133.
—Tú no me amas Rusia
México golpeó la frente del idiota que acababa de robarle un beso
—Yo sí lo hago
—Claro que no... Solo tienes daddy issues que ni siquiera USA pudo solucionar
—Qué? No!
México suspiró. Tenía que terminar con esa tontería en ese mismo instante
—Dime... por qué te gustó?
—Pues...
—Suelta la sopa, chamaco
—Cuando era pequeño tú...
—Ahí está tu respuesta, niño tonto —México suspiró—. Nadie se confiesa con recuerdos de su niñez.
Rusia apretó los labios. No se había dado cuenta que sonaba tan ilógico
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top