[10]

Los de la manada no podían creer lo que sus ojos estaban viendo ¿En serio ese tipo, se quedaría allí?

—¿Por qué debe regresar ese tipo aquí?

—Salvó a Yoongi...de unos cazadores—comentó el jefe de la manada con voz seca—saben muy bien que si se salva la vida de un ser de tu familia, se le debe conceder un deseo a esa persona como agradecimiento. El pidió regresar a la manada.

—¡Es peligroso, tenemos cachorros! Los lobos negro están mald-...

—¡Ese lobo maldito!—alzó una voz a lo lejos, todos fruncieron el ceño y se giraron sorprendidos al reconocer ese tono. Min Yoongi estaba acariciando su vientre—Me salvó la vida...¡Si no fuera por él, estaría muerto!—gritó alterado—Además...en los años que estuvo aquí, jamás le sucedió nada a la manada...el advirtió sobre los cazadores; pero no le creyeron y por eso...hoy hubieron consecuencias. —el albino miró a cada uno—. No fueron ustedes lo que me salvaron la vida, así que él tiene derecho a pedir un deseo y se le debe cumplir como las tradiciones que se siguen en nuestra manada...¿O piensan romper las tradiciones?

La chamán sonrió a lo lejos y enarcó una ceja derecha, el omega ingresó a su cabaña y los demás no podían hablar, contemplaron al jefe, que solo enarcó una ceja y no dijo mas, ingresando por igual a su casa. Wheein se hizo espacio entre los presentes y alzó su mano.

—¡Tae, Tae!—gritó feliz.

El pelinegro le sonrió, la alfa apareció tras la chica mientras los demás se esparcían, contemplando con sospechas a la pequeña Wheein.

—Hola...

—¡Ay que emoción, ya no tendré que caminar taaaaaaaaantooooooo para ir a tu cabañita! por cierto ¿Dónde piensas quedarte?—preguntó extrañada. La alfa de Wheein sonrió divertida mientras su pareja se puso al lado de Taehyung, para empezar a caminar—Deberías contarme que pasó ¡Tengo mucho que actualizarte, a que no sabes que-...

—¡Wheein!—le reprocho su pareja con tono serio—deja al chico en paz...debe acomodarse en un lugar —¿Sabes donde te quedarás?

—Pensaba en la cabaña de mi madre.

—¿Esa...cabaña?—la chica enarcó ambas cejas—está abandonada hace cinco años...¡Puedo ayudarte a limpiar!

—Wheein—le llamó de nuevo la alfa.

—No te preocupes, lo haré solo—sonrió el Delta para alejarse en silencio.

La chica hizo un puchero, enfocó su mirada en el cuello del joven, donde tenía una mordida enorme y cicatrizada, ella contempló a su alfa sorprendida , se cubrió la boca horrizada y señaló en dirección del ajeno, para luego señalar varias veces al cuello del Delta y hacer un ademán de morder. La alfa al ver los gestos de su pareja, suspiró y la cargó de un solo sobre sus hombros, llevándola a su cabaña.



Taehyung contempló aquella vieja cabaña, suspiró con amargura al recordar escenas de su infancia y en como su madre jugaba con él. Escuchó unos pasos, apareciendo la chamán que se puso a su izquierda.

—De todos los deseos que pediste...¿Por qué regresar a la manada, a un lugar donde no te quieren?—preguntó con tristeza.

—Hay tres personas que si me quieren...tú, la chica rara y Yoongi—comentó dando una leve sonrisa—mientras ustedes estén, puedo soportar otras cosas.

—¡Igh!—la anciana le dio con el bastón al chico, el soltó un quejido.

—¡Auch, viejaaaa!

—¿Cómo que Yoongi?—dijo frunciendo el ceño, se giró viendo al chico salir de la cabaña con una canasta de flores, el pelinegro lo hizo también al sentir el aroma del omega. Ambos se quedaron viendo por largos segundos de una cabaña a otra. La chamán alzó al cielo y negó en silencio—Es tu hijo...el que el chico lleva, tu cachorro.

–¿Eh?—dijo el pelinegro que se giró a ver a la mujer—no, no...bueno...si.

—Los dioses no saben ya ni como jugar...como sea, debes mantenerte alejado de-...—La anciana notó que el chico se volvía a girar y enfoca su mirada en Yoongi y el albino alzó el rostro de nuevo, viendo al Delta y sonrió un poco hasta sonrojarse y bajar la mirada.—¿Me estás escuchando?

—Si...si—miró a la mujer—¿Qué decías?

La chamán apretó los labios, para ofrecerle otro golpe al chico, negando en silencio. Taehyung soltó un chillido, sobando su corronilla, gruñendo en dirección de la mujer; pero al hacerlo, recibió otro golpe.



Yoongi ingresó a la cabaña, notó al alfa sentado en el sillón con las manos juntas y las piernas abiertas, el tipo estaba en bastante silencio, el omega carraspeó, depositando la canasta de flores sobre una pequeña mesa para decoración.

—¿Te...te sientes bien?—preguntó el alfa apretando después los labios.

Yoongi se quedó en un profundo silencio y enarcó una ceja.

—Jamás te importé...¿Por qué será que ahora preguntas si estoy bien?—dijo viendo al tipo con una mirada fría—¿Será que...tienes miedo de ese lobo negro?

—¿Por qué debería?

—Entonces no preguntes—dijo molesto—

El alfa al escuchar ese tono despreciable hacía él, se levantó de un solo y cuando le iba dar una bofetada, Yoongi gruñó.

Vamos...atrévete ¿Qué pasaría si por el golpe que recibo, pierdo a mi bebé? ¿Cómo explicaré...la situación? —Los ojos del omega pasaron a un celeste y sonrió de lado—He aguantado todo este tiempo; pero...no creo que pueda más—susurró—Au-xi-lio—dijo en bajo—Creo que podría decir esa palabra mas alto ¡Auxi-...

Yoongi recibió una bofetada, sus ojos volvieron al color gris, el albino miró horrorizado al frente y se tocó la mejilla, empezando a llorar, retrocedió tembloroso.

—¿Te atreves alzarme la voz de esa forma?

—¿Cómo?—dijo Yoongi negando—no lo he hecho...¡No le he subido el tono, alfa!—sollozó.

El alfa tomó a Yoongi y lo metió al cuarto. El omega se tocó el vientre mirando a los lados. Su pareja contempló los ojos del color del chico, había jurado que se volvieron celeste ¿Habrá sido todo su imaginación?

—Solo porque ese chico te salvó...—el alfa gruñó—¿Sabes como me dejó en ridículo frente a la manada? De todas las cosas, regresar aquí, será su peor pesadilla. Cree que porque acepté que se quedara...puede acercarte a ti. Se que está interesado en ti; pero no le daré ese gusto, ese tipo no podrá una mano encima de tí.

Yoongi le miró perplejo ¿Cómo explicarle  ese tipo que Kim Taehyung había puesto más que manos en él? si se enteraba...si su cachorro salía de cabellos negros, daría a entender de su infidelidad. Pero si eso sucedía, huiría...a donde fuera, escaparía con su cachorro y con Kim Taehyung, no lo pensaría dos veces.

El tipo salió del cuarto y cerró la puerta de un golpe, el omega se quedó en un silencio profundo, tocó sus manos, para luego acariciar su vientre, debía relajarse, cualquier sentimiento intenso o movimiento, podía afectar su embarazo y él había deseado por tanto tiempo un cachorro. Además de eso...era hijo del lobo negro, de quien sus ojos se posaron por primera vez.



Taehyung vio al alfa de Yoongi salir de la cabaña, el hombre se dirigía a él, el pelinegro frunció el ceño. El tipo parecía muy molesto ¿Por qué?

—No te acerques a mi esposo o juro que-...

—¿El qué?—se escuchó una voz femenina a lo lejos, el alfa se giró en dirección de la voz. La madre de Yoongi sostenía una canasta en sus manos.

—Señora...—dijo el alfa haciendo un saludo de respeto.

—¿Por qué tratas de esa forma al invitado?...¿No deberías estar agradecido por salvar la vida de mi hijo, de tu esposo?—preguntó la mujer que se acercó al tipo. Contempló la mano del tipo, se enfocó en el dedo anular—dime...¿Dónde está tu anillo de matrimonio?

—L-lo tengo en la gaveta, lo he guardado, no quería perderlo mientras salía recolectar hongos con Yoongi, señora.

—¿Ya terminaste con tus asuntos aquí? vengo agradecer al joven por salvar la vida de mi hijo.

El jefe apretó los labios, para luego afirmar. 


Yoongi se acercó a la ventana de la sala, movió su cortina y sintió una profunda preocupación ¿Estaría bien Taehyung con toda esa gente que no lo querían en la manada? ¿Por qué volver cuando nadie lo quería allí? bueno...el si lo deseaba en esas tierras, ahora podría contemplar todos los días el rostro del lobo negro; pero con su alfa...no sería posible acercarse.

El jefe de la manadas ingresó a la cabaña, Yoongi al verlo, tragó duro contempló a su esposo,

—¿Qué haces fuera de tu cuarto? ve a dormir.

Yoongi afirmó con lentitud e ingresó a su cuarto, ellos dos ni siquiera dormían en la misma cama, el alfa dormía en el cuarto izquierdo y él en el derecho.



La señora MIn contempló al lobo negro, se acercó al chico e hizo un saludo—No sé...como agradecerte por salvar a mi hijo—dijo ella, alzó su rostro y apretó la canasta en sus manos–te traje unas ofrendas, como agradecimiento.

—No las quiero—dijo el lobo apretando la mandíbula—lo hubiera hecho por cualquier otro omega.—el lobo negro se giró para ingresar a la casa, ella suspiró.

—Pero era mi hijo—dijo la mujer—. Recuerdo que tu ibas combatir para ganar su mano; pero...si no fuera porque mi esposo hizo trampa.

—¿Cómo?—dijo el chico que se giró de un golpe—¿Trampa?

—Pensé que el alfa que tiene Yoongi...era el indicado—susurró con un nudo en la garganta—. Soy una madre y conozco a mi hijo, a pesar que eduque a Yoongi bajo las tradiciones de la manada. La primera vez que te vio...el reconoció tu olor—ella enarcó una ceja—Y sé...que eso solo sucede cuando las almas están destinadas. —ella agachó su rostro—Le dije a mi esposo...

La señora Min se giró en dirección de su pareja con lágrimas en los ojos.

—¿¡Por qué lo hiciste?! ¡Rompiste una regla de la tradición de la manada! Se supone que era un juego limpio...¡Hiciste trampa!—su esposo le dio una fuerte bofetada que hizo a la mujer caer de un golpe al suelo, ella miró con temor a su pareja—25 años de mi vida...jamás me habías puesto la mano encima.

—Solo busco el bienestar de mi hijo.

—Mi hijo reconoció el aroma del chico—susurró, se levantó tratando de no romperse en llanto, alzó su rostro, apretando la mandíbulas—lo reconoció.

La señora recibió otra bofetada, ella pegó un grito, cayendo de nuevo al suelo, alzó su rostro, conteniendo sus lágrimas. Se levantó de nuevo.

—Tú...que siempre decías que los lobos negros estaban malditos ¿¡Por qué defiendes a uno, sabes la reputación que llegara a tener nuestro hijo?! —agarró a la mujer del cuello, ella soltó un chillido—. No importa...ahora tiene un alfa perfecto y es un Jefe de manada, así como yo también lo soy. Ahora...tienes prohibido acercarte a Yoongi.

—¡No!—gritó y se hincó de un solo, se aferró a la tela de los pantalones de su esposo—¡No me alejes de mi hijo, no me alejes de él!

—¡Debes de comportarte !—gritó el hombre—¿Como una mujer omega se atreve alzarme la voz? ¡Conoce tu puesto! No te acercarás a tu hijo...hasta que te levante el castigo, si dices algo acerca del arreglo...no lo verás nunca.

Taehyung no podía creer lo que estaba escuchando, la mujer limpió sus lágrimas.

—No había pasado un mes, cuando la sonrisa de mi hijo desapareció, mi esposo me tenia controlada y no podía verlo...hasta que él enfermo, cinco años después...pude ver a mi hijo. Años anteriores, le dije a su alfa...que me dejara ver a mi hijo; pero el decía que mi cachorro no deseaba verme—la señora cayó al suelo entre lágrimas, Taehyung la agarró a tiempo antes de que se hiciera daño—¡Traté muchas veces de acercarme a mi hijo!–comentó con una voz desgarradora.

—¿Por qué me cuentas todo esto?

—Porque hoy...—La señora Min vio al pelinegro aparecer frente a todos, enfocó su mirada en el esposo de Yoongi y luego en su hijo, el albino poseía una sonrisa y sus ojos brillaban. Hace mucho que no había visto ese tipo de mirada, desde que era un niño y la abraza, o cuando vio al lobo negro por primera vez.—volví a ver la sonrisa en mi hijo, sus ojos brillaban y cuando te defendio, estaba cargado de valor...eres el causante de eso.

Taehyung miró a su alrededor, levantó a la mujer con cuidado—vamos adentro. Hablaremos en privado.

La señora Min sacó de canasta una bolsa con pequeños alfajores, contempló un poco nerviosa al alfa, el chico tenía un rostro serio y unos ojos de un amarillo muy profundo.

—Dime...¿Qué hay de tu marca? la que te hizo el esposo de mi hijo.

—Cuando se unió con Yoongi, el enlace se rompió...pero no pude transformarme de nuevo en mi lado animal, mi lobo desapareció—susurró con tristeza.

—Por supuesto, eso pasa cuando un alfa muerde a otro alfa y pasas a ser un Delta, tu lobo desaparece, por la humillación—ella dio un sorbo a su bebida—Dime...¿Todavía estás interesado en mi hijo? se como lo viste la primera vez que lo conociste...¿Sigues teniendo esos sentimientos?

—Sí...señora.

Ella miró a los lados, suspiró.

—Escucha...debes ser cauteloso, la mirada de los alfas están sobre ti, van a querer que cometas el mínimo error para asesinarte. Están temerosos...—la mujer contempló con fijeza al Delta—¿Por qué regresaste a la manada, cuando todos te quieren muerto?

—Quiero...proteger a su hijo—susurró el chico, se hincó recostó sus manos en el suelo y las unió para luego poner su frente sobre ellas—Señora...hoy en el bosque, esos tipos que trataron de abusar de su hijo, le quitaron su camisa en el proceso, cuando lo hicieron...vi moretones en su piel, algunos estaban ya viejos; pero otros eran recién...temo que el alfa de Yoongi, lo trate mal.

La señora golpeó la mesa contra el vaso para tomar café, entrecerró los ojos.

—Lo sospeché...—susurró ella con tristeza. Contempló al chico de cabellos negros—dime: ¿Quieres ser jefe de la manada?

Taehyung alzó su rostro de un solo y se levantó sorprendido por lo que la mujer estaba diciendo.

—¿Yo...jefe de la manada? Soy un Delta, señora.

—Si...eres un Delta; pero hay otras formas de llegar a ese puesto y no se necesita de la fuerza...solo astucia e inteligencia—la mujer le dio un sorbo a su café. Contempló la hora y se levantó un poco preocupada—piensalo bien...si aceptas, tendrás mi apoyo. Y no lo hago por ti, lo hago por mi hijo.

La mujer tomó su canasta y abrió la puerta, saliendo de aquella cabaña.


La chamán sintió una brisa suave y sonrió—Los astros se han alineado...pero aún así—susurró apretando su vara que poseía unas decoraciones en la punta—el futuro es incierto, que los Dioses te protejan—dijo alzando su vara para dar unas cuantas sacudidas al cielo.

Unos niños vieron a la mujer sacudiendo aquel instrumento al cielo y recitando algo.—Hoy sí se volvió loca—dijo uno.La niña de la par afirmó e hizo un ademán, dando giros sobre su oreja con el dedo indice.




Yoongi cayó al suelo, sus ojos se nublaron mientras sentía aquellas respiraciones sobre él.

—Les presento al nuevo líder omega de la manada—habló el lobo jefe negro que alzó la mano de su esposo, los de la manada se hincaron rápido y sonrieron orgullosos. Yoongi notó como los demás se hincaban a él.—Ahora es mi esposo.

—No es necesario que hagas esto...

—¿Por qué no? eres mi esposo, la manada deber saber quien gobernará sobre los omegas, sabes que yo no me puedo meter en asuntos de omega, solo el jefe omega...yo trato con los alfas—Taehyung sentó a su esposo sobre sus piernas. Acarició el pelo largo de Yoongi, tomando entre sus dedos, para inhalar la dulce fragancia del menor. Yoongi tambíen acarició aquellos cabellos largos de color negro.

—Pero amor...—el omega contempló a la manada—sabes que los omegas blancos, tenemos eso fama de débiles y desprotegidos.

—¿De dónde tienes tu la palabra débil y desprotegido?—dijo consternado su esposo, el omega le dio un suave golpe, su esposo soltó una gran carcajada—Yoongi, tu que has venido desde una familia humilde, criado de un alfa de bajo rango, ahora te exaltarás sobre los demás, no tengas vergüenza de mandar...eres el gran jefe ahora. Y quien se atreva a humillarte y hacerte daño...yo mismo lo mataré—mostró sus manos y sonrió de lado—con mis propio puños.

—Es que...escuché rumores de que yo te seduje.

—Pues en eso no mienten—dijo con gran honestidad.

—Me refiero al hecho que...yo te seduje para llegar al puesto donde estoy solo porque mis padres son de una casta baja. Eso dicen...

—Si alguien vuelve a decir algo contra mi esposo—habló Taehyung, dirigiendo su mirada en los demás—o humillando por el nombre de su familia...pagará el precio—el lobo negro golpeó el brazo de la silla, a tal punto de romperlo—¿Entendido?

Todos afirmaron de un solo ahora inclinarse más y pegar su cabeza al suelo, con sus manos sobre sus frentes.

—Alfa...gracias.

—Te haré una promesa amor...no importa cuantas veces renazcamos, te amaré siempre.

Yoongi acarició la mejilla del tipo, sonriendo entre lágrimas y afirmó.

—Yo te prometo...que te buscaré para que estemos de nuevo juntos.



Yoongi sintió algo filoso cruzar a su vientre, el omega abrió los ojos en par y bajó su mirada a su vientre, se tocó agonizando del dolor, escuchando unos gritos a lo lejos, sintió las manos de su esposo sosteniendo su cabeza, el omega derramó lágrimas, notando a su pareja llorar de forma desconsolada.

—Salva...al bebé—susurró el omega entre lágrimas—Y vive...vive...

—No me dejes...Yoongi no me dejes—gritó con la voz desgarrada, tomando el cuerpo de su omega entre brazos.

El albino alzó su mano, tocando el rostro de su alfa.

—Te...amo...vi...vive...

La mano del omega se deslizó con delicadeza, sus ojos se fueron cerrando con lentitud: En la siguiente viva...le pido a los dioses que seamos felices— pensó en su último momento, antes de que su respiración se cortara.


La mirada de Yoongi se enfrió y desvió la mirada—Y lo encontré...—bajó su mirada a su vientre y acarició–y hemos empezado...cuando perdimos todo, alfa. Tu me exaltaste cuando yo no era nadie, cuando mi apellido no era fuerte en la manada y venía de una casta baja...tú que eras el Gran jefe y todos te alababan—empezó a recordar cómo su esposo era el gran señor de los licántropos y fue donde el mundo de los Betas , se presentó ante el rey de ese país para pedir la paz por su gente y no ingresaran a su territorio o habría guerra—incluso las otras manadas te temían, te respetaban, fijaste tus ojos en un ser como yo.—Yoongi sintió la esquina de sus ojos llenarse de lágrimas—.ahora, te tratan como si no fueras nada—de los ojos del omega salieron lágrimas, se limpió, sintiendo un nudo en la garganta—. Pero mi amado—susurró—. He vuelto...y ahora...yo te exaltaré—susurró limpiando rápido sus últimas lágrimas.

Mi alfa.


—ingresa con un vestido blanco largo, lo acomoda para luego arrodillarse, pone sus manos en el suelo, una sobre la otra y recuesta la cabeza sobre ellas en forma de agradecimiento—

¡Bueno, como sea, es cuando uno se inca bien bonito en agradecimiento; pero no sabía como describirlo! :'v

¡Gracias por su apoyo y comentarios y también porque siguen leyendo este fanfic, me hace muy, muy pero muyyyyyyyyyyyyyyyyy —se queda sin aire—fe-liz—cae desmayada, se levanta y tira besitos, para luego caer desmayada de forma dramática.



[Cualquier error de ortografía, redacción, avisad por favor, esto se corregirá cuando el fanfic pase a edición]

¡Recuerden el lema de la familia!

∞ Somos Sol que calienta; pero no quema 7w7r ∞

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