¿Qué tan grande es la posibilidad de que haya escuchado mal? Una posibilidad enorme. Estoy segura que él dijo que quería ir a cazar conmigo, posiblemente sea una manera de ver la naturaleza para así encontrar a mi artista espiritual o tal vez sea algún tipo de ritual nuevo que hacen los grandes artistas, si, estoy segura que es eso, no es posible que el quiera contraer matrimonio conmigo. Miré al señor Serkin quien también me miraba, aunque más específicamente mi mano que sostenía el tenedor, solté una risa un tanto nerviosa bajé el tenedor lentamente para poder acomodarme mejor en mi asiento.

—Realmente no comprendo a los artistas famosos, el ir a cazar con usted en la naturaleza, ¿es algún tipo de nueva técnica?

El señor Serkin arqueo sus cejas, me miró en silencio cruzando sus brazos. Creo que lo malinterprete, será que no es ese el objetivo.

—¿Me equivoqué? Entonces, ¿es algún tipo de prueba?

—Hablo de matrimonio.

—¿Matrimonio? —nuevamente mi mente en blanco. ¿Es algún tipo de código secreto? ¿Cómo demonios puedo malinterpretar algo como esto? Matrimonio, ¿es decir que va a dedicarse ahora a eso¿ no lo entiendo— Entonces, ¿es algún tipo de tematica? ¿o me pregunta como se vería usted casado? No, espere, ya se, está ensayando conmigo.

Dije ahora más tranquila soltando un suspiro de alivio, era de esperarse, claro que se refiere a eso. Es un hombre ya en edad casadera por supuesto que está ensayando conmigo.

—Creo que es una propuesta bastante simple, debería practicarlo mejor, señor Serkin.

Aconseje pero él arqueo sus cejas, soltó un leve suspiro mientras negó

—No es ningún tipo de práctica, hablo de un matrimonio con usted, la propuesta es para usted,necesito que se case conmigo señorita Persson.

—¿Qué?... ¿Estamos en un programa de cámara escondida? —una risa con nerviosismo me invadió, él seguía en silencio, pero esta posibilidad era más grande a su propuesta, no iba a caer. Mire alrededor en busca de alguna cámara escondida incluso busque debajo de la mesa pero no había nada, levante la mirada para verlo—Vaya señor Serkin, jamás pensé que fuese del tipo bromista. Al parecer su apariencia de miedo solo es una farsa.

—Señorita Persson, ¿realmente parezco el tipo de persona que hace bromas de ese tipo?

—No, pero siempre hay una primera vez para sacar a su niño interior… ¿feliz día del inocente?

Soltó un suspiro y yo solo deje de reír, no entiendo que esta pasando. Quiero poner todas mis ideas en orden, pero no logro hacerlo y es que para empezar no hay ninguna razón para algo como esto.
¿Matrimonio? ¿Por qué me está pidiendo matrimonio? Veo su rostro y cada vez me doy cuenta que no es ningún tipo de broma sin embargo tampoco encuentro una razón para su propuesta, dudo mucho que sea por tener sentimientos hacia a mi de hecho ni siquiera parece del tipo que tenga sentimientos

—No lo entiendo… Es decir, técnicamente somos extraños, yo solo se que usted es algún tipo de genio en el arte, un pintor reconocido y yo solo soy una simple estudiante de último año en la carrera de arte. No tenemos nada en común además del arte y siendo sinceros se que no le agrado por haberle gritado idiota esa vez cuando casi me arroya con su auto y la verdad me da algo de miedo— mencioné lo último en voz baja aunque parece que él lo escucho muy bien pues se cruzo de brazos.

—Concuerdo con usted señorita Persson, somos unos desconocidos y en parte por esa misma razón le ofrezco una propuesta de matrimonio.

—Perdone que le interrumpa, pero sigo sin entender la propuesta. La razón por la cual decidió casarse conmigo es, ¿por qué somos unos desconocidos?

Pregunté confundido, si sigue así sin dar una explicación claro solo me dará un tic nervioso, necesito respuesta, muchas pero muchas respuestas.

—Comprendo su confusión señorita Persson, en especial por la situación tan repentina, pero esta propuesta es una gran oportunidad para usted, se que no tiene un sustento económico que se ajuste al presupuesto escolar, ciertamente tienes una beca completa y te encuentras en varios programas sin embargo sigue sin ser suficiente y cuando se gradué tendrá varios gastos que serán difícil de sustentar con el dinero como una simple mesera de una cafetería.

Está no es la clase de respuesta que necesito, más que eso siento que me ofendió.

—Si quiere lograr que sea su esposa no lo hará insultando y recordando que soy una pobre.

—No pretendía insultar, solo exponía la situación.

Una situación que me hace ver como un mendigo lamentable, parece que este hombre solo es bueno para crear obras de arte y no para hablar con una mujer.

—Me sigue insultando —aclaré.

—Mi propósito para exponer esta situación es solo para hablar sobre los beneficios, no solo pagaré todos sus gastos escolares también le ayudare en un futuro si planea algo más. Además, al ser un matrimonio por contrato solo por un año, no necesita vivir conmigo ni ningún sentimiento en particular, solo necesito una esposa de nombre.

—¿Y por eso quiere comprarme? Habla de beneficios que se supone que son muy convenientes para mí, todo esto…—trate de guardar la calma sin embargo estaba tan molesta, ahora sí quería golpearlo con el tenedor —Entonces, ¿todo esto solo es una farsa? La razón por la cual me escogió como su discípula es para cubrir su cercanía conmigo, debo decir que todo esto es tan hilarante, ¿acaso solo soy un chiste para usted? el simple hecho que piense en esa propuesta me es una ofensa ¿Le soy tan lamentable a sus ojos? ¿Y usted cree que me voy a dejar comprar como una cualquiera?

—Señorita Persson…

—Ni siquiera me ofende el hecho de que piense que soy una persona lamentable—confesé pues realmente era así, soy totalmente consciente de ello desde que mis padres murieron y nadie en mi familia me busco—más bien el hecho de que me hiciera pensar que tenía algo talento como para impresionar tan siquiera un poco, primero te burlas de mi y ahora esto.

—Señorita Persson…

—Incluso casi me arrolla con su automóvil… Por un momento me hizo sentir mal por haberlo llamado idiota pero ahora se que lo tiene bien merecido, es un idiota señor Serkin.

Me levanté de mi lugar aguantando las ganas de querer llorar pues seguía sin poder creer en esta situación, ahora tenía mucho más sentido que él quisiera mantener todo en secreto, no es más que un grandísimo idiota. Salí del restaurante con la frente en alto sintiéndome orgullosa por mi decisión, pero ahora tenía dos inconvenientes, número uno, no tenía ni la más mínima idea de donde estaba y número dos, no tenía el suficiente dinero para un taxi. Miré hacia el restaurante y un sentimiento de ira me invadió, algo me decía que todo esto fue planeado, me trajo hasta aquí por si la situación no funcionaba a su favor y yo no pudiera huir para así tarde o temprano regresará a él, pero no iba a ceder, si pude volver de ese campamento al otro lado de la ciudad soportando las quejas de Cameron puedo con esto. Observé el camino y solté un largo suspiro, bueno no iba a llegar a casa si solo me mantenía de pie a esperar algún tipo de milagro, estoy comenzando a pensar que debí seguirlo en mi bicicleta más bien no debí haberlo seguido en primer lugar, ¿en que demonios estaba pensando? Bueno todo esto no podría ser peor o al menos eso creí… Y se hizo la lluvia, yo y mi gran boca, tenia  que ser, parece que no aprendo la lección, solté un quejido para continuar mi camino, apenas y las gotas lograban mojarme,está bien, esto no es nada, si se puede Shenna.
Escuché el sonido de un auto a mis espaldas, este comenzó a avanzar lentamente para ir a mi ritmo, sabía que no necesita girar a verlo para saber de quien se trataba, me detuve y el auto también, respire hondo y  con una enorme sonrisa giré para patear el auto.

—No voy a seguirte idiota, prefiero caminar bajo la lluvia y…

—Entiendo que un desconocido en un auto da miedo, pero no dañes al pobre auto inocente— un hombre traje me miró con una enorme sonrisa. Me sentí avergonzada al reconocer al cliente habitual de americano doble con postres de mermelada.

—Como lo siento, pensé que era alguien mas.

—Pues siento pena por ese alguien más —miré al hombre avergonzada y lo vi acercarse con un paraguas —una mujer no debería caminar sola bajo la lluvia.

—Y tampoco debe seguir a extraños a sus autos —comente al saber su intención y el comenzó a reír. Ya cometí esta equivocacion una vez, no volveré a hacerlo para mí suerte el señor Serkin no es ningún tipo de asesino sin embargo no podía confiar tampoco en este hombre.

—Cierto, pero no soy cualquier desconocido, soy el cliente habitual de cafe americano doble con postres de mermelada que es raro del parque—bromeó y yo sonreí, vaya que era un título bastante largo—Y, ¿todo bien? Porque aún te ves horrible.

No pude evitar reír por su comentario para asentir, parece que el solo aparece en mis momentos donde me veo tan horrible.

—La verdad es que tengo la peor de las suertes así que siempre me veo horrible.

—Es una verdadera pena, parece que las palabras de la última vez no sirvieron de nada.

—De hecho fueron de mucha ayuda, incluso de mucha inspiración, pero aún así los nuevos problemas siempre llegan.

—Por suerte también nuevas soluciones —dijo mostrando las llaves de su auto—Si te aterrorizo, ¿Qué si conduces el auto?

—Claro, así si intentas matarme nos morimos los dos.

Aquello lo hizo reír, me extendió las llaves y yo las tomé.

—Suena a un gran plan.

Me dirigí a la puerta del conductor para subir, miré a aquel hombre y pensé en como decir que soy una completa novata en esto, ¿Cómo le diré que apenas se andar a veinte kilómetros por hora? Que más da, iré con cuidado para no dañar más este auto además es mejor que ir caminando. Puse el auto en marcha cuando aquel hombre subió a la parte del copiloto.

—Tal vez sea tarde mencionarlo o tal vez no, soy Alexey. Es que decir café americano doble con postres de mermelada que también es raro es un título bastante largo.

Bromeó y yo asentí en concordancia mientras mantenía mi vista en la carretera en verdad que no quería dañar ni un poco más el auto.

—Shenna.

—¿Cómo la guerrera de la jungla?

—En realidad es con doble n y no con doble e… Por otro lado, Alexey, parece que siempre apareces en los momentos oportunos, ¿no me estás acosando, verdad?

—No, solo es una bella coincidencia. De hecho iba a ver a mi hermano en el restaurante pero te Vi sola caminando sola en medio de la lluvia y sabía que no podía dejarte así.

—Agradezco la amabilidad,pero, ¿no será un problema dejar a tu hermano plantado?

—No, de hecho dudo mucho que le importe, él es algo reservado sin embargo tenía que asegurarme que no metiera la pata.

—¿Es problemático?—interrogue y lo ví hacer un ademán moviendo su mano de un lado a otro.

—Suele ser algo grosero al hablar, no explica mucho así que todo es un completo mal entendido con él. Bueno, es un completo idiota, así que cuando me dijo que hablaría con alguien, específicamente una mujer en verdad que me preocupo, él nunca a hablado con una o al menos no con tacto.

—Parece que toda la alegría te la llevaste tu.

—Ciertamente el encanto fue mi premio.

—Parece que también la humildad—solté sarcástica y el soltó una pequeña risa.

— Aunque ser consciente de mis dotes no es lo importante en este momento, tengo más interés en el hecho del por que caminaba sola, bajo la lluvia en un lugar muy alejado de la ciudad.

No pude evitar hacer una mueca ante el recuerdo, sigo pensando que debí golpearlo con el tenedor.

—Sinceramente no quiero pensar mucho en ello, solo diré que fue por un idiota.

—¿Problemas con tu novio? —interrogó y yo negué.

—No, solo un hombre idiota. Solo pensar en él vuelvo a estar molesta, es un tipo tan arrogante, no tiene nada de tacto y luego esa mirada que tiene, es como si analizará cada movimiento tuyo para juzgarlo, no tiene otro gesto que no sea el de un hombre que está pasando por la calle de la amargura.

Aquello hizo reír a Alexey a carcajadas hasta el grado de comenzar a toser, lo escuché respirar hondo tratando de controlarse para luego asentir con la cabeza.

—Suena como un completo idiota.

—Lo es, completamente, estoy segura que en su sello de fabricación tiene una advertencia de cuidado pues es un completo idiota, ahora mismo a este tipo debe… —frene de golpe cuando un enorme trueno se hizo presente, mis manos comenzaron a temblar y yo mire al frente, la lluvia comenzó a empeorar.

—Shenna, ¿estas bien? Debiste sentirte sorprendida por aquel trueno, estuvo algo aterrador el sonido.

Otro trueno, cerré de los ojos pero aquello solo provocó que aquellos recuerdos vinieran a mi, baje del auto con total pánico para comenzar a caminar quería despejar mi mente, quería olvidar ese sentimiento que me hacía sentir tan pequeña. Solté un pequeño grito cuando otro trueno se hizo presente, traté de cubrir mis oídos pro imposible no poder escuchar el sonido de la lluvia, la lagrima comenzaron a brotar, sentí tanto miedo, tenía frío y de un momento a otro todo eso desapareció, levante la mirada el señor Serkin estaba a mi lado cubriendo mi cuerpo con su saco, se estaba empapado debido a la lluvia pero no dijo nada, solo me encaminó hacia su auto giré para ver a Alexey de pie con un paraguas quien solo miraba la escena en silencio, me sentí tan avergonzada, cubrí mi rostro con aquel saco cuando subí a aquel auto lujoso que casi de arrolló en el pasado, ahora mismo estoy muy agradecida con este auto que me brinda calor con la calefacción y que ahora mismo estaba empapando con agua de lluvia… Maldición.
Mire de reojo al señor Serkin, acomodo su cabello empapado, aflojo su corbata, estaba completamente empapado también pero no escuché ninguna queja al respecto, me cubrí más con su saco cuando giro en mi dirección, no sabía que me iba a decir pero algo me decía que sería un gran sermón sobre mi imprudencia o mi pobreza, incluso esos tontos beneficios si me convierto en su esposa pero no dijo nada solo puso algo de música que hacía retumbar el auto era muy alto el volumen pero no me molesto pues evitaba que escuchara el sonido de los truenos.

—Perdón, por haberlo llamado idiota —pronuncie cuando el auto se detuvo, me quite el saco para extenderlo en su dirección —y también gracias, por todo.

El señor Serkin tomó el saco, pero no me miro solo se limitó a asentir con la cabeza.

—Bueno, yo, me voy. Nuevamente muchas gracias.

—Señorita Persson, aunque le resulte ofensivo piense en mi propuesta.

Quería estar molesta con él por sacar ese tema nuevamente pero no me sentía con el derecho de sentir así después de lo que hizo por mi, me límite a asentir con la cabeza para dirigirme a mi habitación en el campus. Lo que más quería en estos momentos era tomar una ducha y dormir, saque mi celular para poner algo de música y observe varios mensajes de Cameron, el sabia mi pánico a las fuertes lluvias y truenos así que supuse que quería saber si estaba bien, le envié un breve mensaje diciendo que me encontraba bien, una respuesta que también tuvieron los mensajes que me enviaron Bonnie y Megan. Noté que también tenía un mensaje de notificación de la universidad así que lo abrí para leerlo.

—Lamentamos informarle el retiro de los programas de las becas escolares al igual que de todos los programas escolares debido a un recorte de presupuesto.

Volví a leer el mensaje una y otra vez, pero sin importar cuanto lo hiciera el contenido era el mismo, tomé asiento en la cama para seguir leyendo el contenido de esta. Esto era un completo asco, aún me faltaba un año para terminar mi carrera, no tenía suficiente material, también tendría que pagar la habitación del campus y aunque odia admitirlo mis ahorros no eran suficientes en especial con el sueldo como una simple mesera en una cafetería. Maldije en mis adentros, lance mi celular y volví a maldecir cuando este cayó al suelo, necesitaba pensar en una solución, podía tomar turnos extras pero aún así el dinero no sería suficiente.
“Piense en mi propuesta”
Esa frase vino a mi y volví a maldecir, ¿realmente era la única opción que me quedaba? Quería encontrar otras posibilidades a esto pero no importaba en lo que pensara no era suficiente…  Maldita sea, realmente tengo la peor de las suertes.