—Minho... —el nombrado levantó la cabeza del libro que estaba leyendo—. Te quiero.

    —Yo también te quiero Jisung, te amo —El nombrado sonrió y abrazo a su novio sonriente—. ¿Estás cariñoso?

    —Si... —Jisung hizo una leve mueca con su boquita—. Trato de distraerme del mal presentimiento que tengo de Seungmin...
  
    —Si algo le llega a pasar... El sabrá que hacer, ya no es débil —Jisung asintió y Minho comenzó a repartir besitos por toda su cara haciéndolo reír—.

     —Minhoooo —El nombrado enarcó una ceja y abrazo a su novio—. Te quiero mucho mucho.

     —Tu ya sabes mí respuesta —Minho sentó a Jisung en sus piernas y lo abrazó comenzando a darle besitos en el cuello, los cachetes, la nariz y la frente mientras Jisung asentía y reía—.

    —Chicos vieron mi- ugh demasiado cariño para mí mundo dark —ChangBin había entrado en la sala en busca de sus auriculares encontrando a sus amigos en esa pose—.

    —"Binnie Binnie Changbinnie" —Jisung le hizo burla haciendo que el pelinegro rodara los ojos—. ¿No le decías eso a Felix el otro día?

    —¡Era para que me dé un poco de pastel! —Minho aguanto la risa y ChangBin enojado salió de la sala dejando solos a los otros dos jóvenes—.

∆∆∆

    —Si no lo haces hoy —SeungMin se hablaba a si mismo, hacia dos días que no podía dormir y las ojeras se marcaban en sus pequeños ojos, estaba pálido y más delgado; tomo aire tratando de calmar el temblor que cada vez se hacía más fuerte y se extendía por todo su cuerpo—. Si no lo haces hoy...

    —¿Hijo? —Una voz se escuchó del otro lado de la puerta SeungMin se tenso— ¿Quieres venir? Con Ma estamos haciendo un pastel.

   —Ya voy ma —Logró parecer cansado, se colocó una gorra y trato de poner su mejor sonrisa pero no podía salir de su habitación, no quería, tenía miedo; tomó aire y lo expulsó mientras se acomodaba la gorra y abría la puerta comenzando a escuchar las voces de su madre haciendo que se sienta más calmado—. ¿Ma?

   —¿Si? —Una de sus madres se dio vuelta y le sonrió mientras le extendía un plato con unas galletas—. ¿SeungMin? ¿Qué sucede? Estás pálido...

   —¿SeungMinnie? —Su otra madre se le acercó y le quitó la gorra viendo su rostro demacrado y triste—. Hijo... ¿Qué está pasando?

   —Yo... Yo lo siento tanto —El chico abrazo a sus dos madres mientras que estás se miraban extrañadas devolviéndole el abrazo a su hijo—.

   —Dinos que sucede Seung... —El nombrado sollozo y se separó de sus madres para luego comenzar a hablar—.

   —Yo... Yo fui metido en un problema —Sus madres lo miraron mal—. Un hombre me dijo que si... Si... No no no.

    —SeungMin, si no nos dices no podremos ayudarte.

    —Si no mataba —El rostro de las tres personas en la sala de hizo más pálido—. Si no mataba a HyunJin... El las mataría a ustedes. ¡No puedo permitir eso! Tengo que matarlo...

    —SeungMin —Una de sus madres trato de controlar todo el miedo que había comenzado a sentir—. Cariño escúchame.

    —Mamá no puedes morir por favor no —El chico miró a su madre sin preocuparse por la cantidad de lágrimas que caían de sus ojos a una velocidad alta—. El vivió mucho más tiempo ustedes no el...

     —SeungMin, el no es quien me importa, lo único que quiero es que estés bien vos, no quiero que estés en problemas no quiero q- —la madre sintió su pecho comenzar a cerrarse y a impedirle respirar la otra mujer en la sala que abrazaba a su hijo comenzó a sentir lo mismo—.

    —¿Mamá? ¡Mamá! ¡Ayuda! ¡Alguien, por favor! —SeungMin comenzó a desesperarse en cuanto vio a sus madres en el suelo retorciéndose por la asfixia—.

    —Te dije que debías matarlo —El adolescente en la sala tembló al escuchar esa voz—. Sabías que sucedía si no lo matabas.

    —Todavia queda tiempo —SeungMin lo miro suplicante—. ¡Ayudalas! ¡Haz que dejen de sufrir!

    —Oh, está bien —JaeBum chasqueó los dedos y en un instante las dos mujeres estaban en el piso completamente inmóviles, muertas, SeungMin se horrorizó—.

     —No... ¡No! ¡Esto no era lo planeamos JaeBum! En ningún momento me diste un limite de horario —JaeBum se encogió de hombros—.

    —Olvide mencionarlo. De todas formas, debes matarlo —SeungMin sintió que todo se volvía oscuro, ya no había alguien en su familia, sus madres no estaban y sus amigos nunca lo entenderían, de todas formas iba a matar a un ser inocente. Miro a JaeBum y el mayor noto como un brillo que reflejaba la felicidad y la vida en los ojos de SeungMin desaparecía lentamente—.

    —Está bien —JaeBum enarco una ceja—. No tengo a nadie más en este mundo...

    —Bien —El mayor se dio la vuelta y camino hacia la puerta de la casa del chico—. Hyunjin está en su casa, y tu estás en la tuya, solo debes ir a su casa y listo.

    El pelinegro sonrió al finalizar de hablar y SeungMin asintió.

    —Sólo... Sólo déjame llevarlas a la cama... —El joven comenzó a levantar a una de sus madres con cuidado permitiendo que las lágrimas se apoderaron de su rostro otra vez—.

∆∆∆

     SeungMin sostenía la estaca entre sus manos temblorosas mientras miraba a HyunJin con los ojos llorosos deseando no estar en esa situación.

     —¿Qué haces? —HyunJin sostenía con fuerza la estaca que estaba apuntada a su pecho, SeungMin tomó aire entrecortado por el llanto que tenía—.

     —Y-yo —Hipó—. Yo no puedo.

     —SeungMin explica que está pasando.

     —¡Eran mi única familia! —SeungMin cada vez temblaba más HyunJin no entendía nada, tiro de la estaca con fuerza y atrajo al menor entre sus brazos impidiendo que se mueva a pesar de los intentos del menor—. Ya no están...

    —SeungMin, ¿Qué sucedió con tus madres? —el menor se tenso en los brazos del mayor—. ¿SeungMin?

    —JaeBum... El me dijo que si no te mataba... Las mataría —HyunJin no entendía nada—. Pero cambio las reglas y llego de la nada a casa en cuanto yo hable sobre lo que era forzado a hacer y las mató...

    —SeungMin... —HyunJin abrazó con fuerza el delgado cuerpo del menor y se deslizó por la pared hacia el piso con SeungMin abrazado a el—. Lo siento...

    —Es mí culpa, si yo hubiera sido más fuerte —El mayor negó con la cabeza—.

    —No SeungMinnie, no es tu culpa, tu no tienes la culpa de nada —SeungMin separó su cabeza del pecho del mayor y miro como si fuera un perrito mojado a HyunJin tratando de decir algo—. Vamos a ir con JaeBum y lo vamos a hacer pagar.

     —El es muy fuerte... —SeungMin negó con la cabeza—. El dijo que no se enfrentaba a vos por miedo ya que era más débil que vos. Pero... Si me tiene a mí podrá lastimar a otras personas....

     —Es por eso que me llevaras a donde está el y nos vengaremos —SeungMin negó—.

     —Es muy arriesgado, yo debería —Tomo aire—. Debería matarme.

     —¿Qué? ¿SeungMin estás loco? Ni se te ocurra tocar esa estaca —HyunJin tiro del brazo del menor obligando a que se vuelva a sentar—. Ven vamos, vamos al auto.

     —Está bien —SeungMin comenzó a caminar pero sintió como su pecho se estrujaba—. H-HyunJin...

     —¿SeungMin? —HyunJin lo miro y agarro tratando de entender que le sucedía—.

     —Duele... —El menor hablo entrecortado apretando su remera en la parte en la que se encontraba su corazón—.

     —Si no lo matas te mato a ti, ya no tienes familia después de todo —Una voz se escuchó dentro de la casa, SeungMin se retorcía de dolor mientras HyunJin trataba de encontrar a la persona. El mayor tomó aire y concentró su sentido auditivo al máximo ignorando completamente los otros como la vista el tacto o el gusto; al cabo de unos instantes su cuerpo de dirigió a una velocidad sobre-humana hacia una esquina de la sala en la que estaban asustando a JaeBum y tomándolo por la remera que llevaba puesta—.

   —¿C-cómo? —JaeBum estaba completamente aterrado. Pero HyunJin era alguien que tenía un poder nunca antes visto, podía reprimir sus sentidos, como sus emociones o sentimientos. Los ojos del pelinegro se oscurecieron completamente mientras apretaba el cuello del hombre de su misma altura—.

    —Deja a SeungMin —El nombrado estaba a punto de perder la conciencia por la cantidad de dolor que estaba sintiendo, pero a pesar de la amenaza, JaeBum no se detuvo—.

     —Dame la piedra primero —HyunJin gruñó—.

     -No la tengo, pero tal vez tengo algo —Los ojos de JaeBum demostraron interés—. Tu vida.

     —¿Qué rayos? —JaeBum sintió como la mano que estaba al rededor de su cuello lo apretaba increíblemente imposibilitando su respirar, inmediatamente dejo de hacer sufrir al menor de todos en la sala; pero HyunJin no paro hasta ahorcarlo completamente y matarlo, arrojandolo al suelo luego de eso—.

     —SeungMin... —HyunJin volvió a su estado natural acercándose al pequeño SeungMin que estaba en el suelo contra la pared tratando de tranquilizarse—. Ven.

     El mayor cargo en brazos al menor que estaba temblando del miedo mientras subía arriba de HyunJin las escaleras hasta el cuarto de este y lo recostaba en la cama tapandolo.

    —Ya vuelvo, son unos segundos, si sucede algo grita lo más alto que puedas ¿Entendido? —SeungMin asintió y HyunJin salió rápidamente de la habitación actuando a una velocidad extremadamente alta sacando a JaeBum de la casa clavándole la estaca observando cómo se hacía cenizas; si bien JaeBum no era un vampiro era un ser sobrenatural por lo que al ser matado de esa manera y siendo descendiente de vampiros, terminaba esfumandose—.

    La noche no fue bonita, HyunJin no durmió absolutamente nada acompañando a SeungMin en su desvelo, había perdido a sus dos madres, ya no tenía familia, no tenía a nadie que lo acompañe ni lo entienda como su madres lo hacían.