Felizmente no había tanto que lavar ese día, por eso termine rápido, fui al cuarto, apague la luz y me quite la ropa. Me acosté en boxer de espalda con Diana, quien se había dormido hecha bolita para la derecha.

Me resultaba extraño el porque aún no habíamos hecho nada, es decir, ambos dormíamos en la misma cama, la conocía de toda la vida, sé que eso no implica explicitamente que tengamos algo, pero dado el contexto en el que estamos era obvio. Mis pensamientos fueron interrumpidos cuando Diana volteo y me toco el hombro, me di la vuelta para verla y ambos nos quedamos cara a cara, ella volvió a girar y ahora acomodándose en mí, estábamos de cucharita.

No lo había notado hasta que lo sentí, al subir un poco mi mano toque el pecho desnudo de Diana, ella solo se acostó en ropa interior igual que yo.

¿Era acaso una señal de que ese algo debía a pasar ahora?

No pude evitar mis instintos y comencé a tocar sus pechos con ambas manos, tenia la impresión de que lo disfrutaba, porque sentía un ligero movimiento de su cadera.

¿Qué estaba haciendo?¿No era acaso esto lo que quería que pasase?

Mis dudas empezar y yo me detuve, dejé de hacerlo antes de que me saliera de control, saque mis manos y me acosté boca arriba.

Diana sin hacer mucho ruido se coloco encima mía y se acostó ahí, podía sentir como sus pezones chocaban con mis tetillas, y en un acto de querer abrazarme comenzó a besarme el cuello.