Apreciando las pequeñas gotas de lluvia visiblemente presentes desde aquellas ventanas empañadas, se encontraba Ayano Aishi sentada en su pupitre en la primera hora de clases. En ocasiones recibía llamadas de atención por parte de su profesora, por distraerse mirando hacia afuera. Sin embargo, por mas que el salón solo fuera una habitación de cuatro paredes insípidas, ella tenía su mente perdida pensando en Senpai.

De todos modos era muy buena estudiante en su nuevo colegio. Sus calificaciones eran excelentes, al igual que su comportamiento. Tal vez porque ya no veía a sus nuevas compañeras como "zorras que solo quieren a mi Senpai" como solía hacerlo, o quizás por su personalidad "solitaria" y "antisocial", como algunos la llamaban.

Terminada sus clases, se encaminó directamente a su habitación. Si, para su mala suerte o fortuna, se encontraba en un internado de alto prestigio en Estados Unidos, y compartía cuarto con tres compañeras mas. Por eso quería aprovechar cada segundo que estuviera sola, y llamar a Taro por su celular, aprovechando la privacidad.

Sin embargo, esta vez era diferente. De hecho, era la primera vez luego de tres meses en el internado que se encontraba...animada.

Llegó a su habitación y se abalanzó sobre su cama mientras que marcaba el número de su novio en su celular.

-¡Hola Yan-...!

-¡Senpai adivina!- lo interrumpió ella entre emocionada y divertida

Se escuchó una pequeña risita del otro lado del teléfono.

-Dime linda ¿Qué sucedió?

-¡En una semana ya estaré de regreso!¿Puedes creerlo?

-¡¿En verdad?!- exclamó sorprendido y a la vez muy feliz- ¡Dime que no estás bromeando Yan-chan!

-Si, es verdad- afirmó ella.

-¿Pero cómo...? Creí que tendrías que estar en ese lugar por seis meses.

-Yo también pensé eso, pero hace un mes el director me dijo sobre un posible cambio de ese lapso, por una cuestión de vacantes o cupos o algo así. No te lo dije porque no estaba confirmado, hasta ahora- rió mientras jugaba con el dije de la cadena que llevaba puesta-  Ya habló con mis padres para informarles sobre eso, pero ya tenía todo preparado por si las dudas ¿No es eso genial?- Ayano en verdad estaba muy contenta, casi llorando al contarle sobre eso a su novio, pero no se escuchaba respuesta de su parte- ¿S-Senpai?...¿Taro?

- T-tranquila, estoy aquí Yan-chan, solo que ahora estoy ...en clases- susurraba- y creo que hice muy evidente mi entusiasmo- rió nervioso. Posiblemente todos los estudiantes cerca suyo se dieron cuenta de eso.- Es genial Yan-chan, estoy muy feliz. No puedo esperar a verte de nuevo. No te imaginas cuanto te extraño linda. 

-Te amo...

Estuvieron hablando un poco mas hasta que llegaron  dos chicas que compartían habitación con Ayano, y ella se despidió prometiendo que hablarían mas tarde.

-Hey Ayano-chan- la llamó una de las muchachas sentándose a un costado de la cama de Ayano, y la otra hizo lo mismo- ¿Es verdad lo que se rumorea?

-¿Qué cosa?- dijo indiferente mientras que con su celular simulaba escribir algo.

-Ya sabes, eso de que te...iras en una semana- dijo otra chica de cabello castaño, un poco triste.

-Ah, si.

-¡Te extrañaremos muchoo~!- gritaron las dos jóvenes al unisono mientras se tiraron sobre Ayano y la abrazaron con fuerza.

De nuevo esa sensación de asfixia comenzó a invadir a la pobre pelinegra, pues los abrazos de "amigas" no era justamente lo suyo.

Después de un rato de palabrerías y llanto de ambas chicas, por fin se calmaron para poder hablar de otra cosa.

-Bien, Ayano-chan, ¿Sabes que vamos a hacer hoy?

-Nop...- dijo sin entusiasmo.

-¡Haremos un piyama party!- gritó muy animada la joven de cabello rubio.

-Pero si ya estamos en la misma habitación...- dijo Ayano irónica volviendo a recostarse en la cama.

-No seas tonta Emma- la reprendió la castaña dándole un codazo a su amiga- No será tan así. Solo comeremos pizza y beberemos un poco, charla de chicas, será divertido.

-No.- negó Ayano.

-Vamos Ayano-chan, ademas...

En eso llega la otra chica que faltaba, con unas cajas de pizzas en sus manos y una mochila en su espalda.

-Uff...no saben lo que me costó traer esto sin que nadie se diera cuenta- dijo colocando las pizzas sobre una mesa.

-¿Unas pizzas, en serio Jasmine?- dijo irónica Emma.

-Me refería a esto- dijo abriendo su mochila para sacar cuatro bebidas alcohólicas- No beberemos demasiado. No olviden que es lunes. Mañana hay clases. ¡Y eso también va para ti Sofía!- gritó reprendiendo de broma a su compañera.- Ya no podré decir que sigues enferma.

-Okey...pero eso depende de lo que decida Ayano-chan.

Las tres jóvenes miraron a Ayano suplicándole.

-Como sea.- accedió un poco harta, a lo que sus compañeras sonrieron.

[...]

Las cuatro estudiantes se encontraban sentadas en el suelo comiendo y bebiendo, mientras hablaban de tonterías y reían plácidamente, a excepción de Ayano, que se encontraba bastante aburrida y con un poco de sueño.

-¿Y que hay de tí Ayano?

-¿Uh?- dijo ella sin entender, pues no había prestado atención a la conversación de las muchachas.

-Tu primera vez tonta.

Ayano se sonrojó un poco sorprendida.

-¿D-desde cuando la conversación se desvió a esto?-preguntó Ayano algo nerviosa.

-Estamos hablando hace mas de una hora. Creo que el medio vaso de cerveza ya te hizo efecto- rió Emma- ¿Y entonces?

-Y entonces...

-Cuéntanos sobre tu primera vez- insistió Jasmine.- No creo que sea peor que la de Sofia...

-¡Oye!

-Tu misma dijiste que él era un idiota.- le reprochó su amiga.

-Cierto...

-No peleen. Ahora es el turno de Ayano-chan. ¿Y bien Ayano?- le preguntó  Emma con una sonrisa.

-Oh, bueno...

Su cara estaba completamente roja. Tragó saliva antes de comenzar. Tal vez en otras circunstancias no habría dicho nada, pero sería sospechosamente descortés no adentrarse en la charla luego de que las muchachas contaran tales experiencias. De todos modos ella no iba a dar tantos detalles.

- Estuvo...¿Bien?-dijo, no convenciendo del todo a las muchachas-  Bueno, fue muy lindo...- continuó, pero las chicas aun la miraban como si quisieran saber mas -Bien...-suspiró- Fue muy...placentero, para ser sincera.

En realidad a Ayano no le gustaba hablar mucho de ese tema, pero las chicas a su alrededor estaban muy interesadas.

-¿Y el chico con quién lo hiciste? ¿Cómo es?- preguntó Jasmine.

-¿No es tu novio verdad?

Todas miraban a Ayano esperando una respuesta.

-¿Importa?- preguntó con tono sarcástico- no me siento muy...cómoda hablando sobre estas cosas.

-Está bien- suspiró un poco desilusionada la castaña- Si no quieres no te obligaremos. No te preocupes.

Las demás asintieron, un poco apenadas, pues después de cierto tiempo pensaron que se habían ganado la confianza de Ayano, pero no iban a reclamarle por tal cosa. 

Hubo un silencio en que ya no sabían de que hablar, mirando hacia cualquier lado un poco aburridas.

-Él...-titubeó la pelinegra, a lo que las jóvenes voltearon a verla- fue muy gentil y cuidadoso conmigo. Al principio lo veía como cualquier otro pero...descubrí que era un chico muy lindo y que se preocupa por mi. Me demostró muchas veces cuanto me amaba.- Ayano interpretaba cada palabra que salía de su boca, como si su mente hablara por si sola.- Solía divertirme a su lado y cuando paso "eso"...fue muy intenso. En ese instante jamás había pensado que me sentiría así y...que él me trataría tan bien. Dolió, lo admito, pero fue algo ...fue algo muy maravilloso. Budo en verdad...

Ayano se percató que estaba hablando un poco demasiado y levantó su vista para encontrarse con las tres chicas maravilladas ante tal relato.

-¡Ohh eso es hermoso!- decía Jasmine muy conmovida por lo que había escuchado.

-Ah no, basta.- se puso de pié Sofía mientras alzaba el vaso de cerveza que tenía en su mano, del cual ya había tomado una buena cantidad- Brindo para que alguna de nosotras pueda conseguir un novio como ese tal Budo.

Jasmine y Emma rieron mientras imitaban a su amiga. No se habían dado cuenta de que Ayano se había puesto de pie y se dirigía directamente a su cama.

-Vamos Ayano-chan, no te pongas así, ven.- la llamó Emma.

-Estoy cansada, me voy a dormir.- dijo ella recostándose en su cama debajo de las sábanas.

-¡Al menos dinos si Budo fue tu novio o algo por el estilo!

Ayano suspiró mientras fruncía el ceño.

-Algo por el estilo, ¿Bien? Ahora quiero dormir.

Se escuchó un gran "Oooooooh" en la habitación, a lo que Ayano solo tomó su almohada y se aferró a ella intentando dormirse por la fuerza.

Luego de que las chicas terminaran su charla, risas y carcajadas, todas se fueron directamente a sus camas, muy agotadas.

En medio de la noche, mientras Ayano dormía profundamente, sintió como alguien la abrazaba por detrás, con cierta ternura.

-Senpai...¿Estás aquí?- preguntó ella aun adormilada dándose la vuelta. Cuando abrió los ojos por completo, se alejó bruscamente, pero aun recostada en la cama.

-¿B-Budo?- preguntó muy confundida al ver al muchacho que tenía en frente- No, no puede ser..¿Q-que haces...?

-Admite que me extrañas hermosa...- le dijo Budo en un susurro tomándola por la cintura y acercándola a él.

-N-no...yo...-Ayano estaba muy confundida. 

Budo acercó su rostro al de ella. Ayano se dio la vuelta al instante. Casi grita al darse cuenta...

-¿S-Senpai?

Taro se encontraba en frente de ella a pocos centímetros de sus labios.

-¿Me amas linda?-le preguntó él acariciando su mejilla mientras se aproximaba a ella mas de lo que ya estaba.

La joven sentía su corazón latir muy rápido, hasta se podría decir que prácticamente estaba asustada. ¿Qué demonios estaba pasando?

Dió un grito sentándose en la cama, muy agitada, y totalmente sudada, como si hubiera tenido  mucha fiebre.

-¿Ayano?- se escuchó la voz de Emma.

-¿Te encuentras bien Ayano-chan?- preguntó Sofía.

Ayano miró a su alrededor muy exaltada, mientras respiraba muy rápido.

A su derecha...no había nadie.

A su izquierda...tampoco.

Todo había sido un sueño.

Sus compañeras de cuarto la observaban preocupadas, puesto a que no era común que Ayano tuviera pesadillas de tal grado.

"¿Que...sucedió?"- se preguntaba a si misma.

-¿Esta todo bien Ayano-chan?- dijo Jasmine sentándose en su cama también.

-Si. Si. Todo está...bien.

Dicho eso, Ayano volvió a recostarse boca arriba y taparse solo un poco. No tenía frío, y además ahora estaba totalmente despabilada. No tenía mas remedio que quedarse mirando el cielo raso en lo que restaba de la noche. Por cierto motivo ya no podía dormir.

💕💕💕

(Créditos a Victorialand5 por la imagen. 💕 :v)

Pido disculpas de antemano si es que no puedo actualizar muy seguido, pero quería al menos publicar el primer capítulo.

¡Gracias por leer!❤

[Pdta: aclaro nuevamente que es la segunda parte de "Te necesito", para que puedan entender mejor cómo se va a desarrollar la historia (?]