Capítulo 21: "The happiness of the unknown"
Suelto una risa al ver como Jasson se ha presentado para la feria, podía haber esperado cualquier cosa menos verlo vestido semi formal, realmente creo que fue un error no haberme especificado el atuendo que debería de usar para la ocasión pero viéndolo desde un punto de vista diferente, es probable que sí le hubiera dicho que debía de comprar ropa de vaquero terminaría siendo un desperdicio cuando solo se quedara por una noche más en Jackson Hole, añadiendo que, él no es mucho de usar pantalones vaqueros y camisas cuadriculadas y botas, sin embargo para él, si fue una sorpresa tener que verme en una faceta mucho más diferente de la que conocía.
Y de cierta parte no es de menos cuando estoy ocupando una blusa blanca de mangas acampanadas y hombros descubiertos, como también, una falda jeans azul y el sombrero de Sawyer que aún sin creer que lo tenga conmigo luego de haberme prestado ya tres de los que he olvidado devolvérselos, más este que por Pam y Ariadna sé que es el más valioso para él. En esta ocasión lo único que puedo decir que no encaja con mi vestimenta son las sandalias de tacón que hacen juego con mi blusa.
—Wow. —Se queda asombrado.
—Vamos, muévete que te has tardado demasiado. —Lo tomo del brazo para que camine a mi lado.
Entramos a la feria mientras que vemos como ya hay varias personas en nuestro alrededor, muchas de ellas, comiendo, participando en juegos para obtener un premio, otras hablando o bromeando y eso sin decir, de que dentro de un establo ya se encuentran varias haciendo los típicos bailes sincronizados de los que me siguen impactando como se mueven a la perfección con la coordinación que tiene cada integrante como si hubiesen ensayado para que los movimientos sean más que correctos.
Jasson se queda impactado al ver todo lo que se encuentra a su alrededor más cuando nos acercamos a ver como un hombre compite con otro donde han empezado a sacar manzanas solo con sus bocas de un barril lleno de agua; a lo lejos se escuchan como varias personas aplauden, elogian, silban y gritan el nombre de algunas personas, por lo que nuevamente al caminar en esa dirección nos encontramos más que con un torneo de látigo en donde por lo que escucho luego viene otro torneo solo que esta vez de ordeñar y luego otro de rodeo de caballos.
— ¡Amy!
Me doy la vuelta para ver como Yogui se lanza hacia mí para brindarme un fuerte abrazo sin soltarme, detrás de él veo como llega Denise y Hippy, quien también me saludan mientras nos damos un beso en cada mejilla.
—Te ves espectacular —dice Hippy quien ahora tiene las puntas de su cabello color rosa.
—Gracias. —Le sonrió. —Me gusta tu nuevo look —le señaló su cabello.
— ¡Gracias! —Dice ajustándose sus anteojos redondos. —Iba a pintarlo completamente pero Tanner comenzó a llamarme algodón de azúcar, ¿lo puedes creer? —Dijo ella disgustada.
—La verdad, es que lo ibas a parecer. —Murmuró Denise.
—Quizás Tanner te evito algo, Hippy. —Yogui encogió los hombros.
Antes de que los acompañara para buscar a nuestros demás amigos, decidí presentarles a Jasson quien se ha quedado a mi lado escuchando las quejas de Hippy mientras se arregla la banda de tela que lleva puesta alrededor de su frente mientras Yogui y Denise intentan calmarla para que no se sienta ofendida con su nuevo cambio de cabello.
—Amigas y amigo, les presento a Jasson. —Los tres ponen su atención en mí. —Él además de ser mi compañero de trabajo y un buen amigo, también será un beneficiario que ayudará a reconstruir la escuela para darle una mejor educación a los niños y jóvenes —les empiezo a decir.
— ¡Mucho gusto! —Alza la mano Jasson.
—Es un placer conocerte, más porque estas contribuyendo a que la escuela tenga mejores condiciones y futuras oportunidades para los niños —declara Denise.
—Exacto, nadie en este pueblo se había preocupado por la educación hasta que llegó Amy y cambió las reglas —aprecié el comentario de Yogui.
—Sí, esa escuela ya necesitaba un cambio y ella ha venido a modernizar la educación que estos niños y jóvenes requieren, algo que nosotros no tuvimos —menciona Hippy.
Escuchar todo aquello de sus palabras me es un orgullo, primeramente porque siento que he sido útil en este pueblo al menos para mejorar la educación en los niños y adolescentes, y lo segundo, a cambiar ciertos estigmas sobre los infantes que tienen una discapacidad intelectual; sé que todo lo que he hecho no ha sido nada sencillo, más porque la directora no contribuye a hacer mi trabajo un poco más fácil al ponerse renuente cada vez que le doy una propuesta de cambio de educación, además, aún siento que falta mucho por lo que debo de realizar para que no haya discriminación entre los estudiantes, como a su vez, de no haber maltrato infantil al haber un grado elevado de exigencia en esos niños y adolescentes que a veces tienen complicaciones en la atención o concentración.
—Créanme cuando les digo que Amy es un orgullo de mujer, ella se empeña a que todo sea excelente y que los niños se merezcan lo que deben de tener en la vida —suelto una sonrisa al ver cómo Jasson se dirige a mí —, son afortunados de que ella esté aquí en Jackson Hole ayudándolos en lo que necesiten, ojalá, pueda aportarles más. —Me pongo una mano en el pecho al sentir un inmenso cariño por lo que dice mi amigo.
—Basta, me halagas demasiado. —Todos reímos.
Por supuesto, Jasson siempre ha sido un gran admirador de mi trabajo, él muy bien sabe que siempre busco conseguir aquello que quiero sin importar que pueda ser difícil o que me lleve a tener complicaciones con terceros; mi meta en mi vida sea a corto o largo plazo ha sido ayudar a niños y jóvenes no sólo en su educación sino que sus derechos sean valorados como es debido, también, a que tengan un pleno bienestar y que se les pueda atribuir lo necesario para que se convierta en personas de bien al crecer. Es algo de lo que me ha gustado de mi profesión, que a pesar que mayormente trabaje con niños con alguna discapacidad, también me desempeño en aquellos que tienen vidas problemáticas o difíciles en las que tienen dificultad de salir adelante por cualquier motivo mayor que les impida tener una vida digna.
— ¿Qué piensan hacer esta noche? —Nos pregunta Denise.
—Ambos somos nuevos en esto, ¿qué nos sugieren ustedes? Más tú Yogui quién organizo la feria. —Veo como a él le brillan los ojos de la emoción.
—Mmm, tenemos varias cosas, concursos, juegos tradicionales o mecánicos, bailes y sin dudarlo, mucha pero mucha comida —nos hace una pequeña recopilación el diseñador del evento.
— ¿Por qué no nos das un recorrido? —Le sugiere Jasson a Yogui.
—Claro, será un placer. Vengan. —Nos hace un gesto con la mano para que lo sigamos.
Yogui fue nuestro guía a través de lo que íbamos recorriendo toda la feria, explicándonos cada festejo y actividad que se estaba realizando en su momento, muchas veces no dejaba de ver como todos los pobladores de los pueblos cercanos que unían a Jackson Hole se divertían a su placer en hacer competencias o juegos en familia, también, en hacer dinámicas de las que son profesionales; en otras ocasiones nos tocó ver como varios granjeros concursaban por ver cuál era el vegetal más grande o el ganado que más peso tenía, además, también hubo rifas de ciertos animales de granja como lo fueron los patos, gallinas, cerdos y toros.
Me alegraba ver cómo mientras dejábamos un granero, Yogui nos mostró algunos juegos para los niños, eso sin decir, del pequeño zoológico que había reunido teniendo que llevar varios animales de granja en donde los infantes podían entrar a tomarse fotografías como a su vez, a perseguir o acariciar a los animales; otro momento también se vio como las personas podían hacer un intercambio de ganado o comprar vacas, toros o caballos que tienen una buena certificación para usarlos como proveedores de productos lácteos o de carne, como también, para utilizarlos de otra forma.
Me divertí al lado de mis amigos al quedarnos viendo una competencia de vaqueros sobre quien comía más tartas de moras, en donde me di cuenta que ahí estuvo participando Jackson, el hermano de Sawyer; para su mala suerte quedó en segundo lugar pero fue divertido animarlo a pesar que sé empezó a marear luego de que comiera doce tartas completas, en donde su boca ya estaba morada y dijo que tendría que ir a relajarse antes de vomitar lo comido.
En el instante en que nos encaminamos para ir a otra parte de la feria, fue que inesperadamente nos encontramos con Tanner, Dalton, Gigi y Sawyer, los tres acaban de salir de una carpa en la que Yogui acababa de decir que era una vidente la que había contratado.
— ¿Qué haces tú viendo una vidente? Si no crees en esas cosas —se burló Hippy de Tanner.
—Estuve ahí, porque perdí un reto con Gigi y me obligó a saber mi futuro que ahora ya no es tan incierto como lo creía —respondió Tanner disgustado.
— ¿Es que te convertirás en un hombre calvo, gordo y solitario? —Casi todos nos reímos en la cara del pobre Tanner cuando Hippy hizo ese comentario.
— ¡No! —Dijo él asustado. —Aún mejor, me dijeron que conseguiré a una linda mujer, trabajadora y cariñosa que apreciará como soy. —Reveló.
—Ajá, ¿cuánto pagaste para que se mofaran de ti está vez? —Dijo Hippy mientras cruzaba los brazos con risa.
—Diez dólares... —Dijo Tanner con vergüenza.
Fue inevitable no reírse pero Tanner no se lo tomó mal al saber que aún su suerte no está en sus manos al tener esa mujer que quiere en su vida, sin dudarlo, he visto como él suspira por Jazmín cada vez que escucha que hablo de ella o de las veces que la ve cuando recoge a Zack de la escuela. Sin mentir, tengo la impresión que está perdidamente enamorado de ella, sin embargo, me he dado cuenta que es muy tímido para pedirle que salga con ella y la verdad, es que deseo que llegue ese día porque a ambos serían una buena pareja, pero Tanner sigue sin animarse que al rato siento que tendré que darle un leve empujón para que se acerque a mi amiga y compañera de trabajo.
— ¿Qué hacen ustedes? —Intervino Gigi para cambiar de tema.
—Les estaba dando un recorrido por toda la feria —anunció Yogui.
—Ah es cierto, lo siento Amy, olvidé que debía de darte un tour por la feria —dice Gigi preocupada por mi reacción.
—No te preocupes, la hemos pasado bien —le digo para que se quede tranquila.
—Iremos a los juegos donde se ganan premios, ¿nos acompañan? —Pregunta Denise.
— ¿Por qué no? ¡Vamos! —Dice animada Gigi.
La verdad es que no fue necesario presentarles a Tanner, Gigi y Sawyer a Jasson, ya que ellos ya lo han llegado a conocer durante el tiempo en que él se ha estado quedando acá en Teton Village, por tanto, ellos solo lo terminaron por saludar mientras que mi mejor amiga Gigi le empezó a hacer ciertas preguntas a él sobre que le parecía hasta el momento la feria, a lo que él entusiasmado y con una enorme sonrisa en su rostro declaraba lo impresionados que está en quedarse a ver todo lo que habían preparado para esta fecha.
—No dejas de sorprenderme, te ves espectacular. —Musita Sawyer cerca de mi oído.
—Gracias, tú no te quedas atrás. —Me sincero al estar a su lado.
Y cómo no lo está si me encanta como su camiseta negra resalta su color de piel y eso sin decir de sus vaqueros a juego que marcan su cintura; además tuve que hacer un gran esfuerzo por no ver aquel espacio en que esta desabotonada su camiseta, la cual revela una parte de su pecho que tiene un vello considerado que apenas suele ser visible. Ahora no tengo duda de la razón por la que muchas mujeres se sienten atraídas a él cuando además de ser el soltero más codiciado del pueblo, es un hombre que sabe ganarse la vida y es muy guapo como inteligente.
— ¿Por qué no hacemos una competencia? —Hippy raspa sus manos como si estuviera planeando algo maligno.
— ¿Qué tienes en mente? —Inquiere Gigi.
Todos nos damos cuenta como ella gira su cabeza a unas casetas en las que hay una diversidad de juegos en donde se pueden obtener premios, por lo que, no es de sorprenderse que cada quien ya sepa a lo que ella quiere llegar luego de decirnos que realicemos una competencia.
—Ay no, ya empiezas con tus locuras —refunfuño Dalton.
—Ay, no seas aburrido, quizás te ganes un patito de hule, ¿qué te parece? —Hippy le dio un golpe con su codo en el costado a Dalton.
—Bueno, no lo veo mal —Gigi encoge los hombros.
—Entonces, ¿qué dicen los demás? —Ella aplaude con energía.
Realmente, nunca he sido buena para esos juegos y lo digo por mi dislexia la que me ha impedido de cierta forma poder obtener la dimensión y distancia adecuada de las cosas al tirarlas o agarrarlos, por eso es que casi no me gusta participar en ellas porque sé que será inútil intentarlas. Sin embargo, en esta ocasión, no le veo nada de malo intentarlo a pesar que cometa algún error, de todas formas, es normal que haya personas que no sean buenas en ciertos juegos, así que no me debo de asustar.
Al final, todos estuvimos de acuerdo en participar en los juegos de competencia que eligió Hippy para todos, y sin dudarlo, la mayoría consistió en tirar cosas, lo que menos puedo hacer pero ni modo, tocaría intentarlo aunque perdiera. Además, la persona que perdiera le tocaría pagar la comida de todos luego de que termináramos de jugar, eso sin decir que, la ganadora obtendría un deseo que le beneficiara; por tanto, ya sabía perfectamente quién sería la perdedora.
El primer juego que todos participamos fue el de tirar aros en un palo de madera un tanto grueso, por lo que cuando me dieron a mí los cinco aros que fueron las oportunidades que tuve para al menos tener un tiro, al final para mi desgracia por más que intente calcular la distancia del objeto, ningún aro cayó en su lugar, en vez de eso, quienes lograron tener cuatro aros dentro del palo de madera fue Gigi, Sawyer y Hippy, mientras que Dalton, Tanner y para mi sorpresa, Jasson fueron los que quedaron en segundo lugar con tres aros.
El siguiente juego consistió más bien, en meter en cualquiera de los cinco agujeros tres pelotas que marcarían una puntuación máxima de quién terminaba por darle a la que tenía una cantidad de trescientos, por tanto, en esta ocasión casi logro meter una bola sino hubiera sido porque la tire de lado, al menos en esa, hubiera tenido cincuenta, ya que mis tres intentos otra vez fueron fallidos y la frustración me llegó, haciendo que el último tiro no logrará dar correctamente al blanco. En este juego, los que sobresalieron fueron Dalton, Hippy y Yogui, mientras que Jasson, Sawyer y Tanner fueron quienes le siguieron en la puntuación.
—Amy, ¿qué sucede? —Pregunto Hippy. — ¿Se te dificulta calcular los tiros? —Pone sus manos en sus caderas.
Hice una mueca porque en verdad siempre ha sido mi dificultad desde que me diagnosticaron con dislexia, añadiendo que, no se me ha hecho fácil controlar ese problema como el tartamudeo cuando estoy bajo presión y aunque estos momentos no es que tenga un exceso de ello, el ruido de mi alrededor y desde luego, ver como todos logran al menos tener un buen puntaje, es lo que ha hecho que no tenga una buena concentración y visibilidad de la distancia.
—Soy mala para estos juegos... Olvide decirlo —digo con una risa falsa.
Jasson quien es el único que conoce la razón por la que no obtengo la suerte de dar al blanco, hace una mueca en la que intenta obviar el problema, además, le doy gracias que no recurre fácilmente a mí, para preguntarme si estoy bien, porque si no me irritaría al no poder lograr mi cometido aunque sea una vez.
—No te preocupes, no todos somos buenos en esto —se expresa Sawyer.
—Sí, además solo son juegos —lo apoya Dalton.
—Sí, tienen razón. —Muestro una leve sonrisa.
—Vamos, el de llenar los globos con pistolas de agua, quizás sean más sencillos —me toma de la mano Hippy para que la acompañe.
Bueno, de cierta forma, si tuvo razón ella que fue el más sencillo de todos y que al menos, pude llenar un globo donde quedé en tercer lugar, ya que el siguiente y último que fue en los dardos, rápido me rehusé en participar y de una sola vez, me declaré la perdedora de todos porque ya era inútil con ese y además, no quería tener un mal tiro en el que terminará por dañar al vendedor del juego. Lo que sí pude obtener de ese juego, es que cada uno de mis amigos, obtuvo un peluche en el que Sawyer se dispuso a regalarme un lindo conejo blanco que tiene olor a zanahoria y es suave.
—Bien, ¿quién quiere una alitas o costillas? —Resalte cuando terminamos de jugar.
— ¡Yo! —Todos incluido Jasson, levanto la mano y dijo al unísono como los demás.
Todos nos fuimos al comedor más cercano para poder cenar entre amigos, por lo que mientras unos pedían unas alitas en barbacoa, otros se disponían a pedir las costillas; sin embargo, Jasson prefirió una hamburguesa de cordero por lo que mientras comíamos, reíamos y recordábamos lo sucedido de hace unos momentos, fue demasiado divertido para todos, hasta que detrás de Sawyer llegó alguien que terminó por arruinar la alegría que estábamos manteniendo en ese instante.
—Así que, aquí están todos —rezongo Aby.
—Se me quito el apetito —Hippy tiro una alita al plato al disgustarse de la presencia de ella.
—Creo que me caerá mal la cena —protesto también Gigi.
—Mmm, creo que has llegado en un mal momento —dijo de forma directa Yogui.
Aby achicó los ojos haciendo que mirara a mis tres amigos quienes se disgustaron que pronto ella apareciera interrumpiendo nuestro divertido y armonioso momento entre amigos; Sawyer también se puso incómodo y tenso pero al querer ser cortés, no sabía de qué manera explicarle a Aby que su presencia no es el agrado de nadie de los que está sentado en la mesa, omitiendo a Jasson en ello pero quien no se pondrá a discutir para que se quede sabiendo que nadie desea que ella participe con nosotros.
— ¿Interrumpí en algo? —Ella omitió las palabras anteriores.
—Nuestra paz. —Mascullo Denise.
— ¿Qué deseas Aby? —Sawyer formó una línea en su boca.
—Quiero invitar a Amy para que sea mi pareja en el concurso de tirar y agarrar los globos, por eso estoy acá —aclaró.
— ¿Qué? —Dijeron todos al unísono.
Incluso yo, me quedé admirada en el instante en que Aby se dispuso a querer invitarme a un juego del tampoco no soy buena, quiere que sea su pareja. No tengo idea la intención que tiene en este instante, porque para ser sincera, no nos agradamos y sabemos bien entre una hacia la otra, que participar en cualquier actividad juntas es para que se dé la siguiente guerra porque no hay que actuar como una actriz, para fingir que esto no lo está haciendo con amabilidad o estrechar las manos para aclarar todo y estar en paz, sino porque tiene algo en mente que pueda en el que quede mal o que ella puede verse como la víctima a fin de que Sawyer le preste atención.
—Deberías rehusarte —me musito Gigi muy cerca.
— ¿Es que te montaste al toro mecánico y se te desenchufo los cables del cerebro? —Dice Tanner con ironía. —Desde lejos se ve que no te agrada Amy, y ahora, vienes acá a pedir que sea tu pareja en un juego del que tampoco nunca has participado —siguió murmurando él.
— ¡Cállate! Que a ti, no te he preguntado —dijo ella irritada.
—Amy, no lo hará —me sorprendió la tenacidad en la que respondió Dalton.
—Tú cállate, campesino. No te metas en mis asuntos —le respondió ella molesta.
—No le hables así a él —la voz se Sawyer se tornó molesta al escuchar ese comentario.
Señor, aquí habrá fuego y pelea si no respondo; por la incomodidad de todos y sus propias respuestas sé que no quieren que participe al lado de Aby en el dichoso concurso, pero para ser sincera, me da igual lo que pueda suceder, de todas formas, todos los días soy la noticia de la semana entre los pobladores de Jackson Hole y aunque sea o no, la pareja de Aby para un dichoso juego, siempre hablaran de mí, por tanto, me tiene sin cuidados la decisión que tome, solo espero que no trame algo fuera de lo común.
—Bien, si tú lo quieres. —Dije encogiendo los hombros.
—Pero, Amy... —Jasson me da una mirada angustiada.
—No te preocupes, sabré manejarlo. —Le guiño el ojo.
Me levante de la banca de madera para acompañarla al dichoso concurso del que desea que participe con ella, veo como ya se encuentran cinco parejas más quienes parecen estarse preparando antes que comience, por lo que, al esperar que el anfitrión del juego dé una señal para empezar, me doy cuenta como mis amigos ya se encuentran entre una barrera esperando para apoyarme, eso sin decir que no dejo de ver como Aby sonríe como si próximamente llegará a tener una victoria.
—Las reglas son simples, la pareja que se le caiga el globo con agua, estará fuera de la competencia. —Resume el anfitrión. —Serán tres minutos los que deberán estarse tirando y agarrando de forma constante el globo, si hay una pareja que se detiene y espera por un largo tiempo para tirar el globo con agua, también estará fuera. —Chasquea los dedos el hombre. —Serán tres tipos de globos los que se les darán, por cada cambio de los tres minutos. —Muestra su mano con tres dedos alzados. —Así que, veremos quién será el ganador, ¡comencemos!
Trago hondo porque esto no me gusta para nada, primeramente porque no soy buena tirando y lo segundo, tampoco soy buena agarrando, lo cual lo que estaré a punto de hacer es como un tipo de suicidio ya que tengo dos alternativas que podrán suceder, la primera hacer una tontería en la que terminare por ser la burla u ocasionar un problema en que Aby se termine por enfadar. Bueno, ella quiso que fuera su pareja, así que, ahora que se atenga a las consecuencias.
Un chico le deja a Aby, un balde con un globo color azul, por lo que cuando ella lo agarra y lo empieza a mover entre sus manos, me da una mala espina al imaginar que tengo el presentimiento que algo no estará bien y no lo digo, por mi mal cálculo de no medir la distancia sino porque, pueda suceder otra cosa más que no será nada agradable.
—3... 2... 1... ¡Inicien!
Aby me tira el pequeño globo azul haciendo que me altere en unos cortos segundos cuando veo el objeto dirigirse a mí, por lo que intentando controlar mi dislexia, mido hacia dónde va si a la izquierda o derecha, pero simplemente mis pies se mueven a una sola dirección en la que abro las manos para poder agarrar el globo; al instante de ver como se aproxima a mí, cierro los ojos con el temor que me caiga en la cara o en la cabeza, por lo que teniendo miedo a lo que pueda suceder, sólo espero que pase lo peor. Sin embargo, pronto algo cae en mis manos sintiéndolo aguado y que se mueve de un lado a otro, eso solo ocasiona que rápido abra mis ojos para darme cuenta que agarre el globo, haciendo que, me impresione y como una niña pequeña empiece a saltar de la alegría mientras escucho como mis amigos detrás de mí, me felicitan y me apoyan a que tire el globo.
No obstante, al no saber si me resultará tirar bien el globo, intento no moverme de mi lugar y hacer un leve tiro con miedo que me pone ansiosa al no saber si Aby podrá agarrarlo, pero en el instante en que veo que el objeto se mueve hacia arriba, ella sin dudarlo, lo toma con rapidez y pronto me lo vuelve a tirar haciendo que tenga que moverme y ver hacia dónde va. No sé qué me estaba pasando en ese momento, pero pude calcular bien al agarrar otra vez el globo, haciendo que soltara otro chillido de la alegría donde al verme un joven que tuve a mi lado terminó por distraerse a punto de que el globo que le tiro su compañero, le cayera entre medio de sus piernas, haciendo que perdiera la competencia.
— ¡Eso Amy! ¡Vamos tú puedes! ¡Sigue así! —Escuchaba las porras que mis amigos me daban.
La verdad de todas es que supe manejar el juego entre el tiempo en que pude agarrar con perfección el globo, hasta que los primeros tres minutos pasaron, y me entregaron un globo más grande que el anterior y el cual, pesaba más. En esa ocasión, seguí concentrándome, como también, en poder tirar y agarrar el objeto sin ningún problema, en esa ocasión, perdieron dos parejas más por lo que en la final, solo quedamos tres, en la que, cuando vi el enorme globo que tendría que agarrar, me dio un poco de miedo al saber que si no lo agarraba, terminaría por mojarme.
— ¡Concéntrate! —Me grito Aby.
— ¡Es lo que hago! —Le dije a ella antes de que me tirara el globo.
— ¡Vamos hermosa! ¡Tú lo lograrás! ¡Serás la ganadora! —Escuche que dijo Sawyer.
Saqué una sonrisa y me di la vuelta en el instante que escuché como él empezó a apoyarme con más ánimos al encontrarme con Aby en la final.
— ¡Amy cuidado! —Gigi me señaló al cielo.
No sé cómo le hice pero al ver que el globo se dirigió a mí, rápido lo tomé pero con miedo al imaginar que podía explotar en mis brazos, en ese instante me di cuenta que al agarrarlo, el rostro se Aby se encontraba enfureció y no era de menos cuando Sawyer me ha estado apoyando en todo este tiempo donde ni siquiera a ella quien es mi pareja, le ha estado brindando porras.
Intente concentrarme cada vez más cuando le lanzaba a Aby el globo, como a su vez, cuando ella me lo regresaba para agarrarlo, en comparación a las otras veces, ahora ella me lo tiraba con más fuerza y agilidad haciendo que varias veces casi me tropezaba con los zapatos, eso sin decir, que en una de ellas, vi como una pareja termino por ser expulsada cuando a cada quince o veinte segundo tiraba su globo, por lo que yo no podía detenerme en ese periodo solo por la finalidad de calcular para que Aby lo terminará por agarrar cuando se lo tirara.
Sin embargo, esos tres minutos para mí se volvieron eternos cuando ni nosotras ni la otra pareja dejaban caer el globo, fue en ese instante en que vi una cierta sonrisa en el rostro de Aby en donde me tiro muy alto el objeto donde no pude medir bien hacia donde iba, ocasionando que, casi me tropezaba con un agujero al no ver hacia atrás. Pero quizás su plan no funciono porque termine por agarrarlo.
— ¡Eso Amy! ¡Eres la mejor! —Gritaron Gigi y Denise al mismo tiempo.
Trague hondo y en el instante en que estuve a punto de lanzar el globo, la fuerza del objeto fue mayor por el agua que se movía por dentro provocando que me fuera de lado y me deslizará un poco haciendo que cayera en el suelo, inesperadamente el tiempo se hizo totalmente corto cuando el globo terminó por caer en la cabeza en Aby, haciendo que gritara y de ello, viera como lo que le había mojado no había sido simple agua, sino que una, donde parece ser que era agua sucia ya que llevaba lodo y hojas secas. Su ropa terminó por ensuciarse y exactamente, los que estaban admirando el concurso empezaron a reírse de lo sucedido, ocasionando que ella se enfureciera pero no tuviera la oportunidad de gritarme cuando de pronto, llegó su querido primo a salvarla, sacándola del lugar y llevándose lejos.
—Y como vemos, los ganadores son Alice Carvajal y Peter Dawson. —Todos empiezan a aplaudirle a los ganadores.
Sentí como alguien llego y me levanto, ocasionando que mirara detrás de mí y me diera cuenta que es Sawyer con Jasson, ambos me dan una mirada de compasión de la que me hace sentir ciertamente culpable por lo sucedido. Retire mis brazos de ellos para salir del sitio donde se dio el concurso y pronto trote para alejarme de todos, sé muy bien que la intención de Aby era humillarme entre los espectadores si me caía el globo con el agua sucia, sin embargo, parece ser que su propio plan, termino por tener otros resultados inesperados.
Sinceramente no quería causarle esa vergüenza porque lo que me sucedió fue accidentado, pero ahora comienzo a darme cuenta que esto solo ocasionará que ella ahora me moleste más y no tengo duda, que con lo sucedido, ocasionará un buen rumor de que las personas del pueblo creerán que lo sucedido estuvo planeado por mí.
Me aleje un momento para tomar aire, lo que acaba de suceder por una parte fue trágico pero admirable, porque es primera vez que puedo controlar la dimensión de los objetos y su distancia cuando para mí, esto ha sido difícil. Con este concurso, al menos me di cuenta que puedo lograr muchas cosas si me las propongo sin que siempre tenga esos pensamientos negativos en mi cabeza que puedan ocasionarme frustración y desconcentración, algo de lo que aprendí hoy y por supuesto, me ha dejado una buena enseñanza como también, en no confiarme de cierta persona que siempre tramara algo contra mí.
—Amy, ¿estás bien? —Me di la vuelta para ver a Sawyer.
—Sí, lo estoy. —Hice una mueca.
—No te sientas culpable por lo sucedido, solo fue un accidente. —Asiento porque he comprendido eso.
—Lo sé. —Suspiré.
Realmente mi escapada fue más para poder celebrar con entusiasmo lo que acabo de hacer a pesar de tener dislexia. Porque de todas formas, desde un principio supe que Aby tramaba algo pero como dicen por ahí, el tiro le salió por la culata al querer hacerme daño, el cual, ella misma se lo termino haciendo.
— ¿No te hiciste daño? —Se preocupo él.
—No. —Dije sin problema.
—Que bien, tenía miedo de que ese globo te cayera a ti, pero me alegro que no haya sido así —se acercó para poner una mano en mi mejilla.
Sin haberlo imaginado, se acercó a mi cuerpo cada vez más hasta que estos ya se encontraban rozándose, puse mis manos en sus brazos y sentí como la punta de su nariz comenzaba a acariciar la mía, ocasionándome unos cosquilleos de los que me hicieron reír a través de la oscura noche.
— ¿Qué haces? —Le susurré.
—Intento controlarme para no besarte —elevé mi cabeza.
— ¿Por qué deberías controlarte? —Retira unos cabellos de mi rostro mientras sonríe.
—Porque soy capaz de no detenerme ahora —revela con cierto aire tentador.
— ¿Ah sí? —Le digo con una sonrisita.
Pongo una mano en su pecho y pronto puedo sentir como su corazón empieza a latir muy rápido, ocasionando que, otra nueva sonrisa aparezca en mis labios al ver la sensación que le provoca mi tacto, sin imaginarlo, mis manos se enredan entre uno de los botones de su camiseta, la cual terminó por desabrochar junto con otros dos más en donde me revela más su pecho; sus ojos empiezan a brillar más cuando mis manos no se quedan quietas y empiezan a tocarlo, ocasionando que, algo dentro de mí, empiece a sentir calor ante el momento.
—Bésame. —Musité.
Suelta una sonrisa pero no me besa en vez de eso, solo acerca sus labios a los míos, provocando que empiezan a rozarse y tenga la necesidad de que me bese inmediatamente antes que ahora sea yo la que no pueda controlar mis impulsos.
— ¿Dónde quieres que te bese? —Empuja mi cuerpo un poco más para que choque con el suyo. — ¿Aquí? —Deja un beso en mi mejilla. — ¿O aquí? —Mi piel se eriza al sentir sus labios en mi cuello. —También podría dejar un par de besos acá. —Besa uno de mis hombros.
— ¡Solo bésame, Sawyer! —Insistí.
Enrolló sus dedos entre mi cabello cuando sentí como apretó sus labios contra los míos haciendo que el beso se convirtiera en ansioso, peligroso y pasional. Ni siquiera deseaba que el aire se terminará de mis pulmones cuando nuestros labios no se separaban, en vez de eso, me aprisioné más a su cuerpo hasta que de repente, mi espalda choca con el tronco de un árbol; sentí como dejo un pequeño mordisco en mis labios y de cómo volvió a besarme sin detenerse. Mis piernas empezaron a flaquear y por un segundo me sentí mareada ante aquel olor varonil suyo y los intensos besos que nos estábamos dando, era una mezcla totalmente explosiva de la que tuve que controlarme para no caer en sus brazos, apenas me dio tiempo para respirar cuando otra sonrisa más grande apareció en su rostro.
—Como deseaba esto. —Murmuro.
Me dio otra mirada de la que pronto simplemente dejó pequeños y castos besos en mis labios de los que me pusieron impaciente. Fue extraño que ninguno de los dos hubiera ido más allá de eso, pero al menos me alegro al sentir que tenía no sólo respeto por mi sino porque también, nos encontramos en un lugar público.
—Ven, te invito a bailar. —Dice mientras se vuelve a abrochar el par de botones que le quite para acariciar su pecho.
Alza su mano y espera el momento indicado para que le dé la mía, así que sin ninguna espera, se la entrego haciendo que ambos, con una sonrisa en el rostro salgamos de la oscuridad para ir nuevamente a la feria, extrañamente se nos salen un par de risas como si acabáramos de hacer una broma de niños cuando en sí, parece como si nos hubiéramos terminado por comportar como unos adolescentes que están viviendo un amorío misterioso; esos minutos extrañamente fueron uno de mis favoritos hasta que nos detuvimos al ver a Tanner correr hacia nosotros agitado y con un rostro lleno de miedo.
—Sawyer... —Apenas puede contener el aire.
— ¿Qué pasa Tanner? —Él pone una mano en el hombro de Tanner para que se relaje.
—Tienes que irte con tu familia... —Sawyer y yo nos damos una mirada al mismo tiempo.
— ¿Qué pasó? ¿Por qué me dices eso? —Empieza a decir con preocupación.
—Es... Es tu padre... Él... Acaba de desmayarse y no responde —Veo como Sawyer se pone pálido al escuchar eso.
— ¿Dónde están? Y... ¿ya llamaron a una ambulancia? ¿Qué pasó con mi padre? ¿Cómo te enteraste? —Empieza a bombardear a Tanner con muchas preguntas.
—Vamos te cuento, en el camino. —Le dice nuestro amigo.
—Amy... —Me da una mirada.
—Vamos, ve con Tanner. Me reuniré con los demás. —Le digo razonando. —Tu padre y tu familia te necesitan. —Él asiente.
—Vamos, llévame.
Veo como Sawyer y Tanner se alejan de mí mientras corren lo más rápido que pueden, ante aquella trágica e inesperada noticia me quedo pensando en lo difícil que debe ser que te digan algo así en un día que te la has pasado bien con tus amigos, eso sin decir, de cómo tu felicidad puede decaer en un instante. Sólo ruego que el padre de Sawyer no le suceda algo peor y que pronto se recupere, ahora será necesario buscar a los demás y de ser posible que vayamos al hospital para acompañar a Sawyer, quien ahora más que nada, nos necesitará como un apoyo.
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Continuará...
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