10. monster

୧ ⋅ ・。━━ 𝐒𝐔𝐑𝐕𝐈𝐕𝐄𝐒 𝐅𝐎𝐑 𝐌𝐄 *ૢ✧ ཻུ۪۪⸙͎
chapter ten. ; monster ➤ i'm an albatraoz ▬▬  𝗮𝗻 𝗹𝗲𝗲 𝘀𝘂-𝗵𝘆𝗲𝗼𝗸 𝗳𝗮𝗻𝗳𝗶𝗰𝘁𝗶𝗼𝗻 🧟‍♀️  ‧₊˚ ©writeen by -swttxhrry. !!!


LOS ALUMNOS DE HYOSAN SENTÍAN UN NUDO EN LA GARGANTA al ver como el bullie lanzaba lejos a Nam-lu y tomaba de los hombros a On-jo como rehén, Cheong-san corrió rápido hacia su mejor amiga sin pensarlo dos veces para poder salvarla, Gwi-nam al ver como el chico pollo se acercaba a él avienta a un lado a la chica tierna y empuja a Cheong-san al suelo, después se pone encima de él y empieza a tratar de quitarle el ojo. Su-hyeok es el segundo en actuar, pues quita de una patada a Gwi-nam de encima de su mejor amigo y trata de golpearlo pero este se defiende y lo golpea en el estómago quitándole todo el aire y dejando que cayera al suelo.

Nam-lu se levanta con cuidado del suelo y mira furiosa al bullie, ella corre hacia este y lo empuja al suelo para después subirse arriba de él y empezar a golpearlo con los puños. Gwi-nam trata de detenerla pero la fuerza de la azabache es superior a la de él, hasta que en una distracción el bullie logra girarse quedando ahora él arriba de Nam-lu, este sonríe burlón y empieza a ahorcar a la azabache para matarla y quitarse un problema de encima de una vez por todas. On-jo corre y trata de quitarle de encima a Gwi-nam a la azabache pero es inútil pues el bullie voltea hacia la chica tierna y la vuelve a empujar lejos de él.

— Tú y Cheong-san son unos malditos. Los mataré a ambos.

Nam-lu gime adolorida y trata de quitar las manos del bullie de su cuello. El aire empezaba a faltarle, podía sentir como perdía el conocimiento por la falta de oxígeno hasta que algo o más alguien quema el rostro de Gwi-nam con un pedazo de madera en llamas logrando por fin que la azabache se pudiera safar. Pará sorpresa de la pequeña Choi NAM-RA fue la que había tomado la valentía de acercarse y salvarla

Mientras el bullie se quejaba la presi tomó a la azabache y la alejo de Gwi-nam.

— ¿Qu-uien eres?

Pregunta Joon-Yeong mientras temblaba cómo un Chihuahua por el miedo que sentía en esos momentos.

Gwi-nam ríe sarcástico y mira incrédulo a los chicos.

— ¿Eres del club de corazones?

Pregunta confundido Dae-su mirando el suéter que traía el bullie.

— Ahg, ¿Como no pueden saber quién soy?

Pregunta ofendido Gwi-nam.

De repente una risa burlona aparece en el silencio profundo e incómodo de la situación.

Nam-lu reía divertida mientras miraba al suelo, los demás la miraron raro.

— ¿De qué te ríes, loca?

Pregunta Gwi-nam.

— ¿No es obvio? De ti. Me rio porque piensas que eres alguien importante en el instituto, pero la realidad es que... eres un don nadie.

Gwi-nam grita enojado y eufórico de las palabras de la azabache y corre hacia ella, Nam-lu no se queda atrás y también corre hacia él.

La azabache logra tomar del cuello a Gwi-nam y lanzarlo como él lo hizo primero con ella, después se acerca cortiendo hacia él para golpearlo pero este logra esquivar el golpe dando una pirueta. Aprovechando ese movimiento Gwi-nam la toma por la espalda y enrolla su antebrazo por el cuello de Nam-lu.

— Me dejaste muerto durante una hora.

Reclama en un susurro el bullie.

— Ojo por ojo, diente por diente y mordida por mordida.

Nam-lu toma fuerza y se hace para enfrente, dajandolo caer de espaldas  al suelo. La azabache aprovecha eso y le propina unos buenos puñetazos al bullie pero este no dejando que gane nuevamente la chica Choi, la agarra de la mano y la hace girar en el suelo.

— Tú y yo juntos podríamos haber sido poderosos.

Gwi-nam mira con una sonrisa triunfante a Nam-lu, quien seguía en el piso.

— Vete al diablo.

Susurra con desprecio la azabache dándole un cabezazo al bullie y desorientandolo un poco pero suficiente para que ella se parara del suelo y se alejara.

— ¡¿Que no te das cuenta?! Somos iguales.

Gwi-nam se acerca nuevamente a Nam-lu queriendola derribar pero esta lo detiene con sus manos, quedando ambos en medio de la azotea empujandose el uno con el otro para ver quien es el vencedor.

— No... Yo soy mejor.

La azabache sin pensarlo dos veces atraviesa con su mano el pecho de Gwi-nam y le arranca el corazón, matandolo.

Todos se quedan mudos, viendo la escena mientras que Nam-lu siente el peso del cuerpo muerto de Gwi-nam sobre ella.

El bullie había caído en sus brazos, la azabache suspira cansada y deja que el cadáver de Gwi-nam se resbale por su cuerpo hasta caer al suelo, voltea hacia su mano derecha en la cual aún seguía sosteniendo el corazón del bullie, este se encontraba con algunas manchas negras y algunas venas color verde podrido. Era asqueroso.

— ¿Estas bien, Nam-lu?

Preguntan detrás de la azabache, ella parpadea varias veces y después deja caer el corazón al suelo, junto al cadáver inerte de Gwi-nam.

Nam-lu se voltea lentamente a sus compañeros y los observa nerviosa, esperando alguna reacción negativa por parte de todos, pero estos sólo se quedan callados y mirando a la azabache sin expresión alguna.

— Eso fue muy violento. Lo siento.

Su-hyeok es el primero en acercarse a ella y tomarla de las mejillas, la inspecciona con la mirada de abajo hacia arriba buscando algún raspón o herida, pero Nam-lu se encontraba impecable. Des-su suspira aliviado y abraza a la azabache ocultando el rostro de esta en su pecho.

— Debí de hacer más. Debí ayudarte. Lo siento, lo siento muchísimo.

Susurra Su-hyeok.

— Está bien. Estoy bien. Todo acabó.

Ambos chicos quedan en la misma posición abrazados durante unos segundos hasta que Dae-su los interrumpe.

— Oigan, perdón pero ¿Que hacemos con el cuerpo?

— ¿Y el corazón?

Lo último lo pregunta Woonji.

Nam-lu y Su-hyeok se separan y voltean hacia el cadáver de Gwi-nam.

— Yo digo que debemos aventarlo por el balcón.

Sugiere Joon-Yeong.

— Hay que quemarlo. Pará que no reviva.

Dice Nam-lu.

— Le arrancaste el corazón. No creo que reviva.

Dice Dae-su con una sonrisa divertida y nerviosa pegada a su rostro.

— Es mejor prevenir.

La azabache se acerca al cuerpo de Gwi-nam y lo voltea boca arriba. Los ojos del bullie se encontraban abiertos, su piel empezaba a tomar un color blanco y en su pecho se encontraba el agujero que había hecho Nam-lu con su mano.

— Es mejor que miren para otro lado.

Susurra la azabache.

— ¿Porque?

Pregunta On-jo confundida.

— Lo despedazare.

Todos al escuchar eso se quedaron mudos.

Dae-su, Woonji y Joon-Yeong fueron los primeros en voltearse, después Jimin y su amiga quienes decidieron mejor alejarse de ahí. Nam-ra, Cheong-san, On-jo y Su-hyeok se quedaron en la misma posición.

— Te ayudaré.

Dice Su-hyeok acercándose a Nam-lu.

— Haré un espacio para quemar los restos. ¿Me ayudas, On-jo?

La chica tierna asiente ante la pregunta de la presi.

— Conseguire cosas flamables para que queme más rápido.

Dice Cheong-san mientras camina hacia las cosas tiradas como basura en una de las esquinas de la azotea.

— No es necesario que hagan esto.

Dice Nam-lu.

Su-hyeok la voltea a ver y le sonríe de lado.

— Somos amigos. Y los amigos se ayudan en lo que sea, hasta en ocultar cadáveres.

Nam-lu sonríe y asiente con la cabeza.

Los chicos se volvieron a sentar en círculo como lo estaban antes de que todo con Gwi-nam empezará, Nam-lu se encontraba en medio de Su-hyeok y Nam-ra, la azabache volteaba cada cinco minutos a ver como el cuerpo desmembrado del bullie ardía junto a la madera y restos de basura en el pequeño espacio que se encargaron de hacer On-jo y la presi.

— ¿Nadie dirá nada de lo que pasó?

Preguntó Jimin, haciendo que todos voltearan a verla.

— ¿De qué hablas?

Pregunta Su-hyeok.

— ¡Nam-lu le arrancó el corazón a Gwi-nam y lo despedazo!

— Salvo nuestras vidas.

Contradijo Nam-ra.

Jimin mordió su mejilla interior y volteo a ver furiosa a la azabache.

— ¿Que sentiste al asesinar a Gwi-nam? ¿Nos harás eso también si te hacemos enojar?

— ¡Ya basta!

Grita enojado Su-hyeok.

Nam-lu no es Gwi-nam.

— Claro que lo es. A ambos los mordieron un zombie y no se convirtieron, ambos son unos fenómenos...

— Mediombies.

Corrigió en un susurro Dae-su, ganándose un codazo de parte de Woonji.

— ¿Si te dijera que no haría lo mismo me creerías?

Pregunta Nam-lu sin apartar la vista de la fogata.

— ¿Porque debes de decirlo así? ¿Porque no haces un esfuerzo para que te creamos? Estaremos juntos de todas formas.

Nam-lu suspiro cansada y abrazo sus piernas, pegandolas a su pecho.

— Solo hemos sido Nam-ra y yo en la vida, ninguna tenía a alguien más, no teníamos amigos. Nunca pensé que me sentaría junto al fuego con ustedes así. Es muy bonito. Es mi primera vez. Si salimos de aquí, sentemonos junto a una fogata y volvamos a juntarnos así. Espero que podamos.

Todos se quedaron en silencio, Jimin bajo la mirada apenada mientras que los demás sonreían de lado.

— Claro, hagamoslo. Si alguien enciende un fuego juntémonos todos.

Dice On-jo mirando nerviosa a Nam-lu. La azabache voltea a verla y le sonríe de lado.

De repente el aleteo de las hélices de un helicoptero empiezan a escucharse, por lo cual Nam-lu voltea hacia el cielo y deja de sonreír.

— ¿Pasa algo?

Pregunta Su-hyeok al ver el cambio de actitud de la azabache.

— Escucho algo.

Responde Nam-lu mientras se levanta del suelo.

— ¿Que?

— Creo que... Es un helicoptero.

Todos voltean hacia el cielo, en busca del dichoso helicoptero, pero lo único que encuentran es la oscuridad del cielo.

— Yo no veo nada.

Susurra Cheong-san.

— Tal vez te confundiste.

Dice esta ves Dae-su.

— ¡O tal vez no! ¡Miren ahí!

Grita feliz Woonji, señalando un helicoptero que venía hacia ellos.

Todos empiezan a tomar un palo de madera con fuego para hacer señales al helicoptero, Nam-lu por otro lado frunce el ceño adolorida pues el ruido que emitían las hélices del helicoptero eran muy fuertes para ella.

— ¡Por aquí! ¡Aquí señor!

— ¡Estamos aquí! ¡Por favor!

— ¡Aquí! ¡Aquí!

El helicoptero baja razonablemente en el techo del instituto, de el bajan unos cuantos soldados quienes al verlos los apuntan con sus armas.

— Abajo. Todos al suelo.

Los chicos se quedan confundidos pero hacen caso a la orden del soldado.

Su-hyeok toma de la mano a Nam-lu y ambos se agacha juntos. Otro de los soldados se acerca a ellos y empieza a checar la temperatura de todos.

— Diez sobrevivientes confirmados. Checaremos la temperatura de cada uno.

— Despejado.

— Despejado.

Su-hyeok voltea a ver de reojo a Nam-lu, quien al ver lo que los soldados estaban haciendo empezó a temblar de miedo.

Cuando todos pasaron y fue turno de la azabache esta contuvo la respiración.

36.5

— Despejado.

Nam-lu cerró los ojos aliviada y miró a su lado donde Su-hyeok también parecía aliviado.

— Los rescataremos al final de la misión. Ya pueden levantarse. ¿Son los únicos sobrevivientes?

— No lo sabemos.

Responde Cheong-san.

— Debe de haber más.

Dice Nam-lu.

— Bajaremos unos minutos. Esperen aquí.

Los chicos suspiraron aliviados y felices pues por fin irían a un lugar seguro.

Tres soldados bajan de la azotea con una correa en la cintura mientras que el último se quedaba vigilando. Nam-lu ladea la cabeza y empieza a escuchar los comunicadores de los soldados, dándose cuenta que la verdadera razón por la que habían venido era por una computadora, más específico, la computadora del profesor Lee.

— Están buscando una laptop. La laptop del profesor Lee.

Susurra la azabache haciendo que los demás volteen a verla confundidos.

— ¿Porque?

Pregunta Dae-su.

— Porque el profesor Lee inició todo esto. Y seguramente en su cómputo debe de tener la solución. Una cura tal vez.

Responde Nam-lu mientras se esconde en los brazos de Su-hyeok.

Pasan unos minutos y los tres soldados regresan y el helicoptero se acerca nuevamente.

— Sargento, suba primero. Los subiremos de en uno en uno. Quédense quietos aunque tengan miedo. ¿Esta bien?

Todos asienten con la cabeza.

— Jimin tú sube primero.

Dice On-jo a la de flequillo, quien lloraba de felicidad igual que los demás.

Los soldados le amarran los arneces en la cintura para subirla y después la cuerda empieza a girar, subiendo a Jimin al helicoptero.

No rescaten a nadie.

Nam-lu voltea a ver confundida al soldado que parecía ser el segundo al mando.

— Repita por favor, ¿Se refiere a todos?

— ¿Que pasa?

Pregunta Nam-ra a su hermana.

— Algo salió mal.

Responde la azabache.

Encontramos a una persona infectada y asintomática.

Nam-lu abre los ojos sorprendida y asustada.

— ¿Que pasa? ¿Que escuchas?

Pregunta esta vez Su-hyeok.

— Descubrieron qué hay personas asintomáticas al virus.

La presi y Des-su se quedan mudos y miran nerviosos a los soldados.

— ¡Operación cancelada! ¡Solo tomaremos el paquete y nos iremos!

Jimin empieza a bajar y los demás a alterarse.

— ¡¿Que está pasando?! ¡¿Porque me bajan?!

— ¡Oigan, no! ¡¿Que sucede?!

— ¡¿A que se refiere con operación cancelada?!

Los soldados le quitan los arneces a Jimin y la empujan hacia los demás.

— ¡No por favor! ¡Llevenme con ustedes! ¡No quiero estar aquí!

Nam-lu toma la mano de su hermana y camina hacia los soldados.

— Por favor, al menos llevense a algunos.

El soldado ve las manos unidas de las chicas y cierra los ojos culpable.

— Lo siento, niña.

Los dos últimos soldados empiezan a subir al helicoptero, dejando a los alumnos nuevamente solos.

— ¡No por favor! ¡Por favor!

— ¡Regresen! ¡Se los rogamos! ¡Regresen!

— ¡No nos dejen! ¡Solo somos unos niños, por favor! ¡No nos dejen solos!

Nam-lu baja la cabeza decepcionada y después abraza a su hermana para consolarla.

Los demás empiezan a llorar de impotencia mientras veían el helicoptero irse, Cheong-san por otro lado grita furioso y empieza a patear las letras de S.O.S. y la fogata.

— ¡¿Que haces?!

Pregunta On-jo.

— ¡Ya nadie más vendrá a rescatarnos! ¡Estamos solos!

Responde furioso Cheong-san mientras seguía destruyendo todo.

Un dolor punzante y agudo apareció en los oídos de Nam-lu cuando un trueno fuerte resonó por todo Hyosan. La azabache se tapó los oídos y se agacho en el suelo mientras un grito agudo salía de sus labios.

— ¿Que ocurre? ¿Que te duele?

Pregunta preocupado Su-hyeok.

— Mis oídos. Duelen mucho.

Des-su volteo hacia todos lados sin saber que hacer, después bajó su mirada a su camisa y decidió romperla un poco para hacer unos tapones.

— Toma, para tus oídos.

Nam-lu subió la mirada hacia Su-hyeok y los tapones y sonrió de lado, agradecida con su chico. Ella tomó con cuidado los tapones y se los puso en sud oídos que estaban rojos y con venas resaltando.

Las primeras gotas de lluvia empezaron a caer haciendo que todos voltearan a ver al cielo alegres.

— ¡Esta lloviendo!

Dice entre risas Dae-su.

Nam-lu mira hacia el cielo sintiendo las gotas caer sobre su rostro, cabello y cuerpo. Ella cierra los ojos y deja que el agua de la lluvia la limpie.

Los demás imitan la acción de la azabache, dejando que las gotas de lluvia los limpiaran, algunos abrían la boca para poder tomar de esa agua e hidratarse un poco. Dae-su y Woonji se acostaron en el suelo mientras abrían la boca y sacaban la lengua para recibir el agua que caía del cielo, ambos estaban riendo alegres pero esa sonrisa poco a poco se transformó en un lloriqueo, los demás no se quedaron atrás pues también empezaron a llorar de impotencia, frustración y tristeza. Ya no tenían más opciones, no tenían a quien más pedir ayuda, estaban completamente solos.

Nam-lu miró a cada uno de sus compañeros y después a Su-hyeok, quien tenía la cabeza para atrás con los ojos cerrados para recibir las gotas de lluvia. La azabache apretó los puños adolorida cuando un trueno volvió a resonar por todo el lugar y después una idea cruzó por su mente.

— Su-hyeok.

El mencionado volteó hacía la azabache de inmediato.

— ¿Que ocurre?

— Tengo una idea.

Su-hyeok miró a su chica sorprendido y después la tomó de la mano para ayudarla a levantarse.

— Oigan, Nam-lu tiene una idea.

Los demás al escuchar eso se limpiaron los ojos y se acercaron.

— ¿Que se te ocurrió?

Pregunta Cheong-san.

— Podemos utilizar los truenos a nuestro favor. Si nos movemos cada vez que se escucha uno, los zombies no podrán oirnos y podremos salir de aquí.

Todos se quedan callados, analizando la idea de la azabache.

— Es una buena idea.

Dice On-jo, después poco a poco los demás van diciendo lo mismo.

— ¿A dónde iríamos?

Pregunta Jimin.

— Si entramos por la puerta trasera a las canchas de tenis, y pasamos por el centro de Inglés, podremos llegar a la montaña.

Explica Nam-lu mientras un nuevo trueno resonaba por el cielo y hacia el dolor de la azabache notorio otra vez.

— Si podemos llegar a la montaña, podemos llegar a Yangdong.

Dice Cheong-san.

— Si. Fui allí de excursión varias veces con mi padre.

Concuerda On-jo.

— ¿No crees que es una locura intentarlo?

Pregunta Woonji a la chica tierna y a la azabache.

— Es mejor morir intentando salvarnos, que morir esperando a que nos rescaten.

Dice Nam-lu haciendo que Woonji se empiece a morder las uñas.

— ¿Y si los zombies nos atrapan?

— No dejaré que los zombies nos atrapen. Lo prometo.

Tranquiliza Nam-lu a la mejor amiga de Jimin.

— Debemos de ir en parejas, nadie debe de quedarse atrás.

Todos asiente con la cabeza ante lo dicho por Cheong-san.

— ¡Bien! ¡Vamos!

Dice Dae-su con entusiasmo mientras extendía la mano a la mejor amiga de Jimin, pero esta lo ignora y tomo de la mano a la de flequillo para después pararse.

— Ok, ¿Joon-Yeong?

El de lentes extiende su mano a Woonji y este lo acepta, dejando a Dae-su en visto nuevamente.

— Bueno, ¿Su-hy...?

Antes de que pudiera terminar de decir el nombre de Des-su, este ya había tomado la mano de Nam-lu.

Cheong-san extendió su mano a la presi, está lo miró durante unos segundos y después aceptó la mano del chico pollo.

— Vamos, Dae-su.

Dice On-jo mientras tomaba la mano del mencionado.

— Eres buena amiga, On-jo.

— Si si, vámonos.

Los primeros en salir fueron Cheong-san y Nam-ra, después siguieron Woonji y Joon-Yeong, después Jimin y su mejor amiga, On-jo y Dae-su y a lo último Su-hyeok y Nam-lu.

Los chicos salieron en fila en silencio, sin hacer mucho ruido, empezaron a bajar las escaleras con cuidado y cuando llegaron al final de estas se quedaron ahi, pues habían varios zombies.

— Esperen.

Susurra Cheong-san mientras se asomaba un poco para ver a los zombies. Un trueno acompañado de un relámpago hizo que los zombies se desorientaran y se fueran de ahí, dándoles el camino libre a los chicos.

Ellos no tardaron en apresurarse y salir de ahí. Cuando todos estuvieron fuera del instituto se pegaron hacia la pared y andaron hacia un camión, en donde uno por uno se fueron metiendo por debajo para que los zombies no los vieran, pero cuando fue turno de Cheong-san, el chico volteo hacia arriba topandose con su madre convertida en zombie.

— ¿Mamá?













🧪・. ୨ Espero les haya gustado el capitulo, recuerden dejar su voto y comentarios. Los amo ❤️

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