parte 1 capitulo 4
*narra Chile*
El fin de semana pasó rápido, ese lunes me levante sin muchas ganas de trabajar pero tenia que ir para eliminar a los "sin piedad", pasé a ver a los niños a su habitación y dándoles un beso en la frente a cada uno me fui cerrando la puerta, ya me había despedido de México y me acerqué a la jaula donde estaba la piedra/mascota de Mel, la saqué de allí y me lleve la jaula, esta vez les traería una mascota de verdad.
No me encontré con nadie en los pasillos, me fui trotando hasta mi auto, otravez se me hacia tarde, mi padre no dejaría de molestar con eso, otravez superé los límites de velocidad, pasando por el terreno baldío, el lugar donde antes estaba el control terrestre y por fin había llegado, me bajé de el ato revisando por última vez si llevaba las etiquetas conmigo, seguían en mi bolsillo, saludando a los guardias y a mi madre subí hasta la oficina y me encerré allí con mi padre
- al fin llegas a tiempo- dijo con su profunda voz, esta vez no estaba borracho y si hacía su trabajo, de seguro se le había terminado el ron
- vine lo más rápido que pude - le respondí seriamente buscando con la mirada alguna señal de que haya estado tomando, no encontré ninguna así que pasé a mi puesto y me sumergí entre las tareas que me ofrecia el computador, me parecía un poco extraño que no me estuviera molestando
- vi que rompiste la regla - dijo sin mirarme después de un tiempo
- yo no pienso tener esa cosa en mi poder - dije mirándolo
- sabia que sigues siendo un cobarde
- ya es la hora de tu almuerzo - dije apuntando al reloj, él sonrió un poco y salió, me quedé un rato en silencio y apagué el computador, me levanté de mi asiento y revisé afuera para ver si había alguna señal de vida, metí la mano derecha a mi bolsillo apretando las etiquetas, salí rápidamente de allí y me metí a otra habitación, un computador gigante y algunos raros cilindros de quizás 2 metros con algún liquido extraño dentro, me recibieron al entrar, me acerqué al computador y saqué las etiquetas de mi bolsillo insertandolas en sus respectivas ranuras al igual que una tarjeta de identificación de mi padre
- bienvenido otravez Mundo, contraseña para continuar - dijo una voz
- voy a destruir a los humanos - dije al pequeño micrófono que salió, la computadora puso una pantalla azul por un momento y luego una verde, el resto fue pan comido, quité las etiquetas de las ranuras al igual que la tarjeta y salí de allí, volví a meterme a la oficina y espere a mi padre. No tardó en llegar y otravez llegó serio, yo lo miré cuando entró
- al fin volviste- le dije - creo un le entro un virus a tu computador otravez
- de seguro fuiste tu que nada haces bien - dijo con un tono de burla en su voz, había soportado escenas iguales por 5 meses seguidos y ya estaba cansado de él
- es todo, renuncio! - le dije parandome de la silla, él me miró sorprendido pero yo lo ignore y salí de allí, busqué a mi madre y la encontré en el jardín
- madre! - le grité para que volteara a verme
- hijo, ¿que haces aquí tan temprano? Aún no terminas- me dijo, esta vez ella se lucia con el mismo vestido con el cual se casó, yo sonreí al verla tan radiante, literalmente
- madre- dije borrando mi sonrisa - yo renuncio, no puedo más con éste trabajo
- entiendo - dijo ella
- volveré a casa, cuando mi padre se vaya, vendré con los niños y México a visitarte
- espero que sea pronto - dijo sonriendo, con el tiempo el brillo de su vestido había disminuido, pero seguía igual de hermosa que el día en que se casó, me despedí y luego fui al centro a comprarles una mascota real a los niños.
No tardé mucho en ese lugar, había pocos countrys y la tienda de mascotas estaba casi vacía, compré un perro y un loro, a Mexi le encantaban los loros y Mel adoraba a los perros.
Al llegar a casa los niños comenzaron a gritar y corrieron hasta mi para abrazarme casi tirándome al suelo
- papi al fin volviste - me dijo Mexile sonriendo
- pensé que volverías más tarde - me dijo Mexle
- ya terminé para siempre mi trabajo, ahora solo estaré con ustedes - les dije, ellos comenzaron a saltar celebrando la nueva noticia - ¿niños donde está su padre? - les pregunté
- padre salió- dijo Mexle
- dijo que iría a hablar con un conocido que apareció en la puerta - dijo Mexile corriendo hasta la mesa de centro y tomando una hoja para luego entregarmela
- nosotros hicimos ese dibujo, son ellos dos - dijo Mexle
- ¿es USA?... - pregunté susurrando, me parecía extraño que USA viniera a buscar a Mex y él se fuera dejando a los niños solos, un portazo a mis espaldas me hizo volver a la realidad, después de el brinco que di vi hacía atrás, ahí esta México
- ¿amor? ¿Que haces aquí tan temprano? - me preguntó yendo a saludarme con un beso
- niños vayan a su habitación, quiero hablar con su padre a solas - les dije sin mirarlos
- pero papá... - alegaron ambos
- ahora - dije, ellos se fueron a regañadientes y yo me preparé para hablar con México
- ¿amor que pasa? - me preguntó
- ¿como que que pasa? Los niños me contaron que alguien vino a buscarte ¿como se te ocurre dejarlos solos? - le pregunté enojado mientras le mostraba el dibujo, él se mostró arrepentido y bajó la cabeza
- amor... no quería que supieras pero me veo en la obligación de contártelo - dijo tomando mi mano derecha
- ¿que tienes que contarme? - pregunté relajando mi enojada expresión y escuchándolo
- ¿podrías perdonarme luego de que te cuente? - preguntó, me estaba confundiendo demasiado y luego de suspirar le conteste
- debo saber de que se trata primero y quizás te perdone- le dije manteniéndose serio, él sin cambiar su expresión tomó aire
- perdóname por favor... pero yo... amor yo te estoy engañando
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top