Extra #1
:・*Amar de gustar*・:
12 años adelante.
Jadeó molesto cuando el dedo meñique de su pie derecho golpeó contra la pata de una de las mesitas que se encontraban cerca de las escaleras, no tomándole demasiada importancia a su dolor infernal, porque iba tarde y tenía que apresurarse.
Jimin podía decir que había cambiado mucho en el transcurso del tiempo, más que todo en algunos comportamientos y pensamientos, volviéndose más realista por consecuencia a su crecimiento.
Sin embargo, algo que no había cambiado y realmente dudaba que pudiera pasar, era su puntualidad.
―Te dije que prepararas todo ayer por la noche, Jiminie―se quejó su madre cuando lo vio correr hasta la cocina, sabiendo que su hijo tendría que salir corriendo para poder llegar a tiempo al instituto.
―Lo sé, mami. Lo que pasa es que se me olvidó por estar jugando con Tae y Jungkookie, es culpa de ellos―se quejó mientras se estiraba para poder sacar el extractor de la alacena, conectándolo a la luz.
―Pensé que me dirías que estabas muy ocupado haciendo tareas o algo así―soltó una risa, viendo al rubio rebuscar en la nevera―Lo harás esperar de nuevo, seguramente.
―Las tareas siempre las hago al llegar a casa, así que no las dejo para la noche―peló las mandarinas con velocidad, para meterla en el extractor―Si llega deja que pase, por fa.
―Sí, porque realmente planeaba dejarlo afuera esperando―fue irónica, haciendo que Jimin la viera con ojos entrecerrados, pero con una sonrisa pequeña.
―Eres malvada.
Jimin podía admitir con mucho orgullo que muchas de sus amistades se habían mantenido desde el jardín hasta ese momento, aunque no había sido con todos, naturalmente.
Con Taehyung se había mantenido más cercano, ya que ambos asistían al mismo instituto, por lo que esa amistad que habían formado en el jardín había avanzado tanto hasta volverlos mejores amigos.
Dejando de lado el concepto de mejores amigos que se mantenía en el jardín de niños, sino que ya una más sincera.
En el caso de Jungkook, habían perdido el contacto durante un tiempo, pero el padre de Taehyung se encontró con los padres de Jungkook un día en el supermercado y así pudieron hablar nuevamente, volviéndose muy cercanos y posteriormente encontrándose con Jimin.
En el caso de Jin, Namjoon y Hoseok, no había podido verlos nuevamente y no recordaba mucho de ellos, pero su madre tenía muchas fotografías y vídeos de ellos, así que los recordaba de los tiempos de infancia.
El último que quedaba y para nada el menos importante, era Yoongi.
Con Yoongi había sido un poco complicado, en donde ellos decidieron el mantenerse lo más juntos posible, pero que las situaciones económicas de las familias volvió más difícil. Jimin iba a un instituto privado, con un uniforme nuevo y libros que no habían sido tocados por nadie más anteriormente. En cambio Yoongi estudiaba en un instituto público, rentaba los uniformes y compraba libros usados.
Aquellas diferencias como tal no eran el problema, sino la distancia y los problemas de cada familia.
La situación había sido un poco difícil porque el padre del pálido había enfermado durante un tiempo, por lo que tuvieron que reducir gastos y Yoongi comenzó a ayudar a sus vecinos para ganar algo de dinero, hasta que pudo obtener un pequeño empleo como ayudante de un amigo de su padre en una ferretería.
Cuando lograron levantarse económicamente, en donde el hombre se recuperó y pudo seguir trabajando, Yoongi decidió mantenerse en la institución pública y economizar lo más posible, para evitar que gastara más de lo necesario y entraba a trabajar en tiempos festivos, trabajos de temporada que le permitieran aportar un poco al salir de clases.
El instituto de Yoongi no quedaba tan lejos, pero sí era una distancia considerable que no le permitía el verlo tan seguido como quisiera.
Y Jimin le había compartido su tristeza a Yoongi, quien no pudo evitar que su corazón débil se sintiera triste también por la situación, por lo que le ofreció el irse juntos por las mañanas al instituto, en donde Yoongi iría a dejar a Jimin y después se encaminaría a su instituto.
El rubio se había negado al inicio, diciéndole que era pérdida de tiempo para él y que tendría que levantarse más temprano para ir hasta su casa y recogerlo, pero Yoongi insistió.
"Estar contigo jamás va a ser una pérdida de tiempo, lo sabes"
Por lo que Jimin se sentía en deuda, haciéndole jugo de mandarina fresco por las mañanas a Yoongi para que pudiera beberlo en el camino a su instituto y que tuviera más energías.
Jadeó sorprendido cuando escuchó el timbre, por lo que comenzó a apresurarse en el jugo, haciendo un poco incluso para él, ya que Yoongi había terminado pegándole el gusto por la mandarina.
Escuchó que su madre hablaba con Yoongi, por lo que limpió el termo que mantendría el jugo helado por bastante tiempo y lo cerró con cuidado, procurando que no se saliera nada en el camino.
― ¿Jiminie? ―escuchó, haciendo que diera media vuelta sobre su lugar, viendo a Yoongi, quien mantenía una sonrisa de lado―Buenos días.
―Buenos días, hyungie. Hoy llegaste un poco más temprano―dijo, aunque sabía que no era del todo verdad, porque a él se le había atrasado todo por el sueño.
―Si te hace sentir mejor, digamos que vine más temprano―asintió mientras ampliaba su sonrisa, notándose cansado, pero no dejando que eso lo limitara en sonreírle a Jimin.
―No, no me hace sentir mejor, pero gracias―soltó una risa, acercándose a Yoongi para darle un beso en la mejilla, siendo correspondido como todas las mañanas― ¿Nos vamos? Toma tu jugo.
―Gracias y sí, vamos.
Los padres de Jimin debían de admitir que no esperaron para nada que la amistad de Jimin y Yoongi se mantuviera de esa forma con el tiempo, pero ambos habían sido sorprendidos gratamente al notar que el cariño que se tenían solamente iba incrementando con el pasar de los años y era algo que los había hecho muy felices
Además de que Yoongi había ayudado mucho a Jimin en sus etapas más complicadas, haciendo que su trabajo fuera más fácil para ellos como padres.
Yoongi era muy maduro para su edad, debido a todo lo que sucedió y seguía sucediendo con su familia, se había obligado a madurar más rápido de lo que debería, por lo que había podido ser un apoyo para Jimin dentro de la pubertad y sus momentos más sensibles.
Jimin era muy emocional y Yoongi era más racional, por lo que se complementaban bien.
―No dormiste nada ¿Verdad? ―preguntó Jimin con el ceño fruncido, analizando el rostro de Yoongi.
―Sí dormí―mintió, haciendo que Jimin bufara en medio de la caminata, no gustándole las mentiras.
―Una bolsa de gomitas menos el viernes―se cruzó de brazos, haciendo que Yoongi suspirara.
―Bien, perdón. No dormí nada, es que quería terminar de organizar los datos de inventario que tenía, para poder tener libre el viernes por la tarde, para salir contigo―se explicó, haciendo que Jimin lo viera nuevamente, analizando si era verdad―Es en serio, no quería dejar trabajo para ese día, así podemos estar tranquilos ambos.
Jimin notó que lo que decía era verdad y es que no era primera vez que Yoongi hacía ese tipo de cosas por él o para no fallarle en algo.
Dentro del tiempo que había pasado, Jimin se había visto interesado en el baile contemporáneo y aunque era un arte bastante complicado, Yoongi lo había inspirado a inscribirse y probar. El rubio se había terminado enamorando por completo, por lo que se había quedado en la academia, teniendo que ir dos horas de lunes a viernes, con un día de descanso de por medio y al salir del instituto se iba a sus clases.
La primera presentación que Jimin tuvo, fue un día sábado, uno que Yoongi normalmente tendría libre, pero que por las fechas saturadas tendría que trabajar desde las doce hasta las cinco. Sin embargo, cuando Jimin le contó sobre su presentación, el pálido había negociado con su jefe el ir ese día por la mañana para trabajar e ir también el domingo por la tarde, para compensar el que no se quedaría el sábado hasta tarde.
Afortunadamente funcionó y Yoongi pudo tomar muchas fotografías desde las primeras filas el día de la presentación, pero había terminado e iniciado una nueva semana bastante cansado y con pocas energías físicas.
Jimin lo ayudó en lo que pudo, aquello que pudiera realizar a distancia, pero igualmente había sido un poco duro.
Yoongi no se arrepentía y siempre que podía hacía espacios para poder pasar tiempo con Jimin.
―Solamente te voy a dejar tranquilo porque haces eso por mí, pero no me gusta que no duermas, lo sabes―lo reprendió bajo― ¿Qué harás cuando nos vayamos a la universidad? Tienes que comenzar a darte un descanso antes de irnos.
Y es que, aunque no tenían pensado estudiar nada similar, estaban procesando sus becas para poder irse juntos a Seúl a estudiar en su universidad central, por lo que era una buena oportunidad de poder mantenerse juntos sin interferir en los planes del otro.
―Hoy dormiré mucho, no te preocupes.
Al llegar al instituto, Jimin pudo ver a lo lejos a Taehyung, quien ya se encontraba dentro con una gran sonrisa hacia su dirección.
―Bien, ve con mucho cuidado y me escribes cuando llegues, aunque no pueda verlo hasta el receso―se dio media vuelta Jimin, quedando de frente a Yoongi―Te amo.
Sus mejillas se calentaron ligeramente al soltar aquellas palabras, las cuales eran comunes entre ellos hace tiempo, pero que no dejaban de ponerlo más tímido de lo que debería.
―Yo también te amo, disfruta de tu día y me comentas cuando estés en la academia. Nada de saltarte el almuerzo, me voy a enterar si sucede―levantó su dedo índice y le dio un suave golpe en la nariz, sabiendo que a ambos les daba algo de vergüenza besarse en la mejilla en público, por lo que ese gesto fue suficiente.
―No lo haré, nos vemos más tarde.
Estaban conscientes de que las palabras "Te amo" eran algo más para parejas, pero para ellos no era de esa forma, para ellos se podían amar sin necesidad de ser una pareja, por lo que se decían de esa forma.
No es que no se gustaran entre ellos, pero el contrario no era realmente consciente de esos sentimientos, por lo que no eran realmente sabedores de lo que implicaban esas palabras para el otro.
Jimin suspiró, acomodando la corbata de su uniforme y correteando hasta donde estaba Taehyung, en una de las bancas que se encontraban en el patio delantero.
― ¡Jiminie! No es muy bueno para tu récord de perfección el que haya llegado antes que tú―inclinó la cabeza, viendo a Jimin sentarse frente a él.
―Es que ayer jugamos mucho y me dormí tarde, así que prácticamente es culpa de Jungkookie y tuya―lo acusó, señalándolo con su dedo índice, haciendo que Taehyung riera.
―Bueno, igualmente del cuadro de honor no te saca nadie.
Jimin estaba muy orgulloso de su situación académica y aunque había tenido algunos problemas emocionales, había logrado avanzar con ayuda profesional, de sus padres, amigos y Yoongi.
Porque Yoongi no entraba en esa categoría.
―Tú también estás ahí―le recordó.
―Sí, pero gracias a tu ayuda y estoy en el último puesto del cuadro, así que no es un mérito tan grande como el tuyo―le sonrió, sintiendo orgulloso también por puesto en el cuadro, pero sabiendo que no estaría ahí sin la ayuda de Jimin―Eres quien me despierta cuando comienzo a quedarme dormido en clases.
―Bueno, el punto es que no volveremos a jugar hasta tan tarde un día de semana, ahora debemos concentrarnos para poder aplicar a la beca todos e irnos a la universidad―sonrió en grande, sinceramente emocionado.
―Sí, realmente me emociona que nos vayamos a ir los tres juntos, aunque tendré que ser el que sostenga la vela en todo el viaje―Jimin rodó los ojos, sabiendo a lo que se refería―Aunque estoy pensando en si es mejor irme con Jungkookie, sus padres me ofrecieron el llevarme también, así no voy a ser un estorbo en su viaje romántico.
― ¿Me estás diciendo a mí sobre viajes románticos y tú te vas a ir con Jungkookie? Además ¿Qué sus padres no estaban resentidos contigo todavía? ―levantó una ceja confundido, porque claramente estaba al tanto del drama que había sucedido con sus mejores amigos.
―Se disculparon y están siendo más lindos conmigo, así que supongo que finalmente lo aceptaron―se encogió de hombros, viéndose tranquilo―Solo mantuvimos la promesa de esperar a después de la graduación.
Jimin soltó una pequeña risa.
―Taehyung, Jungkook y tú llevan dándose besos desde que se volvieron a encontrar―se cruzó de brazos, viéndolo con burla―No han respetado regla alguna.
Taehyung apretó los labios con vergüenza, sintiendo sus mejillas rojas.
―Primero, solamente han sido besos pequeños. Segundo, la regla es no formalizar hasta que nos graduemos, así que la regla sigue intacta―levantó el dedo índice, señalándolo―Además, al menos nosotros podemos admitir que nos gustamos de una forma distinta a los amigos, en cambio Yoongi hyung y tú llevan años negando que sienten algo más que amistad―lo acusó, haciendo que Jimin se sorprendiera.
―T-Tú malinterpretas las cosas―carraspeó, frustrado.
―No, apuesto mis videojuegos a que es así―habló con seguridad, queriendo escucharlo―Tú amas a Yoongi hyung, se lo dices siempre.
―Sí, lo amo―asintió rápidamente, porque no era un secreto.
―Pero lo amas diferente ¿No es así? Lo amas de gustar, no solo de amar―Jimin entrecerró los ojos, haciendo que Taehyung riera―A Yoongi hyung no lo amas como nos amas a mí o a Jungkookie ¿O sí?
Jimin negó sin pensarlo.
―Bien, entonces es obvio que lo amas de gustar. Tanto que seguramente quieres besarlo también.
Para Jimin era más fácil pensarlo que decirlo en voz alta, aunque tuviera mucha confianza en Taehyung, siempre se le hacía algo vergonzoso el hablar sobre su situación amorosa, la cual no había dado muchos cambios, en realidad.
― ¿Y qué pasa si es así? ¿Uh? ―preguntó a la defensiva.
―Nada, solamente que se me hace extraño que ambos lleven tiempo gustándose y no hayan dado señal alguna de que vayan a tener algo más que una amistad―explicó mientras se encogía de hombros.
Jimin se sonrojó.
―Yoongi tiene otras prioridades ahora, una relación solamente sería una distracción―dio su punto, el cual era realmente válido ante las circunstancias―Tiene un trabajo y estudia al mismo tiempo, está esforzándose para poder conseguir la beca también y el que yo esté pegado a él todo el tiempo es algo que puede afectarlo.
―Lo sé, Yoongi hyung tiene una vida de adulto cuando apenas va entrando a la adultez joven. Pero ser conscientes de los sentimientos del otro no es malo, creo yo―se encogió de hombros.
―Ni siquiera sabemos si a Yoongi hyung le gusto, estamos precipitándonos―jadeó, viendo que faltaba poco tiempo para tener que ir al salón.
― ¿No es obvio? Creo que todos los que estamos a algunos metros de ustedes cuando están juntos nos damos cuenta de que se gustan―soltó una risa, pero siendo serio con sus palabras―Hasta sus padres lo saben.
― ¡No es así! Lo que pasa es que la gente cree que porque tuvimos una buena amistad desde pequeños y siempre hemos sido inseparables tenemos que gustarnos ahora ¿No? Es lo predecible.
Taehyung inclinó ligeramente la cabeza, confundido.
― ¿Y qué pasa si es así? En realidad la mayoría de las personas que se vuelven cercanas a otro de pequeños no suelen durar tanto, nosotros somos una excepción―se incluyó, porque su caso era similar―No veo lo malo.
Jimin tenía algunas inseguridades sobre todo el tema, los cuales no sabía cómo compartir correctamente.
―A veces creo que podemos llegar a confundir nuestros sentimientos, no hablando de ti y Jungkookie, sino de mí―se señaló―Me refiero, quizá estamos diciendo esto solo porque nos llevamos muy bien, no he tenido muchas experiencias con otras personas.
― ¿Has querido tener experiencias con otras personas?
―No.
― ¿Te ha gustado alguien más además de Yoongi hyung?
―Tampoco.
― ¿Entonces lo que quieres es forzarte a que te guste alguien más?
―Mh...no.
Taehyung colocó ambas manos frente a él, con las palmas hacia arriba, mostrando su punto.
― ¿Ves? Deja de pensar en lo que la gente pueda pensar o lo que normalmente es, solo concéntrate en ti y si no das un paso, que sea porque no lo quieres así y no porque te preocupa eso de las experiencias y otras cosas. Además, yo tuve un novio antes de volver a encontrarme con Jungkookie, así que no aplicó para mí la experiencia―levantó ambas cejas, haciendo que Jimin suspirara.
―Y vaya mierda de novio el que tuviste―bufó al recordarlo, sintiendo molestia de tan solo verlo en su mente.
―Ese no es el punto, el punto es que ahora puedes dejar de pensar en esas cosas, solamente concéntrate en lo que importa.
El rubio suspiró y asintió con una pequeña sonrisa, sabiendo que Taehyung tenía razón y que no tenía que pensar demasiado en ese tipo de cosas que solamente le aportarían cosas negativas.
Tuvieron que irse a clases, por lo que el tema quedó hasta ahí. Sin embargo Jimin sabía que hablar con Taehyung siempre le aclaraba muchas dudas que se mantenían en su mente y esa conversación no había sido una excepción.
No volvieron a tocar el tema ni en el receso y ambos se mantuvieron juntos en la salida para poder irse a casa juntos, ya que Taehyung estaría con él por la tarde, además de Jungkook.
― ¿Te vas a ver con Yoongi hyung mañana? ―preguntó el castaño de repente, haciendo que el rubio lo viera curioso.
―Solamente cuando llegue a mi casa para acompañarme en el camino al instituto ¿Por qué?
―Por nada, solamente tenía curiosidad―se encogió de hombros, haciendo que Jimin sospechara.
― ¿Tú te verás con él mañana? ―devolvió la pregunta, porque Taehyung y Yoongi eran cercanos aún en ese tiempo, por lo que se encontraban algunos días.
―Sí, me ayudará a comprar unas cosas que necesitaré antes de mudarnos y me llevará en su moto, así será más fácil―asintió, apretando los labios para aguantar una sonrisa―No nos extrañes mucho, podemos ir un rato a tu casa después de que compremos lo que necesito, cuando salgas de tu clase en la academia.
―Sería divertido, pueden quedarse a comer―asintió de acuerdo, haciendo que Taehyung sonriera en grande―Pero tengo que pedirle permiso a mis padres, mañana no estarán hasta tarde. Es la cena de la empresa.
Taehyung asintió con una sonrisa.
―Lo sé, tengo todo controlado.
Jimin frunció el ceño al no comprender del todo, pero le restó importancia.
Al llegar a casa se colocaron ropa cómoda para comenzar a hacer sus tareas, hasta que Jungkook llegó y pudieron ponerse a jugar en la consola de Jimin.
Terminaron el día tranquilamente y sin demasiadas variaciones, por lo que todo fue bueno para los tres.
Cuando Taehyung y Jungkook se fueron de su casa, tomó su celular para poder revisar los mensajes de Yoongi.
Yoonie hyungie🍊:
Hola, Jiminie. Acabo de llegar a mi casa.
¿Estás con Tae y Jungkook? Me imagino que sí, no te quedes con ellos demasiado tarde o vas a desvelarte de nuevo.
5:10 pm.
¡Hyung! Saliste más tarde del trabajo hoy ¿Sucedió algo?
Los chicos se fueron hace unos minutos, prometí que dormiría bien hoy así que nada de juegos :D
5:13 pm.
Oh, qué bueno entonces. Me tuve que quedar un tiempo extra, pero no fue nada malo en verdad, sabes que estoy dispuesto a tomar las horas extra que me ofrezcan.
Quiero dejarle un colchón a papá antes de irme, no quiero que tenga problemas. No sé cuánto me tardaré en encontrar trabajo en Seúl, así que quiero darle esa ayuda.
5:15 pm.
Hyungie, sabes que tu papá estará bien, ahora tienen una economía bastante estable, no es necesario que te esfuerces demasiado :c Es muy lindo lo que haces, pero no vale la pena que te desgastes más, hyung.
5:18 pm.
No te preocupes por mí, de verdad que estoy muy bien, no fue trabajo pesado. Aunque nuestra economía ahora sea buena, tengo miedo de que pase algo de nuevo que cause una inestabilidad, así que quiero prevenir.
¿Quieres hablar un rato por llamada?
5:20 pm.
Claro que sí, hyungie.
5:21 pm.
Jimin a veces sentía que hablaba con una persona mayor, cuando en realidad hablaba con alguien que apenas había salido de la pubertad. Yoongi era muy serio y se preocupaba por temas que no tendrían que ser su preocupación inicial a esa edad, pero a la vez sabía que las dificultades habían ayudado a Yoongi a ser más responsable con su vida.
Y eso le parecía muy atractivo, en realidad.
Aunque eso no quitaba el hecho de que se sentía triste por lo perdido en la infancia de su hyung.
Correteó hasta el espejo para poder verse, aplacando su cabello e incluso colocándose un poco de bálsamo labial, regresando a su cama de un salto.
― ¡Hola, hyungie! ―chilló emocionado―Pon videollamada, te quiero ver.
―Mh, creo que mejor solo en voz, estoy un poco desarreglado ahora―dijo mientras soltaba una risa tímida.
―Hyungie, nos hemos visto en los peores momentos, literalmente. Me viste lleno de mi propio vómito y yo te vi igual, así que estar un poco despeinado no es nada malo―recordó, porque habían vivido demasiado como para que se apenara por algo así.
―No te asustes ¿Sí?
Jimin se quedó callado, con el ceño fruncido.
― ¿Por qué me asustaría? ¿Qué pasó?
―Cayó algo de la estantería y me dio en el ojo, pero estoy bien, no fue nada grave, solo quedó la marca―advirtió, sabiendo que Jimin era algo, demasiado, sobreprotector. Especialmente con él.
Jimin no dijo nada hasta que pudo ver a Yoongi en la pantalla, un jadeo siendo lo primero que Yoongi pudo escuchar, haciendo que cerrara los ojos.
―Hyung...
―En verdad no es para tanto, es más escandaloso el color del moretón―explicó, intentando sonreírle para que no siguiera preocupándose― ¿Cómo te fue en tus clases?
Jimin apretó los labios mientras veía el ojo de Yoongi, intentando calmarse antes de hablar, ya que no servía de nada regañar a Yoongi.
―Bien ¿Tu jefe te va a recompensar el menos por el accidente?
―Sí, mañana no iré a trabajar, así que no te preocupes―Jimin suspiró, asintiendo.
―Bueno, pero debes ser más cuidadoso.
―Lo seré, te lo prometo.
Al día siguiente, Jimin casi le arranca la cabeza a Yoongi cuando colocó ambas manos sobre las mejillas ajenas y lo acercó de golpe para poder verlo de cerca, haciendo que el mayor se pusiera muy nervioso ante la cercanía.
Jimin le dio una almohadilla fría para que se la colocara cuando lo necesitara, para después darle su jugo de mandarina.
―Taehyung me dijo que irán hoy a comprar algunas cosas y que después irán a mi casa―dijo en medio del camino, Yoongi asintiendo.
―Sí, le pedí permiso a tu madre mientras esperábamos a que bajaras y está de acuerdo, así que podemos cocinar algo para la cena―asintió.
―Podemos pedir algo para comer, para que no tengamos que cocinar.
―Mh, no tengo mucho dinero ahora―hizo una pequeña mueca.
―No importa, Taehyungie y yo podemos invitar. Hasta Jungkookie si es que viene.
―No me dejarás decir que no ¿No es así?
―Exactamente.
Yoongi suspiró, rendido.
―Jamás puedo pelear contigo, me dejas sin ganas de llevarte la contraria―lo vio con una sonrisa de lado, haciendo que Jimin levantara los hombros ligeramente con una sonrisa.
―Y me gusta causar ese efecto.
Yoongi sabía que el pequeño accidente había afectado un poco sus planes, pero el tener un ojo morado no sería un impedimento para lo que quería realizar ese día, mucho menos cuando en esos momentos lo único que podía hacer era reafirmar lo que Jimin le hacía sentir.
mxyoongx
Habrá un extra más❤️
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top