♦Capítulo IV♦
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"Tortura"
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-- comenzaremos con algo suave -- Kill esboza una sonrisa maliciosa.
Ataron a las tres chicas, cada una en una camilla, de manos y piernas, con cadenas que en su interior tenían púas, y les vendaron los ojos.
-- ~hora de la tortura~ -- dice Bill en tono cantarín.
«De tín marin de do pingüe»
Empezaron tapándoles la nariz y a través de un pequeño tubo que ingresaron por su boca les hicieron ingerir agua, cada vez más en grandes cantidades. Aunque parezca inocente es un acto sumamente cruel pues al no ver nada el cerebro sufre una sensación de ahogamiento y claustrofobia similar a la que se produciría bajo el líquido elemento.
Las tres chicas tenían convulsiones y temblores, eso sin contar que su garganta dolía por el tubo y su estómago se estaba hinchando por la cantidad de agua que estaban ingiriendo en contra de su voluntad, pues si no lo hacían no podrían respirar.
«Tomó a la niña de los tobillos»
-- creo que es suficiente -- menciona Will frunciendo el ceño.
Kill se gira a verlo -- ¿Disculpa? -- pregunta con una venita saltando en su frente, odiaba que le dieran órdenes.
Will se sobresaltó un poco -- digo que si siguen así terminarán matándolas y ya no podrán imponerles más torturas.
-- no seas estúpido, podemos revivirlas, imbécil -- interviene el rubio.
El peliazul soltó un suspiro.
-- ¿Qué tal si les aumentamos unos electrochoques? -- pregunta Bill esbozando una sonrisa cínica.
-- oh sí -- Kill suelta una carcajada.
«Si grita no la dejes ir»
~[•••]~
-- bien, otra de las torturas -- dice Will observando a las chicas las cuales no dejaban de temblar.
-- ¿Eso es todo lo que tienen? -- pregunta Mabel Gleeful jadeando.
-- no -- dice Bill frunciendo el ceño, chasqueado los dedos e invocando las famosas "doncellas de hierro".
-- algunos dicen que los clavos traspasan el cuerpo, pero aquí no se aplicará eso, así que... adelante -- Kill hace una reverencia y con un ademán envía a las tres castañas adentro del "sarcófago".
Mabel podía sentir como los clavos se clavaban por todo su cuerpo y sin poder aguantar más soltó un grito de dolor.
«De tín marin de do pingüe»
Más torturas continuaron después de esa, entre ellas "La tortura de la zarpa de gato", "El tormento de la rata", "La decapitación", "La quema en hoguera", "El ahorcamiento", "La rueda", "La hija del carroñero" entre otras torturas mucho más dolorosas, siempre que no soportaban más y morían Bill las volvía a revivir.
Cada día era una tortura nueva y mucho más dolorosa que la anterior.
~[•Un año después•]~
-- ¡¿Cómo es eso de que archivaron el caso de mi hermana?! -- pregunta un castaño alarmado.
-- Dipper, cálmate, sé que es difícil de aceptar pero no hay ninguna pista y tu hermana lleva desaparecida un año, simplemente ya no hay nada que ellos puedan hacer -- Ford intentaba tranquilizarlo.
-- es mi hermana ¡No pueden hacer eso! -- Dipper se negaba a aceptarlo.
-- creo que es hora de que lo superes -- dice Stan colocando sus manos en los hombros de Dipper a modo de consuelo.
El castaño niega con la cabeza y se aleja -- ¡No! No me importa si la policía no me ayuda, haré lo que sea con tal de recuperar a mi hermana.
Un portal se abre frente a ellos, llamando su atención. Del portal salieron dos castaños similares a Dipper.
-- pero ¿Qué? -- Dipper abrió en grande sus ojos al igual que sus tíos.
-- ugg, ahora a explicar -- el castaño de ojos cian rodó los ojos molesto.
~[•••]~
Mabel corría por unos pasillos oscuros y lúgubres sin detenerse hasta que llegó a una puerta. Sonrió y cuando estaba por coger la manija de la puerta una mano la detuvo.
-- ¿A dónde crees que vas, estrella fugaz? -- pregunta un rubio en un tono profundo.
-- te estaba buscando -- menciona la castaña con una sonrisa mientras se voltea y lo abraza por el cuello.
«Tu madre dijo que escogieras a la mejor niña»
-- ¿Ah sí? ¿Y para qué? -- pregunta Bill en un tono divertido alzando una ceja.
-- ya lo sabes -- responde Mabel con una sonrisa coqueta antes de envolver sus piernas en la cintura del demonio y pasar sus manos por detrás de su cabeza, jugando con sus mechones rubios.
«Y esa soy yo»
Bill sonríe perversamente y coloca sus manos en las nalgas de Mabel, apretándolas un poco, provocando un gemido bajo por parte de la castaña.
Unos gemidos provenientes de una de las habitaciones se escucharon, llamando la atención de la pareja.
-- cuando no, Kill y Mabel Fight -- murmura Bill frunciendo el ceño por arruinar el momento.
Mabel suelta una risita y se baja de un salto del rubio, sorprendiéndolo, para luego irse corriendo.
«Corriendo a través del estacionamiento»
-- con que quieres jugar, ¿Eh? -- menciona Bill en un susurro para luego esbozar una sonrisa maliciosa y seguir a la castaña, perdiéndose entre los pasillos.
«Me estaba persiguiendo y no parará»
Unos momentos después Mabel sintió unas manos envolverse en su cintura, deteniéndola.
-- te atrapé -- susurra Bill en su oído antes de morderlo suavemente.
«Tocada, tú la llevas»
-- vamos a una habitación -- susurró Mabel en un gemido bajo, antes de ser cargada por el rubio y dirigirse la habitación más cercana.
«Tocada, tocada; tú la llevas»
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CONTINUARÁ...
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Me llegó la inspiración y así es como quedó este capítulo, espero que les haya gustado.
Mi mamá ha enfermado y estoy cuidándola, tiene fiebre, no sabía que hacer hasta que recordé un fic de SrtaPotatoHard el cual decía que para bajar la fiebre teníamos que mojar el cuerpo con un paño. No tenía paños así que eché agua en una bolsa y quedó fría. Ya le bajó la fiebre, está tibia, me alegra que se recupere.
Lamento que el capítulo sea corto.
Pero recuerden :
Nada es lo que parece, no confíes en nadie. ¡Compra diamantes!
¡Adiós!
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