Y ahí estaba yo, esperando como un águila. Yo sabía que vendría al parque de atracciones, lo supe porque Luis me pasó el dato, entonces los vi..., cualquiera que pudiera verlos pensaría que son una pareja feliz, pero no lo son. Mi corazón estaba temblando, había decidido no reprimirlo más, me gustaba muchísimo. Días atrás se me había declarado pero yo decidí no aceptar esos sentimientos, no sé por qué fui así de estúpida pero yo sentía lo mismo. Es solo que no me sentía preparada.

Ya no podía perder el tiempo, lo había decidido.

Caminé rápidamente hacia la pareja feliz. Me quedé parada mirándolos a un metro de distancia, ellos me miraron algo incómodos, entonces antes de que él hablara, yo decidí hacerlo.

―Jim me darías un segundo por favor.

―Sí claro ―nos alejamos unos cuántos pasos de Gina.

―Lo siento Jim. Yo solo...

―Lo sé, lo sé..., me estaba preguntando cuánto tiempo tardarías en aceptarlo. No te preocupes por este galán, siempre tengo un Plan B. Suerte Ivanna, te quiero mucho.

Jim se fue como si no hubiera pasado nada, luego me acerqué a Gina y la tomé de las manos y casi susurrando y temblorosa le dije: 

―Te amo demasiado, es solo que no podía aceptarlo, pero he decidido... ―Ella me interrumpió con un besó.

Así empezó nuestra gran historia de amor. De eso ya hace 6 años y aún seguimos juntas.