CAPITULO 2

"Entonces, mi papá fue a ver que pasaba y se encontró con un oso comiéndose nuestra comida y nos quedamos sin picnic"

Jungkook escuchaba atentamente la historia de Jimin, mientras este hacía expresiones muy exageradas con sus manos. Ambos contaban historias de sus familias.
Por ejemplo, cuando Jin le dijo a Kook que los bebés salían de la popo de las personas específicamente mujeres y él buscó en la popo de su perrita para saber si había tenido cachorros, llevándose una decepción cuando no encontraba a los perritos.

O la vez que Jimin estaba con su familia en la playa y enterraron a su padre en la arena, el problema es que ya todos se iban y de no ser porque se les había olvidado la pala de Jimin en la arena estaban seguros que iban a dejar al hombre enterrado.

La campana sonó, eso quería decir que todos debían volver a sus aulas, ambos hicieron puchero porque se la estaban pasando bien pero iban a regañarlos si no entraban a clase; Kook se enteró que Jimin era un año mayor, por lo tanto de ninguna manera podría verlo.
Luego de despedirse, ambos entraron a sus últimas cuatro clases para dar por concluida la jornada escolar, por ese día.

Debería de invitar a Jimin a su casa para decirle a su mamá que tenía razón, que hizo un amigo en su primer día de clases y que era muy divertido, pero a ella no le gustan mucho las visitas así que desechó la idea.

A la salida el pelinegro se encontró con su hermano, rápidamente ambos subieron al auto y se dirigieron a casa. Minutos después llegaron, el mayor de los hermanos fue a su habitación, mientras el menor buscaba a su mamá para contarle la buena noticia; aunque no la había encontrado. Era algo común, su mamá era enfermera. Trabajaba todo el tiempo.

Pasaron las horas hasta que vió a su madre en la cena, le contó sobre Jimin y ella lo felicitó. Después de cenar, agradecieron a Dios (y al chef) por sus alimentos; ambos hermanos se dirigieron cada uno a su habitación para terminar su día.

Vaya que estar en primer año de primaria era agotador, sobre todo eso de hacer amigos.

La primera semana de clases se pasó volando. Su maestra le dejaba mucha tareas, merecía descansar. Era viernes en la tarde, Kook y Jimin se encontraban jugando en la resbaladilla del parque cuando un gritó los alertó.

"¡GOLPE AVISA!"

"Golpe qu-" Kook no terminó la frase cuando ya había recibido un golpe en el rostro. Se sobó el rostro y sujetó la pelota viendo como a lo lejos había dos niños que parecían ser los dueños. "¿Quién la aventó?" un niño castaño de cabello ondulado automáticamente apuntó al niño de piel pálida a su lado.

"¿Ah? Traicionero no fuí yo. No le creas, solo danos la pelota e imaginemos que esto no pasó" Kook veía como el pelinegro se acercaba poco a poco por la pelota, pero antes que pudiera tomarla, Kook solo la ponchó con un vidrio que estaba cerca.

"Ups"

"¿Qué te pasa? Es la única pelota que tengo, no es justo ¿Por qué lo hiciste?" Yoongi se acercó gritándole para 'recoger' su pelota ponchada.

"Me golpearon en la cara y me dolió, es lo mínimo que puedo hacer" Kook reía victorioso mientras que el niño a su lado estaba a punto de colapsar.

"Déjalo Yoongi, iremos a jugar a otro lugar" el castaño trató de tomar del brazo a su amigo para alejarlo de ahí pero no predijo lo siguiente. Era Yoongi aventando una bola de lodo a la cara del niño que había ponchado su pelota.

"¡Me las vas a pagar!" Dijo Yoongi aventando otra bola de lodo a su ropa

Kook quería llorar, pero no iba a dejar su orgullo de lado, así que aventó al pelinegro a un charco de lodo como venganza. Tae se acercó para ayudar a Yoongi pero fue empujado al lodo por parte del otro niño que se encontraba ahí provocando que cayeran juntos.

Jungkook se divertía al ver como esos desconocidos y Jimin estaban enlodados. Aún que su torpeza lo llevó a resbalarse y caer dentro del charco también, haciendo que los cuatro empezaran una guerra de lodo.

"¡Ayuda Jimin, ocupo refuerzos! ¡Los desconocidos nos van a asesinar!"

"Van refuerzos" Jimin disparaba con sus pequeñas manos bolas de lodo hacia todos lados haciendo que los otros niños se ensuciaran más. "Jungkookie, alerta roja. Sujeto de cabello ondulado encontró una manguera de agua, repito, sujeto con manguera de agua"

"¡Taehyung a la cara!" Yoongi se lo había tomado muy personal. 

"¡Si capitán!" Taehyung hizo una señal militar, seguido de eso aventó un chorro de agua a la cara de sus enemigos.

Todos jugaban a la guerra de lodo y agua hasta que el suelo se comenzó a oscurecer. Empezaría a hacer más frío y podrían enfermarse así que dejaron de jugar.

"¿Cómo se llaman?" El niño con piel pálida habló.

"Yo soy Jimin y él es Jungkook" habló el niño de grandes cachetes.

"Un placer, soy Yoongi y él Taehyung" dijo apuntándose primero y después apuntando a su amigo.

"Deberíamos volver o nos van a castigar Yoongi"

"Si" ambos se pusieron de pie "Debemos irnos. Nos podrían regañar si no volvemos temprano, podríamos jugar mañana"

"No lo creo, mi familia y yo saldremos" Jungkook lucía apenado "Pero el domingo sí"

"Es domingo de misa, Jungkook"

"Después de misa"

Yoongi lo pensó un momento pero aceptó, se había divertido. "Bien, nos vemos después de misa aquí. Adiós" Yoongi y Taehyung se despidieron y salieron corriendo a toda velocidad al orfanato, si llegaban tarde Amelie iba a castigarlos lo cual sería una tragedia total.

Mientras tanto Jimin y Jungkook se fueron a sus casas por separado, Jimin recibiendo un regaño de su madre por llegar a casa sucio. Kook por su parte entrando sin llamar la atención puesto que sus padres no estaban.

A veces la soledad dentro de esa casa era abrumadora, sobre todo para un niño que estaba en pleno crecimiento y necesitaba atención de sus padres. Su mamá era enfermera y su papá era militar, tiempo es lo último que tenían para dedicarle a él o a su hermano. No recordaba la última vez que había jugado con su familia de la manera en que había jugado ese día.

Yoongi y Taehyung llegaron al orfanato tratando de hacer el menor ruido posible, aunque era imposible. Amelie tenía un oído realmente agudo.

"¿Dónde estaban mocosos?¿Creen que pueden escaparse cuando quieran? Están aquí, así que deben obedecer mis órdenes. Las órdenes son no salgan sin mi permiso y yo nunca doy permisos" Amelie era una señora de 40 años, cabello un poco grisáceo, lentes grandes, algo pasada de peso y que siempre colgaba consigo un collar con una cruz.

"Perdón Amelie, no volverá a pasar"

"Siempre es lo mismo, es suficiente que vayan a la escuela del gobierno ¿no es suficiente libertad? Vayan a bañarse, después van a sus camas y no me molesten. Tengo cosas importantes que hacer"

Ambos niños se dirigieron rápido a los baños sorprendidos de no tener un castigo por parte de la mujer. Aunque no se libraban del agua fría, si hubieran llegado dos horas antes tal vez hubieran tenido agua caliente, pero prefirieron quedarse a jugar y sufrírian las consecuencias. Aunque ninguno se arrepentía.

Terminando de bañarse los dos se fueron a la cama con la ropa más caliente que encontraron para no resfriarse. Ambos habían tenido un gran día, habían escapado y también hicieron amigos nuevos. Era lo más bonito que le había pasado a Taehyung desde la última semana que llevaba ahí.

Posiblemente sus padres estarían felices de él por hacer amigos nuevos; habló con su ángel de la guarda antes de dormir y le deseó buenas noches a Yoongi.

"Esposos, amen a sus esposas, así como Cristo amó a la iglesia y se entregó por ella para hacerla santa. Él la purificó, lavándola con agua mediante la palabra...."

Aburrido.

Jungkook se estaba quedando dormido en misa como era costumbre, siempre estaba bostezando. Él solo iba porque sus papás lo obligaban, estaba seguro de no entender ni la cuarta parte de las cosas que decían.

"Nadie ha visto jamás a Dios, pero, si nos amamos los unos a los otros, Dios permanece entre nosotros, y entre nosotros su amor se ha manifestado plenamente"

¿Por qué las monjas se visten de blanco y negro? Parecen pingüinos, ¿será a propósito o también tendrá un significado espiritual?

Estaba tan metido en sus pensamientos que no se dió cuenta cuando la misa había culminado. Había esperado todo el día para poder ver a sus nuevos amigos, saliendo de la iglesia se encontró con dos figuras peculiares debajo de un árbol mirando directo hacia allá. Jimin se acercó a él y ambos fueron al árbol saludando a las dos personas allí.

"Hola Yoongi, hola Tae" se saludaron de puño todos pero el niño de cabello ondulado no quitaba su mirada de Kook.

"¿Por qué tienen trajes? No sabía que las misas eran tan formales" Ambos niños se miraron y era cierto, Jimin tenía un pequeño traje gris oscuro y Jungkook uno negro.

"Pues es normal tenerlo, no me digas que nunca haz ido a una misa Tae"

"No" el pequeño miró hacia el suelo avergonzado ya que no sabía cómo funcionaba eso. Sus padres le hablaron acerca de Dios, pero decidieron que no le interpondrían una religión a su hijo; así cuando Taehyung creciera él eligiría si quería pertenecer a una religión o no. 

"Bueno, si quieres puedes venir conmigo la próxima semana" esta vez habló Kook poniéndo su mano en el hombro de su amigo "No es tan divertido, pero después de eso mi familia hace una comida y podrías venir. Bueno tú también, osea ambos" ahora el avergonzado era él.

"Gracias Jungkook, pero no creo poder"

"Piénsalo bien, osea piénselo ambos porque es una invitación para ambos"

"Yo así estoy bien, mi abuela me llevó por el camino budista" el niño de piel pálida respondió.

"Entiendo...pues la propuesta sigue en pie"

Después de esa charla los cuatro niños se quedaron un rato jugando y terminar comiendo gomitas en el pasto. 
Media hora después Jimin se tuvo que retirar, dejándo a Taehyung, Jungkook y Yoongi.

"¿A qué escuela van?" Jungkook queria saber algo de ellos, solo sabía sus nombres y nada más.

"Vamos a la primaria Willow Oak"

¿Willow Oak? Jungkook conocía esa escuela, era una primaria del gobierno donde iban los niños de bajos recursos. Eso quería decir que ellos eran pobres, su padre siempre le decían que no se juntara con ese tipo de niños porque tenían piojos, pero vamos...ellos no podían tenerlos, de ser así él ya habría sentido comezón en su cabeza.

"¿A qué escuela vas tú, Jungkook?"

"Emerson Waldorf, igual que Jimin"

"¡¿Qué?! Esa escuela es una de las más caras de la ciudad, ¿en qué trabajan tus papás?" Yoongi estaba demasiado consternado, esa escuela es privada, si no eras rico las posibilidades de entrar ahí eran nulas.

"Mi papá es militar y mi mamá enfermera, nada del otro mundo"

"¿Cómo que nada del otro mundo? Nadie tiene padres así, debes vivir en una casa grande con un gran comedor, tu propia habitación y alguien que te cocine ¿no?. Deben tratarte como un príncipe" dijo el castaño.

Tae alucinaba de lo grande que sería la casa de su amigo. Cuando él vivía con sus papás estaban alojados en un departamento en renta a las afueras de la ciudad, tenían una habitación para los tres y un pequeño televisor que casi no funcionaba.

"Tengo eso, pero no es la gran cosa cuando siempre está solo"

Se formó un silencio entre ellos tres, al parecer los tres tenían ausencia de sus padres, aunque en uno de los casos estuvieran vivos aún. Yoongi iba a mencionar algo pero los pequeños vieron como una persona se acercaba a ellos, era alguien alto y también tenía traje.

"Jungkook debemos irnos, mamá debe hacer turno y papá se fué cuando terminó la misa. No nos pueden dejar solos" el niño también tenía ojos oscuros, tenía labios gruesos, era delgado y al parecer hermano de Jungkook.

"Ya voy Jin" Kook se levantó sacudiéndose su pantalón, los otros copiaron su acción "Bien, debo irme pero ¿seguiremos viéndonos no?"

"Obviamente, nos vemos luego" ambos se despidieron y se dieron media vuelta para irse.

Cuando ambos niños estaban lejos Jin habló con su hermano. "¿Por qué hablas con ellos? Se ve que son de barrio pobre, mamá y papá nos prohibieron hablar con ese tipo de personas"

"No tiene algo malo, es una clase distinta pero son buenos, es lo que importa"

"¡Pero ellos son pobres! Te van a pegar los piojos y tú me los pegaras a mí, no puedo dejar que pase eso" ambos se dirigían al auto donde ya los esperaban el chófer y su mamá. "¿Son tus amigos?"

"Lo son" el menor subió al auto cerrando la puerta en la cara de su hermano.

Taehyung y Yoongi llegaron al orfanato con la noticia que había una familia haciendo un trámite de adopción. Cuando vieron a quien habían adoptado se sorprendieron.

"¡Penny! ¡Te han adoptado!" ¿Cómo podía eso posible? ella llevaba solamente 2 días y ya la habían adoptado, había niños que tenían años allí y nadie los quería. Aunque lo negaran siempre las familias tenían favoritismo a las niñas y a los bebés.

Ese día tanto Tae como Yoongi se fueron a dormir con una cara de tristeza y decepción, ninguno quería estar ahí. No era bonito ver como estaban adoptando a muchos niños y ninguno era alguno de ellos, eso empeoraba las cosas.

Taehyung lloró esa noche, no quería estar ahí, constantemente soñaba que estaba con su familia en la sala de su pequeño departamento comiendo pizza y siendo felices como cualquier otra familia. Soñaba que nada de lo que había pasado era verdad, que todos estaban bien y eran felices pero luego despertaba y la realidad lo golpeaba diciéndole que todo real; que él estaba ahí esperando a que una familia lo adopte y posiblemente lo hagan feliz.

Yoongi por su lado estaba acostumbrado a ese lugar, tenía casi un año ahí y nadie lo miraba.

A veces se preguntaba si en realidad alguien lo adoptaría, ¿como alguien lo adoptaría? Debía ser alguien valiente. Él podía ser maleducado a veces, sin contar que tenía algunos pensamientos raros de ver el mundo, ¡pero estaba sano! Sabía curar a la gente, él cuidó a su abuela hasta el último momento, también sabía cocinar, no era gran cosa lo que hacía pero sabía bien, su abuela le repetía constantemente que cocinaba rico; también sabía tejer y limpiar, era suficiente. Pero nadie lo elegía y las esperanzas de ser adoptado solo se disipaban.

.

"¿Cómo así?"

"Enserio no sé, pero no durará mucho. Mamá dijo que son unos días"

"¿Y como vamos a jugar? No podemos jugar sin tí, sería tan extraño Jiminie"

Jungkook estaba hablando por el teléfono familiar con Jimin, al parecer Jimin se había resfriado y no podría ir a jugar al parque por un tiempo.

"¿Pero te vas a recuperar verdad?"

"Si, solo debo tomar mis vitaminas de naranja y un jarabe que sabe a pescado"

"Eso suena muy mal, pero trataré de ir a visitarte y te llevaré golosinas"

"Bien, estaré esperando por tí Kookie. Debo bañarme, adiós"

"Adiós" colgó el teléfono

Bueno ¿ahora qué?

Quería jugar con alguien pero Jimin estaba enfermo y no tenía el número de teléfono de Taehyung y Yoongi. Se aburriría tanto estando solo, así que fué a hacer lo mejor que sabe, molestar a su hermano.

Jungkook se dirigía a la habitación de Jin para molestarlo, cuando escuchó unas voces provenientes de la habitación de sus padres.

"Si lo hicieron...."

Eran sus papás hablando, no debería ser chismoso pero amaba eso, además ¿que tenía de malo escuchar solo un poquito? Se acercó a la puerta de la habitación de sus padres para escuchar más de cerca.

"Pero Namjoon te dije que no lo hicieras, que tuvieras un poco de empatía"

"Era un idiota, claramente pude hacerlo yo pero que mejor que lo hiciera alguien más"

Silencio.

"¿Que pasa si alguien se entera?"

"Será silenciado"

Jungkook se alejó de la puerta, no entendía. Pero suponía que no importaba y que no podía ser algo malo. Adultos, nadie los entiende.

Ya no recordaba que iba a hacer, así que fué a la cocina y agarró algo de comer, que mala memoria tenía debería trabajar más en eso, en fin. Mañana visitaría a Jimin después de clases, le llevaría un poco de dulces para alegrarlo.


El siguiente capítulo es el último de ellos siendo niños.

Las faltas de ortografía se van a modificar con el tiempo.

Es todo, tengan buen día ✨ Fer

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