- ¡Ah! ¡Joder!

Eran cerca de las 5 de la mañana cuándo un travieso omega despertó después de haber tenido un sueño húmedo bastante explícito con su sexy doctor.

Definitivamente su celo estaba por llegar, su cuerpo comenzaba a calentarse de sobremanera, estaba muy excitado, soñó con aquella vez en la que se había entregado a Jungkook después de conocerse en el bar. Aún recordaba cada detalle de aquella noche.

La piel bronceada del alfa, sus fuertes brazos, su besos deliciosos, como tocó y acarició cada parte de su cuerpo, como lo penetraba con tanta fuerza llevandolo al cielo.

Jimin estaba completamente ruborizado, gotitas de sudor caian por toda su frente, dejó su dildo sobre la mesita de noche después de retirarlo de su interior con cuidado, si no lo hacía estaba seguro de que vovlería a masturbarse hasta que no pudiera más.

Intentó controlar su respiración, la cuál estaba demasiado acelerada al igual que su corazón que latía a toda velocidad, mordió su labio inferior, estirando su manita y tomá una toallita humeda para limpiar el semen que tenía en su abdomen y el lubricante natural que escurría de su entrada.

Se dejó caer por completo en la cama, no tenía fuerzas para nada, estaba demasiado cansado como para cambiar las sábanas o darse un baño, necesitaba descansar, en una hora tenía que levantarse para conenzar a prepararse para su cita con el alfa.

7:30 am

El despertador no dejaba de sonar, Jimin estaba completamente perdido en sus sueños, hasta que el tono de la canción Havana- Camila Cabello subió al nivel más alto que existía logrando que el pequeño omega abriera un ojo para ver que hora era.

Jimin se levantó de golpe.

Casi se cae al suelo por la rápidez en la que se puso de pie, corrió hacía el cuarto de baño sin importarle nada, abrió la llave para que comenzara a salir el agua de la regadera. Algo que no le gustaba del departamento es que siempre salía primero agua fría y después de algunos minutos empezaba a calentarse.

Así que tuvo que bañarse con agua fría pues no podía perder más tiempo esperando a que el agua se calentara. El omega estaba haciendo un berrinche en el baño mientras se lavaba el cuerpo.

Era un cachorro.

Cuándo terminó de bañarse salió casi corriendo para buscar algo que ponerse, no había tenido tiempo de buscar ropa adecuada para su cita con el alfa, el día anterior había llegado a casa cerca de las 10 de la noche, había lanzado su maleta al sofá y simplemente se había desmayado en su cama sin importar nada más.

Así de cansado había estado.

Ahora estaba peleando con su ropa pues no creía que nada fuera perfecto para la ocasión. Quería llorar y estaba a punto de darse por vencido, llamaría a Jungkook y cancelaría todo. Pero su subconsciente le recordó que ya había hecho esperar demasiado al alfa y no podía simplemente cancelar así.

Resignado siguió buscando que ponerse. Hacía frío afuera así que optó por ponerse una camiseta blanca con un hoodie rosa y un suéter blanco esponjoso, un pantalón color caqui y sus tenis blancos, se maquilló un poco, se arregló el cabello y salió corriendo del departamento luego de tomar su celular y su billetera.

💠💠💠💠💠

Jungkook estaba revisando el menú de aquel lindo lugar. Era un espacio muy grande y agradable, había mesas dentro en el local y muchas otras fuera en una especie de jardín que era muy vistoso y colorido. Le gustaba mucho pues estaba lleno de flores diversas y hermosas.

Acaba de llegar aproximadamente hace 15 minutos, estaba un poco nervioso pensando en que tal vez el omega se había arrepentido a última hora.

Tal vez estaba dando vueltas en su departamento pensando en como llamarlo para decirle que todo había sido una broma y que lo mejor era tener un trato meramente profesional.

Patrañas.

Si Jimin le decía eso, no volvería a molestarlo, es cierto que le gustaba mucho, su lobo al igual que él se sentía demasiado atraídos por el omega, pero no por eso se pasarían la vida rogándole. Soltó un fuerte suspiro y revisó por quinta vez la hora en su celular.

- ¿Desea ordenar?- una beta muy coqueta se situó a su lado poniéndolo nervioso.

- ¿Eh? No, aún no me decido...- Jungkook no quería ser descortés.

La beta acarició su brazo sin ningún tipo de reparo.

- Puedo darle recomendaciones... Muy buenas recomendaciones...

- ¿Ah?- el alfa estaba incómodo.

- Ya me imagino que clase de recomendaciones puedes darle a mi novio....- la voz de Jimin se escuchaba muy molesta.

El omega fulminó con la mirada a aquella estúpida beta que le coqueteaba de forma tan vulgar a su alfa. La empujó para acercarse a Jungkook y besarlo sin pena alguna.

Jungkook se dejó llevar por aquel beso tan apasionado. Debía admitir que ver a Jimin así de celoso y posesivo no había hecho más que excitarlo de sobremanera.

- Buenos días amor...

- Hola cielo...

- Con permiso...- la beta se retiró de inmediato.

Jimin no le quitó la vista de encima hasta que desapareció al entrar al local.

Cuándo estuvieron sólos, el alfa comenzó a reir a carcajadas.

- ¿Qué fue eso Min?

- ¿Eh?- Jimin se hizo el tonto.

- Parecía que ibas a matarla... Somos doctores nene, nosotros salvamos vidas, no quitamos...

- Esa perra se te estaba insinuando!!

- Lo sé...

- ¿No pensabas alejarla?

- Bueno...

- ¿No?

- Claro que sí...

- Pues no lo parecía...

- ¿Celoso?

- C-claro que no...- Jimin se sentó y lo ignoró por completo.

Jungkook lo observó detenidamente, se veía tan tierno. Llevaba el gorrito de su hoodie puesto y eso lo hacía ver tan jóven y hermoso.

- ¿Qué me vez?

- Te vez hermoso...- el omega se ruborizó por completo.

- No digas esas cosas...

- ¿Por qué?

- Me incomodan...

- ¿No te las digo más?

- .....

- ¿Hmm?

El omega asintió varias veces.

- Eres tan bonito...

Jimin sonrió volviendo sus ojitos dos finas líneas. Dios! Se estaba comportando cómo un adolescente.

- Tú también te vez muy bien...

El alfa estaba usando un hoodie color crema, un suéter gris, unos jeans color negro y sus tenis del mismo color. Se veía tan atractivo. Jimin estaba a punto de perder la cabeza por él. Aunque claramente ya la había perdido.

Varios minutos después apareció un mesero a tomar su orden, era obvio que aquella mujerzuela no volvería, Jimin enojado daba mucho miedo.

Cuándo les entregaron sus pedidos, se encargaron de hablar un poco sobre sus vidas, no sabían mucho del otro, la forma en la que se conocieron no había dado tiempo para conocerse así que aprovecharon está primer cita para saber todo sobre el otro, Jimin le platico todo sobre su niñez, porque tomó la decisión de estudiar medicina y Jungkook también le habló sobre su vida.

Aprendieron mucho sobre el otro en aquel lugar de waffles, se sentían cómodos con la compañía del contrario.

Y los besos intensos de despedida, eran algo que Jimin comenzaba a amar.

(✿^⁠‿⁠^✿)

¿Será prudente que pasen el celo de Jimin juntos?🤭