MALDIVAS | Plex

—DÍA 22 DANDO LA vuelta al mundo en ochenta días.— le dije a la cámara— Quiero dormir. Como  ella.— grabé a Maya, que estaba abrazada a un cojín y roncando con la boca abierta. Después me grabé a mi— Si, chicos, no es tan fina como parece. La verdadera Maya ronca como una marmota, ¿a qué si?— le acerqué la cámara, pero evidentemente estaba roque y no me respondió— Como decía...

Iba a contar lo que íbamos a hacer hoy cuando la cámara se me quedó sin batería, y encima me interrumpió un mensaje de Krufy. Aproveché para ir al baño a lavarme la cara y esas cosas mientras se cargaba la cámara y entré en el chat.

Krufo

bro

tú y maya

???

~

Me enjuagué la boca y me quedé un rato mirando el mensaje.

~

yo y maya?

si

pero a qué te refieres?

hay algo entre vosotros no?

😼😼😼😼

🙂

JAJAJAJ

menudo pájaro

es por los últimos posts?

a ver

si pero no

explícate krufo

que es muy temprano

a simple vista parecen unos posts normales 

tipo sois amigos desde hace tiempo

y se nota

pero es que

tu lees los comentarios de tus vídeos de YouTube?

nunca bro

siempre me traumo así que ya no lo hago

bua

pues hazme un favor y míralos

aunque sea el de los últimos

si?

enserio

okok

pues ahora vuelvo

~

Le hice caso a Krufy y entré en el último de los vídeos.

"Día 21 dando la vuelta al mundo."

user2233: como Plex mira a Maya 😍

user3111: soy la única q cree q estos tienen algo?

user21111: 15:67 maya se ha puesto tope nerviosa cuando plex la ha mirado bro

user55588: plex y maya pueden confirmar ya q son novios porfa? gracias 🙏

user2111666: plex y maya han follado 100%

~

Todos los putos comentarios hablaban de lo mismo. Tan solo tres semanas dando la vuelta al mundo y todos pedían lo mismo, que Maya y yo confirmáramos "lo nuestro".

—Ostia.— me empezó a latir el corazón con fuerza mientras leía los comentarios, muchos de los cuales eran muy descarados. ¿Tan obvios éramos?— Y yo que pensaba que en cámara lo disimulábamos bien.— murmuré.

¿Y Maya? ¿Los habrá visto? No podía evitar pensar. Y si es así, ¿Cómo se lo habrá tomado?

Buf esto es demasiado para mi.

Volví al chat de Krufy, que lo había dejado colgado, y me senté en el vater mientras le escribía.

Krufo

la gente está pirada

que hemos follado dicen

pero si lo habéis hecho o no?

a ver bro

si

pero igualmente

COMO QUE SI

ES BROMA????

no

OLE LOS CHAVALE

OLE LOS CARACOLE

Y OLE LA MADRE QUE ME PARIOOO

💃🏻💃🏻💃🏻💃🏻

nono krufy esto es serio

oh

es que no se lo puedes decir a nadie

ni a teddy

ni a jan

ni a ruby

en plan a nadie

NI A LA SEÑORA BOU

eyey

mi madre q culpa tiene 😭

la mujer vive de los chismes 

no bro esto es muy serio

a maya le incomodan estas cosas

no quiero que se vaya diciendo por ahí que hemos

hecho eso

porque se que le va a sentar mal

vale soy una cremallera

gracias mi pana

puedo llamarte?

necesito consejos

son las 6 de la mañana

pero claro mi hermano

tu como si nada

ok pues te llamo

😀

~

Sé que Krufy estaba muerto de sueño, que lo último que quería era que le llamara, pero necesitaba hacerlo y aclararme algunas cosas, así que lo hice igualmente.

—Maya me gusta. Cien por cien.— fui al grano—
Pero es que hay un problema, bueno dos, y esto si que no puedes decírselo a nadie, porque cojo un vuelo a España y seguro que llego tarde, pero juro que te mato, Krufy.

—Bro, que son las seis de la mañana, no me amenaces así que me meo.— me susurró, y solté una pequeña carcajada.

—Lo primero, a Adri le gusta Maya.— solté— Y lo segundo, me ha escrito Francesca hace nada.

—Wow.— tardó unos segundos en reaccionar— Wow.— repitió— ¿Pero como me puedes soltar esto como si nada?

—Como si nada dice. Estoy que me va a dar una taquicardia.— exageré.

—A ver bro, con todo el respeto. A ti te gusta Maya.

—Sí.

—Tu conociste primero a Maya.

—Sí.

—Y tú le dijiste a Adri que te gustaba Maya desde hace tiempo.

—Em, si.— asentí, no muy seguro de lo que iba a decir.

—¿Pues entonces? ¿Eres tonto o te hago un mapa?— me quedé en silencio. No entendía demasiado por donde iban los tiros— Vale, eres tonto, comprobado.

—No me insultes y explícate mejor, hijo mío, que tú también hablas en jeroglíficos.— protesté.

—Básicamente, lo que te quiero decir, es que Adrián no pinta nada en este cuadro. Es jodido, ¡pero es la verdad!— exclamó— A ver, Plex. Tu la conociste primero, tú te enamoraste primero y tú eres el que debe de estar con ella.

—Pero Adri...

—Pero Adri nada, Plex. Hay más peces en el mar, no me toques los cojones.— bufó— Aquí la cuestión es la siguiente, ¿tú le gustas a ella?

La pregunta empezó a resonar por mi mente. Abrí los ojos como platos, la respiración se me empezó a acelerar, y me puse muy nervioso de repente.

¿Le gusto a Maya?

—¿Plex?— insistió.

—Perodna, estaba pensando.— respiré hondo, pasándome la mano por el pelo— Mira, Krufy, no lo sé. Creo que si. Aunque sus palabras no me lo demuestran, sus acciones sí. Eso es suficiente, ¿no?

—¿Sus acciones? Explícate.— Krufy exigió.

—Bueno, no me ha dicho "te quiero", ¿sabes? Ni tampoco me ha dedicado palabras de cariño, en plan, ya me entiendes.— le expliqué— Pero siempre que puede me abraza, me besa, veo como muchas veces me busca y también es importante tener en cuenta que me ha confiado algo tan fuerte como su virginidad, en plan, literalmente lo ha hecho conmigo, ¿sabes?— respiré hondo— Hay muchos tipos de chica, pero yo sé cómo es Maya, y el hecho de que nos hayamos acostado creo que es suficiente prueba. Aunque se nuevo, no lo sé seguro. Tampoco hemos tenido una charla demasiado profunda.

—Esto hay que hablarlo bien.— Krufy dijo tajante— Escúchame bien, Plex. Háblalo con los demás. Con Jopa, con Borja, incluso con Paconi si hace falta.

—Pero.

—Escúchame.— me interrumpió. La idea no me hacía mucha gracia, es más, me daba hasta vergüenza, pero creo que Krufy era un buen amigo por todo lo que estaba haciendo aunque fuera se merecía ser escuchado— Yo creo que ellos no son tontos, y saben que algo hay, así que pienso que pueden ayudarte. Ellos te ven a ti, pero es que también la ven a ella. Como actúa cuando está contigo, como te mira sin que te des cuenta, comentarios que puede decir sobre ti sin que te fijes, etc. Sincérate con ellos, entiende la situación y entonces haz lo que tengas que hacer.

—Krufy, dime la verdad.— hice una pausa dramática— ¿Te has fumado un porro?

—Pff cabron.— se rio, y luego me reí yo.

—Es broma, sabes que te lo agradezco mucho.

—Más te vale porque me estoy cayendo del suelo.

—Una ultima cosa antes de colgar.— le pare— ¿Qué hago con la italiana?

—Como que, ¿"que haces con la italiana"? Pues apartarla de tu vida, inútil, ¿qué vas a hacer?— dijo obvio— Puede que vayas a tener algo serio con Maya, ¿quieres arriesgarlo con una tía que jugó contigo?

—A veces jode que seas tan directo.

—A veces es lo que necesitas.— respondió él.

—Tienes razón.

—¿Qué te ha dicho, de todas formas?

—Me ha preguntado cómo estoy. Que dice que me ve las historias y me nota feliz, y que se alegra...

—Si te digo esto no me creerás.

—Ay Dios.— suspiré.

Yo ya me esperaba cualquier cosa.

—Estuvieron ella y Yang en casa hace poco.

—QUE.— exclamé.

No le quería seguir oyendo.

Que Francesca hubiera estado en Madrid, EN MI CASA, y sin yo estar ahí... no se, entiendo que es amiga de Krufy, pero después de todo lo que me hizo pasar no es que me haga mucha gracia. Hacía un año que habíamos decidido poner fin a lo que fuera que tuviéramos, así que no me valía que quisiera volver otra vez, y más ahora, en el mejor momento de mi vida. Si quería desestabilizarme de nuevo os juro que no lo iba a conseguir.

Yo soy más fuerte que las mentiras de Francesca, y lo que siento por Maya también.

Joder que cursi.

Pero es que es la verdad. Estuve muy enamorado de Francesca, lo acepto. Fue una persona muy importante para mi, también. Pero no me trajo nada bueno, y no iba a volver a caer en el mismo ciclo vicioso pudiendo estar feliz al lado de una chica como Maya.

—Espera, espera.— Krufy intentó calmarme.

—No bro, ¿qué coño hacía Francesca en mi casa?

—Vino a verme. A mi, y bueno, Yang a Jan.— explicó. A todo esto, yo estaba de los nervios— Y me preguntó por ti. Me dijo que no se había comportado bien contigo, que te echaba de menos, y que quería arreglar las cosas. Aunque fuera para que pudierais ser amigos.

—Lo de esta chavala no es normal.— dije ante tanta hipocresía— Como si no se hubiera dado cuenta antes.— rodé los ojos— Simplemente está viendo que mi vida por fin empieza a ir sobre ruedas y tiene que encontrar la manera de joderla.

—No se, Plex, se la veía sincera. Además, estaba algo decepcionada por haber llegado tarde, porque literalmente vino a casa un día después de que os fuerais a dar la vuelta al mundo.

—Que se joda.— murmuré— ¿Y te dijo algo de Maya? No, ¿no?

—No, no la menciono en ningún momento. Pero hay algo que si me dijo...

—¿El que?

—Que le gustaría venir a algún destino conmigo y Teddy.

—KRUFY.— le advertí— NI DE COÑA.

Nonono, no puede salir nada bueno de Francesca y Maya juntas dando la vuelta al mundo conmigo. Es que no, me niego. Prefiero que venga Peacky a taladrarme durante lo que queda de viaje a que venga Francesca a joder a Maya y a liarlo todo.

Que no, joder, que por mis huevos que no.

—Que va, que va, tranquilo. Que la puede liar parda, si yo lo sé.— se sinceró conmigo. Hasta él, que es su propio amigo, sabía que Francesca era la definición de "peligro"— Intentaré ponerle excusas o yo que se.

—Krufy te lo pido por favor.

—Que si, joder, que no dejaré que se interponga entre tu y Mayita.— parecía convencido— Pero aún no sois nada es más difícil, así que pídele ya salir de una vez coño.

—Que siii, pero tiempo al tiempo, tiene que ser especial.

Llevaba días dándole vueltas, tal vez semanas. No sabía aún de los sentimientos de Maya hacia mi, por eso aún tenía una charla pendiente con Borja y estos, pero yo si sabía que estaba enamorado de ella, y si quería confirmar lo nuestro tenía que ser en un lugar especial, un destino especial.

Tailandia.

Sería ideal, ¿verdad? El lugar donde nos conocimos, el lugar donde empezó todo... hacernos novios en un sitio tan importante sería épico, pero es que a decir verdad, Frank me daba un poco de miedo, así que 100% seguro que no se me iba a ocurrir en la vida pedírselo delante de él.

—Bueno, ya me vas contando, ¿eh? Que voy a planchar la oreja, bro, estoy demacrao.

Me reí ante su forma de explicar las cosas. Krufy siendo Krufy.

—Buenas noches, krufo, descansa.

—Si, como que después de esto voy a poder dormir bien. Al final sueño con la italiana.

—Jajajaja, me la pela, toda tuya.

—Ni de broma.— bostezó— Hasta mañana.

—Chaooo.

Colgué.

Treinta minutos al teléfono y parece que Krufy había sido capaz de organizar toda mi vida.

Esta noche teníamos un vuelo a Tailandia, oportunidad para hacer las cosas bien. Primero hablaría con los chicos, después con Adri, y cuando todos me hubieran aconsejado, entonces daría el gran paso.

Sentía que mi propósito de vida por fin cobraba sentido, y la idea me emocionaba.

MALDIVAS | Maya

—¿SEGURO QUE ESTARÁS bien?— un poco apartados de los chicos, Plex me preguntaba algo inseguro.

—Sí, no te preocupes.— le sonreí sincera, apretando los ojos y tapándome un poco la cara por el sol que me daba de frente.

—Está bien.

—Pasadlo bien, ¿vale? Y tened cuidado, porfa, que a veces se te va.

—Pf, pero que dices, anda. Mi cabeza esta perfecta.— sonrió con chulería.

—Eso suelen decir los locos.— le guiñé un ojo.

Negó despeinándome un poco y me despedí con la mano mientras se alejaba, dispuesto a ponerse un chaleco como los demás, que iban a subirse a una banana de esas que te lleva mar adentro y empieza a ir más rápido hasta que sales volando.

Podría haber participado yo también, pero hacía unos días que me encontraba mal de la tripa y mareos por gusto era lo que menos necesitaba.

—Bueno.— sonreí, deslizándome las gafas de sol por la frente para colocármelas como una diadema— Un par de horas sola por las Maldivas, ¿qué puedo hacer?

(...)

Primero fui a por el drinking.

Sí, lo sé, empezamos fuerte.

Me pedí unos martinis en la piscina del hotel, en una de las tumbonas mientras tomaba el sol y leía una revista, en este caso de Vogue. Me encantaban todas las modelos que aparecían en ella, sus rostros, sus cuerpos, sus outfits y sus estilos de vida. Algún día me gustaría ser modelo, si lo periodista no funciona, claro.

Pero eso es solo un sueño, lejos de la realidad.

Aunque de nuevo... la vuelta al mundo también lo era, y mirad ahora donde estoy.

Desde que he conocido a Plex, me he dado cuenta de que no existen los límites. Los límites nos los ponemos nosotros mismos. Con esfuerzo y un poco de suerte, nuestros deseos se cumplen, y no pensé nunca que podría llegar a creer en el poder de la mente, hasta que me vi dando la vuelta al mundo con un youtuber y sus tres amigos.

Empezó a hacer calor, así que me metí en el agua a darme un baño. Me saqué un par de fotos con una flor que me había encontrado por ahí y la subí a mi story.

Simple pero bonita.

mayacuestaa ha subido una historia

Además, no se me pasó por alto que tres chicos me observaban desde el borde de la piscina, con una sonrisa pícara y evidentemente queriendo llamar mi atención.

Me reí ante sus intentos, la verdad es que los tres eran guapos, pero ninguno me interesaba.

Solo había un chico en mi mente.

Y ese era Ryan Gosling.

Que hijo de puta, ayer me dormí viendo una película suya con Plex y que hombre mas guapo.

Ryan, digo, aunque Plex tampoco se queda atrás, y es que hace meses que me gusta. Me he dado cuenta de que me lo paso bien estando con él; de que, cuando está más distante, lo busco; de que me gustan sus besos; y de que no me arrepiento de haberla perdido con él, porque fue un momento único y especial, y no lo hubiera querido de ninguna otra manera.

Estaba contando cuando tardarían los amigos en dar un paso.

Fueron cinco minutos.

Los dos de los lados empujaron al del medio, que se me acercó con una sonrisa.

—Hola, ¿tienes insta?— me preguntó sonriéndome.

El chico era muy agradable físicamente. Tenía los ojos oscuros pero el pelo muy rubio, totalmente mojado y desordenado.

También tenía buen cuerpo, y confianza en sí mismo, lo que inmediatamente lo hacía atractivo.

Pero no era él, así que no tenía ningún tipo de oportunidad.

—Sí.— asentí, y vi la victoria en sus ojos, por eso me jodió tener que decirle lo que le dije, pero en el fondo me hizo sentir súper bien— Aunque también estoy casada, lo siento.

—Joder, que lastima.— sonrió avergonzado.

—Lo siento...

—No pasa nada. Buen día, guapa.— me guiñó un ojo y se fue.

Me quedé como una boba repitiendo en mi cabeza mis propias palabras. "Estoy casada". "Estoy casada." "Estoy casada."

Plex y yo no éramos nada aún, cierto.

Pero los actos van por encima de cualquier palabra, y en mi opinión, algo entre nosotros había 100%, así que no estaba de más guardarle lealtad.

—Bueno, creo que por fin es la hora de relax.— sonreí.

Salí del recinto del hotel y caminé hasta la playa, que estaba al lado. Busque un huequito de sombra y extendí la toalla. Me llené de crema, me puse los auriculares, abrí un libro, y me dejé llevar por la calma.

(...)

18:30 de la tarde, me preguntaba como lo llevarían los chicos. No me habían escrito desde la mañana, aunque lo entendí, teniendo en cuenta de que estaban haciendo actividades algo extremas, y no es que sea muy cómodo escribir por chat mientras pegas botes por el Mar encima de una banana.

No me paraba de venir el pobre Jopa a la mente, lo mal que lo estaría pasando. Me sentía mal al imaginarme mil escenarios de Jopa volando por el mar, y también me sentía mal por reírme de ello, pero que le voy a hacer.

Un poco mala si que soy.

—Hola Plex.— la tan esperada llamada, por fin llegó.

Cerré el libro para poder coger mejor el móvil y centrarme en lo que tenía que decir.

—Hola Maya, ¿como lo llevas?— me respondió animado.

Enseguida sonreí al oír su voz.

Joder que alguien me salve. Me estoy enamorando hasta de la forma en la que habla.

—Bien, estoy leyendo un libro en la playa. ¿Y vosotros?

—Bueno...

—LO ODIOOO.— oí a Jopa agonizar. Ahogué un grito de sorpresa y escuché la risa de Plex— No, no, dame el teléfono Plex, dámelo, por mis muertos que me lo des.— le oía pelearse— MAYA.— gritó.

Se había salido con la suya.

—QUE.— respondí de la misma forma.

—ME CAGO EN EL PUTO PLEX.— dijo con un fuerte acento andaluz.

Empecé a reírme ante el cabreo que llevaba Jopa. Pobrecito.

Si no había vomitado seguro que poco le había faltado.

—¿Y yo que quieres que haga?— me reí.

—No se, hazle un trabajito, a ver  si  así se relaja un poco.— soltó to cabreado.

—JOPA.— exclamé.

Sentí que el corazón me empezaba a ir a mil, y apuesto mil euros a que me estaba poniendo tomate.

Joder que incomodo, a saber que debe estar pensando Plex.

¿Enserio piensas en eso como si no se lo hubieras hecho de verdad? Me dijo mi conciencia. Y cuando me conciertos flashbacks de Dubái, supe que mi peor enemiga vivía en mi propia cabeza.

—Que tonto es, bro, puto Jopa.— volví a oír la voz de Plex— Se pasa, joder. Lo siento.

—Tranqui, tranqui, si es que en verdad tampoco se equivoca, ¿sabes?— me reí sin gracia, tratando de afrontar la situación incómoda en la que nos había metido Jopa y su gracia.

—Ala, la otra.— exclamó— Va, ves tirando para el hotel que en nada llegamos.

—¿Y eso que habéis tardado tanto?

—Mira, Maya, yo te lo explico.— oí a Borja coger el móvil.

—Veras tu.— murmuré.

—Primero, el Jopa ha salido volando de la banana. La ha liado parda cuando lo intentábamos volver a subir y a la tercera a potao.— sabía yo— Total, que él Adri ha perdido una chancla que ha volao de su pie y me ha dado a mi en la cabeza, y yo me he cabreado y le he empujado de la banana, así que me han castigado y me han dejado en la orilla. Y claro,
el Jopa, que no dejaba de echar comida, pues se ha tenido que quedar conmigo y que vergüenza he pasado, ahí con toda la gente mirándonos.— seguía explicándome el Borja.

—Uy si, ha debido de ser muy duro.— dije irónicamente, mientras recogía mis cosas y las metía en un cesto que me había comprado en una de las paraditas de la playa.

—En fin.— retomó aire. Madre mía, cómo le gustaba hablar al Borja— Que cuando han llegado los demás, hemos ido camino al hotel pero claro, al Adri le faltaba una chancla, así que hemos parado en una tienda y habían gatitos fuera.

—Ayyy no me digas.— me imaginé a los gatitos ahí acurrucados y me dio mucha pena.

Por desgracia, en Maldiva había mucho animal callejero.

—Si, y el Plex se ha sentido mal así que ha ido a comprar leche y ha estado una hora ahí sentado con los gatitos De Dios.

Ese es mi novio. Pensé, y luego me abofetee mentalmente. Alto ahí, loca del coño, que al final te vas a hacer ilusiones y aún no te ha ni confesado sus sentimientos.

—Tan mono él.— sonreí, y me imaginé que él también lo estaría haciendo— ¿Algo más que os haya pasado y que yo deba conocer?

—No, diría que no.

—Pero has perdonado al Adri, ¿no?— pregunte dudosa, y nadie respondió— ¿Borja?

—Se ha pirado, pero si, le ha perdonado porque no ha sido aposta. En plan, el pobre Adri se estaba intentando acomodar en la banana y el tío ha metido un acelerón que un poco más y perdemos al Jopa.— Plex explicó con una risita— Bueno, estamos ya en la habitación. ¿Te queda mucho?

—Nop, estoy entrando ya en el recinto del hotel.— le expliqué, viendo las puertas de la piscina en frente de mi, las cuales me llevarían a la recepción.

—Okey, pues nos vemos ahora. Hay que recogerlo todo que en 45 minutos hay que coger un barco al aeropuerto.

—Ostia es verdad.... okey, pues no tardo. Adioss.

—Chao.— me colgó.

Subí las escaleras hasta la tercera planta. Golpeé dos veces la puerta y me abrió Plex.

Sin camiseta.

Los ojos se me fueron a su abdomen, desnudo y con los abdominales perfectamente marcados. Aproveché el momento.

Levanté la vista poco a poco y la fije en sus ojos, entreabriendo un poco los labios de manera inocente. Supo lo que estaba haciendo, se rio negando con la cabeza.

Me mordí el labio, me empujó levemente al pasillo y entrecerró la puerta detrás  nuestro.

—¿Qué haces?— susurré.

—Shh...

Mi espalda tocó la pared, sus brazos me atraparon.

Quería mirarle a los ojos, de verdad, pero las ganas de besarlo me superaban.

Tuvo que agachar la cabeza, la altura era un enemigo para los dos, la verdad. La encaminó hacia mi, alce un poco el cuello para dejárselo más fácil, y enseguida empezó a besarme.

Nos enrollamos en el pasillo del hotel, sí, ¿pero y que más da?

Las ganas ganaban a la coherencia.

Con Plex había aprendido eso hacía mucho tiempo.

—¿Plex?— vimos como la puerta de abría a nuestro lado.

Enseguida se separó de mi, y aunque tenía la respiración algo acelerada, creo que a ojos de Jopa no llegó a pasar nada entre Plex y yo.

Logramos disimularlo bastante bien.

—¿Qué quieres Jopa?

—¿Todo bien?— frunció el ceño, mirándonos a ambos.

—Mhm.— asentí yo con inocencia, relamiéndome los labios.

Plex me miraba de reojo, no lo estaba soportando.

—Hay que irse ya, y tú tienes todas tus cosas por medio.— Jopa me regañó.

—Tienes razón, voy.— pasé por su lado y entré en la habitación.

Sonreí internamente sabiendo que la tensión subía por momentos, que lo que fuera que lleváramos en secreto pronto saldría a la luz, y no se porqué, pero la situación me entretenía, le daba chispa a nuestro romance y lo hacía más divertido.

Empecé a empaquetar mis cosas con rapidez para no perder demasiado tiempo.

Jopa y Plex estuvieron un rato hablando fuera, así que tal vez no lo habíamos disimulado tan bien como creímos.

Como fuera, ahora mismo eso era lo de menos. En nada teníamos un vuelo, y el siguiente destino prometía.

(...)

MALDIVAS  | Plex

—YO TENGO QUE hablar contigo.— me dijo Jopa.

Maya acababa de entrar en la habitación. Jopa repitió lo mismo que había hecho yo minutos antes y entrecerró la puerta detrás nuestro, aunque claro, en ningún momento le comí la boca como con Maya.

Eso sería raro.

—No tenemos que hablar nada.— suspiré.

—Jo que no.— se rio irónicamente.

Y quería huir de la situación, pero entonces pensé en las palabras de Krufy.

—Vale, ¿que quieres que te diga?— me reí.

—Lo que estabais haciendo, por ejemplo.

—No hacíamos nada.

—Plex, por favor.— soltó un bufido de burla— ¿Que te crees que todos somos tontos menos tu, o que?

—De hecho, si.— me reí.

—Ja ja ja. Que gracioso.— me hizo burla, poniendo cara de tonto— No, bro, enserio.

—Vale, Jopa. Yo te lo cuento. Te cuento todo lo que quieras, te lo juro. Pero ahora no.— antes de que protestara, le interrumpí— Hazme caso, quiero hablarlo con todos a la vez.

—¿En Tailandia?

—Si, por ejemplo.— asentí.

—¿6 horas con la intriga me vas a tener, pedazo de cabron?

—Es lo que hay.— me encogí de hombros.

—Ten amigos para esto.— se quejó, y entramos en la habitación como si esa conversación no acabara de suceder.

Del hotel cogimos un barco que nos llevó al aeropuerto, donde hicimos tiempo hasta que nos tocó embarcar y, seis horas más tarde y después de haber dormido un tiempo real de 30 minutos, llegamos a Tailandia.

Me sentí como hacía solo un par de meses, tenía la misma sensación que el día en el que sabía que me encontraría de frente con Frank, y que me juzgaría.

Creo que entre nosotros estaba todo bien, pero tenía algo de duda. Frank era muy impredecible, y más teniendo en cuenta que, conociéndole, podría llegar a afectarle ver a su sobrina rodeada de cuatro chicos.

No se, yo solo quería que se comportara bien conmigo, pero sobretodo con mis amigos.

Bromeé un poco durante el camino hacia el parking del aeropuerto, diciendo que Frank era un orco y que estuvieran preparados porque los iba a putear y todas estas vainas, a lo que Maya, obviamente, se reía y trataba de calmarlos porque sabía que lo estaban pasando mal y Frank en realidad no era tan malo.

O al menos ella estaba segura de eso.

Además, Jopa admitió que era fan en secreto. Se ve que de pequeño se tragaba todos sus capítulos, y tenía un miedo especial a caerle mal a su ídolo de la infancia.

—¿Y porqué yo nunca supe esto?— Maya cuestionó cuando Jopa describió explícitamente lo mucho que idolatraba a Frank.

—No se, bro, me daba vergüenza.— Jopa se rio, un poco rojo.

—Ayyyy, que mono eres Jopa.— le agarró de la mejilla como un niño pequeño y lo pellizcó.

Enseguida de empezó a sonar el teléfono.

Era él.

Me armé de valor y dirigí a mis amigos (y a Maya) hasta donde estaba Frank, con el coche aparcado.
Al verlo de lejos, Maya comenzó a correr y lo abrazó fuerte, trasmitiéndole todo lo que le había echado de menos. Él la agarró y la aferró a él, trasmitiéndole todo el cariño que le tenía guardado.

Adri inmortalizó el momento con una camarita vieja que ahora me enteraba de que llevaba encima.

Luego me gustaría ver el vídeo.

—¿Qué pasa chavales?— me dio la mano.

Evidentemente, seguíamos los dos un mismo patrón de moda: crocs, shorts cortos, camiseta sucia de diez días y una gorra hacía atrás.

Si es que puestos al lado del otro, podríamos parecer padre e hijo tranquilamente.

Jopa estaba muy nervioso, y todos lo sabíamos. Empezamos a chincharlo, y claramente, nos pidió disimuladamente que paráramos mientras se volvía un tomate.

Nos ahorramos las introducciones y simplemente cargamos las maletas en el coche para volver al santuario, un lugar tan sagrado para mi, no solo por su historia (el tema de la capibara y demás), sino por lo que todo eso conllevó (que Maya y yo nos conociéramos, y que más tarde viniera conmigo a dar la vuelta al mundo).

Me quedé atónito, quieto en la entrada del lugar.

—¿Te trae recuerdos?— Maya pasó por mi lado, posando su mano en mi hombro.

Vi a mis amigos pasar de largo y sonreí, mirándola a ella.

—Si, muy buenos recuerdos, además.— le confesé.

Vi como se le achinaban un poco los ojos al sonreírme enternecida, y me salió como un impulso. Rodee sus hombros con mi brazo y le besé la cabeza, mientras ella se refugiaba en mi pecho.

—Tailandia, ¿eh?.— respiró hondo.

—Ahá. Aquí empezó todo.

✨

capítulo un poco apresurado, cuando pueda lo corrijo.

ESO SI.

tengo muchas ganas INCREÍBLES de los próximos capítulos porque se vienen cosas MUY intensassss (drama a full)
pistas: 👩‍❤️‍👨🍫😡🌃🧏🏽🍼🇮🇹🫦💍

pd: y ojo a los capítulos de estados unidos, porque se que aún queda mucho, pero va a ser una LOCURA, se me está yendo un poco con la trama pero buah las ideass, es el destino q mas ganas tengo de que llegue y que leáis🐒

(200 votos y nuevo capítulo <3)