°pasaron dos años después de ese accidente , todo parecía volver a la normalidad con el paso de tiempo... Incluso algunas cosas cambiaron,y aquello que creían imposible sucedió....

Aquel bosque frío y espinoso del dormitorio de Diasomnia por las noches era cubiertos de pequeños brotes de flores rosada y la primavera las flores eran lindas que podrían presenciar.

Aunque un solo árbol brillaba en especial, uno que siempre se mantenía vivo , era la marca final del rastro que dejó la chica que entró a ese mundo y lo cambio.
Todos avanzaban en su vida académica pero ya casi ningún la recordaba, a excepción de ese Fae, después de graduarse todavía se quedó en la Academia solamente para apreciar el cerezo que su amada hizo florecer para él.

─Sabia que estarías aquí ─Lilia se acercó a él por la espalda, todas las tardes estaba allí incluso hasta muy tarde en la noche

─¿Necesitas algo?

Contestó con un tono de voz melancólico, Lilia suspiro de frustración y se rasco la cabeza algo desesperado, por más que intentara convencerlo que debía seguir adelante pero él seguía pensando en ella, era obvio, era su primer amor .
El Fae de menor estatura miro la bolsa rosada y dorada que colgaba de su uniforme y luego a Malleus y asi sucesivamente durante unos segundos

─¡Argh ustedes dos son un caso perdido! ─Se acercó a él y se puso delante poniendo frente a sus ojos la bolsa

─

¿Que es eso?

─Kiyoshi me dejó esto para ti, ¡ya deja de lamentarte y ve a buscarla! ─Dejo caer la bolsita caer en su mano

Malleus la abrió algo dudoso y se sorprendió al ver lo que había dentro, había bastante dinero y una hoja de color celeste dentro, ¿por que razón le dejaría eso? , miro a Lilia en busca de una explicación

─Debes ir a buscarla ahora, esta misma noche

─Eso ya no es posible, el director Crowley quemó los libros que tenían la clave para entrar a ese mundo

─A eso mismo voy, Kiyoshi me habló de un portal en el lago en cual caíste cuando eras niños actualmente está desactivado pero me enseño como abrirlo... Pero─Suspiro ─Si entrar en ese portal jamás podrás volver a este mundo

─Eso está bien iré a ese mundo.

Esa respuesta sin titubear lo sorprendió, el Fae estaba decidió abandonar su propio mundo para ir a buscar a su amada albina

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─¿Entiendes?, una vez que estés en ese mundo no serás capaz de usar magia y solo habitan humanos así que esta hoja te será de utilidad ─ explico Lilia estando una vez en el lago en el atardecer del bosque─Ocultara tu apariencia y esto....

Le extendió la alabarda que había sobrevivido a la pelea solo estaba ligeramente agrietada, los pasos de la hierba los hicieron voltear para ver a Sebek y a Silver

─¿Enserio se piensa ir Lord Malleus?

─Si, agradezco que ustedes dos estuvieran conmigo hasta este momento, también....pido que cuiden de Diasomnia

─¡Si mi Lord! ─Dijeron ambos poniéndose firmes

─Bien hora de despedirse─Lilia dejó caer en el agua cristalina un polvo verde haciendo brillar el lago con un paisaje de un bosque brillante ─Demonios voy a extrañarte ─Se acercó y lo jalo de su ropa para poder desordenar su cabello

─¡Argh definitivamente.. Yo no voy a extrañarte! ─Se liberó de si agarre y se posicionó en la orilla del lago

Por un segundo volteo hacia sus amigos que le sonreían en señal de que lo hiciera, respiro profundo ajustando el amarre de la alabarda en su espalda y se dejó caer dentro del lago. Sus sentidos se adormecieron y se sentía como estuviera bajando por un túnel oscuro y algo asfixiante, hasta ver al final una luz que se incrementaba

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"..Agua... "

Sus sentidos volvieron y sus pupilas se contrajeron por la luz, se incorporó lentamente en medio del lago donde estaba metido, el sonido de los árboles y las cigarras invadieron sus sentidos auditivos y el olor a flores y hierbas nueva le era nostálgico. Se levantó y salió del lago tosiendo un poco el agua que había tragado, camino un poco por el bosque una vez recuperado y se quedó dio cuenta que estaba en una colina en el bosque, se asomo ligeramente detrás de un árbol como un niño curiosos para ver a los humanos caminando alegremente por la plaza debajo de la colina

─Puedo hacer esto.. ─Se dio ánimos y se puso la hoja encima de la cabeza como le había indicado Lilia, salió del bosque para mezclarse con los humanos que pasaban por su lado como si nada pensó que se asustarian por sus cuernos pero paro un momento para ver su reflejo en el pequeño río del lago ─¿Eh...?

Abrió los ojos sorprendido, sus cuernos no estaban y sus orejas eran humanas, su ojos seguían igual pero estaba en shock por verse más humano ,respiro profundo y miro a todos lados ahora que lo pensaba era como buscar una abuja en un pajar con tanta gente.
Primero se ajustó nuevamente el amarre de la alabarda y comenzó a preguntar a la gente cercana si no había visto un zorro blanco o una chica albina de ojos dorados , algunos le contestaban respuestas simple como "no o tal vez", otros simplemente respondían con inseguridad y temor y no por su presencia si no por la arma que llevaba en la espalda , otros lo miraban y volteaban la mirada ignorandolo por completo y eso le comenzaba a frustrar. Debía ser inteligente con sus bienes ya que era un mundo sin magia y solamente eran humanos, finalmente le entró el hambre y agradeció que su amada pensara en que podría necesitar todo ese dinero para comer también debía ahorrarlo y cuidarlo bien

─Ahh... Que difícil─En otro parque se dejó caer una banca con una bolsa de Taiyaki o así se llamaban , comió algunos mirando el paisaje ─Debo encontrar pronto un lugar donde quedarme a pasar la noche..

Miro el cielo despejado, en su mundo ya estaría oscuro pero allí apenas iba anochecer, ciertamente estaba en un lugar desconocido pero no se iba a rendir, comió el último pedazo de Taiyaki y se levantó con determinación renovada y apuntó de irse alguien sujeto su ropa deteniendo su andar, Malleus confundido volteo para encontrarse con una niña pequeña de ojos esmeralda y cabello blanco que lo miraba fijamente

─¿Necesitas algo? ─La pequeña estaba apuntó de hablar cuando se escucho otra voz

─¡Mika te encontré! ─Una chica de al menos diecinueve años de cabello castaño y ojos grises, vestida con un kimono se acercó a recoger a la niña y apartarla del Fae ─¡Lo siento! ─Se inclinó a modo de disculpas sostiendo a la pequeña en brazos ─Mika te dije que no te fueras, tu madre va matarme

─Disculpa ─Llamo la atención de la chica castaña ─¿Quien es esta niña? ─Pregunto intrigado

─Oh ella es la hija de mi maestra, su nombre es Mika Chita aunque estoy cuidando por que ella quería venir a este parque por una extraña razón jeje lamento mucho esto ─Sonrío algo nerviosa

─¿Puedo hacerte una pregunta?

─Si..

─¿Has visto un zorro blanco? O.. ¿Ha una chica albina de ojos dorados?, ella es hermosa y siempre está sonriendo y es amable de voz suave

─¿Eh...? Tu..

─Madre ─Pronuncio la pequeña ─Ella es mi madre ─Señalo a una colina que podía asomarse desde algunos edificios

─Oh, ese el templo Chita donde estoy entrenando para ser sacerdotisa ¿gustarias venir con nosotras?, Parece que a Mika le agrada mucho

Los dos cruzaron miradas, aceptó ir con ellas al templo sin hacer más preguntas pero algo le daba un presentimiento y un cosquilleo en su espalda baja.
Después de unas horas de caminata llegaron a las escaleras de un templo arriba de una colina, comenzaron a subirla y cada detalle que tenía el camino llamada la atención del Fae, estatuas de zorros, figuras sagradas y rocas con kanjis , el Tori llamó su atención también y todo el resto apacible que tenía el gran templo

─¡Diane finalmente llegaste!

─¡Diane , Mika bienvenidas!

─¡Estamos en casa! ─Dijeron ambas saludando a las demás chicas vestidas de sacerdotisas ─Traje a un invitado, ¿la maestra esta en casa?

─No deberías traer extraños sin no van a dar una ofrenda a la maestra ¡podría castigarte! ─La regaño una golpeando su cabeza con la escoba

─¡Duele...! ¡no pude evitarlo! Mika esta muy apegada él y pensé que podría ser una señal divina para ser parte como nosotras, osea un posible sacerdote o..

─¡Vale vale! ─Una mujer de cabello rubio se acercó a él─Bienvenido al templo Chita, ¿gustaría quedarse y esperar a la maestra?

─Si, soy Malleus Draconia es un gusto

─ Malleus... Eh, es un nombre muy raro pero no importa, soy Kokona sigame por favor ¡Y Mika ya suelta su brazo!

Se dirigió a la albina que se colgaba de su brazo como koala, a Malleus le pareció tierno y la tomó en brazos para entrar al templo, todo estaba bien decorado con un ambiente acogedor.

─¿Puedo preguntar algo?

─Adelante ─Le ofreció asiento mientras servía té

─¿Quien es la maestra?

─Ah.. Debes ser nuevo en la ciudad, nuestra maestra es Kiyoshi Chita, llegó hace dos años y renovó este templo abandonado y pronto con su hija Mika fueron trayendo a las mueres que necesitaban un guía, y nos hizo sus sacerdotisas, nos enseña mucho y ayuda a exorcizar a los espíritus que atormentan las calles de la cuidad. ─Explico y luego vio la expresión de Fae, era una mezcla de emoción y sorpresa ─¿Pasa algo...?

─No, no es nada ─Tomo el vaso de bambú con el té y lo bebió ─¿Cuando llegará?

─Pues... ─Vio como su pierna de forma impaciente ─Hoy llegará en unos minutos

─La esperaré.

Eso sorprendió a la rubia, el azabache se quedó en el tiempo durante unas dos horas siendo observado desde lejos por la pequeña albina, los ojos de la niña eran sin duda iguales a los suyos pero quería estar seguro. De pronto las voces de las chicas sonaron fuerte con un :"¡Bienvenida a casa Maestra! "
Estaba nervioso y se preparó con una expresión decidida frente a la puerta corrediza, salió del templo hacia el grupo de chicas que estaban rodeando a alguien

─¡Maestra! ¿Hoy fue difícil el trabajo?

─¡Maestra yo me ocuparé de su bolso!

─¡Debe descansar!

Logró divisar la espalda de una chica albina y se atrevió a gritar interrumpiendo

─¡Kiyoshi!

Las chicas se detuvieron y la albina lo había escuchado perfectamente, giro lentamente hacia él y sin duda se quedó sin aliento al verla, su cabello era más largo pero sin duda era ella.

─¿M-malleus...? ─Sus ojos dorados se cristalizaron y sonriendo corriendo hacia él y él hacia ella ─¡MALLEUS!

De un salto se sujeto de su cuello y él la sujeto de la cintura, sus ojos esmeraldas se pusieron brumosos sintiendo que podía de llorar de felicidad de tener su calor de nuevo entre sus brazos. Incluso si era un sueño no quería despertarse, Kiyoshi rompió a llorar sobre su hombro apretando el agarre un poco más, nunca pudo ser capaz de olvidarlo y anhelaba tanto ese momento.

─¡Mami ! ¡mami ! ¡Papá esta en casa! ─Mika salió del templo sonriendo y fue abrazarlos a los dos

Todas las chicas gritaron fuertemente la palabra: "¿¡Padre?! ".
Malleus estaba sorprendido pero sonrió levantando en sus brazos a la pequeña que lo abrazo.

─Supongo que tienes mucho que explicarme Kiyoshi, solo fueron dos años ─La miro buscando una explicación

─Los kitsune crecen rápido─le guiño el ojo recordándole esa noche que los dos estuvieron juntos ─Jeje te lo explicaré a su debido tiempo

Malleus algo sonrojado abrazo a su amada besando sus labios suavemente, ya estaba en donde debía estar y no podía estar más feliz, ese vacío que sentía había llenado de forma repentina otra vez y a pesar de todas las emociones que le invadían se concentró en pensar....

...Que estaba en casa...

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°¿Lo dije no?, pronto nos veríamos y esta vez definitivamente estaríamos juntos °

❝. ғɪɴ .❞