Viggo,viciosamente, empujó uno de sus puños en él estomago de Hipo, y se jacto al ver como su prisionero se retorcía. 

Hiccup en ese instante comenzo a recordar esos horribles momentos cuando estaba a punto de caer de un barranco...

Sólo que esta vez, su padre no estaba aquí para salvarlo ... nadie estaba aquí para salvarlo.

Viggo no se estaba relajando en esta ocasión, y Hiccup tuvo la idea de que el hombre estaba tan enfurecido, tan fuera de control, que iba a matarlo justo aquí y ahora. 

La mente de Hiccup se clavó en una imagen de Astrid, y él sabía que, por ella,él  tenía que luchar hasta su último aliento.

De alguna manera encontrando la fuerza a pesar del dolor agonizante, Hiccup retorció sus manos en puños y agarró la cadena que los unía. 

Usándola como apoyo, levantó las piernas y plantó los pies en el estómago de Viggo, empujándolo con todas sus fuerzas.

Viggo fue tomado por sorpresa y no hizo ningún movimiento para detener su impulso hacia atrás. 

Se estrelló contra la pared opuesta y Hiccup exhaló un suspiro de alivio cuando el tormento disminuyó.

 Sabía que no debía pensar que su suspensión duraría, así que trató de distraer la atención de Grimborn.

–No maté a tu padre, ni siquiera sé quién era – gruñó Hipo mientras trataba de recuperar el aliento. Cada centímetro de su cuerpo dolía y quemaba,y se dio cuenta de que apenas podía recordar lo que era no tener dolor...

Viggo luchó en posición vertical después de unos segundos y el puro odio en su mirada asustó a Hipl como nada más en su vida había tenido.

 El caminó rápidamente por la habitación para mirar fijamente a los ojos de su prisionero, haciendo que Hipo se alejara involuntariamente.

–No me sorprende que no recuerdes sólo a uno en un millón de personas, Haddock–gruñó.

"Un millón…? "

Y entonces Hiccup comprendió finalmente de qué estaba hablando Grimborn y cómo murió su padre.

–¿el atentado de México? ¿Tu padre estaba en él atentado de México?– Hiccup lanzó una áspera carcajada de incredulidad.

El rostro de Viggo se retorció aún más de rabia, y la cabeza de Hiccup se sacudió hacia un lado con la fuerza del puño de Grimborn aplastándose contra su mandíbula. 

Hipo escupió sangre antes de volver a mirar a su atormentador con una mirada desafiante .

–Una actitud tan arrogante acerca de las muchas vidas que tomaste ese día, Haddock, no es muy honorable¿no crees?–

Las palabras de Viggo ayudaron a Hiccup a enfocarse y tratar de encontrar ese centro tranquilo que siempre había sido capaz de encontrar.

–Me arrepiento de todas las vidas perdidas en esa batalla, Viggo...Sin embargo, llegué a un acuerdo con mis acciones ese día hace mucho tiempo...–

–¿Llegaste a un acuerdo? ¿Llegaste a términos! ¿Es así como a lidias con el asesinato, Haddock?¿Con todos los huérfanos que has creado con un pequeño esfuerzo? ¿Cuántos todos los jóvenes a los que privaste de un padre?– Mientras hablaba,Viggo agarró la barbilla de Hipo con una mano, sacudiendo cruelmente la cabeza de su cautivo mientras hacía su punto.

 Los ojos de Viggo estaban cada vez más oscuros de rabia....y un toque de locura.

–¿Y como lidiaron ustedes con sus errores? ....¡perdi a mi novia ese día imbécil!–

–¡Tú ... No entiendes ... nada! – Gritó Viggo, abrumando al chico con la fuerza de ira que demostraba.

 El soltó la mandíbula de su prisionero con un empujón, pero en lugar de aliviarse, Hipo sintió que un punto de miedo le disparaba,mientras observaba a Viggo cada vez más loco de rabia.

El desamparado chico instintivamente se encogió de horror mientras la furia de Viggo alcanzaba su punto de ebullición y explotó. 

Desafortunadamente, Hiccup no tenía dónde ir cuando Grimborn descargó su ira sobre él en una ráfaga de puños...Los golpes llegaron furiosa y continuamente, dejándolo sin respiración y llevándolo hasta el punto de la inconsciencia. 

La fuerza de las huelgas del pelinegro, fue tan intensa que los movimientos bruscos de Hiccup tiraron del gancho por el que sus puños estaban unidos al techo, y se estrelló contra el suelo con un grito de dolor.

Viggo no se detuvo un momento en el golpeteo de su rehén, y comenzó a patear a su víctima derribada. Hipo levantó los brazos para proteger su cabeza, al mismo tiempo tratando de jalar sus piernas para proteger su torso, pero no era muy útil. Viggo parecía encontrar sin lugar a dudas un lugar abierto en su interior. 

La visión de Hipo se volvió borrosa y temió que estuviera a punto de desmayarse, ¿y quién sabía lo que Viggo le haría entonces?

Finalmente, con un gruñido, Viggo dejó de golpearlo y todo lo que Hiccup pudo ver fueron sus pies botados girando y caminando alrededor de la celda por un momento. 

Su cuerpo entero se sentía como un moretón masivo y le dolía respirar. 

De repente, Viggo se agachó a su lado y lo agarró por el pelo, levantando su cabeza del suelo.

 Hiccup gritó en protesta por el dolor que atravesaba su sistema....

–¡Maldito seas, Haddock!, casi me has hecho perder completamente el control allí, y no quiero matarte... todavía no. Tengo mucho más planeado para ti antes de verte morir–, dijo con un tono gutural que Causó que el miedo penetrara la neblina de agonía de Hipo. El castaño se estremeció cuando Viggo dejó caer la cabeza al suelo.

El se rió mientras que Hiccup observaba sus botas mientras salía de la habitación.. –. Duerme bien, señor Haddock,ya  hablaremos pronto.–

Hiccup yacía en el medio del piso donde Viggo lo había dejado, demasiado cansado para intentar llegar hasta la pequeña cama. Trató de respirar hondo, pero terminó en una tos cuando un dolor agudo le atravesó el pecho y le preocupó que las patadas de Viggo pudieran haberle roto una costilla o dos.

Las lágrimas calientes ardían detrás de sus párpados y la desesperación comenzó a arrastrarse por todo su ser.

Quería conservar la esperanza de que su familia lo encontrara, pero cada hora que pasaba le hacía dudar un poco más sobre una posible búsqueda.

"Ellos piensan que estás muerto ... Son van a buscarte! "

Por mucho que trató de desterrar ese pensamiento, él solo se abrió camino en su cabeza y no se iba...Estaba solo, y él iba a morir solo.

–Astrid–susurró miserablemente, –Heather, ayúdame, por favor ...–

 Su cuerpo se curvó en una bola cuando las lágrimas comenzaron a escapar de sus ojos para fluir por sus mejillas, y tuvo que luchar para evitar caer en la piscina negra de desesperanza que lo invadia...

~~~~

Astrid estaba teniendo dificultades para empujar la ola de desesperanza que quería lavarla.

 Diez días. 

Habían estado buscando durante diez días, y no habían encontrado ni una señal ni una pista de lo que podría haberle sucedido a Hipo. 

Cuanto más tardaban, más Astrid temía que sólo encontraran un cuerpo, o peor aún, nunca sabrían lo que le había sucedido....

La parte más difícil de la prueba...ella estaba tratando de mantener su compostura frente a personas bien intencionadas que seguían acercándose a ella para dar sus condolencias por la pérdida de su mejor amigo. 

Ella tenía que contenerse de gritarle a esos tontos que él era más que su mejor amigo, él era su amante y su vida..

¡y no estaba muerto! 

¡Estaba vivo!¡ VIVO! 

Si tan solo pudiera encontrarlo ...

Por muy dificil que fuera, Astrid sabía que era igualmente dificil para Heather y Brutacio, quizás incluso más difícil para ellos....

 Todo el mundo sabía de su apego a Hiccup Haddock, por lo cual Heather había recibido 3 veces mas condolencias que Astrid.

Su vista empezó a difuminarse mientras estudiaba, por lo menos la vigésima vez, una tableta que enumeraba los nombres de los seres que podrían haber tenido rencor contra Hipo. 

No fue hasta que una lágrima salió furtivamente de su ojo que se dio cuenta de que su visión se desdibujaba por el llanto en lugar de por el agotamiento.

 Frustrada y enfurecida por su falta de progreso, Astrid tiró el aparato hacia abajo y se quedó en un estallido de rabia...

–¡Esto es inútil, tiene que haber algo más que podamos hacer!–

Los allí presentes la miraron mientras ella empezaba a pasear por la sala de estar de los Berserker.

–Hacemos todo lo que podemos, Astrid –dijo Heather en voz baja.

–No, no, si estuviéramos haciendo todo lo que podemos,entonces ya lo habríamos encontrado – gruño Astrid.

–lo estamos haciendo, y vamos a encontrarlo– Dagur dijo con seriedad.

Astrid se voltro hacia él con enojo, atrapado en un objetivo conveniente para su frustración y miedo....

–¿Eso aliviaría tu culpable conciencia,Berserker?–Ella se burló.

El rostro de Dagur palideció ante su acusación y Heather gritó: –¡Astrid!– Al mismo tiempo que Brutacio dijo bruscamente: –Basta Hofferson–

–Oh, no te hagas el santo conmigo, ambos están pensando lo mismo,y eres demasiado educado y civilizado para decirlo...Si no fuera por la incapacidad de Dagur para mantener un ojo en su hijo, ¡Entonces Hipo seguiría aquí!–

–¡Nunca quise que Hipo fuera herido!" –gritó Dagur mientras se levantaba para mirar a Astrid.

–Sí, bueno, eso no funcionó exactamente como lo querías, ¿verdad?–

–Hofferson, dije que es suficiente, no me importa si eres la novia de Hipo, esta es nuestra casa, Dagur es mi invitado, y él es uno de los mejores amigos de Hiccup. ¡No volverás a hablar con él así!– Brutacio dijo severamente mientras se ponía en pie y se interpuso entre las dos personas que se enfrentaban a través de la sala de estar.

–Nadie me dice qué hacer, Torton–dijo Astrid con voz peligrosa.

–Tal vez no, Astrid, pero ¿qué crees que Hipo diría si pudiera verte ahora mismo? –preguntó Jackson en voz baja.

Astrid dio un paso atrás, sorprendida por la pregunta de Jack... 

Durante un breve instante, su rostro mostró el miedo desesperado y la angustia que la desgarraba por dentro, pero fue rápidamente cubierto por una máscara de indiferencia pétrea, que los demás en la sala se preguntaban si lo habían imaginado. 

Su mandíbula se endureció y, en lugar de responderle a Jackson, ella se volteo y salió al balcón de la casa.

Hubo un incómodo silencio en la habitación después de su partida, y Dagur finalmente habló, la tristeza que emanaba practicamente podía tocarse.

–Heather, Hipo salvó la vida de mi hija, nunca podría ...– se interrumpió cuando parecía inseguro qué decir. –Si yo hubiera sabido lo que iba a pasar, yo mismo habría ido tras ella.–

–Y entonces Syal podría no hubiera salido viva, Dagur– respondió Heather en voz baja. – Hiccup,estaba haciendo lo que mejor sabía hacer, poniendo su deber antes de su propia seguridad. Habría hecho lo mismo para cualquiera de nosotros en esta habitación. Nadie te culpa. Astrid está simplemente asustada y enojada con la persona detrás de esto, Como todos nosotros.–

–Sí, ella no esconde parte de su enojo así como nosotros–

La risa nerviosa resonó en el cuarto mientras que Heather giraba la cabeza para mirar a Astrid Hofferson de pie en su balcón, con sus manos agarrando la barandilla y la cabeza inclinada.

–Debería ir a hablar con ella–murmuró Heather.

–¿Estás segura de que eso es sabio, cariño? Es probable que todavía esté bastante molesta y Astrid no es exactamente un pétalo de rosa– Brutacio comento.

–Estaré bien, y estoy segura de que si necesito ayuda, estarás ahí fuera, "tontorron" –dijo Heather con una sonrisa para su marido.

Cuando Heather salió al balcón, Astrid estaba llorando. 

No hubo ningún sollozo histérico.

Astrid no era normalmente el tipo de mujer que sollozaba, pero unas cuantas lágrimas silenciosas se deslizaban por sus mejillas. 

Heather se acercó a su lado y las dos miraron él horizonte en silencio...

Heather rompió el silencio primero.

–Creo que le debes a Dagur una disculpa–

Astrid resopló. –No soy muy buena en disculparme – ella murmuro.

–¿Qué crees que Hipo diria a esa excusa?–

La cabeza de Astrid cayó y un ruido que sonaba sospechosamente como un resoplido procedía de debajo del pelo que colgaba sobre su cara.  –No hagas eso.–

–¿no hacer qué? –preguntó Heather.

–No me pidas que me imagine a Hipo juzgándome, ya sé que no soy lo suficientemente buena para él, no necesito que me lo recuerden.–

La mandíbula de Heather se abrió con asombro.

–¡Astrid, eso no es lo que quería decir en absoluto!–

Astrid alzó la cabeza para darle una mirada a la hermana de Hipo, pero era un poco desagradable, su miseria era evidente para Heather –no importa si eso no es lo que querías decir, es verdad...–

–No, no es ...– Heather comenzó a protestar, pero Astrid la interrumpió.

–¡Es la verdad!–dijo ella con dureza –Esa es una de las razones por las que tuve tanta reticencia a involucrarme con Hipo, él es un chico ... tan bueno , que... hay tal pureza en el ... casi me ciega a veces ¿sabes?–dijo Astrid, bajando la voz hasta un susurro abatido.

Para su sorpresa, Heather rió suavemente. –Oh, claro, espero que no creas que Hipo sea de ninguna manera o forma, perfecto, porque te aseguro que no lo es.–

–Está muy cerca, si me lo preguntad a mi –dijo Astrid con obstinación.

Heather levantó una mano y comenzó a marcar las fallas de su gemelo, como sólo el amor de una hermana le permitiría hacerlo. –Es imprudente, impaciente, increíblemente obstinado, especialmente cuando piensa que tiene razón, conduce su motocicleta demasiado rápido, me cuesta una pequeña fortuna sólo darle de comer, despoja a mis hijos sin vergüenza, aunque supongo que podría ser bueno, ya que Significa que él los ama,y ni hablar de que al parecer no sabe de la existencia de la tapa del baño– Heather lanzó sus manos hacia arriba en una burlona desesperación y le dio a Astrid una mirada de exasperación.

Astrid miró a Heather en estado de shock, y luego una pequeña risita se le apareció de la nada. 

Se cubrió la boca con una mano mientras ella y Heather se miraban entre sí con el mismo brillo de alegría en sus ojos. 

Segundos después, ambas reían sin poder hacer nada mientras Heather envolvió un brazo alrededor de la espalda de Astrid, y esta envolvió su brazo alrededor del cuello de su amiga.

–Heather...me has matado con ese comentario–

–Uf, y no he podido hacer que Tacio lo haga tampoco...ambos pusieron un terrible ejemplo para mis hijos– Heather suspiro.

Permanecieron en silencio por un momento, disfrutando del respiro temporal de la abrumadora preocupación por el hombre que ambas amaban.

 Fue muy breve, sin embargo, cuando Astrid sintió que el peso aplastante de la preocupación por Hipo comenzaba a empujarla de nuevo.

 Sus dedos encontraron el anillo colgando de la cadena alrededor de su cuello y lo frotaron suavemente.

–Estrellas... Heather lo extraño mucho, es como si me faltara un pedazo– dijo con voz ronca.

–Lo sé, lo sé –dijo Heather mientras le daba un apretón al hombro deAstrid –Pero lo vamos a encontrar, lo harémos, lo puedo sentir.–

La rubia asintió, luego se enderezó con una inhalación y una respiración profunda. –Bueno, supongo que será mejor que lo haga.–

–¿que cosa?–

–Disculparme con Dagur...pero realmente soy pésima con las disculpas–

–Bueno, estaré allí para ayudarte,– Heather sonrió.

–que Bueno, porque probablemente te necesitaré –murmuró Astrid mientras regresaba al apartamento.

Heather se detuvo por un segundo en el balcón, mirando hacia las montañas que su hermano tanto amaba. 

Aunque sabía que era un gesto inútil, no pudo evitar susurrarle al viento...

–espera un poco Hermanito... Solo un poco, ya te encontraremos.... Y vas a tener que aguantar todos los abrazos que Astrid y yo te vamos a dar–

Hola mis criaturillas😜😽

*le tiran un zapato, y unos trapos impregnados de lágrimas*

Lo ciento lo ciento...

Pero si les sirve de consuelo la parte mala de la historia esta llegando a su fin.🙌

De hecho pensaba hacer esta historia de 29 capítulos y un epílogo...

¿Que opinan?

Bueno si ustedes quisieran sufrir mas tendrían que decírmelo...😧😧

Bueno...Tyria se va, y les manda muchos besitos y abrazos 😘😘😘😘

Y de paso unos pañuelos...

*se va antes de que la machaquen*