𝐀 𝐪𝐮𝐢𝐞𝐧 𝐚𝐥𝐠𝐮𝐧𝐚 𝐯𝐞𝐳 𝐝𝐢𝐣𝐨 𝐪𝐮𝐞 𝐞𝐥 𝐚𝐦𝐨𝐫 𝐬𝐞 𝐩𝐮𝐞𝐝𝐞 𝐯𝐞𝐫 𝐝𝐞 𝐝𝐢𝐬𝐭𝐢𝐧𝐭𝐚𝐬 𝐦𝐚𝐧𝐞𝐫𝐚𝐬, 𝐝𝐨𝐧𝐝𝐞 𝐩𝐮𝐞𝐝𝐞𝐬 𝐬𝐞𝐧𝐭𝐢𝐫 𝐦𝐮𝐜𝐡𝐚𝐬 𝐞𝐦𝐨𝐜𝐢𝐨𝐧𝐞𝐬, 𝐲 𝐚𝐬𝐞𝐦𝐞𝐣𝐚𝐫𝐥𝐨 𝐚 𝐮𝐧 𝐭𝐨𝐫𝐛𝐞𝐥𝐥𝐢𝐧𝐨 𝐜𝐨𝐧 𝐮𝐧𝐚 𝐟𝐮𝐞𝐫𝐳𝐚 𝐚𝐫𝐫𝐚𝐬𝐚𝐝𝐨𝐫𝐚 𝐨 𝐚 𝐮𝐧 𝐟𝐮𝐞𝐠𝐨 𝐭𝐚𝐧 𝐢𝐧𝐭𝐞𝐧𝐬𝐨, 𝐩𝐞𝐫𝐨 𝐚 𝐝𝐨𝐧𝐝𝐞 𝐲𝐨 𝐬𝐢𝐦𝐩𝐥𝐞𝐦𝐞𝐧𝐭𝐞 𝐩𝐮𝐞𝐝𝐨 𝐯𝐞𝐫𝐥𝐨 𝐜𝐨𝐦𝐨 𝐮𝐧𝐚 𝐟𝐫𝐞𝐬𝐜𝐚 𝐲 𝐥𝐢𝐠𝐞𝐫𝐚 𝐛𝐫𝐢𝐬𝐚. 

A la gran mayoría de las personas les agrada demasiado la primavera, es una de las estaciones más esperadas por todos, este tiempo indica el inicio de una nueva vida, así como las flores renacen y retiran el sobrante del invierno que las cubría así sucede con ciertas cosas en la vida de cada uno.

Comienzas a renacer, a retirar aquello que te cubría e impedía florecer, y no, no digo que el invierno sea cruel y malo, por el contrario de lo que muchos esperan yo adoro dicha estación. Incluso a pesar de amar mucho la estación de invierno, yo también esperaba con paciencia aquella primavera, la ansiaba con demasía alegría... pero cruelmente nunca llego a mi vida.

Paso el verano, paso el otoño e inicie el invierno con una taza de chocolate caliente en mi mano, y un cuadro de colores brillantes al fondo de mi estudio que nunca fue revelado.

Aquella paciencia que mantuve junto con mis esperanzas se fue desvaneciendo, como las flores que cayeron en otoño.

— TaeHyung — la débil voz de Jimin suena a través de la puerta que nos divide, no se cuanto tiempo ha pasado, pero creo que lo suficiente para que Jimin haya que tenido venir a buscarme.

Tomo mi taza en mis manos para poder salir de esta habitación.

— Hola TaeHyungie. — Jimin me dedica una tierna sonrisa y sus ojitos se vuelven dos medias lunas.

— Hola Minnie. — cuando termino de saludarle, sus brazos me rodean en un efusivo abrazo. Un abrazo que me transmite un poco de calidez, una sensación de pertenecer a un hogar.

Nos mantenemos abrazados hasta que siento una tercera persona en nuestro momento íntimo, me permito abrir un poco mis ojos para ver de quien se trata y como de un deja vú su sonrisa se presenta. No puedo evitar soltar un sollozo de dolor cuando aquel recuerdo me golpea con fuerza.

— Todo estará bien Tae, te lo prometo, que todo absolutamente todo estará bien, JungKook y yo cuidaremos de ti. — Ambos me abrazan mientras yo continúo soltando lágrimas de dolor.

Después de aquel incidente donde mis dos amigos me tranquilizaron, dentro del auto observo por ultima vez lo que alguna vez fue mi hogar, no era algo ostentoso y carecía de ciertas cosas, pero puedo asegurar que el amor y la felicidad que alguna vez reboso en eso lugar lo hizo perfecto y hermoso.

— Lo que pediste que se quedara Tae. — JungKook hizo una pausa para soltar un suspiro y observarme a través del espejo. — Se ha quedado.

— Gracias.

Quisiera poder decir algo más, pero que podría decir, volvería a romperme nuevamente intentando buscar las palabras.

Irónico en alguien a quien le sobraban hasta el cansancio, pero creo que desde aquel día me quedé sin ninguna, incluso cuando HoSeok me pidió alguna respuesta no pude articular nada más que 6 palabras después de eso no pude decir otra cosa más, aún cuando el me rogaba que dejara a un lado mi silencio.

Las veces donde hablaba con HoSeok hasta altas horas de la madrugada, donde mencionábamos nuestros proyectos, sueños e ilusiones, historias que queríamos plasmar a lo largo de nuestra vida, aquellas aventuras locas que nos imaginábamos. Podría redactar incluso una gran pero gran historia de todo aquello, pero hablarlo nuevamente, jamás podría.

— Es hora de irnos.

La voz de Minnie me trae un poco a la realidad, y yo solo puedo asentir.

El auto comienza a dar marcha hasta llegar a un pequeño poblado en un bosque, es algo tan sencillo pero que sin duda es hermoso, eso puedo deducir.

Después de acomodar ciertas cosas para poder descansar, Jimin y JungKook se han marchado a comprar la cena.

Salgo al pequeño jardín, y es en ese instante donde la primera nevada hace su aparición, la tercera nevada donde él y yo no compartimos, pero mi primera nevada fuera de ese lugar.

— Dijiste que el amor que sentías por mí era tan fuerte como una tormenta, tan poderosa e inmensa, tal vez fue eso lo que nos sucumbió a ambos, pero al contrario de ti, mi amor por tu persona era como una ligera e imperceptible brisa.

Con los copos de nieve me prometo a mi mismo que esta vez esperare la primavera, con la finalidad de renacer.

Esperaba pacientemente en el porche de nuestra pequeña pero acogedora casa la llegada de HoSeok, había hablado con él para mostrarle algo en lo que estaba trabajando, solo necesitaba de él para que todo mi esfuerzo se diera por finalizado. La idea de ver su hermosa sonrisa al ver aquello en lo que me esforcé me aceleraba el corazón.

Incluso me decía que mi sola presencia le hacía sentirse feliz, entonces esto que tenía preparado definitivamente lo haría aún más feliz.

Observaba el calendario a mi lado, mañana iniciaría la primavera y me alegraba enormemente, suponía que mi sorpresa sería muy perfecta para iniciarla de una manera espectacular.

Visualizo como HoSeok regresa en su auto y una vez que aparca me acerco a él emocionado. Lo primero que hago es abrazarle y sonreírle, mi loco corazón se desboca con su presencia.

— Bienvenido a casa, HoSeokie. — le susurro antes de besar su mejilla como de costumbre tengo.

Espero su beso sobre mi frente, pero este nunca llega a mí, levanto mi vista para observarle, pero su rostro muestra un poco de seriedad. Probablemente tuvo algún inconveniente y por eso esta de esa manera, le preguntare una vez que entremos a casa.

Mientras caminamos en dirección a la puerta siento que su agarre en mi mano se desvanece un poco para después tomarme con un poco más de fuerza.

Giro para mirarle y regalarle una de mis sonrisas que tanto le gustan. — Tranquilo, no me iré a ningún lado. Pero si lo sientes así, no te preocupes que no soltaré tu mano, no lo haré.

Sigo avanzando, pero puedo escuchar un "tu no eres quien se marchará".

— TaeHyung, tenemos que hablar de algo importante.

HoSeok me dice eso mientras tomamos asiento en el sofá, y algo dentro de mí comienza a inquietarme, la emoción que mantenía por mostrarle mi sorpresa se ve algo remplazada por un poco de angustia, pero me digo a mi mismo que no debo crearme un cuento grande en mi mente y esperar a que HoSeok hable.

— Seré directo contigo TaeHyung, porque desde que nos conocimos siempre me pediste sinceridad y que te hablara con la absoluta verdad, así hemos funcionado como pareja.

Asiento a sus palabras, dejando que el tenso ambiente comience a formarse, no digo nada más esperando a que continúe con lo que me quiere mencionar.

— Tae, yo besé a alguien, y lo hice aun sabiendo que estábamos tú y yo juntos, lo hice porque me siento confundido. — Soltó un largo suspiro para continuar. — Lamento si te estoy diciendo esto cuando he cometido esa falta en nuestra aún relación. Si te pido perdón por faltar a lo nuestro, mereces saber la verdad y aquí estoy, afrontando esta realidad.

HoSeok termina de hablar, y aquella pequeñita alegría que perseveraba se ha esfumado por completo. El ambiente se siente tan pesado de pronto, como si hubiesen colocado sobre mis hombros un peso demasiado grande.

Me coloco de pie para subir a mi pequeño estudio, abro la puerta con lentitud para después avanzar al cuadro que se encuentra en la esquina, cubierto de papel blanco, un poco irónico.

El peso en mi se hace más fuerte.

Todo se torna confuso, ¿Por qué siento mi rostro demasiado caliente?, será por la primavera, pero aún cuando esta llega el clima permanece un poco frio por la pequeña lentitud en el que el gélido invierno se retira, escucho un golpe, pero no puedo prestar atención.

La puerta se abre y HoSeok se ve un poco borroso, algo no está bien.

Unas suaves manos se posan en mi rostro para presionarlo con una delicadeza increíble, como si yo fuese un vaso frágil.

— Tae respira, por favor. — Escucho la voz de HoSeok un poco distorsionada, pero me pide que respire. Hago lo que me indica y es hasta ese instante que mis pulmones arden por la falta de aire, tomo una bocanada de aire tan grande, que me permita poder sentirlo circular. — Lo estas haciendo bien Tae, vamos respira nuevamente y exhala despacio.

Y como me lo indica lo hago una y otra vez hasta que en la ultima aspiración un dolor tan increíble se dispara sobre mí y sin evitarlo lo emito en un grito desgarrador, las lágrimas salen de una manera furiosa, con todo aquello observo a HoSeok quien me dedica una mirada de melancolía. Y aún con todo este dolor que estoy sintiendo logro articular aquellas palabras que hacen escocer mi corazón.

— Te amo, pero esto se terminó.

— Tae, necesitas calmarte, necesitamos que estés más tranquilo y hablarlo un poco mejor. Eh dicho lo que tenía que decir y aún necesitamos saber que sucederá, pero...

No termino de escuchar lo que dice, reúno la fuerza necesaria para colocarme de pie y avanzar a la puerta de salida, pero mis débiles piernas no ceden a los pasos que intento dar, y nuevamente estoy en el suelo. Antes de que aquella oscuridad comience a cernirse sobre mí, miro el rostro de HoSeok, quisiera ver esa sonrisa, pero lo único que aprecio es algo de evidente arrepentimiento y lagrimas retenidas. Tomo su rostro con delicadeza para darle una pequeña caricia y sumergirme en un sueño, creo que lo necesito.

Después de aquel suceso, HoSeok pidió e incluso le rogo a Jin poder hablar conmigo, pero mi hermano mayor se negó rotundamente, al parecer HoSeok le conto como es que termine inconsciente después de mi ataque de ansiedad y pánico, ellos al ser cuñados se tenían confianza y tampoco se ocultaban nada, por esa razón Jin me dijo que si yo quería hablar con HoSeok el lo permitiría, pero me negué. HoSeok había hablado con la verdad, no hizo el tema demasiado largo y yo dije lo único que pude articular. Así que no era más necesario hablar, podría sonar inmaduro de mi parte, pero ¿Qué podríamos decirnos?, es normal que en las rupturas se hable sobre los errores que ambos cometimos y saber en que fallamos, pero el sentido de ello es saber si habrá otra oportunidad o al menos cerrar de una manera correcta.

Pero mi corazón no desea saber las razones por las cuales HoSeok decidió darle fin a esto que alguna vez llamamos un amor de estaciones, que así fuese primavera, verano, otoño e invierno, permanecería intacto. Así que por eso mi respuesta fue esa, si aún lo amo, pero el hecho de besar a alguien cuando no habíamos hablado de ello me hirió profundamente, no puedo atarlo y pedirle más respuestas, incluso si él está dispuesto a dármelas. Eh decidido terminar así. Mi pobre corazón lo exige de esa manera, y aunque mi mente quiera ser racional no lo permito.

— TaeHyung, yo necesito más que un simple "se terminó". — lo escucho hablar detrás de aquella puerta. Mis lagrimas nuevamente trazan un camino en silencio sobre mi rostro, y mi garganta se niega a dar una respuesta.

— Jung, es mejor que te marches. TaeHyung te lo ha dicho sin rodeos, y tu mejor que nadie sabe sobre sus repuestas.

No podía ver la expresión de HoSeok, pero su silencio me indico que estaba de acuerdo con Jin, oía como sus pasos se alejaban cada vez más de mi habitación. Y así como sus pasos se retiraban de mi vida, así como el amor que alguna vez me tuvo, el dolor se asentó para tomar lugar en mi corazón.

Después de ese día decidí regresar a casa por mis cosas, Jin me acompaño para mostrarme su apoyo como el hermano mayor que era, y bueno Yoongi, pareja de mi hermano y mejor amigo de HoSeok, solo pudo permanecer al margen de la situación y lo comprendía, no podía dividir su sentir en dos personas.

Cuando llegamos HoSeok estaba sentado justo en la puerta, tal y como yo lo estaba en el pasado cuando esperaba por él. Un sentimiento de profunda melancolía se acentuó en mi corazón y las lagrimas picaron en mis ojos, pero me negué a derramarlas, no al menos en estos instantes.

Jin, Yoongi y yo bajamos del auto, los dos primeros saludaron con normalidad a HoSeok, mi hermano con un poco de recelo aún y Yoongi con un deje de tristeza, yo decidí pasar de largo, pero pude escuchar como HoSeok convencía a Yoon de que su decisión era la mejor, preferí alejarme para no saber de que se trataban esas palabras.

Al primer lugar que llegue fue a mi pequeño rincón donde podía expresar todo lo que sentía, quería tomar todo y marcharme del lugar a como fuera. Estaba a punto de tomar mi caballete, pero una mano en mi brazo me hizo girar.

— TaeHyung, antes de que tomes tus cosas... No es necesario que te marches. No al menos tú, hice un error, del cual admití mi culpa, pero no por esa razón, tú serás quien pagué por ello es por eso que decidí cederte la casa.

Me quede asombrado por un momento, pero por mucho que quisiera responderle ninguna palabra salió de mí, incluso si miles de cuestionamientos se agalopaban de manera incesante en mi boca para decirlos, pero nada podía salir.

— Jin lo sabe. — HoSeok continuo al ver que no iba a responder a su anterior comentario. — incluso Yoongi lo sabe. Al principio tu hermano se negó, pero sabe que esto es de ambos, o bueno ahora es tuyo. Se que es un deseo egoísta cederte algo que puede traerte recuerdos dolorosos. Pero por favor no lo rechaces.

Su agarre en mi brazo permanecía, como aquel agarre que me otorgo el día que decidió o más decidí terminar con todo lo que mantuvimos. HoSeok siempre fue expresivo con aquella mirada y ahora mismo podía ver su creciente necesidad en no negarme a su petición, y con un poco de valentía asentí.

Sabía que esta sería la ultima vez que nos veríamos de está manera.

El se alejo a paso firme, se despidió de Jin, de Yoongi y, por último, de mí. Me dedico esa ultima sonrisa de hoyuelos ilegales que siempre le exprese que poseía.

Y yo, simplemente gire mi rostro, para que mi corazón no se quebrara en el momento.

Pasaron días enteros donde no quise salir del lugar, incluso cuando Jimin y JungKook, el hermano menor de HoSeok me visitaron. Por Jimin me entere que Kook se lio con HoSeok a causa de nuestra ruptura, respectivamente le regañe diciendo que aquello no lo tenía porque hacer, que aún con todo lo que sucedió HoSeok y él como hermanos debían respetarse, la respuesta de JungKook fue la que me esperaba.

"— Al carajo el respeto, el no lo tubo cuando decidió cometer ese desliz por su confuso corazón. Vaya ironía de mierda"

Y si, después de esa respuesta rompí a llorar, obviamente Jimin golpeo a JungKook en el brazo y JK se disculpo conmigo, prometiendo no volver a hacer una locura con su hermano.

Pero permanecer en aquel lugar comenzaba a afectarme, dormir en la cama que alguna vez compartimos, salir al jardín donde en las madrugadas nos recostábamos para ver las estrellas, aunque muy pocas pero que le dábamos significados especiales, todas aquellas cosas eran difíciles de borrar. Y mi depresión fue en aumento, y aún en días donde deseaba saber sobre él, me prometí ser más fuerte para no preguntar sobre su vida, aunque sutilmente Yoongi podía mencionar leves cosas de él.

Hasta que finalmente tome la decisión de marcharme de aquella casa, se que él me había pedido el favor de quedármela y lo seguiría cumpliendo, pero realmente necesitaba sanar muchas cosas. Le rogué a Jin que me permitiera conservar todo tal y como lo dejará después de irme. El se opuso, dijo que lo mejor era deshacerme de todo y comenzar de nuevo, Min tuvo que intervenir alegando que si esa era mi decisión SeokJin tendría que respetarla, que si esa era mi manera de ayudarme a sanar que solo me apoyara como el hermano mayor que era.

Porque sí, Yoongi amaba a HoSeok por ser su alma gemela, pero también me amaba a mi como aquel hermano pequeño que nunca pudo tener.

El día de mi viaje a aquel pequeño pueblo, decidí pasar a mi cuarto de pintura mi "pequeño pero lindo estudio de sueños e ilusiones" como HoSeok lo denominaba. Observé el cuadro que con tanta ilusión mantenía, solo aquello quise desechar tal y como Jin había sugerido, pero al momento de tomarlo, un pequeño sobre cayo del mismo. Estaba completamente sellado.

Cuando gire para saber de que se trataba, un nudo se formo en mi garganta, era una carta de HoSeok, y al parecer tenía la fecha del mismo día en que me cedió la casa. De aquello habían pasado meses, solo un pequeño mensaje se mantenía sobre el sobre. "Cuando consideres apropiado abrirlo, incluso si esta vida no fue apropiada para hacerlo, no te preocupes, puedes hacerlo en la siguiente o tardar una eternidad" Jung HoSeok.

— Entonces con cuidado tomas la palita y colocas la tierra, pero con mucho cuidado. — La voz de Nam sonaba completamente detallada a lo que yo solo pude soltar una pequeña risa.

— Si señor. —

— Es que quiero ser un buen profesor, y que esta pequeña plantita este bien cuidada.

— Para ser demasiado descuidado con algunas cosas y ser conocido como "No me dejen con cosas en mano porque se destruyen por accidente" eres muy bueno cuidando de este jardín y lo que hay sobre él.

Señalo alrededor las diferentes plantas y macetas con flores en su interior.

— Para ser sarcasmo, aprecio el gran vocabulario que expresaste al pronunciar aquella frase tan grande, vas mejorando Tae.

Le dedique una sonrisa a Nam, porque sus palabras no solo estaban para halagarme en cuanto a la manera de tener un vocablo más amplio, si no por la decisión que tome esta misma mañana y el había sido testigo.

Después de mudarme al pequeño pueblo, lo que serían vacaciones de 4 meses se volvieron 5 años dentro de este acogedor lugar, Jimin y JungKook me visitaban con frecuencia al igual que el dominante matrimonio Kim/Min ya que ese par de muchachos no se decidían por quien ejercía el apellido superiormente, pero podía darme a la idea de que Yoongi había hecho apropiación del apellido de mi hermano desde el instante en que se comprometieron. Al igual que Jimin y JungKook, ellos 4 habían formado sus respectivas familias. Por cuestiones que ellos comprendieron y jamás me reprocharon, no asistí a ninguna celebración de ambas parejas, la razón, pues la saben perfectamente.

Prefería quedarme con NamJoon, un chico dueño de una gran empresa de entretenimiento, pero que en su vida privada amaba de pasear en bicicleta por las calles y ver la hermosa vista del bosque que nos cubría, mantener cuidado su pequeño jardín, hacer canciones de sus sentimientos, expresar amor a lo sencillo y ligero, y sobre todo en ser ese apoyo que no sabía que necesitaba, se convirtió en otro hermano mayor.

El se entero de todo, luego de encontrarme llorando. No me juzgo y tampoco lo hizo con HoSeok, al contrario, el admitió que, si ambos hicimos las cosas apresuradas o bien respecto a lo que pensábamos, estaba correcto.

Me aconsejo y me apoyo tanto que cuando decidí abrir aquella carta, no tuve ninguna duda.

— Sí, he mejorado bastante Hyung. Gracias por todo.

Agradecí con una sonrisa en mi rostro antes de abrazarle con fuerza.

...

El sudor descendía sobre mi frente, pero estaba decidido a no retirarme hasta que terminara lo que había comenzado.

Un jardín lleno de flores de margaritas, lavandas y smeraldo comenzaba a verse vistoso. Seque con mi mano el sudor nuevamente.

— NamJoon hyung se sentiría muy orgulloso de ver todo esto. — me recosté sobre el pasto para descansar un poco. Cerré mis ojos con una tranquilidad que se vio interrumpida por un toque ligero en mi hombro.

Cuando me reincorpore una mano se extendía sobre mí, la cual mantenía sobre la misma un vaso de lo que parecía ser una deliciosa y refrescante limonada.

La acepté gustoso, y de un solo trago la bebí, por inercia el liquido que no entro por completo a mi boca se deslizo por mis comisuras.

— Gracias. — solo pude decir eso.

La misma mano rozo limpiando los restos de limonada sobre mi boca, y después descendió hasta tomar mi mano izquierda para llevarla a sus labios y dejar un casto beso, específicamente sobre el dedo donde reposaba un hermoso anillo de matrimonio.

Quise pronunciar algo, pero los regadores comenzaron a disparar el agua sobre nosotros, y una fresca brisa se hizo presente, dando esa paz y tranquilidad que mi corazón sentía.

— Ya compré todo lo necesario para mañana, tus sobrinos están impacientes por verte de nuevo, quieren aprender todo del grandioso Vante. — su voz sonaba tan sincera que lo mire expectante. A pesar de que ambos nos estábamos mojando, eso paso a segundo plano.

Se acerco al jardín para arrancar una pequeña flor de margarita, no sin antes disculparse con la plantita por dañarla en el proceso. Apago con el control los rociadores, y regreso hacía a mí.

Con delicadeza retiro mechones de mi cabello que se habían pegado a causa del agua, e hice lo mismo, dejando al descubierto su preciosa frente, dándole un aire demasiado atractivo.

Y con aún mas delicadeza deslizo su mano con la pequeña flor sobre mi oído, de manera que se quedara sujeta. Después me observo con detenimiento para proceder a susurrarme lentamente.

— Un día dura tres otoños. — le mire con una sonrisa y el cerro el espacio que nos separaba con un beso, uno tan ligero y perceptible roce de labios que me estremeció por completo.

— Pero estamos en primavera, Hobi. — contesté feliz y cerrando mis brazos alrededor de su cuello, pude sentir su mano y el anillo de el sobre mi espalda dando ligeras caricias.

El asintió antes de volverme a besar.

Porque se que sus palabras tenían un significado profundo. Aquella mañana donde le dije a Nam que había decidido regresar a mi hogar, había recibido su apoyo y hermosas palabras. Aquella carta que tarde más de 5 años en abrir, por fin me daba más tranquilidad y aunque mis lagrimas no se resistieron a salir, supe en ese momento que ya no estaba herido, que mi corazón se encontraba renovado.

Como decirte que un día dura tres otoños.

Se dice que un día se siente como tres otoños.

O un día dura tres otoños.

Pero mis días se sienten más que esos tres otoños, puede que se extiendan aún mucho más.

Cometí el error más grande de mí vida, y se que no es necesario recordarlo, no más.

Tomamos decisiones ambos, la verdad y la honestidad siempre fue pilar en nuestra relación, incluso si eso fue lo que nos llevo a estas direcciones, no se cuando llegues a leer esto, tal vez como lo mencione en el sobre, no lo hagas durante esta vida, y tardes la que sigue y aún te tomes la próxima y así, incluso la eternidad. Pero quiero decirte que aquella decisión fue tan necesaria, rompí tu corazón por mi estupidez y tal como lo hice deseo poder restaurarlo, pero es necesario que sanes alejado de mí, y esperare pacientemente, toda esta vida, la que sigue, la que sigue de ella y hasta la eternidad. Hasta el momento en el que decidas proveerme de esa oportunidad.

Te amo TaeHyung, lo he hecho desde que te conocí, y lo hare por siempre.

Y si nuestro destino tiene la piedad de volvernos a colocarnos, quiero que mi amor por ti se convierta en esa ligera brisa, que es casi tan imperceptible pero verdadera.

Te amo en todas las versiones que eres Kim TaeHyung, espero tu ames mi nueva versión en Jung HoSeok.

No era una gran carta, era conciso y directo nuevamente, pero mi corazón lo anhelaba. Regrese a casa, a nuestro hogar, y cuando lo observe sentado, con una mirada en el horizonte y corrí hacía él, sus brazos me tomaron como si hubiese sido la primera vez que el destino nos juntó. Y ese bello arrebol fue testigo de nuestra nueva vida.

Se que tiempo atrás la primavera no llego a mi de la manera que deseaba, pero mi nuevo yo y su nuevo él recibieron esta nueva con alegría, y aquel cuadro que nunca vio la luz en el pasado, permanecía en la entrada principal, anunciando la verdad.

Diversidad de colores adornaban aquellas flores de margaritas que fueron pintadas, eran los colores de amor y explosión que ambos sentíamos el uno por el otro, pero que en el pasado no estaban destinados a ser revelados hasta ahora.

Y nuestro amor de torbellino paso a ser el de un amor ligero y refrescante como la brisa.

— Te amo Kim TaeHyung. Gracias por permitir que Jung HoSeok te ame. 

Hola, de nuevo Bnnie.

Este OS es dedicado a Alice ^^, quien me otorgo inspiración para poder realizarlo, y aunque no considero que sea un buen escrito, puse algunos sentimientos en el. 

Gracias HV por existir.