USA era una mujer hermosa, elegante, arrogante y poderosa. Usaba lo que quería y desechaba lo que le aburría

Por eso Japón no sabía cómo logró salir con ella a pasear por ahí

Solo sucedió

—Jap
—Sí?
—Sabes que se vería genial un esa calle
—Qué?
—Un Starbucks

Japón soltó una risita

—Tú crees? Creo que podría hacer algo para solucionarlo
—Tan lindo, sweetie! —USA le sonrió—. Sabía que negociar contigo sería genial
—Quieres seguir viendo la zona? O puedo llevarte al mar
—Uy sí! Me pondré mi mejor traje de baño

Japón se golpeó el rostro cuando empezó a imaginar a esa hermosa mujer en la playa

—No! —se sostuvo el pecho—. Es decir. No ahora. El clima no nos favorece
—Está bien... Entonces qué me dices de aguas termales?!
—Sí. Eso puede ser mejor
—Sí! Entrarás conmigo?
—No!

Enrojeció

—Por qué? —USA hizo un puchero—. Igual me iba a poner mi traje de baño
—Los baños no son mixtos... Y no se usan trajes de baño
—Eh?