Él no era ningún chiquillo adolescente que no sabía lo que hacía. Sí, es cierto, se dejó llevar por un impulso, pero no para hacer algo que no quería.

Estaba más que conciente de la decisión que tomó al ponerse en bandeja de oro hacia Jim'Shug, pero...era solo sexo.

Buen sexo, que le estaba ayudando a sacar toda la frustración y estrés de su cuerpo, además de apagar todas las dudas e incógnitas que aún había en su mente.

No había ni una pizca de arrepentimiento, ya después se sentaría a pensar en las consecuencias. Por ahora, estaba más que a gusto, sentado en el regazo de Jim'Shug, mientras este lo penetraba lentamente.

- Si alguien nos viera...ahhhj...de seguro seríamos condenados al ghirma...- jadeó Yoon'Yuor, recostando su cabeza en el pecho de Jim'Shug. Este rió, mientras apretaba más el cuerpo del peligris.

- ¿Ah sí? - respondió Jim'Shug, cerca de su oído.

- Si, pero sabes, no me importa - rió Yoon'Yuor, subiendo su mano hacia la cara de Jim'Shug, y ladeando la suya para poder besarlo.

Habían pasado dos horas desde que cogieron en la alfombra y Yoon'Yuor se había quedado dormido. Después de despertar, fueron al baño, dónde volvieron a coger, y ahora al salir, quisieron otra ronda más, pero está vez, sin apuro alguno.

- Es tan exquisito escucharte hablar así - dijo Jim'Shug, entre besos. Una profunda estocada hizo gritar a Yoon'Yuor, para después hacerlo reír.

- Tu pene es el exquisito - Yoon'Yuor bajó su mano hacia los testículos de Jim'Shug, para acariciarlos al compas de las estocadas.

- Mnm~...así mi amor, así... - una de las manos de Jim'Shug apretaron tortuosamente uno de los rosaditos pezones de su estrellita.

La espalda de Yoon'Yuor se arqueó, removiendose sobre el regazo de este, lo cual le causó más profundidad a la penetración.

- Tu semen ya no entra más - dijo Yoon'Yuor, riendo. - Has causado un supernova de esperma en mi interior - ambos rieron sobre sus labios, lamiendolos y delineandolos con la punta de sus lenguas.

- Entonces, le ganaste a la estrella T Coronae Borealis - la mano de Jim'Shug presionó el vientre de este, sintiendo un leve bulto.

- Obvio que le gané, ella sufrirá un supernova dentro de 300 años - rió Yoon'Yuor, mordiendo el labio inferior de Jim'Shug.

- Eres tan inteligente, y...

- ¿Y qué?

- ...y mío.

La constelación marcaba el día siguiente.¿Que si ya había analizado las consecuencias? Pues no.

Su chip tenía la lista de llamadas de su madre, y hasta de Tae'Glen, pero aún no quería volver a su realidad. Su trasero le dolía mucho, pero ni eso le impedía poner un alto.

Por primera vez en la vida, quería ver solo por su beneficio, sin importarle lo que los demás pudieran decir o pensar.

Se encontraba solo en la habitación, pues Jim'Shug había salido a comprar algo de comer. Estaba sentado en la cama, tan solo con una bata de baño puesta.

Su mirada estaba en la mancha de sangre seca en la alfombra, rememorando que allí había tenido su "primera vez". Porque eso era. Tuvo sexo muchas veces, pero aquella fue su primera vez siendo penetrado.

- Perdí mi virginidad - rió para si, cubriendo sus rosados lunares. "Cómo un zhel" - Estoy enloqueciendo.

Se levantó y retiró su bata frente a un espejo, observando detenidamente su cuerpo, el cual estaba lleno de hematomas y marcas rojizas.

Todo esto era completamente nuevo para él. Jamás se imaginó ser el que recibiera todo esto, pero...estúpidamente le gustaba.

- Ya estoy aquí, estrellita...

Yoon'Yuor volvió a ponerse la bata, yendo hacia la cama nuevamente.

- No me decidía que comprar, así que te traje de todo para que puedas elegir. - le dijo Jim'Shug, sonriendo dulcemente.

- Pero, no te hubieras...

- No es ninguna molestia - Jim'Shug se acercó, dejando un besito en sus labios. - Estrellita, todo lo que ha pasado en la habitación no fue solo sexo, es más que eso, tenlo presente por favor. - acarició sus mejillas y mechonsitos en su frente. - No quiero darte solo placer sexual, quiero darte todo lo que pueda...

Yoon'Yuor parpadeó consternado. Apartó la mirada, hacia la cama donde estaban las cajas con la comida. Entonces regresó su mirada hacia Jim'Shug.

- Supongo que...debemos hablar sobre eso. ¿Después de comer? - Yoon'Yuor jugó con la tira de su bata.

Jim'Shug sonrió maravillado. - Porsupuesto amor. - dejó un besito en su mejilla. - Iré al baño a lavarme las manos, puedes ir tomando lo que te guste. - Yoon'Yuor asintió, viendo a este entrar al baño.

Al ver el nombre de una de las cajas, no puedo evitar sonreír en grande. ¿En dónde conseguía mandarinas con tanta facilidad?.

Antes de poder tomar una, uno de los chips que estaban en la mesita al lado de la cama vibró. Al mirar allí, notó que era el de Jim'Shug.

Miró de reojo la puerta del baño, suspirando y yendo hacia el chip. Lo dudó unos segundos, pero terminó por presionarlo y proyectar el nombre de quien llamaba.

Tae'Glen.

Se quedó mirando aquel nombre por unos segundos. Miles de pensamientos surcaron su mente, y...por extraño que sonara, no era ningún pensamiento de tristeza o enojo. Más bien, una sonrisa se formó en sus labios. Sus lunares tornandose carmesí.

Era su momento. Su momento de tomar un poco de venganza.

Sutilmente volvió a tocar el chip, abriendo el micrófono, entonces Jim'Shug salió del baño.

- Te estaba esperando - mencionó Yoon'Yuor, en un tono peculiarmente elevado y emocionado.

- ¿Sucede algo?

Yoon'Yuor negó, mientras atraía a Jim'Shug hacia él. Este lo veía curioso, pero sonriente.

- Todo está bien, solo...quiero comer sobre tu cuerpo. ¿Puedo?

Jim'Shug rió. - Desde ya eres tan insaciable estrellita, pero es una maravillosa idea.

- Yo te quitaré la ropa. - Yoon'Yuor lo terminó de atraer por el cuello, y unió sus labios, creando un jadeo y gemido.

Viendo de reojo el chip, sonrió ladino, para después empujar a Jim'Shug a la cama, y sentarse a horcajadas en él.

- Mi amor, ahora solo puedo pensar en comerte a ti, en más nada... - dijo Jim'Shug, empujando a un lado las cajas de comida, y abriendo la bata de Yoon'Yuor.

- Pues comeme... - se removió encima de su miembro - ...ahjjj...ahjjj...

Debido a la excitacion y furor del momento, Jim'Shug no había notado el chip, ni tampoco el momento en que este se apagó, en señal de que habían finalizado la llamada, pero, Yoon'Yuor obvio que lo sabía, y aquello solo lo extasió a mas no poder.

El saber que el imbécil de Tae'Glen había escuchado que su querido amante estaba con alguien más, lo excitó en sobre manera.

¿Consecuencias? Si, habría muchas, pero, sentía que podía enfrentar todo con más firmeza y valentía.