Adivinar es intentar saber la respuesta sin tener certeza de ello, te basas en tu intuición o suposiciones, aunque puedes acertar en la respuesta por casualidad.

Todos hemos adivinado, a veces es correcto y otras veces no.

Adivina, adivina.

¿Quién va a romper su relación con Alice?

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Su pie tambaleaba con nerviosismo, dudando si contar lo que había visto, a pesar de que no fue mucho, eso ya hacía creer y demostrar muchas cosas ¿Porqué Riley no la insultaba o la ignoraba? ¿Porqué Alice sonreía con diversión y algo de felicidad? Eso ya no pasaba muy a menudo con Oliver y Edward lo sabía, aunque tal vez si hay algo en que todos concuerdan, la relación de Oliver y Alice últimamente ha estado decayendo, lo cuál, hace pensar muchas cosas. El acomodó sus lentes y suspiró, así, llamando la atención de su amigo Oliver.

—¿Qué tienes ahora?— Inquirió el de pelo largo, acercándose a dónde estaba situado Edward, el chico lo miró y desvío rápidamente la mirada.
—Estás raro, parece que te dieron duro.— Bromeó.

—No nada...— Susurró Edward, su amigo se sentó a su lado y se cruzó de brazos, hubo un momento de silencio, hasta que Edward decidió hablar.
—¿Cómo va todo con Alice? También ¿Cómo se siente no tener a la loquita a tus pies?— dijo, dándole un pequeño codazo, Oliver bufó con molestia.

—Alice... Ya me aburrió últimamente.— Confesó el de pelo largo, haciendo una ligera muñeca de disgusto. —Si hubiera pensado que sería así, mejor no le hubiera hecho caso.— Soltó una risa amarga, suspiró y recostó su cabeza en la mesa.
—Sobre Riley... Se que Alice tiene que ver con eso, eso también me molesta ¿Porqué lo hace?—

—Tal vez porque te quiere...— Oliver lo miró, haciendo que Edward se callará, el de pelo largo suspiró y continuo contando sus molestias.

—Y es absurdo ¿Porqué me fijaría en una inútil como Riley? Yo tengo mejores gustos.— Se quedó en silencio, dudando si seguir contando.
—Eres mi mejor amigo Edward y se que puedo confiar contándote esto ¿Entendido?— Prosiguió cuando el de lentes asintió. —Y ahora, Alice actúa como Riley y es aburrido.—

—Ya veo...— Susurró Edward, dudoso de decir algo, pero permaneció en silencio. —¡Bueno! Oye ¿Qué opinas de que ya no le gustas a la loquita?—
Intentó cambiar el tema de conversación y si, funcionó. Oliver lo meditó un poco.

—No es que me guste.— Respondió finalmente el chico. —Pero... Podría decir que subía un poco mi ego y eso me hacía sentir bien, pero Alice es una maldita agua fiestas.— Edward asintió suavemente, el timbre sonó, todos los alumnos se levantaron y salieron del aula. —Oye Oliver ¿Quieres ir conmigo a la cafetería?— Invitó el de lentes con una sonrisa, el chico de pelo largo rió y negó.

—No gracias Edward, tengo que hablar con Alice.— Dijo. —Gracias a ti me hiciste pensar y pienso que ya es aburrida.— Oliver caminó a la habitación de la demonio, mientras Edward se mal decía a si mismo mentalmente.

Oliver entró a la habitación de Alice, la castaña levantó la vista y caminó hacia su novio con una pequeña sonrisa, abrió los brazos para abrazarlo, pero el de pelo largo la aparto de un empujón, dejando confundida a Alice.

—¿Y ahora qué?— Inquirió bruscamente la demonio, cruzándose de brazos y mirando con algo de enojo a su novio. —No me gustan esas actitudes y tú lo sabes ¿Entendido?— Oliver se quedó en silencio, el también se cruzó de brazos y frunció el ceño.

—Si, como sea, Alice.— Oliver miró con enojó a la demonio, haciendo que ella retrocediera un poco, nunca, pero nunca Oliver la había mirado así.
—Eres una maldita aguafiestas ¿Sabes? ¿Porqué le dices a Riley que me deje en paz?— Alice frunció el ceño y se acercó a Oliver, aunque el de pelo largo notó su sorpresa y confusión.

—¡Porqué eres mi novio!— Exclamó la castaña con enojo, Oliver se sorprendió un poco, pero rápidamente volvió a su expresión enojada.
—Eres mi novio.— Colocó una mano en su pecho, señalándose a si misma. —Yo siempre protejo a lo mío ¿Entendido?— Oliver gruño suavemente, el colocó una mano en su cadera y miro a Alice con fastidio e irritación.

—Bien, terminamos.—

—¿Qué?—

—Terminamos.— Dijo simplemente Oliver, como si no le importará o doliera. —¿Eres sorda o que?— Alice se acercó rápidamente a el y lo tomó del cuello, azotando su espalda contra la pared mas cercana que tenía.

—No me insultes.— Susurró Alice en tono bajo y peligroso, Oliver la empujó lejos de el.
—¿Terminar por querer que solo fueras mío? Eres ridículo.— Oliver soltó una risa sin gracia.

—¿Ridículo yo?— Inquirió el de pelo largo.
—Tu eres la estúpida.— Alice se abalanzó contra el y empezó a golpearlo con fuerza, Oliver logró retener los golpes y le dió una cachetada, Alice retrocedió y miro incrédula a Oliver.

—Te voy a matar.— Amenazó Alice acercándose peligrosamente al chico, Oliver la empujó de nuevo, la castaña ya se estaba irritado y cansando de el, Oliver se encogió de hombros y sonrió con burla.

—¿Y que si me matas? Igual, nada cambiará, no te voy a seguir amando, perra.— Alice se quedó estática, Oliver suspiró con alivio y sonrió para si misma. —Además ¿Porqué crees que me gustaría una mocosa estúpida como Riley?—

—¡No metas a ella en esto!— Exclamó Alice señalando a Olive con enojó, el se quedó quieto, pensando ¿Porqué la defendió? No hubo tiempo para cuestionar o preguntar ya que Alice invocó unos tentáculos y lanzó a Oliver fuera de su habitación.

☆El chico se quedó mareado, se levantó y caminó con dificultad, caminó por el largo pasillo hasta que encontró a Riley caminando a dirección contraria a el, a la habitación de Alice. Oliver se detuvo y la miró, confundido.

—¿Qué haces aquí?— Inquirió el chico de pelo blanco ligeramente molesto por la discusión anterior, Riley lo miró, lo ignoró y siguió su camino, a Oliver se le hizo raro que ya no hubiera reacción en ella al verlo, pero también, que este llendo a la habitación de su ahora ex novia. Antes de poder reclamar o algo, Riley le contestó.

—A practicar.— ¿Practicar? Se cuestionó Oliver, observó como Riley seguía caminando y entraba a la habitación de Alice, el de pelo blanco se quedó quieto, observando.

¿Qué pasará entre ellas dos?

Riley entró a la habitación de la demonio, rápidamente evadió el ataque que venía hacía ella.  —¡Oye, cálmate!— Exclamó Riley con una ligera molestia, Alice levantó la vista y vió a la de baja estatura estar ahí parada. Riley se sorprendió al ver el rostro de Alice con pequeñas lágrimas.
—¿Alice?—

—Perdón...— Susurró apenada la demonio, sentándose en el frio suelo de su habitación.
—No quería atacarte, pensé que eras Oliver...—
Riley se quedó en su lugar, Alice la miró y sonrió débilmente. —¿Qué quieres? ¿Ahora aceptas que eres mi amiga?— Inquirió, intentando sonar burlona, pero no le funcionó, Riley negó rápidamente.

—¿Qué? No.— Respondió la de moño negro.
—Vine para pagar mi deuda, como dices.— Alice rió suavemente, encontrando divertido que Riley si le haya hecho caso y este propuesta a pagar su deuda. —¡No te rías!—

—Entonces, hazlo.— Riley asintió, colocó la flauta en sus labios y empezó a tocar suavemente una melodía diferente a la anterior.

La suave melodía que provenía de la flauta de Riley hizo que Alice encontrará un consuelo, un consuelo después de los eventos con Oliver, olvidó por unos momentos la pequeña discusión con su ex novio, era como si Riley supiera hacer lo que Oliver nunca supo hacer sentir a Alice.

Felicidad, una de verdad.

Riley terminó con la nota Sol, quitó la flauta de sus labios y miró a Alice, quién parecía más tranquila y feliz, inconscientemente la de baja estatura sonrió.

—Tocas bien.— Felicitó Alice con una sonrisa, Riley bajo la mirada, ligeramente apenada.
—Creo que el profesor Demi hizo un buen trabajo, enseñando a una chica al parecer buena para nada tocar bien la flauta.— Riley frunció ligeramente el ceño, sin saber cómo tomar eso.

—¿Te digo algo?— Riley levantó la vista apenada, un pequeño sonrojo cruzó por sus mejillas y rostro. —Yo hize la melodía... Quería-... Quería satisfacer tu oído, por lo del otro día lluvioso... Gracias.— Alice se sorprendió al ver cómo Riley se tomó el tiempo de hacer esa melodía para ella, no pudo evitar sentir ese extraño estremecer en su cuerpo. —Bueno... Le puse de nombre The Black and Lonely Room... Lo inspiré en tu habitación.— Expresó tímidamente Riley, como si le costará decirlo, miro a los ojos de Alice y se sonrojó más.
—¡Oye, no me mires así!—

—¿Así como pequeña?— Inquirió con burla Alice, riendo un poco, suspiró y miro con gratitud a Riley. —Te agradezco que te hayas pasado por mi habitación... No es muy lindo estar sola y es bueno tener la compañía de una amiga...—

—Denada...— Ambas se quedaron en silencio, en un silencio bastante cómodo, el timbre sonó, significando que era hora de que los alumnos se fueran de la escuela y a su hogar, Riley agarró su mochila del suelo y ahí guardó su flauta junto al cuaderno. —¡Nos vemos Alice!— Exclamó, saliendo de la habitación.

Alice suspiró, se levantó del suelo y empezó a caminar a su alrededor, pensando un poco, el extraño estremecer de su cuerpo desapareció y eso la alivio. La castaña suspiró aliviada, incluso se olvidó de Oliver gracias al momento de paz que le brindó Riley.

Adivina, adivina.

¿Quién va a querer más de esa compañía?

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Fin del capítulo 4

Perdón por no actualizar, pero aquí otro episodio de las lesbianas de mierda 🗣️‼️