Fin
Miraba la taza de te entre sus manos…
Su madre le había contado todo mientras venían en el taxi camino al hospital…
Inuyasha había podido traer al abuelo a tiempo… y estaba aun delicado, pero por lo que los doctores habían dicho fuera de peligro al momento.
Al llegar de vuelta de Kyoto todos estaban cansados y fuero directo a dormir…
Su madre dice que no sabe a qué horas en medio de la noche Sota grito, y tanto ella como el abuelo fueron en su búsqueda.
Y vieron a la cosa ahí, sobre el… como besándolo… pero estaba lamiendo la sangre de su cuello…
Entre gritos y su madre lanzándole sus zapatos descubrieron que no podían lastimarlo…
El abuelo distrajo a la cosa gritando conjuros mientras ella corrió tomo a Sota en sus brazos y corrió escaleras abajo…
El abuelo grito que la cosa brinco por la ventana.
Y ahí estaba obstruyéndole el paso…
Después de un juego al gato y el ratón en el que cada vez que buscaban una salida la cosa estaba ahí riéndose… lograron salir, el abuelo logro atacarle con pergaminos que parecieron hacerle efecto, mientras corrían hacia la calle… la cosa la atrapo a ella por la pierna…
El abuelo se llevo a Sota…
Mientras la cosa se carcajeaba cortando su cuello y pecho…
Ella solamente había podido verle sintiéndose completamente aterrada…
Luego el abuelo apareció una vez más…
Le lanzo algo que quemo a la cosa… saque bendecido quizás…
Ella corrió alejándose de la cosa… el abuelo le grito que corriera hacia la casa…
Estaba de día ahora y la criatura aun les perseguía… entre sollozos su madre ahora toda vendada le había dicho quebrantadamente que las pesadillas debía de marcharse al amanecer y esta no lo había hecho…
Entro a la casa y corrió hacia su habitación… el padre de sus hijos le había regalado una Katana que estaba bendecida y tenía planeado usarla para destruir a la cosa…
Llego a su habitación y la cosa estaba ahí, cuando la ataco… no funciono…
La cosa solamente se carcajeo…
El abuelo la empujo dentro de su habitación y le grito que coloco un pergamino bendecido y no saliera de la habitación por anda del mundo… que no dejara huérfano a Sota y a Kagome… y la amaba mucho…
Mientras escuchaba al abuelo gritar conjuros y alaridos de dolor dice se sintió la más inútil del mundo… pero no podía salir… el abuelo estaba sacrificándose para salvarla… para salvarla a ella y a Sota…
Y luego de lo que parecía una eternidad escucho a alguien entrar a la casa…
Y eran ella e Inuyasha salvándoles…
Sorbió un poco de te…
Se sentía enfadada porque su familia haya tenido que pasar por tal cosa…
Le daba rabia… le hacía sentirse impotente… y aterrada…
Esto podía suceder en cualquier momento…
Necesitaba dejarles preparados…
Tráeles pergaminos de Miroku y la anciana Kaede… cosas con que defenderse…
Volteo a ver a Sota recostado en ella dormido… le pobre Sota que era tan temeroso estaría traumado para siempre ahora…
Suspiró una vez más… tendrían que superarlo… juntos…
En fin lo había destruido, ese ser horripilante que le había causado tanto pavor, pero no había podido evitar reaccionar de tal manera, había hecho esto para proteger a su familia.
Volteo a ver hacia la ventana y el Youki de Inuyasha le tranquilizo, le causaba gran tranquilidad que estuviera con ella, y se sentía aun mas sorprendida que hubiera decidido venir con ella y dejar a Kikyo prácticamente ignorada a la orilla del pozo. Sabía que Inuyasha no sentía "amor" por su familia pero sabía que si eran de su agrado, bueno, su mama lo alimentaba en grandes cantidades cada vez que cruzaba el pozo, Sota lo adulaba, y el abuelo ya no había tratado de ponerle pergaminos o echarle sake bendecido desde hacía mucho tiempo.
Suspiro y tomo otro pequeño sorbo de su te, se sentía mucho mejor ahora, los restos de la "maldición" que tenia había desaparecido, solo que esta vez había sido muy diferente de cuando Tsubaki le había maldecido, no se había sentido tan... sucia, contaminada, en esta ocasión era casi fétido aquella mancha que había sentido estaba en su alma, sabía que poco a poco iba a recuperarse, ella podría purificar esta mancha, quizás hasta le pediría consejos a Kaede-basan para meditar o hacer algo para que le ayudara a purificarse más prontamente.
Le enfermera le hizo una seña de que fuera, ya podía entrar a la habitación, quizás el abuelo había despertado.
"Sota?"
Sota comenzó a frotarse los ojos levantándose y alejándose un poco de ella…
"Si hermana?"
"La enfermera nos llama."
El niño le miro con los ojos rojos pero una pequeña sonrisa s formo en sus labios, probablemente pensaba lo que ella, que el abuelo había despertado.
xxxxxx
"Y... como están?"
Volteo a verlo de reojo mientras caminaban hacia casa.
"Bien, dadas las circunstancias, aun un poco en shock pero, estarán bien."
Inuyasha bajo su mirada y evito mirarle...
"Que es... shock?"
"oh, bueno, es como, aun... mmmm. catatónico?"
Inuyasha le vio con una cara entre inocente apenado y confundido, no puedo evitar desviar su mirada y reírse levemente.
"Lo siento no se como explicarlo... es como... quedarse asustado y sorprendido?"
Volteó a verlo e Inuyasha se sonrojo levemente antes de desviar su rostro hacia el otro lado.
"Keh! siempre buscas complicar las cosas, pudiste solo decir eso."
Se rio y se inclino en el tomando su brazo izquierdo...
"Awww Inuyasha lo siento, no lo hice intencionalmente..."
Le vio con sus "ojos de cachorrito" y cuando Inuyasha volteo a verla se puso rojo como un tomate y agito su brazo alejándose de ella, metiendo sus manos dentro de sus mangas como usualmente lo hace...
"Keh! estás loca."
No pudo evitar reírse nuevamente, Inuyasha era tan divertido cuando se ponía levemente incomodo o apenado.
Suspiro y se dedico a ver sus pies mientras caminaban, estaba tratando de distraerse un poco y regresar a la normalidad, su familia estaba a salvo, ella estaba a salvo, el abuelo estaba despierto, muy mal herido y habían tenido que transfundirle sangre pero sobreviviría, y su madre tenía ya sus heridas limpias y vendadas, no había rastros de la criatura asquerosa en ninguno de ellos, eso le había alegrado
E Inuyasha la había apoyado con toda esta situación, se sentía... feliz podría decirse que las cosas no hubieran terminado mal, pero a la vez se sentía preocupada, si había este tipo de Youkai o demonios en esta época, significa que su familia jamás estaría completamente a salvo, frunció el ceño y realmente cayó en la cuenta que muchas de esas desapariciones extrañas, o casos sin resolver, o incluso asesinatos extraños podría no ser causa de violencia "normal" sino que podría ser relacionada al mundo sobrenatural, y se sintió levemente triste al saber que ya no se contaba con Miko o monjes que pudieran ayudar a estas personas en esta época. Y entonces se pregunto si todos estos programas de "cazadores de fantasmas" tendrían aunque sea una pizca de realidad.
"Oe."
Volteó a ver a Inuyasha que la estaba mirando... preocupado.
"Estoy bien, solo pensando cosas locas."
Inuyasha se rio levemente, esa sonrisa medio de lado un poco burlona.
"No pienses tanto que te volverás mas loca."
Inuyasha se rio levemente, de una manera tan casual, que en lugar de reaccionar golpeándolo levemente y reclamarle por lo dicho se sonrojo al sentir el ritmo de su corazón acelerarse, volteó a ver hacia otro lado y sintió su rostro arder mientras volteaba a ver hacia el lado contrario, por haber andado pensando en tantas cosas no se había dado cuenta que esta noche pasaría en la casa junto con Inuyasha sola. Eso simplemente le causaba muchos nervios y no se había dado cuenta de ello...
'Además dejo a Kikyo para venir conmigo...'
Sintió su corazón latir aun mas rápidamente y apresuro su paso un poco, no tenía que emocionarse, tenía que clamarse Inuyasha estaba ahí mas que nada para que no estuviera sola y proteger a si "detector de fragmentos"...
'Bueno... eso no es justo hace mucho tiempo que ya no me llama así.'
Suspiro y decidió mejor pensar en que tenía en casa de hace para cenar...
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Miraba este cielo...feo... sin muchas estrellas, que tenía manchas de es humo que despedían las carrosas de hierro, con tanto sonido estridente en todos lados, que hacía que dolieran sus oídos y trataba lo más posible de ignorar... tantos olores desagradables, sobre todo el olor a muerte y enfermedad, pero esto era lo único justificable. Volteó a ver hacia un lado, un aparato o cosa extraña de metal con luces cruzaba el cielo a lo lejos, Kagome les había llamado aviones, le parecía increíble que los humanos hubieran logrado encontrar formas de volar por los aires, sobre todo con maquinas tan enormes.
Suspiro, esto era muy triste y desesperante, se sentía mal, se sentía impotente, no había podido proteger correctamente a la familia de Kagome, habían llegado justo a tiempo, o un poco antes hubiera sido mejor, lo único bueno de esto era que Kagome había purificado esa cosa horripilante, y lo había hecho decidida y con confianza, había pensado por un momento cuando le había encontrado llorando y aterrada que Kagome no soportaría la presión y no podría destruir a esa cosa, pero si pudo, parece que su instinto protector pudo más que el miedo que le tenía a esa criatura horripilante.
formo un puño tenso con su mano derecha de recordarlo, se enfurecía ante tal situación, odiaba que Kagome corriera peligro, odiaba que llorara, y peor aún, nunca había sentido aquella desesperación que había sentido al percibir esa gran cantidad de miedo, era su trabajo protegerla, y Kagome era muy valiente siempre se enfrentaba a todo, era también muy decidida y optimista, nunca la había visto tan asustada como en ese momento, y se sentía tan horrible consigo mismo ya que como su protector había fallado rotundamente.
Suspiro nuevamente sabia que no lo resistiría si Kagome llegara a...
Gruño... no quería ni pensarlo
No podía perderla, de ninguna manera, no podía sobre todo permitir que perdiera la vida, y no podía tampoco permitir que regresara a este mundo, sola. Antes pensaba que estaba a salvo aquí, ahora sabía que NO estaba a salvo, lo que era muy grave, así que estuviera donde estuviera Kagome no estaría a salvo más que con él. Sabía que podía protegerla mejor en el Sengoku Jidai donde podía llevar a Tetsaiga con el todo el tiempo, pero acá, sería mucho mas difícil...
Sacudió su cabeza de un lado al otro, en que estaba pensando? Kagome nunca quería... que él se quedara con ella por siempre, no podía, el... no soportaría verla con un... hombre. y él era solamente un Hanyou, no tenia que ofrecerle, si milagrosamente Kagome lo aceptara como... pareja... la perseguirían y si llegaran a tener cachorros...
No, en el sengoku jidai serian perseguidos. No tendrían paz.
Pero acá, sería peor, en esta época de donde el conoce nada.
Suspiro, se sentía completamente atrapado, sabía que no podría permanecer al lado de Kagome y a la vez sabía que no podría protegerla si era así.
Tenía que estar con ella para poder protegerla, pero no podía estar con ella por siempre, el era solo un Hanyou.
Rasco su cabeza frustrado…
"keh! Esta es tan complicado…"
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Venían caminando de vuelta hacia la casa de Kagome, volteaba a ver a la muchacha de reojo solo para asegurarse que venía caminando junto a él, aun había momentos en los que no se creía que Kagome estaba bien y con vida.
También se sentía mal porque su familia había corrido tanto peligro, y no había podido protegerlos a ellos tampoco.
"Y... como están?"
Kagome volteo a verlo.
"Bien, dadas las circunstancias, aun un poco en shock pero, estarán bien."
No sabía que significaba esa palabra, a veces se sentía mal por no comprender el "lenguaje" de Kagome, pero esta vez necesitaba saber...
"Que es... shock?"
"oh, bueno, es como, aun... mmmm. catatónico?"
'Catatónico'
Esta palabra estaba peor o igual que la anterior, no, necesitaba saber que era esto y parecía que Kagome se lo haría más difícil, este era el tipo de cosas que no quería que pasaran si algún día tendría que enfrentarse a esta época había tanto que el no comprendía...
"Lo siento no sé cómo explicarlo... es como... quedarse asustado y sorprendido?"
Se sentía como que era un chiquillo que necesitaba que su madre le explicara el mundo.
"Keh! siempre buscas complicar las cosas, pudiste solo decir eso."
Kagome prácticamente se abalanzo sobre el riéndose y sujetando su brazo izquierdo...
"Awww Inuyasha lo siento, no lo hice intencionalmente..."
Respiro hondo cuando Kagome se aferro a él, sentirla tan cerca, teniendo tanta confianza con el, sabía que esto era todo casual y era como Kagome trataba a todos, pero ese era el problema, ella no lo trababa diferente, no lo veía 'solo como un Hanyou'…
Volteo a verla y Kagome estaba viéndole de una manera tan tierna que lo abrumo, sintió su rostro calentarse y su corazón latir increíblemente rápido, se agito alejándose de ella y metiendo sus manos dentro de sus mangar, sintiéndose increíblemente nervioso… lo ponía nervioso que Kagome le viera así… tiernamente, como si él fuera importante… como si… lo amara…
"Keh! estas loca."
Evito mirarla y continuaron caminando lentamente hacia la casa de Kagome, de hecho parecía que la muchacha estaba haciendo el viaje más largo de lo que debía ser, no sabía si era porque tenía miedo de ir a casa… volteo a verla de reojo, caminaba mirando fijamente al piso, con una expresión muy pensativa… Kagome pensaba demasiado para su gusto, y le sabía curiosidad verla tan pensativa todo el tiempo, sobre todo porque no tenía idea de lo que pasaba por su mente…
Entonces Kagome comenzó a oler fuertemente a preocupación… y miedo… se tenso complemente y lucho contra si mismo para no gruñir… si… tena razón Kagome parecía tener miedo de volver a casa… tenía que buscar una forma de distraerla de esa línea de pensamientos…
'Abrázala…'
Agito su cabeza, no, no podía hacer eso, el simplemente saldría lastimado…
Insultarla… eso era mucho mejor, siempre le funcionaba, prefería que estuviera molesta con el a que estuviera temerosa…
"Oe."
Kagome volteo a verlo… bien, tenía su atención.
"Estoy bien, solo pensando cosas locas."
Se rio levemente, preparando su bromita.
"No pienses tanto que te volverás más loca."
Se rio de ella esperando que Kagome se enfadara con él y lo golpeara, pero sucedió algo peor, Kagome se sonrojo y evito mirarle oliendo a nerviosismo… oh no, había hecho las cosas peores.
Comenzó desesperadamente a pensar en una forma de enfadarla, pero no lo suficiente como para que lo mandara al Sengoku Jidai y quisiera pasar la noche sola por enfadada y orgullosa, pero mientras intentaba maquinar un plan, Kagome dejo de oler a nerviosismo, y simplemente caminaba a su lado, quien sabe pensando en que cosas, pero al menos no era algo que la alterara…
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Merito a la escritora Eiko007
Por esta historia
Bye
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