୧ ⋅ ･｡━━ 𝐒𝐔𝐑𝐕𝐈𝐕𝐄𝐒 𝐅𝐎𝐑 𝐌𝐄 *ૢ✧ ཻུ۪۪⸙͎
chapter nine ; acceptance ➤ cannibal ▬▬ 𝗮𝗻 𝗹𝗲𝗲 𝘀𝘂-𝗵𝘆𝗲𝗼𝗸 𝗳𝗮𝗻𝗳𝗶𝗰𝘁𝗶𝗼𝗻 🧟‍♀️  ‧₊˚ ©writeen by -swttxhrry. !!! 

A VECES SOLO NAM-LU NO PODÍA CREER LO LOCA QUE ERA SU VIDA, todo lo que le estaba pasando parecía ser parte de una historia de terror o una novela de las que después veía su hermana con ella los fines de semana. La azabache se ponía a pensar que tal vez cuando era pequeña cayó en sal o le hecharon un mal de ojo. Pues todo lo que le pasaba era irreal y realmente malo.

Gwi-nam estaba enfrente de los tres chicos con una sonrisa sádica mientras dejaba caer al zombie que tenía agarrado del cuello al suelo. Este corrió directamente a los jóvenes, quienes pudieron esquivarlo y aventarlo lejos de los tres, los demás chicos ya no podían sostener por mucho tiempo el telón pues cada vez eran más zombies los que venían. Su-hyeok tomó de la muñeca a Nam-lu y la puso detrás de él, tratando de protegerla de Gwi-nam y de los zombies.

On-jo al ver la situación, le dejó su lugar a Dae-su y trató de abrir las puertas desesperada.

— Cheong-san. Tú y yo, tenemos un asunto pendiente.

Dijo Gwi-nam mientras hacía aún lado a un zombie y se acercaba al chico pollo.

Su-hyeok trató de acercarse a su mejor amigo para ayudarlo pero más zombies traspasaron el telón, desviando su atención hacia ellos y dejando que Cheong-san se las arreglara solo. Nam-lu veía todo nerviosa, podía sentir como el sudor cubría su frente y la adrenalina recorría sus venas, la azabache volteo a ver a su hermana quien desde arriba veía toda la situación con miedo y preocupación, y después regresó su mirada a Su-hyeok quien empujaba a tantos zombies como podía él sólo, y a Cheong-san siendo tomado del cuello por Gwi-nam.

El enojo y la frustración por la situación en la que estaba nubló el juicio de Nam-lu, los huesos de sus manos y cuello empezaron a tronar, sus ojos empezaron a ver rojo sangre y de sus labios salió un gruñido molesto. La azabache corrió rápido hacia Gwi-nam y lo tomó del cuello, provocando que soltara a Cheong-san, el bullie volteo a ver de reojo a Nam-lu y quedó tan confundido como los demás.

— ¿Que diablos?

Preguntó en un susurro Gwi-nam, la azabache gruñó otra vez furiosa por tener que enfrentar a ese idiota y lo aventó hacia la pared. Los demás vieron impresionados la escena, no reconocían a Nam-lu, parecía otra persona, una más salvaje, agresiva y fuerte.

La azabache se acercó a Gwi-nam como un depredador se acerca a su presa el bullie al ver sus intenciones se levanta rápido del suelo y trata de golpear a Nam-lu pero está detiene su puño con su mano y se la dobla, haciendo que Gwi-nam gruña adolorido y caiga de rodillas ante la azabache.

— ¿Porque no te mueres de una vez?

Pregunta Nam-lu.

Gwi-nam logra safarse de la azabache y la golpea fuertemente provocando que su rostro se girará de lado.

— Maldita zorra.

Susurra con desprecio Gwi-nam.

Nam-lu levanta su mirada lentamente hacia el bullie, cuando lo hace deja ver como el rasguño que le había provocado Gwi-nam desaparece de forma lenta pero rápida, dejando anonadado al ya mencionado.

— ¿Que . . . ?

Pregunta en un susurro el bullie.

De repente las puertas de la azotea son abiertas.

— ¡Chicos! ¡Ya esta abierto!

Anuncia On-jo aliviada.

Los demás no pierden tiempo y se van corriendo a la azotea, Cheong-san toma de la mano a Nam-ra para poder llevarla con los demás, pero esta se niega a ir.

— ¡Nam-lu!

Llama la presi a su hermana desesperada.

Gwi-nam trata de golpear nuevamente a la azabache pero está esquiva sus golpes frustrando al bullie. En el quinto intento de Gwi-nam por querer hacerle daño a Nam-lu, esta toma la muñeca del bullie y le rompe el brazo. Gwi-nam grita adolorido mientras los demás ven sorprendidos la escena, Nam-lu sin la intención de parar golpea las piernas del bullie haciendo que este caiga de rodillas al suelo otra vez, toma un gran puñado del cabello de Gwi-nam y jala hacia atrás su cabeza, dejando relucir su garganta.

— ¡Nam-lu, no!

Grita On-jo, temiendo las acciones de la azabache.

Nam-lu ignora el grito de la chica tierna y sin pensarlo dos veces muerde fuertemente el cuello de Gwi-nam, haciendo que este grite más y altere a los zombies que se encontraban ahí.

Cheong-san por reflejo abraza a Nam-ra por los hombros y oculta su rostro en su pecho para que no vea, mientras que On-jo se lleva sus manos a la boca impactada.

Nam-lu arranca un pedazo de piel de Gwi-nam y lo escupe, después lo toma entre sus brazos y lo avienta hacia los zombies que iban hacia ella y los demás, derrumbandolos y tirandolos al suelo.

La azabache voltea a ver a Su-hyeok y a los demás y al ver cómo estos la miraban se asusta consigo misma, sus ojos se empañan de lágrimas y su labio inferior empieza a temblar de miedo.

Des-su se acerca a Nam-lu y la toma de la mano entrelazandola con la de él, después la lleva junto con los demás. Su-hyeok y Nam-lu entran a la azotea, después entra On-jo, Nam-ra y Cheong-san, quien se encarga de cerrar las puertas con seguro, este ultimo suspira cansado y mira a los demás, quienes se encontraban tristes y frustrados pues acababan de perder la oportunidad de ser salvados por un helicoptero que ahora estaba lejos de ellos.

Mientras los demás se lamentaban, Nam-lu fue hacia la orilla de la azotea y empezó a vomitar, el sabor de la sangre en su boca se le hacía de lo más repugnante y aún podía sentir la sensación de sus dientes arrancando la carne de Gwi-nam de un solo tirón.

Sus ojos se humedecieron nuevamente y empezó a temblar de miedo, ella no quería convertirse en zombie, no quería dañar a su hermana, ni a Su-hyeok ni a nadie, no quería ser un monstruo, no quería convertirse en algo parecido a Gwi-nam. De repente unas manos grandes acariciando sus hombros la asustan, por lo cual se gira hacia atrás, era Des-su quien la veía preocupado.

— Tranquila. Estamos a salvo ahora.

Susurro Su-hyeok en un intento de calmar a la azabache, pero fue en vano.

— No. Viste lo que hice, le arranque un pedazo de piel a Gwi-nam, le rompí la muñeca. Me estoy convirtiendo en un monstruo.

— Ey . . .

Su-hyeok tomó de los hombros a Nam-lu y la obligó a verlo.

— Solo intentabas protegernos, proteger a Cheong-san. Gwi-nam quería matarlo y tú lo salvaste, nos salvaste. No eres un monstruo, eres Choi Nam-lu la chica más lista del instituto Hyosan, la chica que robo mi corazón y la chica por la cual sigo vivo.

Las primeras lágrimas salieron de los hermosos ojos color avellana de Nam-lu, Su-hyeok sonrió de lado y con su dedo pulgar limpio las gotas saladas que resbalaban por las mejillas sonrojadas y sucias de sangre de la azabache.

— ¿Nam-lu?

La mencionada volteo hacia un lado, encontrándose a sus compañeros observándola preocupados.

— Toma, para que te limpies.

Dice Cheong-san mientras que arrancaba un pedazo de su camisa escolar y lo envolvía como trapo para Nam-lu.

La azabache lo recibió tímida y miró a Cheong-san con miedo.

— Gracias por salvarme.

Nam-lu sonrió de lado ante lo dicho por el chico pollo y asintió con la cabeza.

— ¿Somos amigos, no? Los amigos están para protegerse.

Cheong-san sonrió también y asintió con la cabeza.

— ¿Cómo te sientes?

Pregunta Nam-ra acercándose a su hermana y abrazándola por los hombros.

— Siento el sabor de la sangre aún en mi boca. Es asqueroso.

Nam-ra sonrió divertida y después acomodo el cabello de su hermana hacia atrás.

— Deberíamos hacer una señal de ayuda.

Dice On-jo nerviosa.

Los demás asienten con la cabeza de acuerdo con la chica tierna, y empiezan a buscar cosas que los puedan ayudar para las letras S.O.S.

Nam-lu limpio las camisuras de sus labios con el pedazo de camisa que le dio Cheong-san y después se sentó en el suelo cansada.

— ¿Estas bien?

Pregunta On-jo a la azabache quién sólo asiente con la cabeza y cierra los ojos agotada.

— Deberías descansar un poco.

Sugiere Woonji mientras tomaba unos señalamientos que decían "Piso mojado".

— No. Quiero ayudar.

Dice Nam-lu mientras tomaba fuerza y hacia el intento de pararse, pero al hacerlo se va de lado.

— Está bien. Ya ayudaste demasiado.

Dice Su-hyeok mientras posaba una de sus manos en el hombro de la azabache.

Nam-lu recargo su cabeza en el barandal de la azotea y suspiro cansada mientras sentía sus músculos relajarse.

Los demás se alejaron de la azabache, dejándola descansar y empezaron hacer las letras de S.O.S. con lo que tenían ahí.

— ¿Y si duerme para recargar energía?

Pregunta Dae-su mientras veía de reojo a la azabache dormir. Los demás al escucharlo también voltean a ver a la hermana menor Choi.

— No es un celular.

Reclama Woonji.

— No, me refiero a que como tiene poderes, el dormir podría ser su fuente de energía.

— Suena tonto, Dae-su.

Vuelve a reclamar Woonji.

— No es cierto.

— Si es cierto.

— Que no.

— Que si.

— Ya callense.

Dice Cheong-san mientras miraba a ambos amigos con seriedad. Woonji y Dae-su se callan y siguen en su trabajo de hacer las letras.

— Ella dice que es igual que Gwi-nam, pero creo que no es así.

Todos voltean a ver confundidos al chico pollo por sus palabras.

— ¿A que te refieres?

Pregunta Jimin.

— Gwi-nam no se ha podido curar de su ojo, pero Nam-lu puede curarse en cuestión de segundos.

— ¿Y si es algo más?

Pregunta Woonji.

— Tal vez sea más poderosa que Gwi-nam y ya.

Dice Su-hyeok sin gustarle por dónde iba esta conversación.

— Tal vez Cheong-san tenga razón. Nam-lu puede curarse más rápido que Gwi-nam, es más fuerte y no necesita de carne humana para alimentarse.

— De eso no estas tan segura. Tal vez su hambre no es tan grande aún como para querer comernos.

Dice Jimin a On-jo, quien al escuchar a la de flequillo baja su cabeza.

— ¡¿Podrían parar de hablar de mi hermana como si fuera un extraterrestre?!

Pregunta enojada Nam-ra mientras botaba al suelo las cosas que había recogido para ayudar.

— Literalmente ella es la que nos ha mantenido con vida desde que empezó todo esto. Ella ha hecho los planes, se ha sacrificado para que nadie más muera o sea mordido y nos ha puesto a nosotros antes que a ella.

Nam-ra se gira hacia Jimin y la enfrenta.

— Lamento mucho lo de tus padres. Pero no eres la única que perdió a alguien, no eres la única que sufre, no eres la única que tiene miedo. Así que por que no mejor dejas en paz a mi hermana, te ajustas bien tus malditos pantalones y sigues adelante por ti y por tus padres que seguramente hubieran querido que estuvieras a salvo.

Nam-ra se aleja hecha una furia de todos, mientras que los demás bajaban la cabeza apenados.

— Es una mala agradecida.

Susurra Jimin con desprecio hacia Nam-ra.

— Ella tiene razón.

Dice Dae-su, dándole la razón a la presi.

— Hablaré con ella.

Susurra Cheong-san para después caminar nervioso hacía Nam-ra.

Cuando estuvo un par de metros de la presi tocó nervioso su hombro para que se diera media vuelta y lo viera, pero Nam-ra no voltea ni se inmutó.

— Lo lamento.

Susurra Cheong-san con las mejillas sonrojadas.

— No lo hagas.

Responde en un susurro también Nam-ra.

Cheong-san se acerca más a la presi y se pone aún lado de ella, él la mira nervioso y después mira hacia el cielo, hacia el punto exacto en donde veía ella.

— Se como te sientes.

Nam-ra volteo a ver a Cheong-san y este imita su acción.

— ¿Y según tú como me siento?

El chico pollo se sonroja levemente por la mirada de la presi y traga saliva.

— Frustrada, nerviosa, triste, asustada. Así me siento yo también.

Nam-ra se le queda viendo a Cheong-san durante unos segundos y después regresa su mirada al cielo.

— Solo quiero regresar a casa con mi hermana y ver la serie que estábamos viendo.

Cheong-san se acerca un poco más a Nam-ra, rozando su hombro con el de ella.

— ¿Sabes que es lo único bueno de esto?

La presi voltea nuevamente hacia el chico pollo con el ceño fruncido.

— ¿Qué?

— Que nos acercó.

Respondió con las mejillas sonrojadas y mirada baja Cheong-san.

Nam-ra alza levemente las comisuras de sus labios, sonriendo un poco por las palabras del chico pollo.

— Si. Tienes razón.

Sin pensarlo dos veces la presi toma la mano de Cheong-san y la entrelaza con la de ella.

El chico pollo baja su mirada a su mano unida con la de la presi y después alza su mirada a la ya mencionada, quien lo veía con una sonrisa de lado.

— Al fin lo hiciste, idiota.

Susurra para sí misma On-jo viendo a su mejor amigo con orgullo.

Los ojos de Nam-lu se abrieron lentamente, ella se encontraba acostada en el suelo con una chaqueta encima de ella como si fuera una cobija y un suéter hecho bola debajo de su cabeza como almohada.

Se estiró un poco y bostezo, el dormir un rato le había servido pues ahora se sentía mejor, con más energía y ganas de seguir sobreviviendo. Se sento en el suelo y volteo hacia un lado, encontrándose a sus compañeros en un círculo intentando hacer fuego. Nam-lu ladeo la cabeza divertida al ver cómo sus compañeros se forzaban por hacer una fogata, sonrió y después se levantó y fue hacia ellos hasta quedar enfrente de todos, nadie le puso atención ni se fijaron que ya había despertado.

Al ver como batallaban para prender la fogata, Nam-lu busco en los bolsillos de su falda el encendedor que siempre traía para sus cigarros, cuando lo encontró lo puso enfrente de Su-hyeok quien era el que ahora intentaba prender la fogata. Los demás al ver el encendedor voltearon a ver a Nam-lu incrédulos.

— ¿Lo traías todo este tiempo?

Pregunta Woonji.

— ¿Lo van a querer o no?

Preguntó Nam-lu alzando una ceja interrogativa.

Su-hyeok tomó el encendedor y agradece a la azabache con una sonrisa.

— No sabía que fumabas.

Dice Cheong-san.

— Si, lo hace. Ya le he dicho que es un hábito horrible.

Reclama Nam-ra, haciendo que la azabache sonría divertida.

— Ya no lo hago. Se me acabaron los cigarros.

Nam-ra rueda los ojos y el chico pollo ríe divertido.

Su-hyeok por fin enciende la fogata, haciendo suspirar a todos de alivio pues ya estaba oscureciendo y la temperatura estaba bajando notoriamente. Nam-lu fue por la chaqueta y el suéter que estaba utilizando para dormir y se fijo en sus compañeros para ver a quien le pertenecía, todos tenían su suéter a excepción de On-jo, así que se acercó a la chica tierna y le extendió su prenda.

— Gracias por prestarmelo.

Susurra Nam-lu. On-jo se gira a verla y toma su suéter.

— No debes de agredecer.

Dice On-jo.

— Si, si debo.

On-jo se vuelve a colocar su suéter y mira nerviosa a la azabache, esta le da una sonrisa de lado y se gira sobre sus talones para ir hacia Su-hyeok y darle su chaleco pero On-jo la detiene de la muñeca.

— Nam-lu, espera.

— ¿Que pasa?

Pregunta la azabache confundida.

On-jo se sonroja de las mejillas al sentir el tacto de la suave  piel de la azabache con el suyo y su corazón empieza a latir muy rápido, haciendo que Nam-lu se dé cuenta.

— Estas nerviosa, ¿Que sucede?

Vuelve a preguntar la azabache.

— Yo... Debo decirte algo.

— ¿Que cosa?

On-jo desvío su mirada hacia detrás de la azabache, encontrándose con su mejor amigo observándola mientras abrazaba a Nam-ra por los hombros para brindarle un poco más de calor.

Cheong-san asintió con la cabeza, alentando a la chica tierna para que dijera lo que desde hace tiempo quería decirle a la azabache.

— Yo... Quiero decirte que...

Los ojos de On-jo se volvieron a desviar hacia otro lado, ahora encontrándose con Su-hyeok mirando la escena con el ceño fruncido.

On-jo sintió un malestar en su estómago, soltó la mano de Nam-lu lentamente y miró triste a la azabache.

— Ustedes hacen una bonita pareja.

Nam-lu alzó la ceja interrogativa,sin saber a que o a quien se refería.

— Tú y Su-hyeok.

Las mejillas de Nam-lu se sonrojaron y bajo la mirada apenada.

— Gracias.

On-jo asiente con la cabeza y después se va a sentar aún lado de su mejor amigo.

Nam-lu camina hacia Su-hyeok y se sienta aún lado de él mientras le da su chaqueta.

— ¿No tienes frío?

— No.

El cielo se pone oscuro, dejando relucir las estrellas, el viento empezó a sentirse más frío haciendo que los chicos se acerquen un poco más a la fogata.

— Dea-su, ¿Porque no cantas algo?

Dice Woonji mirando las ondas del fuego que estaban en medio de todos.

— ¿Que? Pensé que no te gustaba como cantaba.

— ¿Te dije eso?

— No.

— Ahí esta, ahora canta algo.

Dae-su se quedó callado durante unos segundos y después se aclaró la garganta para empezar a cantar.

— Vayamos cuando termine. Vayamos a donde sea. Cuando terminemos de estudiar 12 horas al día. Cuando pasen los sonidos molestos. Vayamos de la mano. No huyamos. Intentemos caminar despacio. ¿Es baba o sudor en el libro? Nadie nota ese golpeteo. El golpeteo. Las gotas de lluvia que caen. ¿Que esta hirviendo? A fuego lento lento. Es la sopa de doenjang de mamá. Un razón de fideos instantáneos. Delante de la tele, que no hace más que ruido de estática. Vayamos a donde sea juntos.

Todos sonrieron melancólicos, uno que otro se abrazo por los hombros y suspiraron cansados.

— Cantas bien, Dae-su. Y la canción es linda.

Susurra Nam-lu, haciendo que el mencionado sonría feliz.

— Gracias, Nam-lu.

— ¿Desde cuando empezaste a fumar?

Pregunta On-jo a la azabache, quien al escucharla voltea a verla.

— Desde hace un año. Me relaja.

On-jo y los demás se quedan en silencio durante unos segundos sin saber que más decir, hasta que Dae-su volvió hablar.

— ¿Así que ahora son novios?

Preguntó, mirando las manos entrelazadas de Nam-ra y Cheong-san.

Estos se sonrojaron por la pregunta y desviaron la mirada hacia otro lado.

— No sabía que te gustaba Nam-ra.

Dice Joon-Yeong.

— Desde octavo año. La acosaba todo el tiempo.

Se burla On-jo con una sonrisa divertida.

— ¡Callate!

Reclama Cheong-san mirando mal a su mejor amiga.

— Ay, el amor. A veces te vuelve loco. 

Dice entre suspiros Dae-su.

— ¿Te gusta alguien, Dae-su?

Pregunta Joon-Yeong.

— Esta loco.

Exclama enojado Woonji.

— Ha-ri.

Responde en suspiros enamoradizos Dae-su.

— ¡¿Tu hermana?!

Pregunta Jimin sorprendida hacia Woonji quién rueda los ojos.

— Si salimos de esto le diré a mi hermana... para que te mate.

— ¡Oh, vamos, no seas así!

Dae-su abraza por los hombros a Woonji pero este lo empuja hacia un lado, haciendo reír a todo el grupo divertidos.

— Me alegra estar con ustedes en esta situación. Son geniales y divertidos, espero y cuando todo esto termine sigamos siendo amigos.

Todos al escuchar las palabras de Nam-lu sonríen de lado.

— Yo también espero eso.

Susurra Woonji.

— On-jo, ¿A ti te gusta alguien?

Pregunta Joon-Yeong a la chica tierna, quien al escuchar la pregunta se sonroja notoriamente.

— Si, On-jo, ¿Te gusta alguien?

Pregunta sarcástico Cheong-san, ganándose una mirada enojada de parte de la chica tierna.

— Ash, seguramente tú ya sabes.

Dice Dae-su golpeando jugueton el hombro del chico pollo.

On-jo baja la mirada apenada, mientras siente el calor subir por sus mejillas y sus manos un poco empapadas de sudor.

— Estamos en confianza, On-jo. Dinos, ¿Te gusta alguien?

Preguntan otra vez, haciendo que la chica tierna se ponga más nerviosa.

— Anda, dinos. ¿Es alguien de aquí?

On-jo mira de reojo a Nam-lu, quien la veía fijamente esperando una respuesta y después mira al resto de todo el grupo.

— Si.

— Espero y no sea yo porque ya dije que mi corazón pertenece a Ha-ri.

— ¡Dios, ya callate!

Grita cansado Woonji mientras se tapa los oídos y rueda los ojos.

— ¿Es mujer u hombre?

Pregunta Su-hyeok con una sonrisa.

On-jo traga saliva nerviosa y niega con la cabeza frustrada consigo misma para después alejarse de ahí.

— ¿Que pasó?

Pregunta Dae-su confundido.

Nam-lu ladea su cabeza confundida mientras observa a la chica tierna alejarse del resto para ir a la orilla de la azotea.

— Tal vez la presionamos mucho. On-jo es muy tímida.

Dice Joon-Yeong mientras se acomoda las gafas.

La azabache se para de donde está y va hacia la chica tierna. Los demás las voltean a ver un minuto y después regresan la mirada para seguir hablando de quien gustan o gustaban, a excepción de Su-hyeok y Cheong-san.

— ¿Estas bien?

On-jo niega con la cabeza como respuesta a la pregunta de Nam-lu.

— No tiene nada de malo si te gusta una mujer.

La chica tierna voltea hacia la azabache y la mira incrédula.

— Eso ya lose.

— ¿Entonces?

On-jo baja la mirada apenada, haciendo que Nam-lu la tome de la mano y la haga mirarla.

— Puedes confiar en mí.

— Eso también ya lo sé.

— ¿Y entonces porque no dices quien te gusta?

La chica tierna abre la boca para responder pero la cierra inmediatamente.

— ¿La conozco?

On-jo tarda en contestar pero al final asiente con la cabeza.

— Si, demasiado diría yo.

Nam-lu frunce el ceño pensativa.

— Mmmh, diría que Nam-ra pero...

— Tú.

La respuesta de On-jo deja callada y confundida a Nam-lu.

— No entiendo.

— ¡Que me gustas, Nam-lu!

La azabache se quedó estupefacta en su lugar mientras trataba de procesar la información.

On-jo por otro lado baja la mirada arrepentida de decirle a Nam-lu sus sentimientos y se da media vuelta para irse de nuevo con su mejor amigo.

— On-jo, espera...

La voz de la azabache detienen los pasos de la chica tierna, se gira lentamente hacia Nam-lu para confrontarla y ser fuerte ante la respuesta que le espere, pero al hacerlo se encuentra con Gwi-nam parado detrás de la azabache con una mirada sádica en sus ojos cafés oscuros.

— ¡Nam-lu detrás de ti!

La azabache se gira de inmediato, pero al hacerlo Gwi-nam la golpea fuerte, mandándola lejos y haciendo que rodará en la fogata e impactará contra la puerta de la azotea.

— Hola de nuevo.

Todos los demás se paran de inmediato asustados al ver al bullie.

— Cheong-san... Nam-lu, creo que tenemos asuntos pendientes.

🧪･. ୨ Espero les haya gustado el capitulo, recuerden dejar su voto y comentarios. Los amo ❤️

¡POR CIERTO!

Si quieren escuchar el soundtrack de Survives for me, pueden ir a mi perfil y encontrar el link hacia Spotify. Escuchenla, siganme por ahí, denle corazón al mix y me comentan que tal les parecio. ❤️✨

Ahora si, sin nada más que decir ¡Adiooos!