¿Rendirse, ella? ¡Jamás! Si siempre lograba lo que se proponía, por más difícil que fuera, iba a ayudar a Oliver a qué acepte que el estaba enamorado de ella.

Pero... Esa mirada intensa de un par de ojos rojos de un demonio, ahora la hacían dudar, Riley sabía que simplemente no era una amenaza, había algo más humano en ello.

Los humanos cuando corren el riesgo de perder algo, hacen todo lo posible para mantenerlo y aunque era imposible que Oliver amara a Riley, la demonio parecía por un momento tener algo humano en su interior.

¿Cómo lograr comprenderlo de un ser maligno?

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El silencio inundó el aula, incluso los alumnos más ruidosos estaban concentrados en las operaciones que les colocó la profesora Circle, la maestra sonrió, era divertido ver cómo sus alumnos hacían lo posible por un punto extra en la materia ¿Cómo lo iban a desearlo? Después de todo, muchos rumores se hacían presente de desapariciones de alumnos y Circle era una de las sospechosas, por así decirlo, tanto como muchos creían en el rumor y siempre estaban inundados de miedo mientras que otros no lo creían, viéndolo como algo estúpido.

—Terminé.— Oliver se levantó de su asiento y le dió el examen a la profesora, mientras su amiga se retorcía de enojo debido a que ella casi terminaba, Circle tomó el examen y sonrió con orgullo, revisó las respuestas y como era de esperarse, Oliver sacó la mayoría bien.

—Perfecto.— Felicitó Circle dando aplausos silenciosos. —Eres muy inteligente Oliver, casi siempre obtienes un punto extra.— Oliver sonrió triunfante y miró a Zip, la cuál le hacía señas groseras por haberle ganado ese punto, el de pelo blanco caminó a su asiento y se sentó, esperando lo que siempre pasaba cuando mayormente obtenía un punto extra.

Sin embargo, nunca lo obtuvo, se le hizo raro y miro a Riley, la cuál parecía concentrada en su mente más que en las operaciones ¿Y sus aplausos y gritos de alegría? El no era el único confundido, todo el salón incluida Circle estaban sorprendidos.

—Qué tristeza Oliver.— Expresó Zip con un puchero dramático, colocando una mano en su pecho. —Perdiste tu encanto con Riley.— el de pelo blanco miro a su amiga y se encogió de hombros con indiferencia.

—¿Y? No es que la quiera.— Sin embargo, algo había en el que lo molestaba ¿Porqué Riley ya no le celebraba? Eso aumentaba un poco su ego y su autoestima debido a que el sabía que podría usar a Riley de muchas maneras para que le haga favores, ya lo había hecho muchas veces, sin embargo, algo se sentía bastante extraño ese día.
—Es bueno, yo le soy fiel a Alice.— Cuando dijo el nombre de su novia, inmediatamente pensó algo ¿Y si su novia había amenazado a Riley? Lo veía capaz, aunque ella sabía que el solo tenía ojos para ella, Alice seguía siendo tan precavida que incluso llegaba a ser molesto, soltó un suspiró y negó rápidamente, quitando sus pensamientos y concentrándose en la plática con Zip.

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Miró de nuevo su ventana y terminando la tarea de ciencias al mismo tiempo, pasaron unos cuantos días desde que dejó de acosar a Oliver ¿Por miedo? Ni ella misma lo sabía, se sentía algo confundida, pero algo le decía que tenía que obedecer a Alice, aunque ella no quiera, también se empezó a cuestionar ¿Porqué se enamoró de Oliver? ¿Habrá pasado algo para que ella sintiera eso que llamaba amor?

Extrañamente, se sentía algo rara, pero cómoda ignorando la presencia y existencia del chico, aunque si, seguía confundida.

—Cálmate Riley.— Susurró para si misma, tomando el lápiz y continuando con el trazo. Logró terminarla, suspiró con alivio, guardó sus cosas y se acostó en su cama para intentar dormir, ella siempre dormía rápido y hoy no fue la excepción.

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Su mirada se posó en la chica de pequeña estatura, sonrió y salió de su escondite después de mirarla durante cinco minutos, se recargó contra la pared con normalidad, Riley se giró al sentir una presencia y dió un saltó hacía atrás.

—¿¡Qué te pasa infeliz!?— Exclamó, recuperando el equilibrio y mirándola con irritación.
—Ya decía yo que sentía una mirada de alguien... Deberías de dejar de verme así... He sentido una presencia... ¿¡Eres tu acosadora!?—

—Cálmate, pequeña.— Alice pasó una mano por su cabello castaño y lo acomodó un poco, quería verse imponente, aunque ya lo era.
—Ya vi que no acosas a mi novio, que bueno que hiciste caso.— Riley tragó suavemente, ella miro al suelo, iba a decir algo, pero se detuvo, por un momento sintió la necesidad de decirle sobre las acciones algo acosadoras de Alice, pero formó una lógica al pensar que solo la vigilaba para que no se acercará a Oliver.

—Si, como digas, rata inmunda.— Riley se dió la vuelta para seguir con su caminó hacia la clase de lenguajes. —Tengo toda la vida para hablar contigo y una hora de lenguajes.— Alice rió suavemente, observó a la chica irse y desaparecer de su vista, sonrió, era fácil hacer que Riley la insulta, solo con su presencia es suficiente para que se enojé, lo cuál Alice veía divertido.

—Debería hacer esto más seguido.— Susurró para si misma, volviendo a su habitación donde la mayor parte del tiempo estaba, Edward miraba la escena con atención, el retrocedió y corrió hacía el aula de lenguaje, con su respiración irregular por la sorpresa, lo veía increíblemente extraño, Riley si parecía molesta con la presencia de la demonio, sin embargo, Alice parecía inmutarse en lo más mínimo, parecía divertida incluso ¿Y cómo no? Molestar a Riley era divertido.

¿Pero a qué se refería Riley con la mirada de los últimos días, la presencia extraña? ¿Será que...?

—No puede ser...— Susurró el de pelo largo, se quedó quieto observando la puerta del aula ¿Alice vigila a Riley? —Oliver tiene que saber de esto...—

¿Qué habrá de raro que Alice vigile a Riley?

Qué Alice parecía disfrutar la compañía de la chica. Lo cual, se veía muy poco cuando ella estaba con Oliver.

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Fin del capítulo 002