Madara seguía caminando con dirección hacía aquella chica que había visto bajar de la Ducatti, le daba curiosidad, además que jamás la había visto por ese lugar y vaya que frecuentaba el bar.

—Señor, ¿le puedo servir algo? —le pregunto el mismo Bartender que había atendido a _____.

—No, estoy bien gracias. —asintió y después miró a la chica, el Bartender que por nombre llevaba Larry se encogió de hombros, no era muy bueno meterse con _____.

Ella era una oficial, quizás no era jefa de narcóticos o de algún departamento en la policía, solo quería seguir los pasos de su padre el cuál siempre llevaba con honor la placa y el uniforme. Ella siguió comiendo y bebiendo mientras miraba la televisión, estaba un simple partido aburrido de fútbol y ella no se miraba tan interesada. Madara miró la placa que ella llevaba en el pecho, era de un militar o algo así, pero estaba seguro que no era de ella. Gruño al no poder leer con exactitud el nombre que tenía en la placa y negó.

—Supongo que ninguno de esos equipos es tu favorito, ¿cierto? —pregunto Madara mientras miraba de reojo a la chica y prestaba atención al televisor, ella lo miró un poco confundida y curiosa, jamás le habían hablado en el bar, quizás porque todo el mundo sabía que era policía y preferían no meterse con ella.

—Supones bien. —soltó una ligera risa mientras metía otra papa a su boca y seguía mirando el televisor. —Sigo esperando a que algún día los Steelers vuelvan a ganar un superbowl. –– suspiro un poco cansada mientras lo miraba a él. —Alguno de ahí es tu equipo favorito? —preguntó con curiosidad y Madara negó con la cabeza.

—No soy aficionado de los deportes, aunque sinceramente prefiero el baseball. —asintió Madara con suma tranquilidad, la chica sonrió, el azabache le recordaba a sus hermanos mayores, siempre decían que el baseball y basketball eran un poco más tranquilos que él fútbol americano y el soccer.

—Mmm, yo no me quejo, todos me gustan, además que si tienes una buena cerveza y comida se disfrutan más. —le respondió y sonrió levemente. Madara ahí se sintió perdido, jamás había entablado una conversación así de natural con alguien que no fueran sus hermanos.

—Vaya, te entiendo, ¿no prefieres verlos mejor en vivo y en directo? Ya sabes ir a los partidos y esas cosas. —ella negó con suavidad, claro que le gustaría pero su trabajo no se lo permitía. —A todo esto, ¿cómo te llamas? —la miro con cautela y siguió observando la placa. Gruño, ahora no se miraban las letras.

—_____ y tú hombre misterioso? —le preguntó ella, Madara suspiro al no escuchar el apellido de ella, no sabía si darle su nombre real o al menos uno que fuera alguna pantalla, suspiro, había cientos de Madara en Japón, así que se calmo.

—Madara. —la miro y después alzó una ceja hacía la placa. —¿También fuiste a la marina? —señaló la placa y ella se sonrojo levemente.

—No, era de mi padre, mis dos hermanos mayores también tienen una, dijeron que sería lindo llevar siempre el recuerdo de él. —sintió un nudo en la garganta al recordar al rubio que les había entregado la placa a cada uno, las había mandado a hacer especialmente para ellos.

Solamente tenía una fecha y también tenía un apellido, ese apellido no lo llevaba a nada, la placa decía M. Namikaze 2003

—Oh, lamento escuchar eso, no quería tocar un tema muy personal. —se sintió avergonzado y después sacudió un poco su cabeza. —¿Te invito un trago? —le sonrió de manera amable, no pensaba en acostarse con ella o tal vez sí, pero estaba disfrutando demasiado la platica que estaban llevando.

Los hermanos de Madara seguían observando atentos la situación sin perderse algo.

—¿Quién mierda es ella? —preguntó Obito mientras observa a la chica, la cuál era preciosa, sin duda alguna, el problema era que era una desconocida y eso no estaba para nada bien y menos para ellos.

—No lo sé, pero cuando la vi bajar la moto le tomé foto a su placa, Kabuto esta investigandola. —respondió con calma Itachi mientras miraba su celular. Todos sus hermanos lo miraron sorprendido y él alzó una ceja ante las miradas. —¿Qué? —se encogió de hombros y gruño. —Hay que ser precavidos, ¿no? —volvió a mirar su celular y suspiro. —Mmm, no dice nada fuera de lo común, se llama _____ Namikaze, tiene según esto 26 años de edad, no tiene malos récords, horas comunitarias ayudando a gente pobre, Bla Bla Bla Bla, está completamente limpia. —suspiro. —Quizás es solo una... Joder es policía. —murmuró Itachi y todos lo miraron sorprendidos. —¿Es una trampa? —sus hermanos negaron con la cabeza, nadie en el bar parecía policía además que todos estaban mirando el partido y comiendo, nadie actuaba de manera sospechosa.

—No, no es una trampa, tampoco es algo que haya planeado la policía, nos habrían avisado sobre cualquier movimiento. —le recordó Shisui a Itachi el cuál suspiro, tenía razón, la policía no podía dar pasos en falso, Madara los tenía amenazados.

—No me gusta esto, será mejor que saquemos al idiota de Madara de aquí antes de que quiera hacer otro movimiento imprudente. —gruño Obito y después sonrió de lado.

—No, no podemos arruinarle la noche a Madara, de todos nosotros es el que más trabaja y cuida de cada uno. —respondió Izuna defendiendo a su hermano mayor, Obito lo miró fijamente.

—Izuna es por su propio bien, no podemos simplemente dejar que haga movimientos así o le tendrás que decir adiós al idiota. —suspiro un poco abrumado y Izuna gruño, por primera vez estaba mirando a Madara relajado, no quería quitarle eso.

Y aquellos dos seguían hablando de cosas triviales y de la vida, Madara se sentía cómodo hablando con ella y claro que se sentía cómodo ella no sabía quién era él y eso era aún mejor.

—¿Qué te trajo a hablarme eh? —le preguntó con curiosidad y Madara se avergonzo un poco y después se encogió de hombros.

—No lo sé, quizás que siempre vengo aquí y es la primera vez que te veo. —la miro sincero y ella soltó una ligera risa un poco avergonzada.

—Siempre vengo a comer aquí después del trabajo. —se sonrojo y le dio un último trago a su cerveza, no quería preguntarle pero sabía que tenía qué.

—Y, ¿en dónde trabajas? —alzó una ceja y ella sonrió con calma.

—En la estación, soy policía. —la miró y Madara sintió un golpe en la espalda, era uno de sus hermanos y sabía que no era bueno.

—Supongo que tengo que irme, fue un gusto conocerte ____. —le sonrió por última vez. —Espero verte pronto. —tomó su mano para depositar un suave beso y después irse, la chica no pudo evitar sonrojarse y avergonzarse de sobre manera, era la primera vez que un hombre hacía eso, negó con calma.

—Adiós, fue un gusto. —murmuró mientras lo miraba irse, era guapo y jamás había visto a alguien igual, se sintió confundida y cientos de emociones en su estómago o quizás las papas con demasiado queso le habían caído algo mal, ya ni siquiera entendía que era lo que ocurría en ese momento.

Los Uchiha habían salido de aquél bar, no porque quisieran, pero había ocurrido algo en la gran casa, suspiro mientras conducía, está vez Izuna iba en el asiento de copiloto.

—Y, ¿quién era ella? —le preguntó con curiosidad mientras observaba con atención los gestos de su hermano. Izuna era demasiado observador.

—Se llamaba ____, era muy linda, además que por primera vez pude hablar con alguien que no fuera relacionado al trabajo, fue, fue increíble. —una sonrisa se dibujo en el rostro del azabache y Izuna también sonrió. Madara necesitaba un respiro, necesitaba distraerse, desde el incidente con Obito ya no había sido el mismo.

—Mmm, suena interesante, además que era muy linda, Itachi la investigó y se miraba que tenía todo excelente, decía el expediente que su padre era Marín, y tiene dos hermanos, pero de ellos no hay fotografías, tampoco del padre, solo está el nombre y la placa. –suspiro Izuna al no ser de mucha ayuda y Madara gruño, no quería que sus hermanos se metieran, pero tampoco quería investigarla, solo quería salir de manera normal con alguien por primera vez, quería enamorarse o al menos intentarlo.

—No te preocupes Izuna, espero al menos salga bien. —lo miró Madara con una mirada demasiado calmada.

Llegaron a la gran casa, así le habían llamado a ese punto, era donde distribuían droga y no esperaba que hubiera otro incidente, le sorprendió mucho ver a un rubio y un pelinegro de pie. Eran los gemelos Uzumaki. El pelinegro era demasiado tranquilo, el rubio se miraba furioso.

—¡Aléjate de ella!, ¿lo entiendes cierto? Porque no lo voy a repetir dos veces. —se acercó a él con pasos amenazantes, Madara abrió los ojos sorprendido y confundido. ¿De quién debia de alejarse y por qué?

—Oye tranquilo, Naruto, no me he metido en tu territorio, ni siquiera he violado alguna parte del acuerdo relájate. —sonrió de lado y Naruto le puso su teléfono en la cara, eran fotos del bar de hace unos momentos, Madara abrió la boca sorprendido, estaba con esa chica desconocida.

—No te lo voy a decir dos veces Madara, aléjate de ____. —le dijo molesto mientras sacaba su arma y le apuntaba con ella. —Estoy hablándote en serio, no quiero verte cerca de ella.

¿Era la chica de Naruto o algo? Ella no había mencionado alguna pareja, trago en seco, pero había mencionado a dos de sus hermanos. No, no podía ser cierto, joder, claro que no.

—Naruto ya relájate, solo estaban bebiendo una cerveza, deberías dejar de hacer tanto drama, _____ sabe cuidarse sola. —suspiro Menma mientras estaba cruzado de brazos, Naruto negó furioso.

—No, no voy a dejar que _____ se entere de lo que somos si este imbécil abre la boca ____ no va a querer vernos ni siquiera en pintura. —gruño molesto y Menma suspiro para después observar al azabache.

—Deberías relajarte, nadie en este mundo sabe que tenemos una hermana, tú estás destapando el secreto al alborotarte porque a Madara le atrajo _____, además nuestra hermana es linda, ¿de quién no llama la atención? —se encogió de hombros el pelinegro y Madara seguía sorprendido, eran sus hermanos, y el acuerdo decía nada de acercarse.

—Callate idiota, que no se te olvide quien mierda te ayudó a salir de ese incidente Madara, te ayude a salir y yo mismo puedo meterte. —le dijo Naruto serio mientras guardaba su arma, eso había sido un golpe bajo, pero tampoco debía de jugar con ellos.

—Oye, tranquilo, solo bebí un par de tragos con ella, no fue nada fuera de lo común, además que nos estábamos divirtiendo, no tienes porque alterarte, si piensas que me acerque a ella solo para dañarla. —Naruto le golpeó en el rostro con fuerza y gruño, los demás Uchiha se encogieron de hombros, no podían meterse, además que Madara tenía la culpa, era difícil razonar con Naruto.

—Naruto basta, siempre tienes que hacer lo mismo con cada chico que se acerque a _____? —Menma tomó a su hermano y también le golpeó en el rostro, Naruto gruño, y suspiro.

—Gracias Menma. —murmuró Madara mientras sentía como la sangre caía de su labio.

—Ve al auto Naruto, yo arreglaré esto. —le ordenó y Naruto observó al azabache furioso.

—Soy capaz de matarte Madara, así que no vengas a tentar al diablo, jodido idiota. —gruño furioso para irse y entrar al auto. Madara intentó ponerse erguido pero la derecha de Naruto había sido increíblemente fuerte.

—Mira, no sé qué intenciones tengas con _____, tampoco pienso meterme tanto, es mi hermana y la protegeré, supongo que sabes ese sentimiento, no? —señaló a los demás Uchiha los cuales estaban atentos a la situación. Madara asintió, por supuesto que lo sabía. —Solo ten cuidado, cualquier paso en falso y tu vida es la que corre peligro, ¿entendido? —Madara volvió a asentir y Menma sonrió. —Buen muchacho, puedes verla, puedes hablar con ella, nosotros siempre la estamos vigilando. Ya luego te contaremos la historia completa. —Menma suspiro y empezó a caminar al auto.

—¿Qué historia?

—Tranquilo Madara, quizás pronto lo sepas. —siguió caminando y después se detuvo. —Ah, y nada de decirle nuestro secreto, porque no sólo Naruto te matará, está vez, también entraré yo para asesinarte. —su voz juguetona había cambiado, ahora solamente estaba serio y frío, Madara asintió. —Lamentamos el pequeño inconveniente, solo que Naruto quería advertirte o algo así, ponte un poco de hielo, los anillos de Naruto siempre dejan marcas. —empezó a reír de manera divertida y se despidió para subir al auto y irse ahí, Madara gruño.

¿Qué mierda estaba escondiendo esa familia?

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Oh por dios, DRAMA DRAMA, JODER QUÉ PASARÁ DESPUÉS? ¿LISTAS PARA LOS SIGUIENTES CAPÍTULOS? ESTOY AMANDO ESTA HISTORIA MALDICIÓNNNNNNNN💗

L@S AMOOOOOO, ESPERO QUE TAMBIÉN LA DISFRUTEN COMO YOOOO, DÍGANME QUE LES PARECE EN LOS COMENTARIOOSSSS💗