-¿He? Tu padre…¿ha sido hospitalizado?.-
-Sí. Fue operado no hace mucho. Sólo tiene que ir para hacerse un chequeo. Gracias a él, la cantidad de trabajo que tengo ha aumentado, qué agotador. Durante un tiempo llegaré tarde a casa.- Dijo en un suspiro Nam mientras terminaba de ponerse el traje.
-Ho, ya veo. Puedo…¿puedo ir a visitarlo al hospital?.- Dijo Jimin con ojos de cachorrito muerto de hambre.
-No es necesario que lo hagas.-
-Pero hace algún tiempo él solía cuidar de mí…estoy preocupado.- Dijo serio Jimin.-Aunque no creo que tu padre quiera verme…-
“Ese hombre se deshizo de Jimin tan fácilmente. No tengo ninguna intención de que Jimin lo encare…pero…”
-No es así. Estoy seguro de que él estará encantado de que lo visites.-
-Tú…¿Tú realmente crees eso?.-
“…si es lo que Jimin quiere.”
-No podré ir contigo. Pero de todas formas puedes visitarlo mañana.-
-Gracias Nam.-

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-Acabo de regresar de ver a tu padre. Se ve saludable, me siento aliviado.- Dijo Jimin mientras se adentraba en la oficina de su novio junto a Hoseok quien lo acompañó al hospital.
-Ya veo.- respondió Nam desde su escritorio.
- Oh, sí. ¿Recuerdas el piano que me compró hace tiempo? Me invitó a que lo visitara y tocara alguna vez para él. ¿Puedo ir?.- preguntó alegre Jimin.
- El presidente se sintió conmovido cuando vió a Jimin lamentándose por lo ocurrido hace años, parece que le agradó bastante.- Dijo Hoseok al oído a Nam.
“Maldición ese viejo!!”.
-TE COMPRARÉ UN PIANO!!!.-
-¿HE? No es necesario que dejes tus deberes y me compres uno…-
-ME NIEGO A DEJARTE IR A LA CASA DE ESE BASTARDO!!!.-

El verdadero fin.