Como sospechaban, Kogoro Mouri iba camino a la escena del crimen. De ida y vuelta, volviendo loco al detective privado, solo pudieron ir Sera y Conan. Y en ese ida y vuelta, Sera lo llevó en brazos diciendo que quería enseñar más técnicas de deducción al hermanito de Ran.

Ran no estuvo muy de acuerdo, pero bajo la insistencia de el, y la suplica de Sonoko de estar libres del mocoso por un rato, lo dejo ir.

Mientras entraba al auto, Ran lo miró desde la ventana. Conan levantó la mirada y también la observó.

- Ahg, mocosos insolentes -murmuró el detective mientras sacaba el freno de mano y ponía en primera.

- Seremos de mucha ayuda -la joven se burló mostrando su colmillo.- Además, tenemos a Conan-kun que es un experto en estos casos, ¿No?

Dando su mejor actuación de niño bueno, se río.- Solo soy un niño...

- Y un dolor de culo -dio por finalizado el mayor.

Conan rodó los ojos y miró con sospecha a Sera. Esta, orgullosa, apoyo su codo en la venta y levantó el mentón. Se veía claramente su burla.

- "¿Qué quiere?"

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Al llegar, una fila de reporteros estaba amontonada al rededor de la residencia de la periodista asesinada. Los policías hacían una pared para impedir el paso de estos, e impedir una que otra fotografía que pueda perjudicar el caso.

- Inspector Megure, ¿Nos está ocultando información sobre el caso? -pregunto una estirando el celular, donde estaba prendida la grabadora.

- ¿Tiene alguna pista sobre quien fue, o quienes?

- ¿Cuanto a avanzado el caso?

- ¿Los periodistas estamos en peligro?

- Por favor, recién estamos en la escena del crimen. Se pide discreción sobre el tema hasta tener todo confirmado -intento aclarar con calma y paciencia. Sabía que esto pasaría por ser una figura pública y de un rubro importante.- Por esa razón, no responderemos hasta nuevo aviso -finalizó, dándose la vuelta, provocando más preguntas gritadas y fotos por todas partes.

- ¡Inspector! -un policía se acercó e informó la llegada de Kogoro. Aliviado, se adentro a la casa y pudo escuchar como le explicaban algunos detalles a este.

Pestañeo un poco al observar quienes lo acompañaban y su cara de pocos amigos de este.

Ignorando los insultos hacia su persona y la mirada de Sera, observó en detalle la casa. Habían entrado por el patio trasero para no ser intersectados por los periodistas, y no dar más revuelo de lo que había.

Piso de madera que rechinaba al pisar, por lo cual, se podía escuchar con tranquilidad si alguien paseaba por la residencia. Bien, eso podría visualizar un poco que la víctima habrá escuchado o sospechado de algún intruso.

Caminando, miró los cuadros tradicionales japoneses y la casa tradicional que era.

- Lamentablemente no podemos conseguir ningún video. La luz fue cortada. Sospechamos que luego de que cortaran la luz, la mataron -comentó Megure mientras los conducía a la escena del crimen.

- Eso significa que querían atacar hace rato entonces -dijo Kogoro. Conan lo felicito en silencio al decir algo coherente y obvio.

Al llegar a la habitación, finalmente visualizo a la víctima.

Estaba tirada en el piso, con un claro charco de sangre rodeando la zona de la cabeza, que se estaba filtrando a la madera. La habitación estaba claramente desordenado, como si estuvieran buscando algo.

- Parece una escena de robo -Sera miró la habitación cruzándose de brazos.- ¿Saben que falta?

- Por ahora sospechamos que solo las computadoras, objetos de valor -respondió el Inspector.

- "No" -Pensó Conan frunciendo el ceño, mirando el escritorio, donde claramente faltaba una computadora- "La casa está llena de objetos de valor, objetos antiguos. Es raro qué solo se hayan centrado acá."

Dando un último vistazo, salió de ahí en silencio para que no se dieran cuenta.

Pasando por el pasillo, decidió mirar nuevamente el patio trasero. Ya en el porche, la pequeña pileta y flores bien cuidadas se apodero de su visión. Era imposible pasar escalando ese muro y no pisar y arruinar las plantas. Definitivamente, se entró por las puertas, tanto traseras como delanteras. Cualquiera podría haber sido.

Desvío sus ojos a la cámara.

Estaba estrategicamente ubicada, por si no fuera por el corte de luz, se hubiera grabado con perfección quien salía o entraba.

Las horas pasaron y pudo recoger información muy importante.

(1)- Los cables fueron estrategicamente cortados.

(2)- Solo faltaba computadoras y las memorias de las cámaras, fueron robadas.

(3)- Su caja de ahorro estaba sin tocar.

(4)- No había huellas, nada.

(5)- El culpable tenía el arma homicida.

Se había hecho un crimen perfecto...

Pero, algo tendría que haber. Un trabajo tan limpio y detallado tendría que haber un error.

Y lo hubo.

Cuando pudieron disuadir a los periodistas de que se alejaran del lugar, entrevistaron vecinos. Nadie había visto nada raro, solo que el comentario de que hace varios meses pudieron visualizar un auto negro que estacionaba a una cuadra o cerca de la residencia de la víctima.

Detalles de como era el auto no pudieron dar, porque no le daban importancia.

Por supuesto que Conan empezaba a ponerse más ansioso ante este nuevo dato. Usando sus habilidades de niño, pudo hablar con uno que jugaba tranquilamente con la pelota, más o menos de su edad.

- ¿Viste algún auto negro por acá? -pregunto amablemente.

Este, se quedo pensando para luego asentir con emoción.- ¡Si! Un auto negro muy antiguo. No me gustan, son raros.

Sintió que todo se paralizó. Sus manos temblaron un poco, y una gota de sudor pasó por su cara.

- ¿A-antiguo?

- ¡Sip! Tenían sombreros y ropa muy oscura. Tipos raros -restando importancia a esto, volvió su atención a su pelota.

Y así, Conan supo que este no sería un simple caso pasajero. La organización de hombres de negro estaba metida en este asesinato. Se movieron como solo ellos sabían hacer, y silenciaron a uno.

Controlando su respiración, miró a los periodistas reunidos comentando e informando del caso, a los policías impidiendo el paso, las luces de la patrulla y la cinta amarilla rodeando la casa.

Olía a peligro, e información.

Si solo pudiera obtener toda información sobre la vida de la víctima sin involucrar a Kogoro, sería genial.

Era una oportunidad única.

Y así, una figura femenina lo observaba desde lejos. Negó con la cabeza divertida y levantó sus lentes de sol.

Parece que se verían de vuelta.

- "Cuidado bala de plata".

Conan se sintió observado y con la mirada se encontró con la de Sera.

Ambos se miraron mal.

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- La rata blanca mando un aviso de robo a la joya.

- Lo hace con todo -respondió la figura oscura, acariciando su gato. El animal ronroneo gustosa.- Tiene un Rubí, son posibilidades altas.

- Lo se -asintió.- ¿Quieres que estén más hombres junto a Snake, señor? -preguntó mientras se acercaba.

Hubo silencio por unos segundos.

- Que estén infiltrados.

- Por supuesto señor, será cómo mande -se inclinó.- Con su permiso, me retiro -La sombra asintió y sin más, dando otra reverencia, salió del despacho.

El hombre siguió acariciando al gato, y movió una ficha de Shogi.

Unos cuervos volaron por la ventana abierta y cubrieron de plumas negras la visión del cielo estrellado junto a la luna.

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AAaA volvi gente. Me culiaron este cuatrimestre, pero a seguir, una lloradita y a seguir.

Estoy emocionada con todo lo que se vendrá. Gracias por la paciencia y amor que le dan a cada capítulo. Espero que les esté gustando y comenten que les pareció el capitulo.

Admito también que me enganche con Pasión de Gavinales y estoy preparada para decir que Sara y Franco Best pareja. Nada, eso Jsjs.

Sin más esperen el próximo capítulo, atraco y alianzas.

Bye!