Después de unas horas, llegaron a Serenty.

Bajaron del transportador, frente al gran palacio de la familia Parksen. Yoon'Yuor se quedó boquiabierto ante lo grande que era. Su mansión no era nada comparado con esto.

Los empleados los recibieron, indicandoles dónde pasarían las noches. Yoon'Yuor solo escuchaba y los seguía en silencio, eso sí, observando con mucha curiosidad todo.

- No dormiré contigo. - le dijo a Jim'Shug, una vez que quedaron frente a la puerta de una habitación.

- Aunque quisiera, no será así estrellita, está habitación es para ti, yo estaré en la de a lado. - dejando un besito en su mejilla, se retiró. - acomodate, en unos minutos vendré por ti.

Limpiándose la mejilla de aquel beso, Yoon'Yuor entró a la habitación.

- Pero que es... - Caminando hacia el centro de esta, quedó asombrado. - ...esto es mi cocina y sala unidas.

De verdad estaba un palacio.

***********

Unos toques en la puerta, detuvieron el cureoseo de Yoon'Yuor en la habitación. Sabía quién era, así que maldiciendo por lo bajo abrió la puerta.

Las palabras quedaron en su boca al ver que Jim'Shug no estaba solo, a su lado estaba otro hombre, el cual se notaba a leguas que era un Senhariano de clase alta.

- Ven Yoon'Yuor, te presento, él es Jungok Parksen. - dijo Jim'Shug.

Yoon'Yuor cerró la puerta y dió una venia de saludo - Mucho gusto Jungok, soy Min Yoon'Yuor.

Jungok lo quedó viendo con él ceño fruncido, aquello se le hizo muy extraño y para nada agradable a Jim'Shug.

- ¿Sucede algo Jungok? - preguntó serio, Jim'Shug.

- Uh, no, lo siento es que, tienes un gran parecido con el matir de mi hermano mayor.

Yoon'Yuor alzó las cejas. - ¿En serio?

- Creeme que si, con excepción del cabello y los lunares en tu ceño, son muy parecidos.

Jim'Shug se puso en medio de ellos, cortando la conversación. - Bueno, suele pasar, no es nada para sorprenderse.

- Puede ser, por cierto, ¿Ustedes son pareja o...

- ¡Claro que no! - casi gritó Yoon'Yuor - Es decir, Jim'Shug solo es mi amigo, él no quería venir solo y por eso lo acompañe. Eso es todo.

Yoon'Yuor no quería que Jim'Shug dijera algo que no era, así que por eso se adelantó. Este solo lo quedó viendo sonriente y negando.

- Así es, Jungok.

- Bien, vamos me gustaría darles un recorrido por el palacio y mientras eso te explico lo que necesito Jim'Shug.

Ambos asintieron y siguieron a Jungok.

Yoon'Yuor estaba ensimismado con la hermosa arquitectura del palacio y su jardín. Para Jim'Shug no era tan sorprendete, puesto que viajaba mucho y conocía varios lugares aún más excéntricos, pero para Yoon'Yuor quien casi no salía, todo era estupendo.

Jim'Shug lo miraba de reojo, encantado con las adorables expresiones de su estrellita. Escuchó perfectamente lo que le estaba solicitando Jungok, pero no podía evitar concentrarse también en Yoon'Yuor.

Al llegar a una de las alas del palacio, se detuvieron.

- Tengo que ir con Jungok al área de establos, ¿Puedes quedarte solo unos momentos? - le dijo Jim'Shug.

Jungok rió. - Por Júpiter, amigo él no es un niño, puede estar solo. Mientras este aquí en el palacio estará seguro.

Yoon'Yuor sonrió hacia Jungok. - Gracias. Pueden irse, yo seguiré paseando.

- Toma, si necesitas algo llámame. - le dijo Jim'Shug, depositando un chip detrás de la oreja de este. Aquello ocasionó un leve cosquilleo en la nuca de Yoon'Yuor, al sentir el toque y caricia sutil de Jim'Shug.

Yoon'Yuor asintió, volteando para evitar que vieran sus lunares rosados. De reojo vio como Jim'Shug y Jungok se iban.

Resoplando, siguió su camino por aquella ala, admirando las paredes pulidas con marfil y oro, junto con los diseños de águilas.

Las familia Parksen si que disfrutaba presumir su grandeza y riqueza.

Al llegar a uno de los balcones al final del ala, divisó a un chico pelinegro asomado en el filo de este. Sin pensarlo mucho se acercó.

Este estaba vestido como Jungok, pero al acercarse más, notó que llevaba puesto el collar de un...

- Esclavo... - susurró Yoon'Yuor para si.

Claro, la familia Parksen siendo la más poderosa en Senha, era de suponer que tenían esclavos.

- Hola - saludó Yoon'Yuor, con una leve sonrisa y voz amable.

El chico volteó hacia él, sorprendido. Ambos se quedaron en silencio mientras se miraban. Yoon'Yuor enseguida recordó a lo que se refería Jungok con su parecido a alguien. Pues tenía razón.

- Hola... - respondió el chico, aún en transe. - ... Tu eres...

- Oh, lo siento, mi nombre es Min Yoon'Yuor, soy el acompañante del amigo de Jungok.

- Ah ya veo, si escuché algo de eso ayer. - Un poco más confiado, el chico sonrió. - Mucho gusto Yoon'Yuor, me llamó Min Yoongi.

- Wao, tenemos el mismo apellido, y nos parecemos mucho. - respondió Yoon'Yuor.

- Si, así puedo notarlo. Aunque tú eres más llamativo. - Yoon'Yuor rió ante ese comentario. - Lo digo por el color de tu cabello y los lunares.

- En Mirghe mi apariencia es de lo más común, no es nada llamativo. - dijo sonrojado.

- Para mi lo es. Todo esto lo es. En mi planeta, no hay nada como esto. - Yoon'Yuor volvió su vista hacia el collar de Yoongi. - soy un terrícola, es como llaman a los de la tierra aquí.

- Un humano - susurró Yoon'Yuor.

- Sé lo que piensan todos de los humanos en estos mundos...

- No Yoongi, yo no pienso eso. En Mirghe está prohibida la esclavitud. Además, mi padre siempre me enseñó sobre los humanos, a él le encantaba la tierra y sentía admiración por sus inventos. Yo no te veo como un esclavo.

Los ojos de Yoongi se aguaron. - Me hubiera gustado caer en tu planeta.

- ¿Caer? ¿A qué te refieres?

- Yo me entiendo Yoon'Yuor. - sonrió, limpiando sus llorosos ojos. - soy un esclavo, obviamente no me gusta serlo, pero al menos no soy tratado como basura. Sé que si ocurre en la mayoría de los casos.

- Tu... ¿Eres el matir de Jim Parksen?

Yoongi asintió. - Si, ¿Cómo lo sabes?

- Jungok dijo algo sobre eso.

- Ah Jungok... - susurró Yoongi, sonriente. - ...si Jim se entera que mencionó mi nombre lo mataría.

- ¿Tanto así? - Yoon'Yuor se asustó. Yoongi asintió.

- Jim, mi Lord, es muy posesivo y celoso.

Yoon'Yuor resopló. - Lo siento por ti Yoongi, aunque por una parte te entiendo, lidiar con un obstinado no es nada fácil.

- No lo es. ¿Tu pareja es como Jim?

Yoon'Yuor estaba a punto de responder, cuando un empleado llegó hasta ellos, y dijo algo al oído de Yoongi.

- Lo lamento Yoon'Yuor, tengo que irme, pero podemos seguir hablando más tarde, me has caído bien.

- Claro, cuídate Yoongi.

***********

Durante la comida, Yoon'Yuor no pudo evitar mirar intercaladamente a Jim Parksen y Yoongi.

El trato que Jim le daba al terrícola era muy cuidadoso y amable. Nada que ver con la escena de aquel Lord y su esclavo que observó en el puerto Whidham.

- ¿Envidia estrellita? - le dijo Jim'Shug por lo bajo.

- Claro que no. Todo puede lucir bonito y tranquilo, pero Yoongi no deja de ser un esclavo. Está aquí en contra de su voluntad.

- Lo sé, pero no podemos hacer nada al respecto, trata de no hablar mucho con él terrícola, Jim lo podría malinterpretar.

Yoon'Yuor volvió a su comida. Está vez, Jim'Shug tenía razón. No quería que Yoongi tuviera problemas por su culpa.

Al día siguiente, Yoon'Yuor presenció como era el proceso para domar a un pegazo salvaje. Jim'Shug lo hacía con mucha destreza y agilidad.

Su torso estaba desnudo y sudado y muy.... Yoon'Yuor sacudió su cabeza, apartando su mirada. ¿Qué estaba viendo?.

Ignorando sus estúpidos pensamientos, caminó por los establos, admirando los pegazos.

Sin pensarlo, se acercó a uno, estirando su mano hacia la boca del animal. Sonrió, cuando el pegazo bajó su cabeza, en sumisión a él.

- Eres muy lindo y un buen chico... - siguió diciéndole palabras dulces al pegazo, ignorando la presencia de Jim'Shug, que lo miraba curioso.

Jim'Shug pensaba que no volvería a ver una escena así. Aquella ocasión en la que vió a Yoon'Yuor por primera vez, fue en esta misma situación. Él acariciando y hablando con un pegazo. Un pegazo salvaje.

Aquella vez, creyó que había sido simple casualidad el hecho de que el pegazo no le hubiera hecho daño, pero ahora pasaba lo mismo. Yoon'Yuor estaba frente a dos pegazos, los cuales se mantenían tranquilos y sumisos ante sus toques.

Era tierno, pero extraño, muy extraño.

- Estrellita... - lo llamó desde su lugar.

Yoon'Yuor negó resignado. - ¿Qué? - dijo, alejándose de los animales.

- He terminado, ve a tu habitación a alistarte, saldremos a dar un paseo por la ciudad, y no te estoy preguntando.

- Bien. La verdad es que también quiero ver la ciudad.

Ambos se retiraron de los establos, Jim'Shug escuchó como los pegazos gruñian al empleado que se acercó a cerrar el portón del lugar.

************

Al terminar de alistarse, Yoon'Yuor salió de su habitación. Jim'Shug le había dicho por el chip que lo esperaba en el balcón principal.

Camino hacia allí, el sonido de algo tintinear lo detuvo. Frunció el ceño ante aquello, al notar que venía de una habitación. Tenía entendido que era como una especie de bodega, dónde no pasaba nadie.

Tratando de ignorar aquello, siguió su andar, pero los susurros de alguien lo detuvieron otra vez.

Mirando a su alrededor, se acercó al cuarto, abriendo la puerta y entrando. Todo estaba oscuro, a excepción del fondo dónde había una pequeña luz azulada.

Se adentró más, pero se detuvo en seco al notar quien era.

- Yoongi... - susurró Yoon'Yuor.

Yoongi volteó asustado. Detrás de él estaba una especie de aparato proyector, con unos códigos que Yoon'Yuor no entendía.

- Yoon'Yuor... - tragó grueso, desesperado. - ...por favor, no digas nada, te lo suplico. - Yoongi lo tomó de las manos, en ruego. - Sabes que estoy aquí por obligación y que lo que más anhelo es volver a la tierra, estoy tratando de hacer eso...por favor no le digas a nadie, ayúdame.

Con las manos temblorosas, Yoon'Yuor se soltó y tomó de los hombros a Yoongi. - No te preocupes, no le diré a nadie. Tranquilo. Pero, ¿Cómo lo harás? - Yoon'Yuor miró aquel aparato.

- He logrado con mucha dificultad contactarme con un amigo en la tierra mediante un cambio en mi celular, tengo que cuadrar unas cosas con él, pero, ya está hecho el plan.

- Espero que todo te salga bien, y que Jim no se entere. Solo, ten más cuidado, alguien más pudo haberte escuchado y descubierto.

- Lo sé, fue mi error, pero, gracias Yoon'Yuor, en serio, muchas gracias. Me gustaría que todos en este planeta fueran como tú. - Yoongi le sonrió enternecido.

- ¡Yoon'Yuor! - una tercera voz lo llamó, fuera de la bodega.

Yoon'Yuor abrió los ojos asustado. Era Jim'Shug. Yoongi también se asustó.

- No hagas ruido, me tengo que ir, suerte.

Yoongi asintió, viendo a Yoon'Yuor salir.

- ¿Qué hacías allí adentro? - le preguntó Jim'Shug. Él sabía que Yoon'Yuor se había detenido allí, por el chip que este llevaba detrás de su oreja.

- ¿Yo? N-nada, nada. Podemos irnos.

- Estás nervioso. Tus lunares te delatan. - Yoon'Yuor llevó una mano hacia sus lunares, maldiciendo por lo bajo. - ¿Qué sucede Yoon'Yuor?

Haciéndose a un lado, Jim'Shug iba a entrar, pero más que desesperado, Yoon'Yuor lo tomó de la mano, apartandolo de la puerta.

- Tienes razón, estoy nervioso.

- ¿Por qué? - Jim'Shug se preocupó, y se acercó un poco más a este. - ¿Qué pasa?

Vio como Jim'Shug miraba de reojo aquella puerta, no se le ocurría algo para inventar y que no pareciera mentira. ¿Qué podía hacer?

- ¿Qué sucedió allá adentro? - señaló la puerta de la bodega. Jim'Shug estuvo a punto de ir hacia allí otra vez, pero...

- ¡Jim'Shug! - se detuvo ante el grito de Yoon'Yuor. - Estoy nervioso porque...porque...uhh....quiero besarte.

La expresión de Jim'Shug cambió de confusa a sorprendida. Pero no pudo responder nada, pues Yoon'Yuor lo tomó del cuello y unió sus labios en un imprevisto beso.