[18]

Yoongi se encontraba en el jardin de su palacio, haciendo un pañuelo en mano, Mijoo solo lo ayudaba henebrando la aguja para que facilitar más su trabajo, era una bonita mañana, y ya había actividad en aquel enorme lugar, el omega escuchó la puerta del cuarto de su esposo abrirse, el rubio se giró para contemplarlo desde su lugar de descanso, viendo al alfa bien arreglado y listo para ir algún lugar, el mayor se levantó de su asiento y lo fue alcanzar para ver si podía hacer compañía.

—¿A dónde vas? son horas tempranas de la mañana.

—Principe Min—le saludó con respeto Taehyung—, a la biblioteca a seguir con mi trabajo.

—¿Otra vez allí? ah...pensé que ibas a dejarlo, al final de cuentas, ahora eres un consorte.

—Sabe muy bien que no soy alguien que me gusta estar quieto en un lugar, me gusta ese trabajo y si bien ahora soy su esposo, me mantiene distraido.

—Claro, comprendo. No quiero quitarte las cosas que te gustan...¿Vendrá temprano de trabajar?

—Vendré en la noche.

Dicho eso, el alfa se giró sobre sus talones, siendo acompañado de su sirviente, el Eunuco Choi y a su lado, el soldado Hyun Sik. Yoongi se despidió con un movimiento de manos forzando una sonrisa y cuando su esposo desapareció de su campo de visión, se puso serio, se giró a ver a su sirvienta personal.

—¿Lo escondiste bien?—interrogó corriendo a la mesa, Mijoo afirmó sacando la tela de seda y el omega rió feliz—, cada tiempo es oro, tengo que terminar esto antes de que se cumplan los 9 meses.

—Mi señor ¿No se siente triste?—Yoongi le contempló con rostro de incognita—, es decir, ahora vuelven a estar de nuevo separados, regresaron hace dos dias; pero...veo a su esposo alejado de nuevo, dice usted que allá estuvieron juntos.

—No te preocupes por eso, si algo aprendí es que debo darle su espacio, además, lo que yo quería que sucediera, se cumplío. Si tengo suerte, pronto quedaré embarazado y daré a luz un bonito principe—Yoongi notó como las mejillas de su sirvienta se elevaron de la felicidad al escuchar aquellas palabras—. ¿Te hace muy feliz?

—Si mi señor, ya tiene 29 años, aunque muchos consideran demasiado viejo para tener un hijo, aún está en edad y su salud se encuentra en buen estado. Un niño alegrará este lugar más de lo que ya es.

—¿Cúando dices que regresa el médico?

—Dentro de unas semanas, se encuentra en el norte por el momento, pero está su ayudante por si necesita algo.

—No, no...solo confio en el Médico real.

Seojoon se acercó a ambos y saludó con respeto a su principe, Yoongi le contempló con una noble sonrisa, correspondiendo aquel saludo.

—Principe, su tia Honey, la princesa Jennie, están esperando afuera ¿Los dejo entrar?

—¡Oh, claro, que pasen!

—¡Atención, la Dama Real, Min Hooney y la princesa Min Jennie!—gritó aquel soldado.

Ambas mujeres aparecieron por el campo de visualización del rubio, se acercaron con una gran sonrisa y elegancia, saludaron con respeto al ajeno y se empezaron a sentar en la mesa.

—Tía, me hace feliz que vengas a visitar—notó que Jennie hizo un puchero de berrinchuda al darse cuenta que no la mencionó a ella primera—¡También a tí, Jennie preciosa!—exclamó divertido su primo.

—¡Siempre que vengo, solo te alegras por mamá! ¿Ya no me quieres?

—Por supuesto que si, eres mi princesa favorita—afirmó Yoongi tomando la mano de su prima para acariciar con sutileza.

—Jumg, mas te vale.

Honey y Yoongi rieron al escuchar aquello y se miraron entre ellos.

—¿Cómo está todo lo del plan de boda de mi primo DoHwan?

—No se negó al compromiso, le dije que tu le habías seleccionado personalmente a la chica, respecto a ella, es muy inteligente y va avanzando en sus estudios. La señorita Ji Eun está muy agradecida contigo por la oportunidad que le has dado desde que llegó a este palacio y fue rescatada, además su hermanita, también es una buena niña.

—Me alegro mucho que estés conforme con ellas.

—Lo estoy y es bueno tenerlas de nuestro lado, hay que tener aliados. Por cierto, escuché que ingresó un nuevo y joven ministro, Kim Seokjin.

Jennie al escuchar aquel nombre enarcó ambas cejas.

—¿Hay un nuevo ministro?—exclamó sorprendida.

—Si—Yoongi sonrió para seguir alabando al nuevo chico—,es todo un erúdito. Desde muy pequeño se vio interesado en los estudios, lo conocí por su padre, es un año mayor que yo y es buen mozo. Incluso tiene una hermana, hoy vendrán a visitarme, si se quedan pueden conocerlo.

—¿Está de tu lado, Yoongi?—Honey preguntó preocupada, el rubio afirmó y ella sonrió—. Eso es bueno, este palacio se está convirtiendo en una guerra de poderes. La Reina Consorte está decidida a dejar a su hijo en el trono cuando mi hermano muera. Aunque mi hermano dijo que Ji-Sun ya no quedaría como el próximo Rey, dudo que su madre se quede de brazos cruzados.

—Primo—interrumpió Jennie—, si tuvieras que elegir a uno de tus hermanos ¿Quién consideras el mejor para el puesto?

—Bueno, yo elegiria a mi segundo hermano. Goong Yoo. Es con quien menos he tenido problema, si bien no somos unidos, sería un buen Rey. Dongwook en cambio es más ambicioso y se dejaría llevar demasiado por los ministros, lo usarían como una marioneta.

—Tú también serías un buen Rey—agregó su tia con sumo pesar—, es una lástima que no se acepten omegas y mujeres betas en el trono, que solo sean hombres betas y alfas, consideran que no tenemos la cabeza para gobernar un reino, dicen que somos muy sentimentales y eso no ayudará y nos perjudicará.

—Tengo miedo que la Reina Consorte haga algo y Ji-sub termine con la corona luego de la muerte de padre, por eso es mejor que desde temprano empiece a tener aliados en este palacio. Debo tener mucho poder cuando eso suceda, el futuro es incierto.

—¿Por qué no haces una alianza con tu hermano Goong Yoo?—inquirió Honey con una ceja enarcada—, si dices que es el mas sensato entre los otros, estoy segura que aceptará una alianza mientras vayas ganando poder. Además, tienes el favor del Rey, tu padre te quiere mucho y eso también lo beneficiaría.

El soldado Seojoon se fue acercando, le susurró algo en el oido a Yoongi, quien sonrió y miró en dirección de la entrada, notando a un tipo alto de cabelleras negras, de muy buen vestir, acercarse con suma elegancia, a su lado le acompañaba una joven bastante guapa.

—Ministro Kim Seokjin, ha venido—comentó el omega que se levantó con una sonrisa en su rostro, aquel joven le hizo un saludo de respeto, junto a su hermana, quien también le sonrió—, no sabe lo feliz que me hace tenerlo aquí.

—Al contrario, quisiera agradecerle a usted por la oportunidad que me ha brindado en trabajar aquí, mi lealtad permanecerá siempre a su lado, no olvidaré este momento.

Yoongi cubrió su sonrisa un tanto apenado, Honey contempló a su sobrino con una ceja enarcada, para que le presentara al otro.

—Tía, este joven es el ministro Kim Seokjin y ella es su hermana, Kim Jisoo, ambos son de casta alfa y provenien del sur, sus padre fue anteriormente un erudito en las ciencias politicas y ahora su hijo lo sustituirá. Joven Kim, ella es mi tia Honey, es madre de mi padre, el Rey y ella mi prima, Jennie.

—Es un placer tenerlos aquí,, no se si le dieron un recorrido alrededor—ambos afirmaron—,espero que les guste el palacio.

—Un placer Dama Noble, princesa Jennie—habló aquel alfa con suma elegancia.

—¡Vaya, usted es bastante atractivo!—exclamó Jennie sin poder ocultar sus pensamientos, su madre le miró desconcertada y le dio un suave pellizcon disimulado en la parte de la espalda—, también su hermana, deben provenir de una familia muy guapa—miró a su madre algo adolorida por el pellizcón.

—Principe, esta tarde me presentaré al Rey ¿Hay algún consejo que me de?—preguntó el joven ministro.

—Dile que vienes de mi parte y además exclama un poema, le gusta mucho escuchar poesía. Quería saber si ya tienen un lugar para hospedarse—preguntó preocupado, el alfa miró a su hermana y ambos afirmaron.

—No se preocupe por eso, nos vamos a quedar en una casa de un familiar, que se encuentra aquí afuera del palacio. Sin mas que decir, nos retiramos para que pueda seguir conversando con su familia, Principe. Princesa Honey, Princesa Jennie, ha sido un gusto.

Los dos hermanos hicieron un saludo de 90 grados y se giraron sobre sus talones para salir de aquel lugar, Jennie miró a su madre y luego a su primo con una gran sonrisa.

—¿Sucede algo, prima?—preguntó interesado el rubio—¿Te gustó el Ministro Kim?

—No él, ella.

Su madre y su primo le miraron con la ceja enarcada, sorprendidos ante lo que acaban de escuchar.

—¿Ella?...¿Qué rango tiene esa joven en este palacio? su hermano será un ministro.

—Está estudiando para ser una General—comentó Yoongi tratando de recordar, ofreció una sonrisa—, ah...nuestra Jennie ya está lista para casarse, al final de cuentas ya es una mujer ¿No?—rió divertido el principe sacudiendo los cabellos de la menor, quien hizo una mueca.

—¡Ya no soy una niña, dejame!—exclamó con un puchero al final y de brazos cruzados.

Honey y Yoongi rieron divertidos entre ellos ante aquel comentario.

—Sería un buen matrimonio en la verdad—afirmó con sumo interes Yoongi, para ver a su tia con una ceja enarcada—, esperemos que se asienten bien y en unos meses, daré la idea a padre ¿Qué te parece, Jennie?

La chica afirmó con suma felicidad, abrazando la mano de su madre por la emoción obtenida. Yoongi enarcó una ceja, sintiendose orgulloso de la situación para ver de nuevo su mirada hacía la entrada.



Una pequeña niña corría con suma felicidad alrededor de su madre, la cual conversaba con otra de las concubinas de su esposo, ambas sonrieron divertidas viendo a la pequeña princesa dar saltos y jugar con su otro hermano. La puerta del cuarto se abrió, ambas mujeres saludaron con respeto a su pareja, el Principe de segundo Rango, Goong Yoo, quienes les ofreció una media sonrisa, ambos niños al ver a su padre, pegaron un grito de emoción, y se tiraron sobre él.

—Pequeños, comportense—ordenó la esposa principal.

—No te preocupes, deja que se diviertan ¡Vamos a jugar!

La pequeña pegó un grito de alegria cuando su padre la tomó de la cintura y la elevó, haciendo creer que volaba, ambas mujeres sonrieron muy felices ante aquel acto. El soldado se acercó, se hincó en forma de respeto.

—Su majesta, su hermano, el Principe Min Yoongi, quiere conversar con usted.Ambas mujeres miraron sorprendida a su esposo, quien las tranquilizó, le hizo un gesto a su guardia, quien afirmó y se levantó—Atención, su alteza, el principe Min Yoongi.

El omega ingresó con suma elegancia y miró el interior de aquel enorme palacio, era mucho más grande que el suyo, debido a que su hermano tenía 4 esposas y 8 hijos, el rubio miró a los más pequeños quienes se pusieron rectos y le saludaron con respeto, las esposas de su hermano, se inclinaron por igual, Yoongi sonrió al ver a los pequeños.

—Vaya, ustedes dos cada vez están mas grande—dijo el omega que se acercó a ellos, los niños miraron a su madre como buscando algún tipo de aprobación, ellas afirmaron y cuando se dieron cuenta que ya podían liberarse de su saludo, sonrieron para tirarse encima de su tio con suma felicidad—¡Ah, esperen, me van a votar, ya no son unos bebés!

—Tio, tio—llamó la niña—¿Cúando iremos de nuevo a jugar todos a la casa de vacaciones de la montaña? ¡Hace dos años que no vamos con todos mis primitos!

—¡Si, extraño jugar contigo y los demás!

—Tal vez vayamos a final de este año y además, habrá de seguro un primito más—rió divertido.

—¿Estás esperando un bebé?—habló la niña de 4 años con sus ojitos brillando ante aquella idea.

—Aún no, pero tal vez pronto.

—¡Tendremos otro primito, si!—gritaron ambos niños y después de llenar de besos las mejillas de Min Yoongi, se fueron alejando junto a sus madres, para dejar a su padre conversar con el omega.

Goong Yoo miró con cariño a sus cachorros y cuando su mirada se depositó en su hermano menor, lo miró de pie a cabeza y se fue a sentar en su silla.

—¿Se te ofrece algo, Yoongi? no eres de los que vienen hasta mi palacio, al menos que sea una situación seria.

—Sabes que eres el segundo al trono ¿No?—la mirada de su hermano mayor se depositó de un solo sobre él—. Padre no está contento con nuestro hermano Ji-sub, ha cometido muchos errores a lo largo de los años y hace poco le dijo que ni pensara en la corona.

—No importa como, Ji-Sub tiene poder, su madre es la Reina Consorte y muchos ministros están de su lado, padre no puede hacer mucho al respecto.

—Pero padre me escucha a mí, de todos los hermanos, soy el que tengo más poder sobre él, puedo persuadirlo a que te vea como un posible candidato, si nuestro hermano mayor llega al trono, destruirá lo que nuestra dinastia ha construido en años, es muy soberbio y ambicioso y la Reina Consorte no se queda atrás.

—¿Qué quieres a cambio, Yoongi?

—Proteger a mi futura familia. Se que Ji-Sub me mandaría lejos del palacio sin nada y si llego a tener hijos, no quiero que sufran o los mande asesinar y no seré el único, ustedes también corren el riesgo de verse afectados en esta pelea de poderes.

—¿Acaso crees qué Ji-Sub le haría daño a mis hijos?

—Lo creo, estoy seguro—dijo con suma confianza y firmeza—. Si te unes conmigo, persuadiré a padre para que te ponga en el trono, porque se que los que siguen a nuestro tercer hermano, también querrán pelear al respecto.

—Me das tu poder y protección y yo...te daré el trono, Min Goong Yoo—dijo enarcando su ceja derecha.

El Segundo hermano frunció el ceño al escuchar aquella propuesta tan descarada, desvió lamirada muy pensativo y rió algo incrédulo.

—Hermano, comprendo que no te lleves bien con Ji-sub; pero creo que tienes una percepción equivocada hacía él, no sería capaz de hacerle daño a sus sobrinos o a nosotros, si quieres sobrevivir, solo deberías disculparte con él.

—Primero está mi orgullo—aclaró el omega que se molestó al escuchar aquel comentario—, al menos que sea algo de vida o muerte o deba ver con la vida de quien mas amo, lo haría. Pero no me arrodillaré ante él.

—¿Qué pasaría si nuestro hermano se da cuenta que andas buscando hacer alianzas a sus espaldas?

—Goong Yoo, no creas que vine con las manos vacias—afirmó el omega que se fue acercando al segundo, puso sus manos a los lados laterales de la silla donde su hermano se manteía sentado y presionó, sus ojos se volvieron celeste—, si algo de lo que hablamos sale de aquí, me encargaré de que no vuelvas a ver nunca más a tus hijos, te mandaré lejos que habrás deseado haber muerto.

—¿Crees que me da miedo?

Yoongi se acercó al oido del segundo para susurrar algo, los ojos del Hermano mayor se abrieron en par, sus manos temblaron ante lo que escuchó y pasó con dificultad la saliva. Alzó el rostro viendo una sonrisa victoriosa de Min Yoongi, quien le ofreció suaves golpes sobre la mejilla.

—Tienes tiempo para pensarlo, espero que sepas elegir con sabiduria, Segundo Hermano.

Dicho aquello, Yoongi meneó su cabellera y salió de aquel lugar en un profundo silencio, el Segunfo hermano desvió la mirada, soltando un suave gruñido de incomodidad, para terminar golpeando la mesa que tenía a su lado.


Al subir a su palanquin, el omega suspiró viendo en dirección de su soldado Seojoon, el cual le ofreció una sonrisa, el omega enarcó una ceja, haciendo un gesto de que empezaran a encaminarse a su palacio.

—Seojoon, necesito que me investigues algo.

—Lo que usted ordene, su alteza.

—Los soldados son importantes en la guerra, igual a la hora de proteger un reinado o irse en contra de ellos, cuando me case con el antiguo General, lo hice porque era un hombre de poder y también porque me gustó, aunque nada resultó al final—Seojoon al escuchar aquello le miró con tristeza—. Necesito que pongas espias e investiguen los secretos del General que se encuentra en el poder, en el futuro usaré esa información para chantajearlo. Debo asegurar mis tropas de defensa y luego ve a conversar con el Jefe de los soldados que se mantiene en el palacio de caza, me servirán.

—Si, su alteza ¿Algo más?

—También investiga sobre el difunto General, quiero descubrir quien era la persona que ordenó asesinarme y porque.

El soldado afirmó y se detuvo para hacerle un gesto a dos de sus hombres, que afirmaron para esparcirse a los aldos, el rubio se giró viendo como su soldado se alejaba para cumplir su orden—, antes de ir al palacio, quiero que me lleven a la biblioteca—ordenó el principe a los hombres que lo llevaban, quienes afirmaron en silencio.



Taehyung se encontraba leyendo un libro mientras Jihoon limpiaba unos estanques y ponía otros libros en su lugar, el beta se giró a ver a su jefe con una gran sonrisa; pero al ver que el mayor estaba muy serio, decidió seguir mejor en lo suyo—Oh, olvidé unos libros—afirmó el menor—¡Iré a la biblioteca antigua, ya regreso jefe!—exclamó saliendo de aquel lugar entre saltos, Taehyung bajó el libro y alzó la mirada, viendo aquella puerta trasera cerrarse, suspiró para seguir en lo suyo. Desde que había regresado, no había podido dejar a un lado los recuerdos de aquel palacio de caza, con solo recordar el cuerpo desnudo de Min Yoongi, sentía que se alteraba y volvería desquiciado—Debes mantener la cordura, Kim Taehyung, es un principe, recuerdalo—se dijo a si mismo.

—No entiendo como puedes vivir en este silencio, es aniquilador.

Escuchó una voz detras suya, sintió una cálida mano y unos dedos rozar por su mejilla, sus ojos se abrieron en par y se levantó de un golpe, se giró viendo a Min Yoongi, el cual sonrió mientras tenía sus ojos de un color celeste, el principe se sentó sobre la mesa y miró a su alrededor.

—P-principe...¿Qué hace aquí?

—Mi consorte—sonrió el omega para acercarse a su esposo, se bajó de la mesa, lo tomó del cuello de la ropa hasta atraerlo a él—, vengo a que me hagas el amor, asi que...Sal, alfa—ordenó enarcando una ceja.

Unos ojos amarillos aparecieorn frente a él, el alfa de Taehyung sonrió ladino al ver al omega frente a él.

—Hola pastelito—susurró de forma socarrona.

El omega sonrió y se tiró sobre el alfa, empezando a besarlo con suma intensidad.


Jihoon que había ingresado por las llaves de la biblioteca antigua, al ver aquella escena, cerró de nuevo la puerta y optó por regresar más tarde, iría a pasear un rato en el jardin, no quería ver como dos personas hacían un bebé.

.

.

.

Jueves-19-mayo-2022: 

Lamento la tardanza; pero se había ido la luz en todo el país y la gente se volvió loca, yo estaba en el super cuando ¡Zaz! ahora me ves, ahora ya no me ves. Ahorita estoy riendo de eso, pero me asusté cuando pasó ajajajaj.

¡Gracias por todo su apoyo, comentarios. Me hace feliz que sigan leyendo!


republicado 12-11-2023

¡Recuerden el lema de la familia: Somos Sol que calienta; pero no quema!

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top