Mi madre me abrazaba mientras me decía que me tranquilizara

- ¿qué te hizo rojo? - me preguntó secando mis lágrimas
- nada - le respondí sin poder dejar de llorar
- ¿dónde está manchas hijo? - me preguntó, yo comenze a llorar cada vez peor cuando escuché su nombre
- manchas está muerto - dije, ella no me dijo nada pero se sorprendió mucho
- disculpe señora, un hombre la busca - dijo rojo, mi mamá lo miro y asintió, salió de la habitación y después rojo entró
- señorito Chile... Yo de verdad no quería
- ya rojo, fue un accidente - le dije, estornude y luego me puse a toser como si no hubiera un mañana, rojo me ayudó a tomar agua y se me pasó la tos de a poco, mi madre volvió con dinero en las manos y me lo entregó
- hijo... él hombre que... ya sabes, dio este dinero como única disculpa - me dijo, yo tuve los billetes, eran muchos y en una gran cantidad que jamás había tenido en mis infantiles manos, los mire mientras mi mente dibujaba la cara feliz de manchas
- no lo quiero! - grite tirando los billetes por todo el suelo, estaba enojado y triste, ese dinero no era nada comparado con lo que era manchas - rojo, ve con ese hombre y regresale su sucio dinero! - era la primera orden que le había hecho a rojo en toda su existencia, él asintió y recogió los billetes para después salir, escuche como hablaba con el desconocido en el primer piso

- mi señor no quiere su dinero, le pide que por favor tome su dinero y se vaya de aquí - dijo rojo
- esta bien, de verdad lo siento, se como se siente perder a una mascota, dígale mis disculpas al niño - escuche pasos y luego el ruido de la puerta al cerrar, después él ruido que hacían las escaleras cuando subían o bajaban, después rojo abrió la puerta de mi habitación

- él señor ya se ah ido señorito Chile y le manda unas disculpas, ¿desea algo más? - me preguntó
- no rojo, perdón por gritarte - le respondí
- tranquilo mi señor, lo entiendo
- no me digas señor ni señorito, no me gusta... sólo dime Chile
- entiendo seño... Chile - dijo riendo nerviosamente, yo me reí y luego cerré mis ojos para dormir, mi madre se desveló conmigo
- este es el peor cumpleaños - dije mientras unas lágrimas caían por mi cara, mi madre sólo acaricio mi cabeza ayudándome a quedarme dormido.