¡ADVERTENCIA!

Este capítulo es exclusivamente mío, en la verdadera historia no existe ningún Prólogo. El resto de la historia es de @Wolf Blossom y traducida por mí, ya que la escritora me ha dado su permiso.
________________________________________________________________________________
Capítulo 0: Prólogo.
.
.
.
.
.

—¡Tanuka! ¡Te he dicho que no corras! ¡Te puedes caer! –Exclamó una joven y bella rubia a su pequeño retoño.

—¡No te preocupes, Mami! ¡Ya soy un niño grande! –Le respondió felizmente a gritos el pequeño castaño.

—¡Sí! ¡Pero eso no significa que no te puedas hacer daño si te tropiezas! –Volvió a advertir la joven Madre a su Hijo, antes de que se tropezara con una piedra y se callera.

—¡Ah! ¡Mami, me duele! ¡Me he hecho daño en la rodilla! –Lloraba a todo pulmón el pequeño mientras se sentaba en el suelo y se sujetaba con fuerza su pierna herida.

—Por eso te dije que no corrieras, esta calle está llena de piedras. Mira ahora lo que te has hecho por no hacerme caso. –Regañó la oji-miel cuando llegó al lado del niño, el cual seguía llorando a mares, quejándose de su rodilla.

—Lo siento, Mami. –Dijo entre sollozos.

—No pasa nada, cariño, pero la próxima vez hazme caso, ¿Sí? –Le aconsejó mientras sacaba de su bolso una tela blanca, la rompió y con ella le vendó la pierna.

—¡Gracias, Mami! –Exclamó al ser alzado en los brazos de su Madre.

—Ay, mi pequeño León, ahora tienes una herida de guerra. –Le dijo para después darle un sonoro beso en su regordeta mejilla.

—Oye, Mami, ¿Soy como uno de esos leones de los que hablas en tus clases? –Preguntó emocionado el infante.

—Pues claro que sí, cariño. Tú eres el león más feroz de toda la sabana. –Dijo mientras subía los escalones de la pequeña montaña en donde vivían sus Padres.

—¡¿En serio?! –Su Madre sólo asintió. —¡¿Y Papá también fue el león más feroz de toda la sabana?! –Quiso saber el niño, ignorante de lo que esa simple e inocente pregunta causó en su Madre.

—Pues... Sí, claro, él también fue el león más feroz de toda la sabana. –Y con esa respuesta el pequeño dejó de hacer preguntas, esperando el día en el que por fin pudiera conocer a su Padre y comprobar por él mismo si su progenitor en verdad era "El león más feroz de toda la sabana"

Continuará...
________________________________________________________________________________