TAILANDIA | Maya

—¿ASÍ ESTÁ BIEN?— LE PREGUNTÉ a Plex.

Se tomó unos segundos para revisarlo, luego me sonrió.

—Sí, súbela.

—¿Seguro?— me mordí la uña con inseguridad, y él asintió.

—Tu puedes, tranquila.

La mano me temblaba, y quería llorar, pero me obligué a no hacerlo. Demasiadas lágrimas derramadas en tan poco tiempo.

Le di a un botón y apagué mi móvil suspirando. Plex me pasó un brazo por los hombros y me acercó a él, frotándome el brazo en forma de apoyo.

—Ya está, ya lo has hecho. Ahora ya puedes olvidarte.— asentí— Venga, vamos a cenar, me suena mazo la tripa.

mayacuestaa_

❤️✈️💬

👤 | chelseafc

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mayacuestaa_: Antes de nada por favor no os preocupéis, estoy bien.

Nunca pensé que llegaría el día en que tendría que escribir esto, y menos que llegaría tan pronto, pero mi etapa como jugadora y capitana del @chelseafc finaliza hoy, y finaliza aquí.

Hace tres meses tuve una lesión fatal que me mantuvo alejada del juego hasta ahora, y lamento dar la noticia de que hace cuestión de unas horas he vuelto a sufrir un accidente que me dejara sin jugar durante un tiempo más, lo que significa que volveré después de que mi contrato futbolístico finalice.

A tan solo unas semanas del fin de mi contrato con el Chelsea Football Club Femenino, la junta directiva y mi equipo han tomado la decisión de no renovar para la temporada que viene, y por este motivo y con una suma tristeza, me despido de mis compañeras, mi entrenador, mi equipo, y mi afición.

No sé que es lo que tiene la vida preparado para mi de ahora en adelante, pero confío en el destino y se que será algo maravilloso.

Muchas gracias por haberme apoyado todo este tiempo, tanto dentro como fuera del campo. Ser azul es un privilegio que no todos tienen, y es por eso que nunca me olvidaré del orgullo que me supuso formar parte del equipo y poder dirigirlo.

Once a blue, always a blue💙

Maya Cuesta, 7

Ver 2.566 comentarios:

yosoyplex✔️: eres muy fuerte maya🫶🏽 le gusta al creador
↪️mayacuestaa_: ❤️
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adridobylus: ánimo reina le gusta al creador

itskrufy: lo siento mucho maya❤️ le gusta al creador
↪️mayacuestaa_: mersi krufy🫶🏽
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teddarchie: we're proud of u now and always our cap💙 le gusta al creador
↪️mayacuestaa_: y esto? no sabía que eras del chelsea teddy😳
↪️teddarchie: has visto? otro motivo más por el cual soy tu chico perfecto le gusta al creador
↪️peacky.fn: @yosoyplex opaopaopaopaaaaaa
↪️mayacuestaa_: @peacky.fn fuera de mi instagram niño
↪️yosoyplex✔️: @teddarchie no te pases le gusta al creador
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chelseafc✔️: thank you for everything captain! 💙le gusta al creador
↪️mayacuestaa_: thank you for the best years of my life🫶🏽🫶🏽🫶🏽
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masonmount✔️: love ya may! you're strong! 💙 le gusta al creador
↪️mayacuestaa_: appreciate you mase 🫶🏼🫶🏼🫶🏼
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aishalehmn6: my baby🥹 wishing you the best. le gusta al creador
↪️mayacuestaa_: we'll meet again love
↪️theresapaul: @aishlehmn6 @mayacuestaa_ 😭😭😭😭 le gusta al creador

elcromas_: q grande es mi hermana le gusta al creador
↪️mayacuesta: ay mateiito💗
↪️elcromas_: te quiero mucho abeja maya le gusta al creador
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lamineyamal: esto no es nada para ti campeona puedes con todo💪🏼 le gusta al creador
↪️mayacuestaa_: mersii lamine!🥹
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itskrufy ha comenzado a seguirte
teddarchie ha comenzado a seguirte

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Estaba cenando con todos mientras leía y respondía algunos mensajes que me habían mandado de apoyo.

Me estaba sintiendo querida de nuevo después de mucho tiempo, y eso me emocionaba.

Muchos de los mensajes recibidos me los esperaba, al fin y al cabo, la mayoría se trataban de mis compañeras de equipo o algunos amigos, como Lamine. Pero luego me empezó a comentar gente que no me esperaba para nada, y la verdad es que me conmovió bastante, como los amigos de Plex o hasta Masón Mount, un futbolista profesional del Chelsea que conocí un par de veces porque vino a entrenarme cuando jugaba en el juvenil B.

—Wtf, ¿conoces a Mason Mount?— me preguntó Plex de repente, pues estaba leyendo algunos comentarios conmigo (con su cabeza apoyada sobre mi hombro) y me estaba ayudando a contestar a otros.

—Bueno, a veces grababan vídeos para el canal del club y venían jugadores a entrenarnos a los juveniles. También vinieron tammy abraham y Ben Chillwell una vez.

—Locura.— soltó Plex, y me vino una pregunta a la mente.

—Oye.— llamé su atención— ¿Archie es del chelsea?

—¿Archie? Pf, ¿qué va a ser Archie del Chelsea? Anda, Archie lo que es es un pelotero.— dijo medio molesto medio en broma.

—¿Qué? ¿Y eso?— me reí.

—Maya, deja el móvil para cenar.— me ordenó mi tío, y bufé mientras le hacía caso.

—Por nada, da igual.

—No, no, pero dímelo.— Plex se negó mientras masticaba un trozo de lechuga— Joder. Pues otra cosa, ¿tus amigos me conocen? Es que me ha sorprendido que me hayan comentado la mitad pero... Que monos.— sonreí con sinceridad, me había parecido todo un detalle.

—Bueno, mientras estaba en el hospital hablé con algunos, sí. ¿Quien te ha comentado? A ver.

—Em, pues si no recuerdo mal Archie...

—Como no— Plex rodó los ojos, lo que me hizo pensar que tal vez no estaba diciéndolo tanto en broma como yo creía.

Me pregunto que beef tendrá con el británico.

—Un tal Krufy.

—Ah sí, ese es Marc. Un capo.

—Y un niño que se llama Vicky o algo así...

—¿Vicky...?- preguntó, no cayendo— OSTIA ¿PEACKY?— exclamó, riéndose.

—Sí, eso, Peacky.

—¿TE HA COMENTADO EL PUTO PEACKY?— siguió riéndose— Este-este niño yo ya no se como hacerlo, es un caso perdido, de verdad. Primero Francesca, luego Mar Lucas, ahora tú...

—¿Suenas como su padre, quien es?— pregunté con curiosidad, no sabía que Plex y sus amigos habían acogido a un niño.

—Es eso porque lo soy.

—¿Qué?— solté el tenedor.

—Bueno, cuando era joven dejé embarazada a una chica y...

Mi cara se puso pálida.

Plex guardó unos segundos de silencio, y mi corazón empezó a latir acelerado.

—Yoo...— Dani empezó a balbucear, y sentí que se me iba a salir el corazón por la boca.

De repente se formó un silencio incómodo, y es que dani estaba hablando con tanta sinceridad que daba hasta miedo. A Mateo se le había caído la cuchara de la mano, escuchándolo hablar y todo.

—Que no, que es coña, es mi vecino de 15 años.— sentí que podía volver a respirar con normalidad— Lleva juntándose con nosotros desde que nos mudamos y es un maquina, pero a veces hace cosas que rallan mazo.

—Joder que susto.... ¿que hace cosas rallantes?— asintió— ¿Como qué?— pregunté, pero Plex dudó unos segundos y supe que no me diría nada, así que decidí no presionarle y ponerme a comer.

Pasaron  las horas y ni siquiera me había dado cuenta de que mi tío había desaparecido hasta que le vi volver con más latas de cerveza.

—¿Más? Vamos por la tercera ya eh.— dije, y en realidad no es muy coherente teniendo en cuenta que tenía 17 años, es decir, que aún no tenía la edad legal para beber— Esti no lo pongas en el vlog.— bromee, pues Plex tenía la cámara en la mano grabando.

Aún así, en casa del tío Frank esas normas no existían, era lo más parecido a la ciudad sin ley, así que aunque yo no bebía mucha cerveza tenía su permiso para beber si así lo deseaba.

—Maya, hija, no seas agua fiestas, ¿quieres? Yosoygilipollas se va de aquí mañana así que, dentro de lo que cabe, — dijo haciendo referencia a mi accidente— hay que celebrar su última noche aquí.—
Frank explicó mientras se metía la mano en el bolsillo del pantalón y rebuscaba algo haciéndose el interesante, hasta que se sacó una baraja española— ¿Echamos un tute?— alzó las cejas con una sonrisa.

—Pf, ¿un tute?— Plex se rio asombrado mientras le daba un sorbo a su cerveza— Me esperaba cualquier cosa menos eso. la última vez que jugué a uno de estos fue en el pueblo cuando tenía quince años, imagínate, y perdí todo mi dinero.

—Ósea hace tres años.— le corrigió Paconi— Que lo dices como si fueras un viejo en pensión.

—Joder, Paconi, que me había quedao to bien, ya le has quitado la magia— Plex bromeó.

—Va, barájalas Maya.— me las lanzó mi tío y las tomé al vuelo.

Empecé a barajarlas mientras Frank, que estaba al borde de la borrachera, contaba un chiste sin gracia que estaba haciendo a paconi desinflarse de la risa. Mateo estaba sentado con nosotros pero llevaba los cascos puestos y probablemente estaba viendo un vídeo de YouTube, así que no se estaba enterando de absolutamente nada.

—¿Mateo no juega?— preguntó Plex, y yo me encogí de hombros.

—Vale va, empezamos.

Nueve cervezas más tarde y cuatro o cinco rondas de tute, Frank se quedó roncando en el sofá de fuera, Paconi se fue a la habitación que compartía con Plex a dormir, y Mateo se fue a la sala de mi tío donde hacía los streams, así que nos quedamos Plex y yo solos bajo la luz de la luna, oyendo los ruidos de los animales de la noche (con los ronquidos de Frank) y mirando a nuestro alrededor, pensando en todo y a la vez en nada.

—¿Cuántas cervezas te has bebido tú?— le pregunté.

—Diría que nueve, ¿y tú?

—Siete.— le respondí.

—¿No se supone que no debes beber cerveza?

—¿Por ser futbolista?— me reí sin gracia— ¿Qué importa eso ya? Si total.

—No.— me sonrió mirándome— Por ser menor.

—Ah, eso. Ya. Bueno.— me encogí de hombros—
Aquí esas normas no se aplican.

—Ya ya veo ya.— murmuró.

Plex se quedó un rato en silencio, como queriendo decir algo pero no atreviéndose.

—¿Que me quieres decir?— apoyé la cabeza en su hombro.

No se si fue el alcohol o la falta de contacto físico que tenía, pero simplemente me apeteció hacerlo, y él no rechistó.

—No se, que mañana me voy y probablemente no volveremos a vernos en mucho tiempo, por no decir nunca más— quité la cabeza de su hombro y le miré. El corazón me estaba dando un vuelco. Tantos días conviviendo junto a él me había hecho acostumbrarme a su presencia, a sus bromas sin gracia, a su cara de dormido por la mañana... joder, con lo mal que me caía, y ahora no quería que se fuera— ¿Quieres pasemos la última noche juntos? En plan, podemos ver una peli o algo, lo que tú prefieras, o si quieres solo hablamos, a mi me vale. Me has caído muy bien y no quiero irme sin saber algo más de ti, Maya.

Sonreí instintivamente, y miré a Frank, que roncaba en el sofá de la terraza con la boca abierta.

—¿Y qué hacemos con Paconi?— sonreí.

—¿No hay ninguna habitación libre dentro de la casa que podamos usar?— empecé a darle vueltas a la cabeza, y se me ocurrió algo.

—Sí, hay una de invitados donde antes dormía Mateo pero no se que le pasó un día que se asustó y desde entonces no quiere dormir solo, y menos ahí.

—Pues ya está, ahí vamos.— se levantó— Yo te protegeré, no te preocupes. ¿Has visto que brazos?- intentó marcar músculo pero lógicamente no salió nada, ni siquiera un poquito de volumen.

Me reí y él sonrió.

—Vaaale, Dywane Johnson.— lo vacilé.

—Es mi padre ese.— bostezó— Bueno, voy a hablar con Paconi a ver si sigue en esta dimensión, ahora vuelvo.

Observé mientras Plex se alejaba tambaleándose un poco y de repente sentí una sensación extraña dentro de mi.

Me había pedido irnos a un cuarto los dos, sin Frank, ni Paconi, ni Mateo, ni nadie más.

Solo él y yo.

Aunque solo era para ver la tele (tampoco malinterprétenos las cosas) mi corazón empezó a latir con fuerza solo de pensar que iba a pasar un rato a solas con él, y no entendía muy bien porqué, si al fin y al cabo nos conocíamos de una semana y como mucho podíamos considerarnos amigos. En fin, Plex volvió al poco tiempo y me ayudó a levantarme.

Después pasó mi brazo por encima de sus hombros para que pudiera apoyarme en él para subir las escaleras hasta la segunda planta, donde íbamos a dormir.

—Aquí es.— encendí la luz.

—Oye, pues ni tan mal, ¿que opináis chicos?—empezó a grabar con la cámara, grabándome a mi.

—Nono, no pongas eso en el vlog.

—¿Porqué?— se grabó a él riéndose.

—Porque...— me acerqué a él y le susurré en el oído "a ver si van a pensar que tendremos sexo o algo".

Dani se puso rojo como un tomate y ahogó una risa. Supuse que cuando editaran el vídeo harían un corte y pondrían el siguiente para dejar con intriga a sus suscriptores aunque, de nuevo, no soy youtuber así que, ¿qué se yo?

—Ven, te ayudo.

Plex soltó la cámara y se acercó a mi, que estaba sentada en la cama. Me tomó ambas piernas y las recostó sobre el colchón.

—¿Qué quieres ver en la tele?— me preguntó.

—Solo hay un canal en español, ¿te acuerdas?

—¿La 1? Vaya mierda, siempre dan de esas películas antiguas de cine español que solo podrían entretener a mi abuelo.— se quejó, y me hizo gracia.

—Bueno, se me ocurre que entonces podríamos hablar, a no ser que quieras leerme un cuento.—bromeé.

—Uf prefiero lo de hablar eh. No leo desde primaria.— se tumbó a mi lado en la cama, y me miró con la cabeza apoyada en la almohada—Oye, ¿puedo hacerte una pregunta?

—Mhm.— asentí.

—¿Alguna vez te has enamorado?

Joder, ¿a qué viene esto?

—Vaya, empezamos fuerte.

—Sí.— me miró a los ojos, como si quiera encontrar ahí una respuesta— ¿Pero te has enamorado? ¿Sí o no?

Me tomé unos segundos para viajar por los recuerdos de mi cabeza, y algunos chicos me vinieron a la mente, pero ninguno de ellos encajaba con lo que para mi significaba el amor.

Así que después de pensarlo un tiempo, lo miré a los ojos y negué.

—No.

—¿No? ¿Nunca?— preguntó como si no pudiera creérselo.

—Nunca.— me encogí de hombros— ¿Y tú?

Plex puso sus brazos detrás de la cabeza, y se quedó mirando al techo. Luego suspiró, y empezó a hablar flojito, casi en un susurro, pero algo me decía que todo lo que estaba diciendo iba en serio.

—Creo que sí, aunque tampoco salió muy bien.

—¿En serio? ¿Y quien era?— me asombró pensar que detrás de la faceta de Plex, el chico malo que no le importaba lo que dijeran de él y se comportaba en youtube como un cretino, existía un Dani, que alguna vez se había enamorado y que por lo que me estaba diciendo había salido mal parado.

—Se llamaba Francesca.

—¿Italiana?

—Sí. Era amiga de Krufy, ¿te suena no?— asentí, recuerdo haberlo visto en la sección de comentarios de mi nuevo post— Genial, pues al principio era todo por la coña, ¿sabes? Grabar vídeos con Francesca me hacía ganar seguidores, porque nos inventábamos movidas de que si a mi me gustaba ella, pero ella tonteaba con Peacky, y no se que más.— mientras lo escuchaba, no podía evitar pensar en las tonterías que eran capaz de hacer los youtubers con tal de un poco de fama. Desde fingir una relación hasta adoptar una capibara... en fin, así va el mundo— De hecho, ella salía ganando también, porque una parte del dinero se lo llevaban ella y su equipo para italia, y también creció mucho en Instagram y Tiktok. Nls hacíamos los misteriosos y a la gente le gustaba. Pero entonces...

—Te enamoraste, ¿no?

Ese fue el fallo, no, ¿Dani?

—Sí, aparecieron los sentimientos. Y se fue todo a la mierda. Me peleé con Peacky, luego me peleé con Archie, Krufy estuvo sin hablarme mucho tiempo, y bueno, tuve movida hasta con ella, imagínate. Estuve comportándome seis meses como un puto inútil. Francesca ya no venía a casa, ni siquiera me contestaba los mensajes, y me di cuenta de que ya no estaba para grabar vídeos, ni siquiera para ser mi amiga. Fue por eso que, intentando mantener los números, adopté una capibara, saqué una canción y bueno, el resto ya lo sabes.

—Espera, espera, espera.— me miró confundido— ¿QUE SACASTE UNA CANCIÓN?

—¿Me estás diciendo que, de toda la mierda que te he soltado, te has quedado solo con eso?— me preguntó exagerando, a lo que yo asentí— En fin, me llaman plex mami.— se encogió de hombros y yo no lo entendí, hasta que tomó la cámara para grabar mi reacción y puso la canción.

"Me llaman Plex mami, ya te olvide honey. Tú me dejaste y ahora estoy flexeando por Miami. To' los días son party, montao en un Ferrari. Empezamos desde abajo pero es que, ya no para la cuenta, todo ha dado la vuelta."

—Shhh bájala que Frank va a despertarse.— empecé a reírme ante la cara de susto que puso Plex, y en cuanto quitó la canción le pregunté— ¿Qué obsesión tenéis los youtubers con sacar canciones? El único al que le ha salido bien es a Jaden Hossler, y tampoco lo hace demasiado bien.

A lo que Plex respondió grabando su cara.

—Parece ser que no le gustó amigos.— dijo en un tono divertido parecido al que usaba el cerdito de los Looney Tunes y se encogió de hombros, haciendo que me riera.

Luego apagó la cámara, y volvimos a nuestra charla.

—Siento que te pasara eso. Yo he estado en una situación parecida y, bueno, sé que no es fácil.— me sinceré. Plex se apoyó la cabeza en su mano acomodándose, como invitándome a seguir y mostrarme que me estaba escuchando— Quieres que te lo cuente, ¿no?— pregunté obvia.

—Ahá.— asintió.

—Bueno, no es para tanto, y diría que no es nada comparado con lo tuyo, porque ni de coña acabé adoptando un elefante o algo así.

—Que graciosa.— me hizo burla.

—No, pero ahora enserio. Sí me pasó algo, aunque tampoco es para tanto.— bostecé, empezaba a tener un poco de sueño— Antes de jugar en el Chelsea vivía en Madrid, así que estuve un tiempo en el Atleti, y a veces entrenábamos junto al equipo masculino. Allí conocí a un chico de la cantera, y al principio no congeniábamos muy bien, pero poco a poco nos hicimos muy cercanos, hasta al punto de que nos escondíamos entre entreno y entreno para besarnos y toda esa movida.— sonreí, un poco nostálgica— Luego estuve un tiempo sin jugar a fútbol por unos problemas personales, caí enferma por una despresión y al principio él se preocupaba por mi. Me visitaba muchas veces, intentaba sacarme de casa y seguíamos teniendo citas y esas cosas románticas. Pero entonces un día, mientras yo estaba en casa llorando por uno de los bajones que tanto tenía, él se fue de fiesta y bueno...— respiré hondo, como si me diera vergüenza admitirlo en voz alta— Se lío con una amiga mía, a la que consideré algún día como la mejor.

—Ostia.

—Lo sé, ¿heavy eh?— me reí.

—Pues sí, la verdad, lo siento Maya.

—Tranqui, sí ya está olvidadísimo.— intenté sonreír... pero era mentira.

De vez en cuando él me venía a la cabeza, cuando estaba sola, cuando miraba las estrellas, cuando intentaba dormir pero no podía... y es que me preguntaba una y otra vez que es lo que yo había hecho mal.

¿Tal vez era mi amiga mejor que yo?

¿Era más guapa, más lista, más amable...?

¿O es que simplemente se había cansado de mi y buscaba una nueva diversión?

Fuera como fuese, Javi me había roto el corazón y por más vueltas que le diese eso era así y ya está.

Después de tres años he vuelto a tener cosas pasajeras con algunos chicos, pero nada como lo que tuve con él.

—¿Maya estás bien? Te has quedado como colgada, bro, me ha dado algo de miedo.

—Nono.— me reí— Perdóname, estaba pensando.— forcé una sonrisa.

—¿Y ya está? ¿No recuerdas a nadie más?— negué— Va, seguro que con lo guapa que eres seguro que alguien más cayó.

—Alto ahí, ¿Yo soy Plex me acaba de llamar guapa?- sonreí de lado, vacilandolo. Pero en realidad me había gustado- Debo de estar soñando.

—Yo creo que sí eh, creo que oyes voces.

—Ya, seguro. Yo lo he oído muy bien.— me reí. en cuanto se hizo un silencio incómodo, empecé a notar una sensación extraña por dentro y entonces tomé una decisión que o bien podía mejorar las cosas o, de lo contrario, romper toda la confianza que habíamos construido...—Pues yo también creo que eres muy guapo, y no va en coña.

—¿Sí?

—Pues sí, ¿tú no lo crees?

—No me lo suelen decir, Maya, estoy a falta de cariño femenino desde hace tiempo.— bromeó.

—Eso puede arreglarse.

—¿Qué?— me dijo.

Joder, putos pensamientos intrusivos. ¿Debo seguir o me echo para atrás?

—No sé, creo que puedo ayudarte. Llevo contigo cinco días ya, y no mentiré. Hay algo de ti que me llama mucho la atención.

—¿Me estás vacilando?— se acercó un poco a mi.

—No.— negué, con una sonrisa tonta— A menos que tú quieras que te vacile.

—No, no quiero.— dijo en un susurro, mientras me miraba a los ojos.

—¿No?— me acerqué un poco más a él, y negó, un poco embobado.

Se había quedado totalmente ido, y en cuanto vi que su mirada bajaba a mis labios, supe que en cuanto tomé la decisión de lanzarme, estaba en lo correcto. Nos acercamos poco a poco y enseguida unimos nuestros labios. Plex me tomó de la mejilla para intensificar el beso, su tacto era cálido y sus labios se movían a la perfección con los míos.

El momento era perfecto: los dos solos, sin que nadie nos molestase y después de confesar algunos de nuestros secretos, para conocernos mejor.

Sus besos eran apasionados, delicados y en algún momento incluso salvajes, y nunca había conocido a nadie que besara de esta forma, que sintiera tanto cada beso... quise estar más junto a él, no romper nunca la unión de nuestras bocas, pero yo estaba en una mala posición por la pierna y era un poco difícil acomodarme. Plex se recostó con la espalda en el marco de la cama para permitirme subirme encima, pero mientras nos besábamos estaba intentando sentarme a ahorcadas y se me estaba haciendo imposible.

—Joder, me cargo en el puto yeso.— susurré sobre sus labios ahora rojizos, haciendo que Plex sonriera ampliamente, mostrando sus perfectos y blancos dientes.

Me estaba dando cuenta de lo mucho que me gustaba su sonrisa.

—Jajaja, déjalo, Maya, ya está bien.— me susurró— No vaya a ser que te hagas daño en la otra rodilla.

—No llames al mal tiempo, anda.— me recosté en mi almohada, cerca de él— ¿Quieres que vayamos a dormir ya?

—La verdad es que estoy un poco reventado.— se tumbó a mi lado.

Me recosté en la cama y vi que me miraba.

—¿Qué pasa?— me reí.

—¿Puedo? — preguntó, abrazándome a la altura de mi cintura.

Asentí decidida y él se aferró a mi con cuidado, rodeándome por la cintura y apoyando su cabeza en mi pecho.

—Buenas noches Maya.— apagó la luz.

—Hasta mañana Plex.

🦦

VAMONOSSS
PRIMER BESO CHICOS💪🏼💪🏼💪🏼
ha tardado un poco pero ha llegado hahaha como prometí que habría cap hoy está un poco regular pero mañana lo edito sin falta y corrijo errores
🫶🏼🫶🏼🫶🏼

Capítulo editado.