Astrid permaneció despierta durante bastante tiempo, escuchando la respiración de Hipo mientras dormía, pasando las palabras de Hiccup Haddock en su mente una y otra vez...

Hiccup Haddock...

Él nombre que hace unos cuantos años era blasfemia pronunciar, obviamente  ella jamas había pensado iniciar cualquier tipo de relación con "ese tipo"...

Un pequeño segmento de su cerebro todavía se maravillaba de que hace menos de cinco años, ella había querido matar al agente, ¡y ahora estaba dispuesta a compartir su cuerpo con él!

Pero..".¿qué hay de tu corazón, Astrid"?, ella se preguntó....Sabía que Hipo la amaba. El chico no era tan habil de esconder sus sentimientos como solia pensar... O no de ella, en todo caso.

 Lo que la asustaba era la idea de que tal vez su amor no sería lo suficientemente fuerte. ¿Qué pasaría si Hipo finalmente lograra eliminar todas las barreras de Astrid, y cuando llegara al fondo no le gustaba lo que encontraba?

La mano derecha de un fuerte grupo de delincuented nunca había conocido el amor, nunca lo había dado ni recibido...

Astrid Hofferson, la comerciante había conocido el afecto y la amistad, de Tacio y su equipo, de Hipo y su hermana, e incluso de algunos chicos a lo largo del camino,pero ¿ el amor verdadero?

Era un concepto extranjero.

" ya no lo es...Hipo te quiere"

*¿Pero por qué? ¡No soy lo suficientemente buena para él!*

"¿Y quién eres tú para decir que Hipo no puede decidir por sí mismo a quién debe amar?"

*¡Yo era una asesina! ¡Maté a gente inocente por dinero! ¡Y Hipo es él " gran Héroe"!*

"¿Y no luchó contra sus propios tormentos? ¿Aún no lo hace? ¿Quién mejor que él para entender exactamente lo que enfrentas todos los días?"

–Diablos ...estoy hablando sola– Astrid murmuro

Hipo gruñó en su sueño con el sonido de su voz y cambió el brazo que estaba envuelto alrededor de ella, y lo término por colocar en su mejilla...

A pesar de que no podía ver sus ojos verdes en el momento, Astrid recordaba vívidamente cómo brillaban cuando hablaba con ella, la forma en que casi brillaban cuando él hacía el amor con ella... Ella intencionalmente no habia contactado con él en este último viaje. Una parte de ella estaba  preocupada de que ella estuviera demasiado unida a él, y que cuando el se de cuenta de que Astrid Hofferson era indigna de su amor y la rechazara, ella quedaría destrodada.

Irónicamente, ni siquiera se suponía que estuviera en París en este momento...sus superiores pensaban que estaba de camino a Tokio, y probablemente no estarian muy felices si se enteran de la "parada".

Las cejas de Astrid se juntaron en un fruncimiento de confusión cuando se dio cuenta de que era demasiado tarde... El apego que ella temía ya estaba allí. ¡Y no había podido aguantar un día sin verlo!

Cuando habían comenzado este asunto, ella se había preocupado por su poder sobre ella. La presencia de Hiccup siempre la había inquietado de una manera peculiar.

¿Era amor lo que sentía? ¿Ese dolor en el pozo de su vientre por el pensamiento de nunca ver su sonrisa otra vez? ¿No volver a sentir el contacto de sus labios o la caricia de sus manos? 

–yo creo que si–

La rubia miró fijamente a Hipo.... ¿Acaso estaba despierto y escuchaba hacer de ella un idiota? Experimentalmente, ella lo empujó en ese lugar en sus costillas donde sabía que era extremadamente cosquilloso...

Él durmió, aunque hizo unos cuantos gruñidos más.

–¿yo creo que si? Oh Hipo eres un diplomático hasta durmiendo– Astrid murmuro con una sonrisa...

La sonrisa se desvaneció lentamente mientras consideraba su consejo. Esa era otra cosa al considerar al involucrarse con Hipo. La diplomacia era tan parte de él como el aire que respiraba...Con un sobresalto, Astrid se sentó en él sofá, sorprendiendo a Hipo en la vigilia de verdad esta vez.

–¿Qué,ya es hora de levantarse ?–murmuró confuso mientras se incorporaba.

Astrid se volvió hacia él, sentada con las piernas encogidas debajo de ella. Hipo la miró y frunció el ceño al notar sus lágrimas por primera vez y extendió una mano para tocar su rostro.

–¿Astrid?–preguntó curioso

–Todo este tiempo...no lo entendí, no sé cómo fuiste tan paciente conmigo cuando me rehusé a entender, y fue hermoso, Hipo, esto es hermoso...¿lo has visto?–

El todavía la miraba con la expresion mas adorable de la confusión y Astrid sabía que estaba murmurando, que no tenía ningún sentido...Pero los sentimientos, las emociones que se agolpaban dentro de ella eran tan intensas que no estaba muy segura de cómo dejarlas salir.

Ella tomó la mano con la que le había tocado el rostro y la apretó contra él. Con una sonrisa trémula, ella lo miró y susurró suavemente.

–Orgullo, terquedad, arrogancia, temperamento.–

Un brillo diminuto apareció en los ojos de Hipo, como si pensara que entendía, pero tenía miedo de esperar.

–¿que estas diciendo? –

–Te estoy susurrando mi debilidad, Hipo, ¿Compartirás tu fuerza conmigo?–

La esperanza brilló intensamente en sus ojos y una sonrisa incrédula comenzó a estirarse en la cara de él castaño.

–oh, Astrid– el susurró, pero todavía podía ver un poco de incredulidad en su expresión

Llevando la mano que sostenía la mejilla del chico, ella tomo su mano y la besó suavemente. –Te amo, Hipo, te amo con todo mi corazón y con toda mi alma y siento mucho hacerte pasar por todo esto ...–

Hiccup tuvo miedo de moverse por un largo momento, temiendo que estuviera soñando y estaba a punto de despertar. 

La alegría que bullía dentro de él le hizo sentir como si estuviera a punto de estallar. Y cuando finalmente se permitió creerlo... que Astrid estaba sentada frente a él, declarando su amor por él, Hipo se acercó y la besó profundamente.

Apartándose, le enmarcó la cara con sus manos, mirando profundamente sus ojos azules zafiro. 

Ante el amor que vio brillar allí, el último pedazo de su duda desapareció e Hiccup se encontró riendo de alegría.Reunió a Astrid de nuevo en un apretado abrazo, enterrando su rostro en su cabello. Todos los cariños que Hipo había sostenido en estos muchos meses comenzaron a derramarse de sus labios, como si no pudiera retenerlos más tiempo.

Los dos se sentaron en él sofá con las manos unidas, de alguna manera riendo y llorando todo tipo de frases incoherentes como "Oh, mi amor" "Mi corazón" y "Te amo, te amo". 

Hiccup cayó al revés en él sofa, tirándola sobre su pecho y besándola suavemente. Él la miró a los ojos durante un largo rato, todavía asombrado por el amor que veía allí reflejado.

–Siempre me sorprendes, mujer, nunca ni en un millón de años habría pensado que me dirías esas palabras primero, pensé que tendría que arrancartelas a la fuerza –

Una mirada de seriedad y asombro se apoderó de la cara de Astrid –¿tan inoportuna soy?–

Hipo estaba aturdido,oír a Astrid decir que lo amaba era algo que él nunca había creído que pudiera suceder. Ahora, oírla hablar con un tono normal y no de la manera ligeramente burlona que solía emplear, literalmente lo dejó sin habla.

Astrid sonrió ante la expresión de su rostro. Mientras le explicaba a Hipo como había decidido confesarse

–tuve un leve sueño...creo que no duró mas de cinco minutos, pero en él se mencionaba algo sobre un vínculo... ¿Es verdad?–

–Oh, mi amor, ha habido un vínculo entre nosotros desde el momento en que me apuntaste con un arma por primera vez– Hipo se rió entre dientes.

Ella lo miró, más por costumbre que por cualquier otra cosa. –¿Así que siempre supiste que esto pasaría?–

–Nunca me atreví a esperar que esto sucediera, pero ciertamente he soñado mucho–

–¿Incluso cuando viste a Mala?–

Hipo se sorprendió de cómo la punzada de dolor que normalmente se producía con ese nombre se había reducido a apenas una pluma... "No, no estoy sorprendido " pensó mientras miraba al amor de su vida," tiene sentido". 

Él se había preocupado profundamente por Mala, pero Astrid siempre había retenido su corazón, aunque no lo supiera por completo.

–Mala fue ... una experiencia por la que estoy agradecido, pero mi corazón sabía que ella no era mi alma gemela, sólo tomó un tiempo para que mi cabeza se diera cuenta de eso...tenía sueños eróticos sobre ti mientras estaba con ella... Nunca podría ser desleal con alguien a quien me había comprometido de esa manera, pero tú siempre, siempre estuviste en algún rincón de mi mente. No pasaba un día sin pensar en ti de alguna manera; Preguntándome si  estabas bien, si sigues teniendo pesadillas, si todavía quieres matarme –Hipo dijo mientras su boca se levantaba en una mueca algo irónico.

–Será mejor que permanezcas en él lado luminoso de mi cabeza, porque eso podría cambiar si me molestas seriamente– Astrid dijo con malicia

Hipo se rió y la abrazó fuertemente contra él, besándole la parte superior de la cabeza antes de susurrarle al oído. –eso no hacia falta decirlo, he descubierto lo peligrosa que puedes ser...–

Astrid le dio un puñetazo en el brazo y Hiccup jadeó, gimoteando...Un poco dramáticamente. 

Ella lo miró a la cara y extendió su mano para trazar la curva de su mejilla con su dedo.

–Sólo contigo, Haddock, sólo contigo–dijo ella con suavidad

Sus labios se encontraron otra vez, e Hiccup pensó que nunca se cansaría de besar esa hermosa boca....

–asi que...Heather ha estado llamando por cinco minutos, al parecer si tiene buena intuición – Astrid se burlo al avisarle al chico que él teléfono había estado sonando frenéticamente por un rato.

–hay Heather...siempre oportuna–

Hiccup abrió la boca para hablar, pero vacilo al pensar como reaccionaria su hermana por no contestar él teléfono. 

–Hola Heather–

–¡Hipo! No estoy interrumpiendo nada, ¿verdad?–

–No por el momento, no– Él sonrió mientras podía sentir la vergüenza de su hermana a través de él aparato

–Es que.... sentí una oleada de alegría y felicidad por ti... Era tan fuerte que yo ...–

–¿No pudiste resistir ser un poco entrometida?–

–¡Cállate! Sólo dime, ¿es lo que creo que es? ¿Eres tu y tu misteriosa lady que están juntos?–

–Mi Lady misteriosa... Muy buena descripción, Heather....Hermana,me dijo que me amaba hace unos minutos.–

–¡Hipo!¡eso es maravilloso! ¿Puedo saber su nombre ahora?–

Hipo rió en voz alta ante la impaciencia característica de su hermana...– Hmm. No, no lo creo. Creo que lo guardaré como una sorpresa para la fiesta de cumpleaños de Tacio.–

–eso no es justo–

Muy suavemente, para que Heather supiera que no había ningún daño intencionado, Hiccup corto la llamada luego de unos minutos

–¡auch eso dolió As!–

–eso es por no avisarme que ibas a presentarme la otra semana–