando

Para fortuna del dúo de amigos, la chica dio un pequeño grito de alegría ya que era lindo saber de qué el amigo Lincoln se haya enamorado de la chica de tez morena que era su amiga, algo que fue muy sorpresivo para ella.

—Awwww el amigo de mi hermano está enamorado, hasta siento que esto parece un libro virtual para escribir tus historias, sean buenas o malas—decía con alegría y emoción la segunda mayor.

—Ammm, Leni ¿no estas enojada o impresionada? —decía Clyde con dudas.

—Por que debería para nada, bien dices por ahí que para el amor no hay edad—Decía la rubia

—Bueno, si jugamos con esa lógica ¿Entonces no importaría si un hombre cincuenta este con una chica de diez y siete? —decía entre susurros Clyde a Lincoln.

—Es solo un decir amigo, tranquilo—Respondía igualmente—Leni pero decir eso puede ser un arma de doble filo.

—Eso puede ser cierto, pero puedo mostrarte casos, Pique y Shakira tienen una diferencia de diez años. David Hasselhoff y Hayley Roberts, David tiene sesenta y tres y Hayley treinta y seis, Jason Momoa y Lisa Bonet—decía maravillada por lo que iba contar—Esa relación de ellos es hermosa, él mismo dijo que fue amor a primera vista y su diferencia de edad de doce años no fue impedimento, estaba enamorado de ella antes de que Bonet supiera de su existencia desde el papel de Denise en The Cosby Show. —Se explicaba la joven que ahora Lincoln decidió unirse, ya que recuerda bien ese día cuando vio esos casos con us hermana.

—Oh Michael Douglas y Catherine Zeta-Jones, una relación que ha pasado por mucho, pero sigue siendo unida pareja a pesar de todo, tomándose en cuenta uno al otro, otro que puedo mencionar es el Celine Dion y su Manager, lamentablemente su esposo falleció pero vaya que formaron un linda familia, Bruce Willis y Emma Heming han pasado once años y sigue juntos y con diez y siete años de diferencia, Alec Baldwin y Hilaria Thomas con una diferencia de veinte y seis años. este nos lo conto Luna, Mick Swagger y Melanie Hamrick, Meline con veinte y nueve años y Jagger setenta y dos, Eva Mendes y Ryan Gosling, ella con cuarenta y seis y él con treinta y nueve, Elsa Pataky y Chris Hemsworth, Deborra Lee-Furness y Hugh Jackman y por ultimo Madona y Kevin Sampaio—decía Se decía el joven que mostraba varios ejemplos de parejas con una gran diferencia de edad, al igual que su hermana, que hasta los dos se emocionaban, algunas sorprendentes y otras entendibles, Clyde solo sentían asombro que hasta pensó que la palabras ''para el amor no hay edad'' tendría un mensaje mucho más profundo.

—Leni, Lincoln, como saben de todo eso—Pregunto el joven.

—Viejo, Leni no solo hay aire en su cabeza, además los ejemplos que te mostré quizás te ayuden mucho ya que bueno tienes once años y ella tiene diez y seis creo. Y no se preocupes por la actitud de ella y el primer paso que estamos es un avance —Le dijo el joven con confianza— bueno Clyde debes tomar en cuenta estas cosas, lo que le gustan y también un consejo, trata de ser tú mismo, ante todo. Pero tampoco tan tú.

—Claro, entiendo a lo que te refieres con lo último—decía el moreno mientras que en un blog de notas ponía todos los apuntes necesarios para ello, mientras se sentaban y Leni explicaba las cosas vitales para poder conocerla, a veces la primera impresión juega y mucho.

—Muy bien, ella le encanta las compras, salir con amigos, Los pretzels cubiertos de yogurt, de vez cuando los teatros, revistas y esta es muy importante Clyde.

—Que cual es—decía curioso el chico por como decía Leni. Mientras Lincoln estaba prestando atención para poder anotar cosas que quizas se haya olvidado su amigo.

—Ella es una gran fanática de dos series, pero la verdad no somos muy fan de ellas, no nos gustan de hecho, Son Brooklyn 99 y también Friends. Por lo que esto puede ser una gran ventaja para ti—decía la chica dándole también ánimos—También en poder preparar comida, aun no olvido cuando cuidaste de nosotros cuando estábamos enfermos, en serio gracias.

—Jajaja, aprecio eso, aunque era lo menos que podía también, siento algo de culpa ya que di una noticia innecesaria que les pudo sacar de ahí.

—Pero Clyde eso quedo en el pasado, ya no importa, ahora hay que centrarnos en el ahora—decía Lincoln tratando de confortar a su amigo, cosa que logro hacer.

—Excelente la voy a invitar en dos meses ya que como estamos en el la preparatoria y exámenes futuros que nos tocaron, todo eso les dará tiempo, ¿de acuerdo? Lo demás lo hacen entre ustedes—decía la rubia y los dos chicos haciéndole caso.

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Y así comenzó un proceso de ver las series que ella les gustaba, aprender la receta y preparar Pretzel con yogurt, leer revistas de moda y entender algunas cosas que debo admitir que es un tanto complicado, ya que bueno, la moda para mí es un tanto difícil ya que solo me pongo una ropa y ya, quien diría que sería algo importante para el futuro. Y también como dijo Leni, ser yo mismo en la cita y no ser algo que no eres, aunque claro también aprender algunos errores que cometí con Lori, y no cometerlos aquí con ella, saben haber cometido esos tropiezos con Lori, me ayudo a futuro y también para madurar para mí mismo, por el lado de las series debo admitir que para mí era algo difícil de comprender algunos chiste, pero la verdad era algo graciosa cuando llegaban a su conclusión que me mataban de risa, chistes bien planeados y tan buenos que había en la serie y sus carismáticos personajes, aunque habían uno que otro chiste subido de tono, con Friends era muy gracioso, por el ambiente y la amistad se tenían unos a otros, con algunos altibajos, pero con lindos momentos, pero final de todo, una serie que se puede disfrutar mucho y que la verdad me vi algunos capítulos con Lincoln y que puedo decir, no me arrepiento de ver de ver esas series. Los dos meses pasaron volando y ya estaba listo, solo debía ser yo mismo, aprender de mis errores y pasarla bien, sería un pijama da, pero solo serían entre los cuatro ya que las demás hermanas de Lincoln tenían otras cosas que hacer. Y por cosas que hacer me refiero a deberes o salidas. Luego de horas de espera, la vi llegar con sus cosas para la pijama da que tendríamos los cuatro, si podría decir algo de la misma, se podría decir que era agradable y algo buena, ya que bueno.... estaba junto a ella conociéndola poco a poco, no hablaba mucho por temor a incomodar, estuvimos jugando adivinanzas con el celular en la frente, era gracioso.

—No, no Jackie es algo en lo que todos se montan.

—¿Todos se montan? Leni eso es chiste de doble sentido, hay tantas cosas para montar, y hasta suena mal haberlo dicho así.

—Es un medio de transporte de acuático—Decía Leni

—Cual especifiquen, hay varios.

—Quedan, treinta segundos—decía Lincoln.

—Es un medio de transporte que puede entrar más de una docena de personas—decía Leni haciendo un máximo esfuerzo al recordar la apariencia de la foto para divinar.

—Ah un Buque o Yate—decía rápida

—SI—Exclamo mientras ambas dieron un suspiro aliviadas.

—Ufff, esto fue algo agotador, tendrán algo de comer, ¿Leni? —Decía la chica.

—Si justo a tiempo, ya teníamos preparado todo para ti amiga. Clyde podrás ir por los postres—Dijo la rubia haciendo que el ella le guiñara a su hermana para que también lo acompañe

—Si señora, Lincoln me acompañas.

—No era necesario pedirlo —decía Lincoln

Luego de unos dos minutos los jóvenes llevaban cuatro pretzels cubiertos de yogurt, algo que puso los ojos brillosos de la morena y con rapidez al haber recibido su postre, se le ve comiendo gustosamente, disfrutando de cada cucharada mientras que los demás lo combinaban con otras cosas, como chispas de chocolate y otros dulces que había preparado para esta ocasión.

—Mmmmm, en serio le lucieron con esto, quien fue el que los preparo, fue tu padre Leni.

—De hecho, no fue mi padre.

—Entonces ¿quién fue el que lo hizo? —Estaba curioseada por eso.

—Fu-fui yo—Dijo el joven moreno con algo de miedo, pero también tratando de mostrar seguridad.

La chica se quedó algo curiosa, de que un chico de solo once años pueda preparar algo que ella le gustaba. Pero simplemente no le tomo atención y siguió.

—Oye, gracias en serio por esto, ¿Cómo sabias que me gustaba el pretzel con cubiertos de yogurt?

—Bueno es gracias a tu amiga que me ayudo, yo solo aprendí la receta, me alegro que te haya gustado—Contestada algo modesto, pero internamente con algunos nervios y feliz.

La chica solo le acaricio su cabello y dándole una sonrisa.

—Te quedaron genial—Era lo último que dijo.

La noche transcurrió tranquila, hablando entre uno y el otro, pero poco a poco se sentiría monótono, por lo que Leni decidió mejorar el ambiente poniendo la nueva TV que sus padres habían comprado hace semanas con mejores funciones en las mismas.

—Digan quieren hacer de cantos mudo, o karaoke fingido—decía la chica levantando el ánimo de ellos por lo que no hubo problema de que aceptaran.

Se podrían decir que iniciaron Leni y Lincoln, cantando entre ambos algunas canciones, por lo que me tocaría con Jackie a mí después de que terminaran, no mentiré que andaba algo nervioso, creo que cualquier lo estaría cuando se trata de hacer dúo, más si es con la persona que te gusta.

Maroon 5 – Girls Like You

Había empezado a cantar poco a poco con algunos nervios, pero no dejaría que eso juegue en mi contra, trataba de moverme y hacer algunos bailes improvisados mientras ella se quedaba algo graciosa mientras hacía eso, de echo disfrutaba que al menos trataba de sacarle alguna que otra sonrisa, llegaba a cantar tomándole de la mano como si fuera una canción dedicada para ella, pero también hacía unos pequeños movimientos de baile.

Cuando era su turno para poder cantar, simplemente no sabía cómo describir esos sentimientos ese canto mudo, era como si esa fuera su voz, la verdad era para que me quede tenso, como bailaba al ritmo de la música, simplemente me dejaba impactado, de echo por momentos pensaba que me iba desmayar por la intensidad del momento, pero no dejaría que los nervios jueguen en mi contra. Pero más que intimidarme, lo sentí como un reto, algo para poder hacerlo mejor, sin miedos, para poder superarme así que decidí hacer un gran canto mudo con todas mis fuerzas y haciendo un gran dúo de canto y por momentos tomándonos las manos uno al otro y mirándonos por momentos, ahí saque toda la seguridad que nunca pensé que tenía, o había tenido y la vez fue la mejor sensación que pude haber sentido al lado de ella.

Cuando termino la canción, simplemente no dijeron nada, Lincoln y Leni nos aplaudieron por la intensidad que había incluso rieron, ya que pensaban que cantábamos en un concierto los dos con una gran multitud de personas. Simplemente después de eso nos miramos y dijo.

—Oye... buen canto mudo, quizás podríamos hacer mas dúos así, como te llamabas, es que no nos habíamos conocido antes, solo una vez te vi de vista con el hermano de Leni—decía un tanto mal por no recordar el nombre el muchacho.

—Me llamo Clyde, Clyde Mcbride, un gusto—decía el chico de manera formal.

—Jackie, un placer—decía correspondiéndole el saludo.

Luego pasaron las horas de la noche y ya se acababan las ideas para poder hablar uno al otro, quizás ya sería la hora de irse a dormir. Hasta que Jackie tuvo una idea, pero no sabía si aceptarían.

—Oigan chicos, Leni, no si querrán, pero ya que tienen YouTube supongo que tienen Netflix.

—Bueno Jackie ¿pero por qué? —Pregunto Leni

—Bueno es que no si querrás ver Brooklyn 99 y Friends, si, sé que no eres fan de la serie, pero en serio tienes que verla Leni, de hecho me siento sola cuando no puedo hablar de eso con ustedes.

El momento cúspide había llegado. Y era señal para Leni y Lincoln en poder dejarlos a ambos, pero antes habría que dejarles una buena excusa.

—O gracias Jackie, pero sabes que no me gusta la serie, en serio lo siento, incluso lo intentamos con Fiona, Miguel y Mandee. —decía un tanto apenada.

—Pero hay alguien que, si conocen bien esas series, verdad Clyde—decía su amigo.

—Te gusta Brooklyn 99 y Friends—Decía la chica un tanto curioseada.

—Bueno si, las he visto (y por decir visto, me refiero a que me avente todas sus temporadas para verlas)— decía eso ultimo el joven de manera mental.

Esto había alegrado un poco a la morena por lo que sin tiempo que perder se sientan los dos mientras que Leni y Lincoln se van de ahí deseándoles que la pasen bien entre ambos.

—Bueno nos vamos arriba—Decía Lincoln

—Espero que la pasen bien entre ustedes—Decía Leni mientras también se iba con su hermano dejándolos solos.

—Lincoln me ayudas en algunas cosas para hacer.

—Claro no tengo problemas

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—Y dime sabes de que va la serie—Preguntaba.

—Bueno, más o menos. Brooklyn 99 trata sobre las aventuras del los miembros del precinto 99, una comisaria del departamento de policía de nuevo york, donde cada uno de sus miembros tienen personalidades distintas, detectives Peralta, Santiago, Díaz, Boyle, Terry, Hitchcock, Scully, Gina Linetti y Raymond Holt se enfrentan a varios de los criminales más peligrosos de nuevo york, aunque también varios son excéntricos por decirlo así decirlo (y que uno de ellos ama el yogurt igual que a ti)—Explicaba el moreno.

—Vaya parece que si conoces bien la serie, que te parece si no hacemos una maratón, o bueno hasta donde lleguemos—decía la morena.

—Con mucho gusto Jackie—decía encantado el muchacho, encendiendo la tv y poder disfrutar un momento tranquilo y divertido.

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—Quieres saber cómo amanecen en realidad, la muñeca—Preguntaba el capitán Holt a Jake Peralta con tono monótono y frio.

—Si—Respondía con el mejor animo

—Fue practicando con el ula ula, Kevin y yo vamos a clases para ejercitarnos y divertirnos.

—O Dios mío—decía impactado

—Ya domino, todos los movimientos—decía el capitán con su mismo tono monótono mirándolo a los ojos— La pizza voladora, el tornado, el escorpión y las caderas del diablo—Seguía mencionando mientras mostraba las fotos de él practicando todos esos movimientos, pero en realidad estaba practicando literalmente esos movimientos con un ula ula.

El oficial, Peralta estaba confundido, no sabía que decir ante este mal entendido.

—¿Por qué me cuenta todo esto? —decía aun un buen humor, pero en realidad estaba algo incómodo.

—Por qué nadie. Le creerá jamás—decía mientras borraba todas esas fotos de manera rápida y escuchando un Jake peralta decir ''No, No'' por borrarle la evidencia en su celular.

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—Aquí tengo dos fotografías, una es su casillero, la otra es de un basurero en filipinas, podría decirme cual es cual—decía el capitán Holt a Jake que estaba en otro problema.

El joven dio un silencio hasta que finalmente dio su respuesta.

—Ese es el basurero—Señalaba la foto que estaba en la mano derecha de su capitán.

—Equivocado ambas lo son—Le resondraba el capitán.

—AHHH, debí darme cuenta, es bueno. —Lo halagaba el joven.

—Esta carpeta, esta etiquetada como ''pantis sucia''—Contestaba mientras sostenía dicha carpeta.

—Así no la confundo con pantis limpias, además a quien le importa, tengo más arrestos que cualquier otro detective aquí.

—También tiene más ratones viviendo en su escritorio que cualquier otro detective—decía mientras abría uno de los cajones donde se veía una rata viva ahí dentro y con sus crías en incubación.

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—Un misterioso desconocido te dio un arma, te hizo poner sus huellas en ellas, robo la tienda y después escondió el arma en tus canoncillos—Explicaba el oficinal peralta a un civil que había sido asaltado y explicaba los sucesos.

—Bueno si lo dices así no suena creíble amigo.

—Oh oiga capitán, recibió mi informe del asesinato de Phillip—decía mientras veía pasar a su jefe para ver si le llego su informe.

—Si lo leí por encima, buen trabajo.

—Bien, gracias papá—decía el joven.

Así como si un adulto volviera a ser un alumno en la primaria y le digiera a su profesora mamá, el departamento se quedó mudo ando lo dicho, por lo que el oficial peralta le dijo a su capitán, papá.

—¿Porque todo mundo me mira?

—Le llamaste papá al capitán.... Dijiste gracias papá—Respondía la oficial Rosa Díaz.

—¡¿QUE?! No ni hablar, dije gracias capitán—decía avergonzando por la confusión de palabras que nadie paso desapercibido.

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—Hablan de gente vieja, sesenta y ocho—decía lo último entre susurros notables el detective Charles Boyle que presumía de algo.

—No es tan viejo— Respondía Amy Santiago.

—Sí, pero yo solo tenía veinte.

—¿veinte? Ya eras policía entonces —Contestaba peralta.

—No, fue antes de entrar a la academia—Explicaba Boyle

Hubo un silencio por que no se trataba sobre el caso o detenido más viejo que habían tenido. Se trataba de otra cosa.

—Charles no está hablando sobre su detenido más viejo.

Hubo un silencio en ese momento, nadie se daba cuenta del por qué, nadie captada la indirecta, hasta después de unos diez segundos.

—Ewwwww—Decían al unísono el grupo.

—No, no si se era sobre mi detenido con más años. Sesenta y ocho como dije—Se explicaba Charles Boyle que había revelado accidentalmente una de sus experiencias más bochornosas.

—dios, tuviste sexo con una mujer de sesenta y ocho año cuando tu tenías veinte años—decía peralta en voz alta impactado por tal revelación.

—Sabes cómo es cuando tienes la posibilidad de acostarte con una mujer madura—Decía avergonzado.

—No, no era una mujer madura era una anciana, ERA LA ABUELA DE ALGUIEN—decía diciendo en voz alta.

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Unas risas salían del lugar, aunque fueron gritados por el ruido que estaban haciendo, por lo que decidieron moderarse un poco.

—Jajajajajajaja—Eran las risas que tenían los jóvenes que no pararon de reír entre uno y el otro, aunque esta vez más moderados.

—La abuela de alguien, ese si es estuvo bueno, había olvidado ese momento por tantos buenos que había visto en especial con Terry y Holt, a mis padres les encantaría el personaje.

—Jajajaja, si, espera tus padres son ¿LGBT? Porque Holt es gay

—Bueno, se podría decirse que sí.

—Pues que se sientan orgulloso, porque este tipo si representa a los LGBT de manera correcta y que es carismático—decía mientas le elevaba el ánimo.

—Wau, Pocas personas les han dicho así a mis padres, realmente ellos lo apreciarían de ti escuchar eso. De hecho, yo no debería estar viendo este tipo de cosas, pero me pregunto por qué no ven tus amigos esto, ósea son geniales, es muy graciosa.

—Gracias Clyde y no es malo si tú lo vez esto, con tal de que tengas una formación en casa y si sabes definir lo que es bueno y malo, no habrá problema de eso. Y sí, pero bueno, es muy difícil hoy en día que encuentres personas que tengan tus mismos gustos, pero me alegro de poder conocer gente como tú, Bueno quieres ver Friends—Preguntaba la chica.

—Con mucho gusto.

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—Tiene más sentido que cubrirlo—decía Mónica que estaban cuidando al bebe— A parte la gorra no distraerá.

Pero de repente llega Fiby algo alteraba, el porqué, simple, pensaba que sus amigas habían muerto, pero no, todo era una falsa alarma, se podría decir que Fiby tiene un parecido con cierta segunda hermana mayor.

—A están viva gracias Dios—Contestaba aliviada.

—Si Fiby prometí que nadie moriría—Respondía Rachel.

—Si ya veremos, puedo usar el teléfono quiero llamar a todos los que conozco.

—Úsalo aún no lo pago, adelante—Respondía sarcásticamente Mónica por que Fiby ya estaba en el teléfono.

—HOLA NO ESTAS MUERTO. ADIOOOS—Respondía la rubia con buen humor.

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—Quieres jugar al juego del aeroplano, quieres algo divertido ¿si?, Wryyyyyy— decía Mónica mientras cargaba al bebe mientras lo subía y bajaba como un tobogán con sus brazos llevándolo por el departamento y esta vez haciéndolo saltar para sentir que volaba, pero para desgracia, el pobre se golpea con una madera asustando tanto Rachel y Mónica.

Un rato después, trataba de que él bebe no haga yanto, temían lo peor, porque cuando un bebé llora, nadie lo para.

—Eres tan valiente, si nene eres tan valiente—decía Mónica para calmar al bebe que se había lastimado

—Esta, está bien hay que ponerlo aquí, ven acá bebe eres un niño tan bueno—decía mientras le puso en sillón para después cambiar a otro semblante— COMO PUDISTE HACERLE ESTO A TU SOBRINO, ROSS CONFIO EN MI, QUE DIRÁ.

—No va a decir nada, porque no vamos a decirle

—¿A no?

—Claro que no.

—Estoy de acuerdo.

Había un silencio incomodo hasta que fue roto por la misma Rachel.

—Estas bien, estas bien, No, no, no estás bien, no está bien.

—O por Dios, mételo, mételo—decía desesperadamente Mónica porque veía que le había sacado, un fuerte chichon al bebé.

—no puedo, METERLO—decía mientras volvía a hablar con ella.

—Rachel, a hay que ocultarlo, claro, claro, lo tengo, pero como.

—En el instante cuando Ross entre aquí, quiero que te lo lleves a tu habitación y hagas lo que sea para que el niño grite—Dijo mientras hacia un pequeño grito de bebé, por otra parte, él bebe solo actuaba normal, como si nada hubiera pasado.

—Oh, le ponemos una gorra—decía la chica de forma lógica.

—¡una gorra! Siiii.

—Necesitamos un gorra.

—PERO DONDE VAMOS A CONSEGUIR UNA GORRA—Decía Mónica con enojo por que ya se le terminaba la paciencia.

—Ahhhhh traeré al osito—Dijo Rachel.

—¿Porque? sabe que hacer—Dijo sarcásticamente

Pero fue ahí cuando trajo un osito con un traje para tapar la evidencia.

—Hay por Dios eso es genial.

—N-no, creo que esta cocido.

—Dame—decía Mónica para pasarle su oso, pero en vez de sacarle el sombrero, Lo saca todo y con relleno, dejándolas impactadas y sin faltas de opciones ¿y él bebe?, bueno, como si nada hubiera pasado.

—HUY, es como un baño de sangre—decía Rachel asustada.

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No hace falta decir que la pasamos bien viendo ambas sitcoms, lamentablemente, con el pasar de las horas, los dos terminamos durmiéndonos, aunque recuerdo que quise dormir recostado de tu hombro y si mal no recuero tú me miraste sonriendo por un momento, no le tome importancia, lo que me sorprende es que no te haya molestado o incomodado, pero la verdad es que la pase muy bien y feliz, porque es verdad, la pase muy bien a tu lado en ese pijama. Y también con Lincoln y Leni y es un recuerdo que atesoro con mucho cariño cuando lo recuerdo. De hecho, Lincoln Y Leni nos vieron a los dos durmiendo juntos, pero tuvieron que despertarnos. Lo demás fue normal, desayunamos, comimos y todo tranquilo si se podría decirse, hasta que ya era hora de irnos, pero mi amigo Lincoln me hizo recordar algo, poder tener tu número y contactos por lo que antes de irnos, te pedí tu número para poder hablarnos en otro momento, tu gustosa aceptaste feliz, ya que no sería la última vez que te volvería a ver, aunque también fue él inicio de una bella amistad entre ambos.

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El tiempo paso y nos fuimos siendo amigos y personas más cercanas, poder ver con contigo películas desde el celular y ver varias repeticiones de nuestras series y comedias favoritas, era algo que realmente apreciaba mucho, pero también tu querías interesarte en las cosas que hacia como en los comics y también los video juegos, debo admitirlo, era algo raro de ver, bueno, en compartir mis gustos, pero yo sin problema decidí mostrarlos, si yo pude conocer los tuyos gracias a Leni y con apoyo de Lincoln, ¿porque ella no los míos?

El tiempo paso otra, específicamente dos años, yo teniendo trece años y la verdad con una apariencia distinta en ese lapso de tiempo, muchas cosas cambiaron en mí, tanto mi físico <<no tanto>> y también cabello, ya no quería tener ese tipo de cabello por lo que decidí ponerme uno distinto, específicamente un corte clásico de trenzas, aunque con el tiempo decidí ponerme dos estilos más, como sea, los dos años pasaron y cada vez más éramos más cercanos ella tenía diez y ocho años. Sentía que ya era momento de intentarlo, intentar si podíamos ser algo debo admitir que estaba con nervios, con miedo y temor, ya que no sabía cómo reaccionaría ella, no sé si le has pasado, pero cuando están con la chica o el chico que les gusta, tratan de dejar esos sentimientos de lado, para solo pensar en la amistad que tienes con él o ella, bueno, así mas o menos me sentía yo en esos instantes. Pero habría que arriesgarse, si no funcionara al menos podríamos ser conocidos. Aunque temía que también dejara de hablarme, en conclusión, estaba asustado.

Nos encontramos en el parque con el dúo de jóvenes que estaban hablando entre uno y el otro, hablando de varias cosas entre ellos las más destacables, como su día, como estaban, y las típicas preguntas que uno hace en una conversación, abarcando otros temas.

—Quizás una las cosas que me mas me quejaría de Friends, es la relación toxica que tienen Ross y Rachel, porque nadie quiere comportarse como Ross, pero bueno casi siempre por alguna mágica razón siempre volvían, y pues el ciclo se repetía—Daba algunos errores la morena que había notado de la serie.

—Y no olvides que el tipo estuvo con todo tipo de mujeres incluso por momentos a punto de comprometerse, y con una lesbiana.... —Recalcaba el moreno.

—Bueno al menos la serie finalizo de buena manera—Decía por último la morena.

—Bueno eso si tienes razón, pero nunca hay que olvidar los buenos momentos que nos dejó esa serie, uno de mis momentos favoritos, fue la gran rutina de Ross y Mónica—Recalcaba Clyde.

—Jajaja, si tienes razón, es un gran momento de baile que muchos videos lo hicieron viral, tenemos que hacerlo un día de estos—Decía la chica.

La tarde seguía normal, compraron unos helados para comer y se sentaron en una banca, Clyde analizaba el momento y sentía que ya era momento indicado, no había mucha gente así que, que pase lo que tenga que pasar.

—Ammm Jackie estas bien, como la pasaste en esta salida.

—La pase muy bien, gracias en serio, necesitaba un respiro de tantas cosas que debo hacer.

—Oh me alegro mucho de que este yendo bien, aunque también quería hablarte de otra cosa.

—¿Y qué es?

—Tu sabes que aprecio mucho tu amistad no ¿Jackie?

—Bueno las salidas y esta amistad de dos años lo dicen todo no Clyde—Decía la morena sonriendo.

—Sí. Y sabes cuándo paso estas salidas contigo, simplemente, son geniales, ya que bueno, tú quieres saber mis gustos, como tú los míos, algo muy raro de ver como lo siento, pero que también lo aprecio mucho.

—Owww Clyde gracias, aunque bueno, también mi hermano menor Sebastián tiene mucho que ver, aparte de gustarle los carros que colecciona, también es fanáticos de los súper héroes por lo que también se me pego un poco el gusto, aunque trato de no mostrarlo mucho.

—Sí y lo comprendo muy bien y como dije, lo aprecio mucho, aunque quería decirte algo aparte de eso.

—¿Y qué es? No era eso lo que quería o es otra cosa—Decía la chica con algo de curiosidad.

—Bueno si, es que, bueno yo desde hace mucho, yo siempre he ocultado estos sentimientos que tengo, no sé cómo explicarlos.

—¿Que clase se sentimientos?

—Son sentimientos raros cuando estoy contigo. admito que me siento, fuerte y débil al mismo tiempo, es algo difícil de expresar, pero creo que, si lo digo de forma directa, no sé cómo reaccionarias, pero aun así lo diré.

—¿Por qué lo dices?

La chica solo se quedaba escuchándolo después de decir eso, simplemente no decía nada después de lo dicho.

—Jackie, t-tú, m-me g-gustas, me gustas—Decía el chico con un poco de temor, mientras bajaba la cabeza luego de decirle eso.

La chica se lo tomo algo sorpresivo, no pensó que su amigo estuviera gustando de ella desde ya hace buen tiempo por casi decir, hace dos años. Solo decidió quedarse callado y seguir oyendo las palabras del muchacho.

—Yo sé que esto se ve mal, tengo trece años y tú tienes diez y ocho, perdón, es que, es algo que quería decirlo, no sé si perderé tu amistad, no sé qué estarás pensando.

—Clyde—Decía la chica mientras trataba de calmar al chico.

—Yo entenderé si no quieres que volvamos a hablarnos, si quieres podemos ser conocidos.

—Clyde—Repetía de nuevo la morena que esta vez chico se estaba alterado.

—¡Sabes no sé por qué dije esto! sé que no debí decirlo, ¡pero debía! Aunque esto salga bien o mal, bien dicen por ahí que si te gusta alguien, solamente dilo y.... y .... Yo.... Yo.

—¡CLYDE!—Decía con fuerza la chica ya que el moreno estaba botando algunas lágrimas.

—¿Q-Que? —Decía con dificultad.

—1. No te he dado una respuesta aún, mas con el miedo y densidad que estuviste hablando 2. Estas llorando, déjame limpiarte.

Decía la joven mientras sacaba de su bolso papel higiénico mientras le limpiaba sus lágrimas, por otra parte, el joven se sentía un poco avergonzado y un poco sonrojado, a pesar de haberle dicho sus sentimientos, no se sentía incomoda ni nada por el estilo.

—Listo ya estas mejor, ¿ahora si podemos hablar con normalidad?... Clyde lo que dices es muy tierno y de echo lo aprecio, pero de echo me sorprende que te guste por casi dos años, sí que tuviste que esconder esos sentimientos.

—Bueno si, fue algo muy complicado, pero aprendí unos consejos con mi amigo Lincoln en ese lapso de tiempo. El veía mi progreso.

—¿Y qué tanto te gustaba? Y wau sí que te a ayudado mucho el hermano de Leni

—Sin él, creo que estaría perdido, me gustabas tanto que gracias a Leni me vi todas las temporadas de Friends y Brooklyn 99 en ese tiempo, aprendí a diferenciar la moda y también aprendí a preparar pretzels cubiertos de yogurt y entre algunas cosas más, para poder dar al menos una buena impresión.

Esto fue algo sorpresivo para Jackie. No pensó que Clyde se había visto dos de sus series favoritas, aprender a preparar uno de sus postres favoritos y entre algunas cosas más para poder entenderla y comprenderla más, de echo hasta le fue algo lindo de su parte, muy pocos o por decir contados hombres harían algo por la chica que les gusta. Lo mismo para las mujeres.

—Quieres decir que ¿gracias a Leni y tu amigo, supiste mis gustos y más de mí?

—Si lo se, perdón por eso.

—¿Por qué debería perdonarte?, si eso es algo muy lindo de tu parte, pocos chicos o chicas harían eso por alguien que les gusta. Yo debería estar agradecida que te hayas tomado el tiempo de querer conocerme.

—Bueno también tuve ayuda.

—Sí, ya me di cuenta de eso, porque me lo dijiste—Decía sonriente

—Entonces quieres olvidar esto.

—Aun no te he dado una respuesta y ¿por qué deberíamos?

—Bueno es que yo.

—Clyde, los sentimientos que tienes son sinceros. Y se ve en ti quieres intentarlo, aunque también lo llegue a notar un poco cuando estuvimos en el pijama de Leni y su hermano ese día, por algunos momentos si se podría decirse, pero apenas nos conocíamos, es más, cuando estábamos haciendo la maratón, vi que te recostaste conmigo y me querías abrazar, eras muy tierno, que dormimos sentados los dos esa noche—Decía la chica que dejaba impactado al moreno al saber todo eso, y también por la buena memoria que tenia

—Co-como dijiste.

—¿Por qué crees que te deje dormir a mi lado sin ningún problema?, me pareciste un buen chico y estos dos años también lo he pasado igual de bien, si, debo admitir que tener una relación así es algo complicado, hasta difícil, la diferencia de edad y como nos verían, pero sabes que, no importa, hiciste algo que no pensé que vería de un chico y yo valoro eso de alguien, salió de ti, fue sincero, y lindo.

—E-entonces, es.

—Si Clyde, si—Dijo dándole un beso pequeño en los labios al chico.

El joven no sabía cómo expresar las emociones en ese momento, solo decidió seguir el paso y sentir la sensación de poder tener su primer beso que fue casi de diez segundos, luego de eso ambos separaron sus labios y mirándose un tanto sonrojados, pero también con una sonrisa de ambos.

—Entonces quieres seguir caminando ¿amor?—Decía Clyde con algo de timidez

—Si cielo. Si—Decía dándole una sonrisa y yéndose los dos de ahí tomados de la mano.

—Sabes algo Jackie.

—Qué cosa es Clyde.

—Esto es como si me estuviera enamorando de nuevo por primera vez. Y sabes algo, se siente bien.

La chica simplemente no dijo nada y solo le dio otro beso corto en los labios. Lo bueno es que no habían personas por donde pasaban.

Y así comenzó una relación, nuestra relación, de la cual valoro con el paso de tiempo y sigo apreciando de ti, a veces siento que soy la persona más afortunada, siento que me saque la lotería y no lo sabía, lo mejor de ti es que cuando te veo a los ojos y me miras a mí, siento que mi mundo ya es no tan normal, me siento fuerte y débil al mismo tiempo, me siento aterrado y al mismo tiempo emocionado, la verdad no estás seguro de lo que quieres, excepto que clase hombre quieres ser, o más bien quiero ser para ti, siento que he alcanzado lo inalcanzable. Y no estaba listo, sentir varias cosas que aprecio, nuestras relación crecía y salíamos de paseo a los parques, atracciones y también a los teatros, no sabía que habías participado para una obra de Romeo y Julieta, aunque al final no obtuviste el papel, disfrutaste en estar ahí por intentarlo, o también como olvidar cuando íbamos a los cines para ver películas, pero claro, siempre guardando apariencias para que no nos metamos en problemas, cuando cumplí los diez y seis años, sentí que era el momento para poder presentarte a mi familia como yo a la tuya, al principio había algunas dificultades pero no paso de ahí.

Nos encontramos en la casa de los Mcbride, donde los padres de Clyde estaba en el sillón por petición de su mismo hijo, ya que por fin les presentaría a su novia un momento que ni él lo creería. Ella ahora mismo se escondía en una pared escuchando todo.

—Papás, agradezco mucho esto momento, aquí escuchándome ya que es muy importante para mí.

—No tienes de que Clyde, pero ¿porque nos querías reunirnos aquí? —Preguntaba Harold.

—Tu expresión de emoción dice mucho de ti hijo y también que es importante. —Decía Harold.

—Bueno es importante, ya que les voy a presentar a mi novia—Decía el chico algo emocionado.

Esto fue un pequeño grito de alegría para los Mcbride, no pensaban que su hijo por fin ya había tenido novia, era un momento para celebrar.

—Hijo eso es asombroso—Decía Harold.

—Y cuando nos la presentas—Decía Howard emocionado.

El chico no dijo nada y solo dijo ''Jackie puedes salir'' y se veía ahí a una mujer de veinte y dos años, con una belleza increíble a simple vista, los Mcbride se quedaron impactados ya que a simple vista la novia de Clyde era alguien mayor a él.

—Oh, hola señores Mcbride, Soy Jaqueline, pero pueden decirme Jackie—Decía la chica de un tono amigable.

No era de esperarse esa expresión de los Mcbride, no sabían que decir ante la presentación tan sorpresiva, pero luego algo paso en su mente de ambos, si ellos pudieron tener un relación y una amor LGBT, por que su hijo no puede tener un novia mayor que él, eran otros tiempos, pero los tiempos cambian, tanto para bien como para mal, así que decidieron darle la bienvenida a su familia con un abrazo entre ellos y Clyde feliz de que Jackie les agrade sus padres, como sus padres a Jackie.

Si podría decir cómo fue en mi caso, es que al menos yo también termine de caerles bien a sus padres, aunque también Jackie me dijo que tenía un hermano, esto la verdad para mí era algo sorpresivo y bueno, ya que tenía algo que poder regalarle.

Pasamos a otra parte donde se les ve a los padres de Jackie hablando con Clyde tranquilamente hasta que por fin llega la persona que tanto tenía ganas de conocer.

—Si la verdad su hija es una persona maravillosa, de hecho, gracias a ella logre conocer más cosas de la moda y poder estar mejor vestido y mejorar algunas cosas de mi.

—Eso es algo muy bueno Clyde, sabes, esperemos que un día podamos tener una cena familiar juntos con sus padres—Decía la madre.

—Jejeje, apreciaría mucho eso señora.

—Y sabe cuándo vendrá Jackie, ha estado tardando un poco—Decía Clyde.

—No te preocupes en un rato debe venir—Dijo su padre.

Y ahí se veía a su novia trayendo a su hermanito un chico de solo nueve años que estaba ahí un tanto tímido porque era la primera vez que conocía al novio de su hermana, por otra parte, Clyde fue ahí para ponerse en su altura y dándole una sonrisa, se podría decir que en ese entonces el joven ya tenía una apariencia un poco distinta con un polo banco de manga larga y pantalones azules con zapatillas de color mostaza, pero esta vez llevando su corte de toda la vida que llevo cuando tenía 11 años

—Hola, tú debes ser Sebastián ¿verdad? —Decía el chico saludándolo de manera amigable.

El joven simplemente de escondía en las pierna de su hermana tenía algo de miedo, pero también su hermana incentivaba a su hermano a poder hablarle.

—No le te tengas miedo Sebastián, él quiere conocerte, además que es una buena persona—Decía la chica tratando de aumentar la confianza del chico.

El joven moreno salió un rato para volver unos minutos después traía consigo un carro de juguete, de esos de los que los niños disfrutaban jugar, como tú y como yo. El joven se quedó anonadado, pero aun así no sabía si ir o no.

—Ven, no te haré nada—Decía el joven.

Sin más remedio el joven se acercó a él dándole la mano y este sonriéndole.

—¿Tu nombre es? —Preguntaba Clyde con el chico.

—Se-Sebastián—Decía el chico con un poco más confianza.

Y ese fue el inicio de una amistad que tengo con el hermano de Jackie, se podría decir que las cosas iban muy bien nuestras salidas, convivencias familiares y nuestros besos de despedida. Aunque bueno no todo seria para siempre, la llamada que dio, fue el comienzo, del inicio del fin.

Se veía un joven leyendo algunos comics tranquilos en su habitación había pasado un año de las cosas y ahora el joven tenía diez y siete años y ella veinte y tres.

—Jackie como estas, pasa algo.

—Clyde.... Tenemos que hablar—Decía la chica con un semblante serio, pero también nerviosa.

Parecía ser algo serio, con aviso de sus padres el chico salió de su casa para poder ver a su novia, ya llegando, saludo a sus padres y su hermano y le dijeron que, si la buscaban, estaría arriba.

—Jackie que pasa, porque me llamaste.

—Yo, yo, iré a una mejor universidad a terminar mis estudios—Decía con desanimo.

—Solo por eso, ¿de eso se trataba? Por qué sería algo serio por lo que llamaste—Decía confundido—Más bien son buenas noticias amor, vas a ir a un mejor lugar para estudiar.

—Lee la carta—Decía la chica.

Hice lo que ella me dijo, pero la alegría que tenía en ese momento se desvanecía poco a poco debido a lo que decía.

—¿Te iras? Te iras al extranjero, específicamente a Inglaterra. Y después de eso te darán vacantes para poder encontrar tu trabajo.

—Yo sé que es malo de mi parte decirte esto, porque me iré en dos semanas, también lo tome de forma desprevenida, no pensé que nos iban a pasar a otra universidad mejor a mí y otros estudiantes, pero preferiría decírtelo ahora, yo, lo siento, si quieres podemos quedarnos y buscar otra forma—Decía la chica que no sabía que decir ante tal sorpresa, hasta se sentía mal por esta noticia.

Pero vaya que el chico se lo tomo de la mejor forma, Clyde ya había madurado en muchos aspectos con el paso del tiempo, como haberse recuperado en su problema del asma y poder practicar deporte o mejorar su apariencia y la vez superar su amor platónico. El joven solo decido darle un abrazo a su novia para poder ponerla tranquilas.

—Tranquila Jackie, sé que tienes que tienes ir a esa universidad y también perseguir tus sueños, no sería bueno de mi parte pedirte que te quedes y que no puedas ir al extranjero y alcanzar tus metas. Además, esta es una oportunidad que solo aparece una vez en la vida.

—Tal vez personas como tu aparecen una vez en la vida.

Simplemente no dijeron nada por unos segundos, hasta que Clyde decidió romper ese silencio mientras levantaba los ánimos y su rostro frente al suyo, sonriéndole y dándole un beso en la frente.

—Tú vas a destacar, brillaras y serás increíble, que te parece si aprovechamos estas dos semanas para los dos—Daba la propuesta el moreno.

—Sí, si por favor—Era obvio la emoción de la chica.

Si así fue una preparación solo dos semanas para mí y para ella, también pude contar con la ayuda de grandes chicos, como Lincoln, Rusty, Zach, Liam y Stella. Y que puedo decir de mi mejor amigo, que con el paso del tiempo estuvo mejorando mucho si nos referimos a sus planes, como personas y en varios aspectos mejores que yo, y vaya que fue de gran ayuda y apoyo para que pase con ella y también mejore yo, el también encontró pareja, decía que amiga de Ronnie Anne, una chica con rasgos asiáticos, la verdad los veía muy poco, pero se veían tiernos, pero volviendo al caso, esta serían las mejores dos semanas que atesorare mucho si podría hacer un resumen, fue salir a funciones de teatro, a parque, películas, leer comics, libros, ya sabes cosas típicas de parejas y también divirtiéndonos, aunque también jugando con el hermano de Jackie, Sebastián, nos decía por momentos mamá y papá, algo que si nos ponían algo avergonzados por momentos, se podría decir que esas dos semanas y media fueron las mejores para mí y para ella, en especial uno de esos días donde tuvimos un día de campo y vimos el cielo entre los dos, sin que nadie nos molestes, solo ella y yo. Aunque bueno, ya nos faltaba un día para pasar entre los dos, ella pidió que pasemos nuestra última dia/noche en un hotel, se podría decir que hicimos de lo siempre, ver nuestras sitcoms favoritas. Para recordar linda memorias.

Nos encontramos con la pareja que estaban viendo algunas sitcoms, habían terminado de ver algunos episodios de Friends para ver Brooklyn 99 echados en la cama y solo se les podía oír.

—NINE-NINE—Decían al unísono con fuerzas mientras veían la serie.

—Bueno, creo que vimos muchas series desde la tarde que no hospedamos aquí, ¿Crees que es hora dormir? —Respondía el hombre por las altas horas de la noche que estaban.

—Sí creo que ya es hora—Respondía de manera final.

Estaban pasando las horas, pero Jackie no podía congeniar el sueño, muchas cosas le pasaron en la mente y eso no ayudaba mucho.

—Clyde—Decía la chica para poder despertar.

—Que pasa—Decía levantándose con un bostezo

El joven solo la miraba desde su espalda, ya se había sentado pensando y meditando algunas cosas.

—Tu, me quieres ¿verdad? —Decía la chica con alguna duda mientras no lo miraba.

—Pues sí, claro que te quiero, creo que estos años de relación lo dice todo—Respondía un tanto confundido.

—Y también.... ¿te gusta mi cuerpo? —Preguntaba con duda la chica en sus palabras.

Esto fue algo que hizo poner algo rojo al muchacho de diez y siete años, no sabía que decir ante tal pregunta. No sabía que responder.

—Jackie yo, bueno.

—¿Si verdad? A veces vi cómo te ponías de vez en cuando en momentos incomodos entre los dos—Decía mientras recordaba que cuando iban en buz debido a la gente llena, tenían algunos momentos incomodos que ya deben saber.

—Jackie, eso fue cuando estábamos en el bus, había mucha gente, lamento por ponerte en esas circunstancias.

—Pero ¿nunca dije que me haya molestado? —Decía la chica que seguía de espada —Así que por favor—Decía mientras se desvestía la parte de su torso para arriba—Tómalo.

—Jackie, pero

—Antes de que alguien más lo haga—Decía mientras aún se cubría las partes que toda mujer tiene, pero también en la chica se le nota algo, sentía nervios.

Se sentía insegura.... Se sentía con miedo. Por parte de Clyde esto lo llego a notar, el joven ya no era un niño y ya sabía diferenciar las cosas, lo que hizo el joven fue darle un abrazo, un abrazo de consolación y apoyo.

—Jackie, que paso—Decía el moreno mientras la chica solo se soltaba en sollozos.

—E-es, complicado—Decía con un poco de dificultad.

-o-o-o-

Pasamos a hace unos años atrás donde se veía una Jakcie en sus años de adolescencia que estaba en una fiesta de las que todo tiene en esos años, estaba con Leni, Fiona, Mandee y Miguel se había divertido tanto que se había desarreglado, por lo que decidió irse al baño público que había ahí, obviamente avisaría a sus amigos que iría, al entrar todo transcurría normal, pero había encontrado a alguien, un sujeto medio borracho claro no se daba cuenta de eso por lo que pasó por alto.

—Ammm disculpe puedo ayudarlo en algo—Decía la chica preguntándole al hombre que no dejaba de mirarla.

—Mmm, oh, lo siento es que andaba algo cansado y tenía que hacer algunas cosas, esta fiesta es algo muy movida—Decía el hombre mientras seguía veía—Pero puede que me quede un rato más—Decía ahora el joven mirando el cuerpo de la chica

Esto ya estaba asustando a Jackie y poco a poco a decidió alejarse

—Amm sabe que, puede quedarse, puedo volver después, no incomodar lo que esté haciendo—Decía la chica con algo de terror.

—Por qué no nos podemos quedarnos aquí podemos hacer este momento, nuestra la noche.

De un intento rápido Jackie trata de salir baño, pero desafortunadamente el hombre la sostiene del brazo y pone contra pared besándola contra su voluntad, tocando partes de ella sin su consentimiento, la morena sentía mucha adrenalina de miedo, no sabía qué hacer, no podía defenderse, estaba invadiendo su cuerpo sin su consentimiento. Solo podía llorar de impotencia no podía hacer ruido, debido al sonido fuerte de la música.

-o-o-o-

—Oigan chicos ¿dónde está Jackie? —Decía Fiona que no venía a la morena llegar con ellos

—No a salido del baño aun, que yo sepa estas cosas son rápidas—Decía Miguel.

—Qué tal si vamos a ahora, quizás le paso algo—Decía Leni.

—Concuerdo con Leni, quizás le haya pasado algo—Dijo Mandee y sin más excusa fueron.

Por otra parte la morena solo trataba de luchar pero no podía, era muy fuerte y no sabía que hacer, la tenían contra la espadas y la pared, por lo que solo rogaba a que vengan sus compañeros o cerrar los ojos y que esto termine, afortunadamente la chica no le pasaría nada, estuvo inconsciente por unos minutos, cuando despertó, solo pudo ver a sus amigas que la ayudaban a reponerse y ver a Miguel y Fiona golpeando a ese sujeto, no hace falta decir que llamaron a la policía y que la chica entro en yanto debido a lo que sucedió, casi le arrebata algo muy importante de toda mujer. Jackie tuvo que tomar terapia por unos meses, si bien al inicio tuvo algunos altibajos debido al problema que tuvo, porque seamos sinceros, saber que estuviste a punto de ser violado o violada deja un trauma y miedo, pero con el apoyo de sus amigos y su familia la chica pudo superar esto poco a poco.

-o-o-o-

Volvemos al presente, donde el moreno no sabía que decir ante tal cosa, solo sentía lastima y rabia, hasta sentía que no debió pedirle estar con ella debido a la magnitud que podría causar estos problemas qué recién se estaba enterando.

—Pero Jackie, yo lo siento, no sabría qué decir, me siento culpable, yo, no debí pedirte que fuéramos novios.

—Clyde—Decía Jackie razonando con el muchacho.

—De haber sabido algo como esto no te hubiera y...

—Clyde—Decía Jackie sosteniendo uno de sus hombros ya que se estaba alterando.

—¿Que?

—Lo de estar contigo fue mi decisión propia, si bien tuve problemas por esas cosas, como asustarme con Miguel por ratos en ese proceso, contigo fue diferente, aunque debo admitir que el factor de tu edad jugo mucho a tu favor y que también hiciste cosas por mí, la pijama da, las salidas, nuestra amistad. Todo eso fue decisión mía, incluso hable con mi padre que eras un buen chico. No tienes que ponerte mal por eso. Por eso quería que hagas esto no se los peligros que puede haber ahí, por eso quería hacer esto—Decía la morena por ultimo ante el chico.

Esto fue algo que no había tomado en cuenta, pero a la vez era entendible, se podría decir que se tomó un minuto en dar su respuesta hasta que dio sus pensamientos.

—Jackie, yo aceptare esto. Pero cuando tú te sientas segura y que de verdad quieras hacerlo, no por temor ni nada, sino por que nazca de ti, de tus sentimientos, si bien esto es un regalo, quiero que este regalo sea una experiencia bonita, que nazca de ambos, entre tú y yo. Y sea algo que podamos disfrutar los dos y recordar ambos con cariño y si no soy yo, otro puede serlo, hay que estar abiertos a la probabilidad, yo me alegro que superaras esto

—Que pase lo que tenga que pasar no.

—Si.

La joven no sabía que responder ante tan respuesta a pesar de ser un menor, se notaba que el chico ya había crecido, su nueva actitud gracias ella y su amigo Lincol lo decía, lo único que hizo fue poder abrazarlo como el también a ella dando entender que, si algún día podrían hacerlo, sería un acto que nazca de ambos.

—Bueno se nos hace tarde, tenemos que ir a dormir, pero antes de eso. Tapate o ponte tus.... Tus, ya sabes—Decía el joven mirando a otro lado con algo de vergüenza, algo que Jackie logro captar.

Luego de que Jackie se pusiera su ropa, decidieron dormir ambos juntos, abrazados uno al otro mientras Jackie alzaba su rodilla y la juntaba con la de Clyde y durmiendo con una sonrisa tranquila, al final pudo decir, lo que tenía que decir. Mientras el chico también podría dormir tranquilo y disfrutar este momento entre ambos mientras ponía una canción.

Romantic Fligth – How to train your dragon.

Kiss me.

Al día siguiente los dos se levantan y se saludan con un tierno beso y hacer sus últimos quehaceres, cambiarse la ropa, pagar el motel y volver a casa, pero no sin antes, una última cita, esta cita seria comer en un simple restaurante, se podría decir que era una conversación tranquila, con más confianza entre uno y el otro, al final de eso los dos volvieron a casa y preparar las maletas de Jackie para su viaje a Inglaterra. Y también a los padres de Jackie agradecer a Clyde por ser un buen hombre con ella. Y también en esperar al taxi y su despedida.

—Bueno, esto es el final.

—No del todo, tengo tu figura de Jack un solo ojo que me regalaste, por lo que no estaré tan sola, este pequeñín me acompañara siempre—Decía elevándole el ánimo y sosteniendo ese regalo que le dio hace unos años.

—Entonces es un adiós.

—Solo sé que no voy y no quiero olvidarte.

—La distancia es un reto.

—Tu mismo lo dijiste, que pase lo que tenga que pasar.

—Lo se

Simplemente después eso, no dijeron nada, pero Jackie decidió darle un abrazo a Clyde, el abrazo duro casi un minutos y medio, no querían separarse, pero debían hacerlo. La chica solo decidió darle un adiós al entrar al auto mientras se iba de ahí, por otra parte, Clyde se despedía de la familia de Jackie y decidió irse a su casa.

Pasamos a la casa de los Mcbride donde se ve un Clyde cansado por las cosas que pasaron y solo decidió sentarse y pensar en las cosas que fueron como una montaña de emociones.

—Clyde como estas hijas. —Decía Howard mientras hace la cena

—Te despediste ya de Jackie—Decía Harold, que fue recibido por un golpe pequeño de su esposo por recordarle eso reciente—Hijo vamos a preparar comida ya que tus amigos vendrán dentro de un rato, creo que necesitas su compañía—Decía por último y yéndose de los dos de ahí.

Y vaya que fue cierto, unos minutos bastaron para que llegaran sus amigos para ver cómo estaba. La puerta se estaba tocando por lo que fueron atendidos por sus padres.

—Ey, amigo como estas—Decía Rusty preguntando el estado de su amigo.

—No sé, como debería sentirme, bien supongo—Pregunta medio apagado el joven.

—Bueno lo importante es que lo pasaron bien tú y ella—Animaba Stella.

—Por lo que no te sientas mal hermano, los años se pasan volando, son como las temporadas de caza en mi rancho —Decía Liam.

—Qué tal si hacemos un maratón de película—Decía Zach para animar Clyde.

—Chicos, no están ayudando animar a Clyde—Decía el albino acercándose su hermano—Dime amigo, quieres que nos quedemos, si quieres podemos visitarte en otro momento.

—No Lincoln, no es eso, más bien estoy feliz que vinieran a ver y como estoy. Lo aprecio mucho, pero siento que me olvide algo.

—No importa amigo, lo que ustedes no olvidarán serán su gran beso de despedida que siempre hacían—Elevaba Rusty el ánimo haciendo muecas de besos.

Pero de repente los ojos se abrieron como platos para el moreno, debido que eso era lo que se habían olvidado y levantando su cabeza asustado.

—OH NO—Dijeron el grupo de amigos al unísono.

—Olvidaste el beso de despida—Decía Lincoln desesperadamente.

—Cómo pueden olvidar algo tan importante—Decía Stella y Zach.

—No pueden olvidar algo que siempre hacen en sus citas. ES LO SUYO—Le gritaba Liam.

—No sé, es que se le hacía tarde, pasamos dos semanas, fue una montaña rusa de emociones entre los dos—Se explicaba desesperadamente el muchacho.

Pero después de eso llegan los padres de Clyde con gaseosas y también con pasteles de carne, queso americano derretido y tocinos traido para el grupo.

—Que pasa chicos—Decía Harold.

—Por qué tanto alboroto—Decía Howard que dejaban los aperitivos en la mesa.

—Señores Mcbride, Clyde olvido el beso de despedida con Jackie—Decía Liam a sus padres de forma desesperada.

—COMO PUEDES OLVIDAR ALGO TAN IMPORTANTE COMO EL BESO DE DESPEDIDA—Decían sus padres al unísono en voz alta que parecía que estaban gritando a su hijo.

—ES ALGO IMPORTANTE HIJO—Le gritaba Harold.

—NI SI QUIERA YO Y HAROLD NOS OLVIDAMOS DE ALGO TAN VITAL EN NUESTROS DIAS DE JUVENTUD, HASTA TU LO HACIAS CON ELLA CUANDO NOS VISITABA—Le seguía Howard.

—NO SE Y LO SE—Decía el joven desesperado levantando los brazos.

—De prisa chicos, tenemos que ir al aeropuerto, operación ''Llegar al aeropuerto para que Clyde y Jackie tengan su beso de despedida y no llegar tarde y buscar un nombre más corto para la operación''

-o-o-o-

Hay cosas que simplemente nunca cambian.

-o-o-o-

—Rápido suban todos al auto—Decía Harold

—Sera un viaje agitado—Decían al unísono sus padres

Y sin rodeos todos salen de ahí como si fueran una bala teledirigida, pero se estaban olvidando de alguien.

—OIGAN, OIGAN—Gritaba Lincoln por tanto alboroto que hacían—Olvidan a Clyde—Señalaba a su amigo moviendo los brazos.

—O CIERTO—Decían todos yendo por el joven y cargándolo hacia la camioneta.

Donde emprendieron un viaje para llegar al aeropuerto lo más rápido posible, claro, se tenían que hacer faltas en los semáforos. Y con una velocidad al cuello, quizás se pudo buscar mejores opciones o quizás les gano la adrenalina, el viaje tardo un poco, pero valía la pena para llegar. Cuando bajaron de la camioneta el grupo de amigos salió de ahí no sin antes.

—Papás—Miraba Clyde a sus padres y corriendo hacia ellos para darles un abrazo—Gracias.

—No tienes de que hijo—Decía Howard.

—Ahora ve por tu chica—Decía Harold y su hijo como si fuera soldado va a obedecer su orden.

Fueron unos minutos de desesperación buscando a por todas partes a Jackie hasta que Lincoln, Liam y Zach la encontraron en una fila esperando su vuelo, en pocas palabras una revisión. Llamaron a Clyde para que vaya corriendo por ella, era un estampido de cincos chicos, pero lo valía. Demoraron un poco hasta que llegaron.

—Oye—Decía Clyde interceptándola al frente de ella—Olvidamos nuestro beso de despedida.

—Lo sé—Dijo la chica con una pequeña sonrisa.

Ambos juntaron sus labios para poder tener un lindo momento entre ambos hasta que.

—VAMOS, NO ESTAN RETRASANDO A TODOS—Decía un hombre de la fila.

—Ey, hombre de negocios, me hagas ir por ti—Decía una guardia de seguridad.

—Y que te ataquemos—Decían otra guardia, haciendo callar al hombre de negocios.

—Bueno adelante chicos—Dijo el guardia normal.

—Continúen—Dijo la otra guardia sonriéndoles.

Y así sin interrupciones ambos juntan sus labios en un bello momento que ambos apreciarían con el paso del tiempo y sus amigos admirándolo, dándose un chócalas entre los cuatro y Lincoln mirado feliz eso, el beso duró casi un minuto, hasta que finalmente separaron sus labios mirándose uno al otro.

—Vaya forma de terminar.

''Pasajeros el vuelo hacia Inglaterra están a cinco minutos de iniciar, por favor subir al avión lo más antes posible''

Esa era la señal de despedida.

—Ya me tengo que ir—Dejo por ultima Jackie.

—Lo sé.

Era lo último que se decían, Jackie Salía de la revisión caminando hacia su vuelo, mirando por momentos hacia atrás, estaba dejando muchas cosas, un chico que conoció solo por pura casualidad, que, a pesar de su diferencia de edad con él, se querían uno al otro, de hecho, fue una ayuda y apoyo tanto para Jackie y Clyde, para superarse muchas cosas personales entre uno y el otro, también dejaba a sus amigos, Leni, Mandee, Fiona y Miguel que también la apoyaron en un momento difícil que si no hubieran llegado, quizás las cosas pudieron ser diferentes, menos mal que no fue así, mientras la chica caminaba recordaba todas las buenas cosas que paso con su novio, desde las tarde viendo películas, comics, sus sitcoms favoritas, poder cuidar a Sebastián entre los dos y que él mismo le diga madre y padre por momento, o ese momento que tuvo que admitir ese secreto, que solo quedarían entre él y ella, tanto buenos y malos momentos estaría dejando, dejando Royal Woods, dejando a sus amigos y la persona que quería, pero sabía que esto era importante. Ya no hay marcha atrás.

Por otra parte, Clyde miraba como se iba el amor que hizo cambiar y mejorar muchas cosas de él al igual que su amigo, quien le hizo ver que Lori no es la única chica que se tiene que centrar, alguien quien le ayudo a madurar como persona y buenos momentos que pasaron, reuniones, salidas, tener a Sebastián como un hermano que guiar y cuidar. Y entre varias cosas que apreciara con el corazón.

-o-o-o-

Pasamos a otra escena donde vemos a Clyde mirar a un avión despegando desde del aeropuerto, era el avión con rumbo hacia Inglaterra saliendo de Royal Woods, solo podía admirar como se iba, mientras se perdía en el cielo, solo significaba una cosa, Jackie, se había ido, ya había partido el vuelo. Indiscriminadamente le salían lágrimas en los ojos, pero entendía la situación y tenía que entender, el joven decidió secarlas y mirar hacia atrás.

Donde estaban sus amigos, Lincoln, Liam, Zach, Rusty y Stella mirándolo y con unos gestos en sus manos, dijeron y pidieron que venga, que no estaba solo, que estarían ahí para ayudarlo, protegerlo y darle una mano, de hecho, lo harían con cualquiera del grupo quien este en estas condiciones.

-o-o-o-

—Han pasado tres años desde tu partida y aun te echo de menos, sé que la vida sigue y sé que en algún momento nos volveremos a ver, de hecho, sé que les mandas cartas a tus padres y a veces la leo, también trato de mantenerme en contacto contigo mediante las cartas, aunque a veces ya no respondas mucho, espero que estés bien, Sebastián te extraña mucho al igual que yo, pero siento que esto no es bueno para mí, no sé si tendrás pareja o no, los primeros meses fueron difíciles, pero lo fui asimilando, pero poco a poco lo tome mejor, y también acepte que....

—Hermano que pasa por que te demoras mucho—Dijo Sebastián que entraba al cuarto de Clyde—Estamos esperándote para Salir, me dijiste que saldríamos a dakkar con Lincoln dentro de un rato.

—Sebastián, hola hermanito, lamento por la demora, estaba haciendo algunas cosas, no me demoro mucho tu solo espera.

—Ok, ok te espero y Clyde—Dijo por ultimo saliendo de su cuarto, pero también prestando su atención.

—Espero estés bien—Dijo lo último saliendo de su cuarto y Clyde dándole una sonrisa al muchacho que le decía hermano de cariño.

—Bueno ya me tengo que ir, creo que cuando intentas resumirlo todo...como me siento en esta época del año.... Me siento triste. No triste como para llorar, si no como para el triste de una canción, quizás como un Jazz melancólico. Y por mucho tiempo cuando una chica que conocí por pura y mera casualidad gracias a la hermana de mi mejor amigo y hermano, con una sonrisa, con un gesto de ''hola'' y que pesar de las cosas que pasó. Se mantenía con un gran bien en el corazón y me hace pensar.... Que la vida es maravillosa.

Pero solo puedo decir una cosa, algo que quizas muy dentro de mí, jamás lo diga.

''yo puedo conocer a un millón de chicas lindas que saben mi nombre, pero no te preocupes, porque tú tienes mi corazón''

Hasta entonces.

''Te querré, aunque ya no estés''

Fin.

Big Time Rush – Worldwide.

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No sé cómo reaccionara la gente ante esto, solo espero haber dado mejor de mí, y también que con esto se me va un peso de encima, si llegaron hasta aquí, espero que les haya gustado, soy SpiderBatFlash y cuídense 

Maroon 5 - Memories