Encanto sexual

Sentado frente a una de las ventanas en el aquel cuarto de hotel, se encontraba Yoon'Yuor.

¿Cómo había llegado hasta allí? Fácil, al volver a Mirghe, no pudo tener el valor de enfrentar los posibles rumores que se dirían de su viaje con Jim'Shug, así que prefirió quedarse en un hotel, valiendole lo que pensara Jim'Shug. En un principio creyó que este lo amenazaría con su don, pero no fue asi. Accedió a dejarlo solo.

Sinceramente, no tenía mente para pensar en si era una trampa o no de parte de Jim'Shug, el haberse retirado sin protestar, porque solo había algo que ocupaba toda su mente. Si, era lo que le mencionó el señor Parksen.

Poniendo su mentón encima de sus rodillas, Yoon'Yuor cerró los ojos. Que le dijeran algo de ese nivel, como si fuera común o normal, le parecía muy traumante, pero el hecho de que se había dado el tiempo de investigar acerca de los cromosomas y como es que perciben los senharianos, lo dejaron con una lluvia de meteoritos en su cabeza.

Por más que tratara de conectar ideas y llegar a una conclusión lógica, no podía.

Antes de marcharse de Senha, se despidió de Yoongi, y este le dijo que jamás se quedara con dudas e hiciera lo posible por hallar las respuestas a sus incógnitas, tanto en lo sentimental como en lo dicho por Jim.

Pero, era más fácil decirlo que hacerlo. Hallar respuestas. Pero, ¿Dónde? ¿Con quién?.

Su chip vibró, haciendo que gruñera. No estaba de ánimos para hablar con alguien, pero al ver el nombre en el proyector, suspiró contestando.

- Tío...Hola - susurró, tratando de sonreír.

- Yi'Yi - Lee'Seheo se escuchaba un poco alterado y aliviado. - Nos tienes a todos preocupados, ¿Dónde estás?. Supe que volviste de Senha, porque ví a Jim'Shug, pero tú....

- ¿A todos? - Yoon'Yuor rió sin gracia. -  No te preocupes tío, estoy bien. Solo, me quise quedar a parte y ya.

- ¿Por Tae'Glen?

- Por él y por...otras cosas. Durante mis días en Senha, pensé en mi situación, y...no quiero seguir así. Sé que mi mamá en estos momentos debe estar furiosa, pero, no puedo hacer nada al respecto.

- Te entiendo Yi'Yi, y creeme que tienes mi apoyo, además estoy seguro que el de Jim'Shug también. Él parece más tu amigo que el de Tae'Glen.

Yoon'Yuor se quedó en silencio unos segundos. "Amigo". - Lo que sucede...es tan complicado tío... - lágrimas empezaron a rodar por sus mejillas. - ...no sé que hacer o como actuar, no comprendo lo que pasa por mi cabeza.

Los sollozos de Yoon'Yuor le causaron mucha impotencia y dolor a Lee'Seheo. Le hubiera gustado poder abrazar a su sobrino. - Tranquilo mi Yi'Yi, por favor no te derrumbes por completo. Si, desahógate, pero no dejes que la tristeza te gane.

- He tratado de que no sea así, pero, la vida me sale con cada cosa. - Yoon'Yuor sorbió por su nariz, limpiando sus mejillas con la manga.

- Mi chiquillo, muchas veces la vida es así con nosotros, pero después cuando menos lo esperamos, sucede un supernova de recompensas.

- Espero que sea como tú dices tío, porque siento que voy a colapsar.

- Aunque muchos no lo vean o lo acepten, tu eres muy fuerte Yi'Yi.

Yoon'Yuor sonrió aún lloroso. - Como siempre creyendo en mi.

- No me importa las barbaridades que diga sobre ti mi hermana Chae'li, algún día se dará cuenta la joya de hijo que tiene.

Aquellas palabras calaron hondo en Yoon'Yuor, haciendolo sonreír contento.

- Gracias, eres el mejor tío. - ambos rieron. - Por cierto, quería preguntarte algo, sabes si, el día en que yo nací, ¿Ocurrió algo extraño o curioso?.

- Nnnn, bueno, el día en que naciste solo permitieron que estén tus padres en el edificio, los demás esperabamos en casa. Se suponía que regresarían ya contigo en brazos esa noche, pero se tardaron día y medio.

Yoon'Yuor frunció el ceño, y sus lunares comenzaron a tintinear por la ansiedad e intriga. - ¿Por qué? ¿Qué pasó?

- Según tus padres, tu mamá tardó en recuperarse y por eso accedió a quedarse todo un día internada, obvio tu padre se iba a quedar junto a ella. ¿Sucede algo Yi'Yi? ¿Por qué me preguntas eso?

- No, por nada, solo me dió curiosidad saber si algo influyó para que fuera un sesvhen.

- Ay mi Yi'Yi, no te dejes llevar por eso, ser un sesvhen no te hace ni más ni menos, la gente debe cambiar esa estúpida mentalidad.

Yoon'Yuor rió. - Tienes razón tío, bueno tengo que colgar. Puedes estar tranquilo, estaré bien,  gracias por llamarme.

- Gracias por quitarme esta preocupación, cuidate y avísame si necesitas algo.

- Claro, adiós tío.

Yoon'Yuor apagó el chip, retirándolo de su oreja. Suspiró, levantándose de aquella posición, para comenzar a caminar por la habitación.

Pensaba en lo que había dicho su tío sobre su nacimiento. Solo sus padres eran testigos de todo lo que fue su llegada al mundo, y los doctores claro. Se supone que al nacer, se le hacen al bebé examenes para ver que todo esté bien, y si era un zhel, se confimaba en ese momento.

Si él hubiera sido un...un zhel, el doctor lo hubiera diagnosticado cuando nació, pero no fue así. Entonces, ¿Cómo es que según los senharianos el era cromosomas herma...un zhel?

Además, ¿Él un zhel? Imposible. En todo el tiempo que tuvo sexo con Tae'Glen, se veía la diferencia entre él y su ex esposo.

Sacudió su cabeza. - No tiene lógica ni sentido.

La puerta fue tocada, sacándolo de sus pensamientos. Resoplando, fue hasta allí, viendo del otro lado quien era. No teniendo ganas de discutir, presionó el boton que hacía desaparecer la puerta, dando paso a que Jim'Shug entrara.

- ¿Y ahora que? - dijo Yoon'Yuor dándole la espalda.

Jim'Shug volvió a presionar el botón, cerrando la habitación. - ¿De verdad creíste que te dejaría así no más? - tomándolo de uno de los hombros, este le dió la vuelta para encararlo.

Antes de poder responder, vio lo que Jim'Shug le había puesto frente a sus ojos. - Es para ti. - acercó más la caja hacia Yoon'Yuor, y este la tomó. - No me gusta verte desanimado, así que te compré algo que seguro te gustará mucho.

- No estoy desanimado - susurró Yoon'Yuor, sintiendo mucha curiosidad por lo que había dentro de la caja.

- No se lo que sucedió en Senha para que hayas regresado así, pero si puedo hacer algo para arreglar eso, aquí está - señaló la caja con su vista.

Muerto de la curiosidad, Yoon'Yuor se sentó en la cama y abrió la caja, jadeando por lo que encontró allí. Dió una mirada rápida a Jim'Shug, quien sonreía por su expresión.

- ¿Te gusta?

Yoon'Yuor tomó una de aquellas frutas, llevándola a su nariz y aspirando su delicioso y cítrico aroma. No evitó formar una sonrisa. - Me encanta.

Sin perder más tiempo, abrió una de las mandarinas, comenzando a comer pedazo tras pedazo.

Jim'Shug solo lo observaba sonriente. Estaba orgulloso de conocer a su estrellita y hacer que sonriera.

- ¿Cómo...como sabías que... - habló con la boca llena, como un niño pequeño.

- Solo lo sé. - Jim'Shug se acercó, cuncliyandose ante él. - Las mandarinas son las frutas de la tierra que más te gustan y que rara vez se consigue aquí. - levantó su mano, quitando un afrecho de mandarina que había en la comisura de sus labios. - Estoy feliz de que te haya encantado.

Yoon'Yuor llevó otro pedazo a su boca, tragando grueso. Mordió su labio, abriendo otra mandarina, y llevando un pedazo a los labios de Jim'Shug. Este lo recibió, sin apartar la mirada de sus ojos ni un segundo.

Los labios de Jim'Shug acariciaron los dedos de Yoon'Yuor, causandole una corriente a su cuerpo. Los recuerdos de lo sucedido en Senha, en aquella habitación, hizo que los lunares de Yoon'Yuor se tornaran rosados.

Jim'Shug sonrió coqueto, acercándose un poco más a él. - ¿Te acordaste de algo, estrellita?

El pulso de Yoon'Yuor se aceleró, y podía sentir como latían sus lunares. Por un momento solo podía pensar en Jim'Shug y él. Todo lo que lo abrumaba no estaba más.

Jim'Shug se veía muy atractivo con esa irritante sonrisa, junto con el aroma de la mandarina...era tan excitante.

Dejando la caja a un lado, Yoon'Yuor cedió a sus ilógicos e impulsivos deseos, empujando a Jim'Shug al suelo y sentadose sobre el regazo de este.

- Yoon...

- Shhh... - Yoon'Yuor puso el índice en los labios de este. - ...no digas nada, solo... - Jim'Shug jadeó acercando aún más a Yoon'Yuor. - ...dame de tu encanto sexual.

Jim'Shug lo tomó de la nuca, acercando sus caras, quedando a casi nada de sus labios. - Te daré eso y más, pero te advierto que no me voy a detener una vez empiece.

- No te detengas entonces - susurró tembloroso, mientras sus manos envolvieron el cuello de Jim'Shug - tómame como si fuera un zhel.

Cerrando el poco espacio que había, juntaron sus labios, en un pasional y lento beso.

Ninguno de los dos podía siquiera imaginarse o pensar en otra cosa, que no fuera sentir sus cuerpos desnudos.

Recostados en la alfombra blanda en el suelo, se devoraban los labios con profundos y húmedos besos. Las manos de Jim'Shug acariciaban el pecho de Yoon'Yuor, quien tenía la camisa y la bragueta abierta.

- Mmmj~~ - los agudos gemidos de Yoon'Yuor, eran callados por la boca de Jim'Shug.

Las caricias y mordiscos en sus labios, tenían a Yoon'Yuor embelesado. No quería más nada, solo seguir sintiendo lo que el hombre encima de él le estaba dando.

Los miembros de ambos se restregaban, causando un delicioso placer, que si o si necesitaban aumentar.

- He visto tantas cosas de muchos mundos increíbles, pero nada se compara a tu belleza - susurró Jimin, mientras bajaba lamiendo por su cuello hasta su pecho. - Eres precioso...me tienes loco...

- Ahhh...ahhh ~~

Los labios de Jim'Shug se deleitaron con la tibia y blanquecina piel de su pelvis, mientras sus dedos raspaban el borde de su boxer. La cadera de Yoon'Yuor se removía, ansioso por sentir más.

Jim'Shug se irguió un poco, quitando sus manos del cuerpo de este, solo para retirar su camisa y desabrochar su pantalón.

- Hazlo, tócame.

La mirada de Yoon'Yuor lo pedía a gritos, y sin esperar ningún segundo, extendió sus manos, delineando cada centímetro del pecho y abdomen de Jim'Shug. Las yemas de sus dedos cosquilleaban en la cincelada y tonificada piel de este, ecxitandolo aún más.

Una de sus manos detuvo la de Yoon'Yuor, apretándola, para después levantarlo y dejarlo sentado a horcajadas.

- Quiero tus manos encima de mi cuerpo todo el tiempo, no las apartes - Yoon'Yuor se abrazó a su espalda, mientras volvían a comerse la boca.

Jim'Shug metió sus manos por debajo del boxer de este, apretando la cálida carne de su trasero. Yoon'Yuor mordió el labio inferior de este, subiendo las manos hasta su nuca, y jalar su cabello al sentir un pellizco en una de sus nalgas.

- ¡Ah! Jim'S...

Los labios de Jim'Shug bajaron hacia su cuello, mientras volvía a subir sus manos y retiraba por completo la camisa de este. Yoon'Yuor hizo su cabeza para atrás, jadeando ante las mordidas de Jim'Shug.

- J-Jim'Shug...¿V-va a doler? - logró decir, entre gemidos.

Jim'Shug rió entre lamidas. Antes de responder, volvió a dejarlo en la alfombra, para poder retirar el pantalón junto con el boxer de este.

Al fin tenía a su estrellita totalmente expuesta ante él. Sus manos recorrieron el interior de sus muslos, abriendo lentamente sus piernas para ver su intimidad.

- Todo este tiempo me has privado de esto - negó, su mirada hechizada en el espléndido cuerpo curveado y pulcro de Yoon'Yuor. - Me has torturado mucho, estamos a mano. - Delineó delicadamente el miembro de este, causandole gemidos suplicantes. - ¿Tú crees que dolerá?

Apartó sus manos, solo para quitar su pantalón y el resto de su ropa. Yoon'Yuor pudo ver detenidamente el miembro de Jim'Shug, lo cual no pudo hacer aquella vez que se masturbaron en Senha por la euforia del momento.

- Con eso, s-si me va a doler - susurró Yoon'Yuor, asustado y conmocionado, sin dejar de ver el miembro de Jim'Shug.

Riendo lascivamente, Jim'Shug se acomodó entre sus piernas, dejando caer su cuerpo sobre el de él. - No te mentiré, quizá si te duela un poco, pero pasará, lo prometo.

- N-No me va a entrar, es muy grande...y yo...yo nunca...

- Shhh... - Jim'Shug besó sus lunares, para después bajar a la punta de su nariz, y por último a sus labios. - ...confía en mí.

Uniendo sus labios otra vez, Yoon'Yuor se dejó llevar otra vez por toda la irónica calma y placer que le impartía Jim'Shug. Su entrada cosquilleaba extrañamente, como si...como si hubiera sido hecha para...

- Estrellita, tu fuiste hecho para estar debajo de mi cuerpo - jadeó cerca de su oído, dejandole una mordida.

- Ahj~~

Acariciando circularmente la entrada de Yoon'Yuor, metió dos de sus dedos. Creyó que sería más complicado, ya que este no tenía la elasticidad de un zhel, pero no, fue fácil. Inclusive sintió cierta humedad adentro.

Jim'Shug no se iba a poner a conjeturar en ese momento, así que solo siguió preparándolo, mientras los gemidos de Yoon'Yuor lo enloquecían.

- Estás listo, amor...

El cuerpo de Yoon'Yuor se contrajo ante aquella palabra de "cariño", la cual Jim'Shug se la había dicho algunas veces, pero en esta ocasión se sentía diferente.

El miembro de Jim'Shug se ubicó en su ano, entrando en él lentamente.

- E-Espera... ¡Ahhhhh!!! ¡Ahhhhh!!!

¡¿Cómo es que Tae'Glen soportaba ser penetrado?! ¡Por los aros de Júpiter, sentía que lo estaban partiendo!

- Ahhhhh..no...no puedo...

Jim'Shug puso los ojos en blanco, tocando el vientre bajo de este, el cual comenzó adormecerse junto con todas las extremidades de abajo. Aquello sirvió para que Yoon'Yuor no sintiera mucho el dolor.

- Tranquilo, todo mejorará y será un deleite... - Jim'Shug terminó de entrar, gimiendo cerca de la mejilla de este. Su miembro estaba atrapado en la cavidad estrecha y hasta húmeda de su estrellita, lo que tanto había deseado desde que lo conoció. - Nnnn~...

Con los labios entreabiertos y ojos cerrados, Yoon'Yuor jadeaba. Lo que estaba viviendo, no se comparaba en nada al sexo que tenía con su ex esposo. Prácticamente, ahora ocupaba el lugar de Tae'Glen, el lugar de un zhel...y era...era...

Su entrada comenzó a latir y arder, pero era una mezcla de dolor con placer, se sentía cosquilleante y desesperante.

Jim'Shug comenzó a moverse. Eran embestidas lentas pero profundas, causando gemidos y jadeos en ambos.

- J-Jim'Shug...ahhh~~

Apretando uno de sus muslos, Jim'Shug abrió su pierna, aumentando más su ritmo, y quitando el adormecimiento de sus extremidades bajas.

- Si, mi amor, gime para mí, grita para mí...solo para mí...

Yoon'Yuor se afianzaba al cuello y espalda de Jim'Shug, mientras este lo seguía embistiendolo, y por ende golpeando algo en su interior que lo hacía delirar.

Jim'Shug gruñía y gemía sobre los labios de Yoon'Yuor, extasiado por la manera en que el interior de este lo apretaba y rosaba con cada estocada

Ambos ignorando la sangre que escurría por la entrada de Yoon'Yuor, y que obviamente manchó la alfombra.

- Esto es tan...tan..ahhh~~ de-delicioso... - dijo Yoon'Yuor, con mucho esfuerzo.

- Todo tu lo eres, amor... - le respondió Jim'Shug, irguiendose y tomandolo de las caderas para penetrarlo con más fuerza.

- Ahhh~~ ahhhh~~

Ya no eran solo gemidos, sino gritos los que chocaban en las paredes de aquel cuarto.

Los testículos de Jim'Shug rebotaban en las nalgas de Yoon'Yuor, y sus dedos apretaban su cintura, dejándola rojiza.

Apretando sus manos en los antebrazos de Jim'Shug, Yoon'Yuor se removió desesperado. Ya no podía más. Estaba bañando en sudor, su cuerpo quemaba y latía, a nada de alcanzar su climax, sin necesidad de haberse tocado.

- Vamos, mi estrellita, juntos...Nnnn~...

- Ahjj~~ ahjj~~

El interior de Yoon'Yuor ardió aún más, al sentir un líquido pegajoso en sus paredes anales. Su cadera se levantó, chocando con la pelvis de Jim'Shug.

Después de eyacular todo su semen en el interior de Yoon'Yuor, Jim'Shug inhaló y exhaló, embistiendo por inercia de manera lenta, dos veces más.

Yoon'Yuor dejó caer sus manos a cada lado de su cabeza. No tenía más fuerzas, ni siquiera para sentarse o decir palabra alguna.

Jim'Shug salió de él, notando su miembro manchado de sangre y obviamente semen. Aquello también chorreaba de la entrada de Yoon'Yuor, manchando también la alfombra.

Acarició con delicadeza la piel a los costados de su rojiza entrada, para después subir su mirada hacia su cara, sonriendo ante la relajada expresión de su estrellita.

Ignorando por ahora las manchas y pegajosidad, se acostó a un lado de él, envolviendolo en sus brazos. Apartó los grisáceos cabellos de su sudorosa frente, dejándole un besito allí.

Yoon'Yuor se acurrucó en el pecho de este, cayendo dormido por los mimos en su cabello y espalda. Jim'Shug no tenía planes de dormir, más bien se quedaría admirando la belleza de su amor, quien se veía tan tierno y vulnerable así, dormido en su pecho.

- Después de este día, no podrás huir de mis brazos, este es tu lugar...










Hola mis amoressss.....aquí un nuevo cap.
Si quieren saber el contexto y como sigue la historia de Jim Parksen y Yoongi, nos leemos en:

"El terricola de Lord Parksen".

La cual está en mi perfil.

Los y las quiere HOLLY.




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