104.


—Tengo ganas de comer algo.

—¿Cómo qué? —Perú lo miró elevando una ceja.

—Algo como... tu pito, precioso.

—Ah... Mex... Creo que te confundiste. Canadá está por allá —señaló.

—Asumadre... ya decía yo que te me habías encogido, pinche maplecito hermoso.

—Qué no soy Canadá.

—Yo a ti si te doy y no consejos.

—¡Qué soy Perú! ¡Ctm, Canadá está allá!

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top