La puerta de la Yurta principal se abrió, una mujer atractiva y joven de unos cuarenta años ingresó, a su lado sus sirvientes, Kim Seokjin y Kim Namjoon, ella miró a su hijo menor y enarcó una ceja. Detrás de aquellos lideres, estaba Jung Hoseok y la esposa de Namjoon, quien lo acompañaba

—Madre—susurró Taehyung que se acercó a ella, tomó la mano de su progenitora, las junto y ofreció un beso sobre sus palmas—, bienvenida.

—Me enteré de lo sucedido—comentó ella de un solo—, tomaste a una segunda pareja, bastante rápido para los pocos meses que llevas casado con Saeron ¿Se puede saber qué ha sucedido?—notó el rostro serió de su hijo, se veía tenso más de lo usual, por lo cual comprendió que el alfa no deseba hablar al respecto, suspiró—,¿Cúando te casas?

—Dentro de dos días.

—Vaya—exclamó Kim Seokjin sorprendido—parece que vamos rompiendo nuestros records, eres el que más rápido ha hecho una boda ¿Acaso preñaste a alguien?

—No aún—exclamó con suma tranquilidad aquel alfa y la señora Kim al escuchar aquello, le dió un zape en la cabeza—¿Te volviste loco?—exclamó ella—¿Qué hay de Saeron, cómo se ha tomado todo esto?

—Me imagino que lo tomó de maravilla—exclamó Kim Seokjin con una sonrisa ladina.

—Jin—sentenció la señora Kim—, de las personas menos inesperadas, tú eras el último en la lista, me lo imaginaba de Seokjin que hizo la boda en una semana ¿Pero en dos días? como sea, no soy nadie para ir en una decisión que ya tomaste. Iré a ver al prometido—comentó ella y se giró sobre sus talones caminando con elegancia— ¡Chehjaru, dame paciencia!

La mujer salió de la Yurta principal junto a sus servidores, Jin solo le hizo un saludo a su hermano para seguir a su madre y tomar la mano de su esposo para ayudarlo a sostenerse ya que tenía miedo que su omega tropezara y tuvieran un accidente con respecto al bebé. Kim Namjoon contempló a su hermano mayor, hizo un gesto a su esposa para que saliera de aquel lugar ya que deseaba conversar en privado con ese líder.

La señora Kim fue guiada por Eunha, la cual mantenía una leve sonrisa, ya que estaba emocionada por la boda que se llevaría, aunque bueno, algunas personas no estaban de acuerdo con esa situación, una de ellas era su ama que cuando escuchó lo de la boda, rompió a llorar y tirar todo lo del cuarto ante la molestia, rompiendo unos jarrones, bajo la mirada de Kim Taehyung, quien estaba decidido a llevar aquel matrimonio.

Así que desde esa noche, metieron a Min Yoongi a la Yurta vacía, donde estaría dos días más hasta la noche de la fiesta de bodas, ya que estaba prohibido que los futuros esposos se vieran días antes de la boda. Ella se sentía orgullosa, sabía que Yoongi no se quedaría como un simple esclavo con ese bello rostro, además que desde que entró a esa manada, notó que los ojos de su amo se perdían algunas veces en el omega.

Los cuatros se detuvieron enfrente de la Yurta donde Yoongi se encontraba, la señora Kim respiró con profundidad, agarró la mano de su hijo para sostenerse ya que los nervios le estaban fallando.

—Jin ¿Conoces ya este chico?

—Si, es un esclavo que mi hermano tenía—afirmó aquel alfa con mucha calma—. Desde un principio Saeron lo trataba mal, ella ya sospechaba que le quitarían el puesto.

—Por favor, dime que por lo menos es bonito—agregó ella. Jin solo afirmó con lentitud mientras Hoseok sonrió en bajo por la divertida situación que se estaba generando—. Saeron debe estar muy enojada, su padre y el tuyo fueron quienes los comprometieron desde pequeños, por mi, le hubiera entregado otra esposa a mi hijo.

La señora Kim abrió la puerta, viendo a un chico que se encontraba con un velo blanco y largo cubierto, frunció el ceño y le hizo un gesto a sus ayudantes para que alzaran el velo. Yoongi subió su mirada, en la verdad que encerrado no tenía mucho que hacer y ese dia le dijeron que le tocaría recibir visitas para ser bendecido; pero esas personas que ingresaron serían las primeras, ya que nadie más de la manada, le había dado algún regalo como era costumbre.

Su velo fue subido y se estremeció un poco por el temor, contemplando a una joven mujer que parecía ser una poderosa omega, reconoció al hermano de Kim Taehyung y al joven líder omega Jung Hoseok. La mujer solo enarcó una ceja, haciendo un gesto a sus ayudantes, que dejaron caer de nuevo el velo con delicadeza sobre el chico y salieron, cerrando la puerta detrás suyo.

La señora Kim se giró sobre sus talones y enarcó ambas cejas, vio a su hijo.

—Ahora entiendo todo—comentó de un solo—. Gracias a la diosa Ishtar que hizo a mi hijo pendejo y así tomara por fin un omega bonito.

—Pensé que te agradaba Saeron—comentó Jin sorprendido.

—Le está dando problemas a mi hijo últimamente, necesita que alguien más la ponga en su lugar y le baje el ego, además que se atrevió amenazarte a ti y mi nieto. Será la esposa de un líder, pero yo soy la madre de él y mi palabra también será escuchada—Sirvientes, taiganme los regalos.

—Sí señora—afirmaron aquellas personas y se alejaron a pasos apresurados.

—Madre—interrumpió Hoseok viendo a la señora Kim, la cual le ofreció una sonrisa—. Una vez que vine, pude ver como ese joven tenía sus manos muy lastimadas, todo por culpa de la chica Saeron. Ahora que contraerá matrimonio con el líder, estoy seguro que ella no lo dejará en paz, por eso pienso dejarle a mis dos mejores esclavos para que puedan atenderlo, ellos ya tienen entrenamiento.

—Tienes razón—ella hizo una mueca pensativa—. El chico necesitará ayuda, dale de regalos tus esclavos, elige a los mejores para que en el futuro lo atiendan. Ese chico llevará en su vientre a futuros alfas y omegas, harán que la descendencia de mi hijo crezca.

Yoongi apenas podía escuchar de lo que estaban hablando allá afuera, estaba sentado sobre sus piernas, recordando aquellos ojos amarillos y como su amo lo tomó a la fuerza y se apareó con él. Si el tipo lo hubiera rechazado después de hacer un acto así, él no hubiera tenido valor para vivir siguiendo y se hubiera matado a como diera o dejaría que la esposa de él cortara su yugular.

Miró alrededor con desgano, la situación no era favorecedora. Tenía ganas de escapar en ese preciso momento; pero su cuerpo no se movía, estaba paralizado del terror. Cubrió su boca al sentir un poco de asco, se sentía enfermo y cansado.

La puerta de aquella Yurta se abrió, ingresando de nuevo aquella señora, junto con Seokjin y Hoseok, ellos hicieron un saludo de respeto hacía el omega, que aún tenía aquel velo blanco semi-transparente sobre sí. Ya que ese dia era cuando purificarían su cuerpo, la chamán le dijo que era usado para las mujeres vírgenes, aunque si bien él ya no lo era, nadie sabía la verdadera razón por la cual Kim Taehyung se estaba casando con él. Muchos pensaban que simplemente se le antojó y al ser el líder alfa, podía hacer lo que se le antojara, otros murmuraban que solo era un simple capricho del líder y ya.

—Soy la señora Kim, antigua líder de esta manada Madre, primera esposa del líder antiguo, madre de dos hijos quienes son líderes: Kim Seokjin y Kim Taehyung. He venido a darte mi bendición para tu matrimonio. Traje unos regalos para tí.

La puerta se volvió a abrir, ingresando dos jóvenes, uno tenía una caja y otro una bandeja de plata que tenía una tela encima.

—Gracias, Madre Kim—comentó el omega tratando de no hacer notar su nerviosismo. El primer chico se acercó e hincó frente al omega, abrió la caja, dejando ver varias monedas de oro. Lo ojos de Yoongi se abrieron de la sorpresa, si fuera esclavo, con ese dinero compraría su libertad; pero eso ya no valía ya que se convertiría en el segundo esposo de un líder de manada y con una marca en su cuello, ya no había escapatoria.

—Estas monedas de oro representan parte de las riquezas que obtendras, esto es tuyo para que compre lo que desees. Además de eso—la otra chica se acercó e hincó frente a Yoongi—, compré esta tela de seda para que te hagas un hermoso vestido digno para tí, ya que te convertirás en el esposo de un líder.

—Muchas gracias, Madre Kim—susurró Yoongi que hizo una reverencia a aquella mujer, contempló a los otros dos. Hoseok ofreció una sonrisa, se puso al lado de la señora Kim—Joven Jung.

—Mi regalo es para que puedan servirte—el chico hizo un gesto y dos omegas hombres se le acercaron, haciendo una reverencia al chico de cabellos blancos—. Son mis dos mejores sirvientes, ellos ahora te pertenecen y atenderán, velarán por tus necesidades. Necesitarás de mucho apoyo, además de eso, quiero que sepas que cuentas con mi ayuda y amistad para lo que desees, yo estaré pendiente de tí.

—Gracias,Lider omega Jung—comentó Yoongi que hizo una leve reverencia como agradecimiento, contempló aquellos omegas un tanto pensativo.

—No entran en celo—comentó de un solo Hoseok ofreciendo una sonrisa—. No tienen útero—Yoongi se estremeció al escuchar aquello, extrañado—. A algunos esclavos y esclavas le quitan sus partes reproductivas, a los alfas los convierten en delta y se les castra y los omegas se les quita el útero para que no entren en celo y no haya inconvenientes. Cuando llegaron a mí, ya les habían extirpado sus úteros...si hubieran estado antes conmigo, no hubiera permitido esa barbarie.

—Ya que eras esclavo, tuviste suerte de llegar aquí—comentó Jin que puso sus manos tras la espalda—, en nuestra manada está prohibido algo así, ya que consideramos que los esclavos si compran su libertad, son libres de hacer una familia. En otras manadas no hubieras corrido con suerte.

Yoongi por un momento se sintió agradecido de haber llegado a ese lugar, aunque eso no le quitaba que la situación en la que se mantenía le agradara.

—Mi regalo será hacerle la Yurta en la que vivirá—comentó Jin con una leve sonrisa—, será grande y bonita, no tendrá nada que envidiarle a la principal.

—Gracias por sus regalos y bendiciones–afirmó Yoongi haciendo de nuevo una reverencia.

—Que Chehjaru te bendiga, nos vemos en la boda—comentó la señora Kim.

Los tres salieron de aquel cuarto, quedando los nuevos sirvientes de Yoongi, quienes dirigieron su mirada en el omega, esperando alguna orden, además de eso que empezarían a conocer si su nuevo amo, sería tan amable como el líder Hoseok, aunque anteriormente ya lo habían conocido y agradecian que era un chico agradable por igual.

Pasado unos minutos, en que aquellos sirvientes, empezaron hacer la comida para el omega, la puerta se abrió, ingresando Saeron junto a su madre y hermanas, la chica rió con amargura viendo aquel velo blanco, se acercó a Yoongi y se lo arrebató hasta hacerlo a un lado.

—¿En serio piensas que puedes usar ese velo? ya no eres puro, mi esposo solo se casa contigo porque es demasiado bueno, pero deberías ser desprestigiado y castigado por seducirlo y acostarte con él.—los sirvientes subieron su rostro al escuchar aquello, uno de ellos dejó darle vuelta a la sopa, ya que en esos días, el omega debía comer solo sopas y comidas suaves—. ¿Ya no te atreves a verme a los ojos? ¡Te estoy hablando!

Yoongi subió con lentitud su rostro, mientras la hermana mayor de Saeron cerraba las puertas.

—Ama Saeron...

—¿Tienes el descaro de decirme ama, qué maldito esclavo traiciona a su ama? yo sabía que deseabas de forma lujuriosa a mi hombre.—uno de los sirvientes se levantó y se puso frente al chico Min—¿Y tú quién eres?

—Señorita, disculpe que la interrumpe; pero en estos días, está prohibido darle sentimientos negativos al novio, solo debe llenarse de bendiciones y regalos, si no viene a eso. Le pediré que se retire.

—¿Pero quién te has creído?—preguntó Saeron viendo de pie a cabeza a aquel esclavo—¿No eres tú uno de los esclavos que estaba con ese omega líder Hoseok?

—Soy un regalo para el amo Min, sirvo a él. Si no vienen a dar sus bendición o regalo, le pediré que se retiren—Saeron estaba lista para darle una bofetada aquel esclavo, cuando el chico la detuvo a tiempo con una ceja enarcada, Yoongi se sobresaltó al darse cuenta de que la situación se ponía tensa—¿Está segura que desea golpear a un sirviente que pertenece ahora al segundo esposo del líder de esta manada? hacer algo tan descarado en el los dias de gracia, es irrespetuoso, le estaría faltando también el respeto al líder Kim Taehyung.

Yoongi miraba maravillado aquel omega, notando el valor que este tenía, el otro sirviente se acercó a su nuevo amo y lo ayudó a levantarse para alejarlo de esa situación y protegerlo. La puerta de aquel lugar se abrió, ingresando el alfa Kim Jaejoong junto a Eunbi y Hyuna, ellos fruncieron el ceño al ver la pose de Saeron, quien bajó sus manos y suspiró con pesadez ante aquella inesperada llegada.

—Venimos a dar nuestra bendiciones y regalo al joven Min...¡Oh Saeron!—dijo Jaejoong que hizo una risilla ladina—¿También estás tan emocionada como yo qué has venido hasta aquí?—el alfa se puso al lado de aquella líder—¿O ya está dando problemas?—el la miró con un rostro serio—, quién iba decirlo, que Taehyung tomaría a ese chico.

Saeron le miró con ojos cargados de furia y salió del lugar junto con su madre y hermanas, Eunbi las siguió con la mirada hasta que ellas salieron y cerró la puerta tras sí. Hyuna tomó el velo que estaba en el suelo y se acercó al omega, lo acomodó con mucho cuidado ofreciendo una sonrisa dulce.

—Joven Min, venimos a dar nuestra bendición y regalos—el sirviente que había defendido a Yoongi se puso a la izquierda mientras el otro se mantenía a la derecha, ambos ayudaron a su nuevo amo a sentarse sobre el cojín con mucho cuidado.

—Gracias Hyuna—susurró Yoongi, aquellos tres alfas hicieron un saludo de reverencia y respeto, luego se levantaron.

—Joven Min—habló Eunbi con una gran sonrisa—. Si necesita una espada para ser protegido, yo le ofrezco la mía, mi lealtad es hacía mi líder, eso incluye protegerlo por igual y respetarlo—ella hizo otra reverencia—. No tengo un regalo grande para dar más que mi lealtad—comentó penosa.

—Gracias Eunbi—sonrió un poco Yoongi al escuchar aquellas palabras.

—Omega Min—habló ahora Hyuna que sacó una pequeña daga decorada de joyas y oro—. Le regalo esto para su protección, será alguien importante, asi que es necesario que lleve una arma digna de usted, si no sabe usarla, no se preocupe. Le daré clases.—Yoongi afirmó; pero no agarró aquel regalo, ya que debían ser sus sirvientes por ley que tomarian los regalos, ya que si uno de ellos estaba envenenado, no matarían al chico.

La mirada se posicionó en Jaejoong, quien carraspeó y desvió la mirada.

—Se que no hemos tenido un buen comienzo—comentó aquel alfa que enfocó su mirada en el omega—, pero prefiero inclinarme y derramar mi espada de sangre por usted que por esa chica Saeron. Mi regalo es el siguiente—el alfa dio dos palmadas, la puerta de aquella Yurta se abrió, un hermoso caballo albino ingreso, dejando a la vista sus bellos ojos celestes. Yoongi se levantó de la sorpresa al ver aquel precioso animal—, busqué uno que fuera digno para usted.

Yoongi se acercó al animal con ayuda de sus sirvientes, el omega acarició el cuello de su regalo, en ese momento no pudo evitar sonreír, olvidando su penosa situación.

—Es un hermoso regalo, gracias...alfa Jaejoong—el alfa solo hinchó el pecho con orgullo haciendo un: "Hum" y desviando la mirada. Yoongi rió un poco divertido por la actitud del alfa.

Aparecieron dos mujeres mayores que contemplaron al chico de pie a cabeza, los alfas fruncieron el ceño al reconocer aquellas vestimentas, sabían que eran aconsejadoras del matrimonio, por lo que debían irse ya que la siguiente reunión que tendría el omega, era muy privada. Ellos se despidieron con respeto y se llevaron al animal consigo. Yoongi se fue a sentar sobre el cojín, la puerta se cerró y esas mujeres mayor visualizaron alrededor para sentarse cada una en su cojín.

—Vaya, es cierto que el líder tomó a un esclavo como esposo—comentó una de las ancianas—, que desprestigió. Escucha bien, somos consejeras y nuestro deber es enseñarle como hará feliz a su esposo, además de explicarte otras cosas.

—Eres la segunda pareja, así que escucha esto claro: No tienes derecho a rogar por amor. Solo la esposa oficial puede hacerlo. Cuando hagan el amor, es decir, estén en el acto de reproducirse, ella puede sentir placer a la hora de consumar el matrimonio; pero tú no.

Yoongi sintió un escalofrío que recorrió su cuerpo, presentía que esas mujeres no estaban muy contentas con el hecho de que contrajera matrimonio con el líder Kim.

—Tú solo debes callarte y dejar que él haga lo suyo—siguió la más joven—.No puedes ni debes ser una molestia para el líder, con eso me refiero a que tus sentimientos te los guardas y callas. El no debe complicarse más la vida por cosas tan tontas, tiene tierras que gobernar y tú servirás como su concubino, le darás sus hijos.

—A la hora del acto coital, cuando estén teniendo sexo—comentó la mas anciana—,al ser el concubino, tienes que ponerte en cuatro y darle la espalda, no puedes verlo a los ojos en ese momento, ese derecho solo lo tiene la primera esposa. No puedes negarte a ninguna orden de tu esposo, él está sobre tí, también la primera esposa, debes obedecerla por igual.

—¿Entendiste?—preguntó con tono pesado aquella anciana que se levantó del cojín.

—Si, señoras—afirmó Yoongi con su mirada muy baja y deseos de llorar.

Dicho aquellas las mujeres se inclinaron, al despedirse salieron de aquella Yurta, dejando a un Min Yoongi cargado de tensión, en resumen: "Aún sigues siendo nadie".

Ah, con que esa era ahora su vida.

Aquellas mujeres al salir se encontraron a lo lejos con la líder de la manada, ella les ofreció una suave sonrisa y les saludó con respeto, ambas mujeres le correspondieron, la más anciana tomó la manos de su sobrina.

—Mi niña, acabo de venir de esa Yurta donde se encuentra la futura pareja del líder. Lo siento tanto por tí—notó que Saeron quería llorar—, oh cielo...debes ser fuerte. Recuerda que tú aún tienes poder sobre ese chico, no flaquees que se te crió como la Gran esposa del líder de esta manada.

—Además—agregó su otra tía por parte de papá—, mientras tu tengas primero al hijo del líder, nadie podrá quitarte el puesto, tu hijo se convertirá en tu soporte y herramienta.

—Tías, ese omega engañó a mi esposo—susurró Saeron, ella en bajo tratando de contener sus lágrimas—¡No pude quitarlo de encima de él, lo embrujó! es descendiente de esas mujeres Ghawazis, lo embrujó con ese baile indecoroso que hizo y-...

—Saeron, mantén la cordura—ordenó su tía triste de ver a su sobrina en ese estado tan deplorable—, aún no has perdido esta batalla, ese chico no es nada comparado contigo. Tu esposo habrá sido embrujado por ese vil ser, pero es algo rompible, el te quiere a tí, desde pequeño han estado juntos y ese tipo no quitará ese tiempo que le has dedicado.

Ellas siguieron dando consejos a su sobrina, hasta que terminaron y se alejaron en sus caballos de aquella aldea. Kim Taehyung solo contempló a lo lejos a su esposa, notando el rostro de preocupación y tensión, suspiró desviando la mirada. Namjoon se puso a su lado con las manos tras la espalda.

—Me enteré que tu esposa trató de quitarse la vida cuando le dijiste que te casarías con ese omega.

—Si, no es algo de lo que me pueda sentir orgulloso.

—Sabes muy bien que papá siempre supo separar su vida matrimonial. Mi madre y tu madre nunca le complicaron nada, así que debes ser rígido también y controlate. Saeron se siente humillada, apenas tienen dos meses de casados y tú agarraste un omega—habló Namjoon un poco apenado por aquella chica, contempló a su hermano menor—, ella es tu esposa legítima Taehyung, ha estado contigo en las buenas y las malas, dedicó toda su vida para tí, debes ser agradecido.

—Suena extraño cuando eres mi medio-hermano e hijo de la segunda esposa de mi padre—comentó aquel líder.

—Padre supo como mantenernos alejados siempre de los problemas, mi madre nunca le dio complicaciones y se comportó, respetó a la primera esposa, fue una buena mujer. Así que espero que tú también sepas manejar tu vida privada. Controla a Saeron y al otro chico y no olvides a la esposa que Chehjaru te ofreció. Ella te ama.

Taehyung suspiró abatido, lo sabía. Que Saeron lo ama con profundidad, aunque también ese tipo de intensidad, la hacía cometer ciertos actos que no le agradaban mucho. Él nunca le había levantado la mano a alguien y sentía que se estaba volviendo loco desde que ese chico Min llegó.La golpeó y ahora la había humillado, eso no podía seguir así, la manada lo verían como un líder descarado que no amaba y respetaba a la esposa que los dioses eligieron.Eso sería faltarles el respeto a su Dios y traer desgracias futuras. Sus ojos se enfocaron en dirección de la Yurta donde habían metido a Yoongi y que vería hasta dentro de dos días.

—No te preocupes, pondré reglas—comentó con una ceja enarcada y se cruzó de brazos.

—Espero que así sea, enorgullece a nuestro difunto padre.

Dicho aquello el alfa se alejó y su esposa lo siguió en silencio. Kim Taehyung contempló de nuevo a Saeron, ella le miró por unos segundos hasta que desvió su mirada

"¿Cómo podría llevar la paz cuando su corazón se sentía en un caos y guerra de sentimientos?"

Wenas a todos, gracias por su apoyo en este fanfic, veo que cada vez llegan mas solecitos y Lunitas a leer y me hace muy feliz~

Ya no actualizaré el viernes, porque lo hice hoy ¡Muchos besitos en sus mejillitas!

¡Recuerden el lema de la familia: Somos Sol que calienta; pero no quema!