Un Desgraciado En El Mundo De Sonic.
Morir no es algo que uno espere recordar con detalle, pero a mí me quedó grabado. El frío. La oscuridad. El dolor punzante que, de alguna forma, se sintió más real que cualquier otra cosa en mi vida. Y después... la nada.No fue una experiencia iluminadora ni un "momento de claridad" como en las películas. Simplemente acabé. Sin avisos, sin fanfarrias, sin respuestas.Y luego desperté aquí.Un mundo lleno de animales parlantes, tecnología futurista, entidades cósmicas y el tipo de caos que hace que la vida humana parezca aburrida en comparación. En otro momento, tal vez habría pensado que era un sueño o una broma retorcida de mi cerebro. Pero la realidad tarde o temprano se impone rápidamente.Terminar mi nueva adolescencia chambeando por unos cuantos Rings como mercenario, y ahora: soldado, no es precisamente lo que esperaba de una 'segunda oportunidad'. Donde están mis poderes divinos y mi harén de chicas mágicas, ¿eh? Oh, cierto. Eso sólo pasa en los animes.No soy un héroe. Ni un elegido. No tengo poderes divinos, ni una misión cósmica para salvar el mundo. Sólo soy un desgraciado que acabó aquí por razones que ni siquiera entiendo. Y si soy sincero, probablemente ni quiera entenderlas.¿Y sabes qué es lo peor? Que al parecer no soy el único aquí. Pero eso ya es otro cuento.El punto, es que sólo quiero sobrevivir. Hacer lo justo para mantenerme a flote y, tal vez, encontrar algún propósito en esta segunda oportunidad que nunca pedí.Pero, claro, este mundo no deja que las cosas sean tan simples.¿En fin, cómo se le llama a esto? ¿Monólogo interno? ¿Locura? Quizás una mezcla de ambas. Sea como sea, supongo que mejor me callo. No vaya a ser que alguno de mis compañeros me oiga y piensen que soy más raro de lo que ya creen. ¿Notas de...?: décimo mes en la guerra Forces…