Elsa se despertó, desorientada. Miró por la ventana del coche,no estaba lloviendo pero era un clima bastante húmedo. Era de noche,no veía nada ni carteles de indicación. Ni si quiera los arboles. Ahora era Aster en el que conducía y el otro Frost de copiloto mientras Punzie y Flynn hablaban en voz baja tomados de la mano

-¿Dónde estamos?-preguntó Elsa en voz alta para que todos se percataran de que se había despertado

-Ya estamos llegando-le contestó el peligris sin apartar la vista de la carretera.

El coche se detuvo de repente extrañando a la rubia. No veía nada,solo oscuridad. Todos de bajaron del coche, de escuchaba un suave murmullo y Elsa dedujo que era un río. Veía como Flynn y los primos Frost sacaban algo del maletero y lo arrastraban por la tierra

-¿Qué hacen?-preguntó confusa la rubia

-Ayúdame con esto-le dijo Rapunzel haciendo que Elsa cogiera en brazos varias mochilas.

-¿Para qué es esto? -preguntó la rubia

-Luego te explicaré,ahora cógelo-dijo la castaña seria. Elsa solo siguió a su prima la cual se acercaba al río. Cuanto más se acercaban más ruido hacia éste. Entonces vio lo que los chicos estaban haciendo y era montar una enorme balsa inflable.

-Esto...-murmuró ella señalando la balsa

-Iros montando-decía Flynn serio mientras cargaba en aquella balsa algunas mochilas de cuero aparentemente llenas. Elsa confusa siguiendo a su prima se montó en aquel hinchable para después sentarse. Un par de minutos después los cinco ya estaban montados en aquella balsa. La cual seguía un curso bastante rápido

-¿Habéis metido la ropa?-preguntó el peliblanco rebuscando entre los macutos

-No hemos metido nada para Elsa -dijo Rapunzel sorprendida por su error. Posó una mano en su rostro. Elsa les miraba sin comprender nada

-Ya arreglaremos eso después, nos estamos acercando-decía Aster poniéndose de pie en aquella balsa poco fiable. Elsa les miraba confusa. Los cuatro estaban poniéndose de pie con las mochilas en sus espaldas.

-¿Acercando a qué? -preguntó Elsa levantándose también. Comenzó a sentir una brisa húmeda en su rostro. Un sonido demasiado estrepitoso de agua se acercaba y la respuesta de sus amigos le daba pavor

Rapunzel de giró y le miró con una sonrisa

-A las cataratas Victoria - dijo la morena. Elsa abrió sus ojos. El sonido ya era demasiado molesto. El agua les salpicaba y la balsa se movía más

-¿Vamos a caer?-preguntó Elsa a asustada al ver que todos se ponían en una posición

-No...-hizo un silencio- vamos a saltar-le dijo Flynn mirando al frente

-¡¿Qué?!-gritó pero le ignoraban. Elsa apenas escuchaba nada. Solo sentía el frío del agua,el zumbido de la cascada y a los chicos delante de ella completamente quietos mirando al frente.

-Es la hora-dijo Flynn y de repente saltó. Elsa gritó asustada. Le siguieron los Frost. Pero Elsa retrocedía en vez de avanzar

-Vamos Elsa - le dijo Punzie tendiéndole la mano

-Estáis locos-dijo Elsa asustada

-¿Después de todo lo que has visto no vas a confiar en nosotros?-preguntó la morena aún con su mano tendida. Elsa parpadeó varias veces. Tenía razón. Todo lo que había visto 72 horas atrás había sido una autentica locura que le quitaba sentido a todo lo que conocía. Miró a Olaf y lo metió en su bolso para que estuviera asegurado. Elsa tomó su mano y las dos se pusieron delante de la barca. El miedo recorría su cuerpo. Temblaba. Giró su rostro y vio a Rapunzel con los ojos cerrados y una calma demasiado asustadiza.

Cerró los ojos también como su prima para ver si su miedo pasaba pero lo único que invadió su cuerpo fue un enorme mareo. Suspiró profundamente. Sentía que ya estaba mojada, probablemente por el agua que les salpicaba. Tomó todo el aire que pudo y sus pies dejaron de tocar la barca.

Gritó gritó todo lo que pudo mientras sentía como caía, estaba cayendo. Realmente estaba cayendo por las cataratas del Niágara. De repente sintió que su cuerpo había tocado tierra. El golpe había sido un poco fuerte,como si se hubiera caído de la cama. Las llemas de sus dedos tocaban tierra. Era tierra.

Abrió sus ojos ,Tierra marrón había debajo de ella. Escuchaba pasos,caballos,carretas. Alguien le agarró por los brazos y le ayudó a levantarse. Miró a su alrededor asustada. No estaban en el fondo de las cataratas. No estaban en Estados Unidos...¿Dónde demonios estaban?

La gente que tenía ante ella parecían sacados de una película de la época medieval. Pueblerinos vestidos con ropas harapientas y de colores oscuros sin algún tono alegre. Casas de aspecto mal hecho ,juntas con materiales pobres. Los niños jugaban en la calle persiguiendo a un extraño animal. Elsa se asusto al verlo pues parecía un perro. Pero extrañamente su cuerpo estaba cubierto de pinchos. Alzó la cabeza de nuevo y vio entre los pueblerinos personas con aspecto realmente monstruoso.

Iba a gritar asustada pero una mano en su boca le hizo bajar su volumen. Aquella persona le arrastró hasta estar dentro de un establo. Donde el suelo estaba repleto de paja. Elsa vio aquellos ojos azules que le miraban fijamente. Con su cuerpo la aprisionaba contra la pared y su mano tapaba su boca

-Silencio- le dijo él serio- Nadie puede verte ¿Entendido?

Elsa asintió. El chico le quitó la mano de la boca y ella respiró. Miró su ropa. El peliblanco llevaba unos extraños pantalones marrones atados a las piernas. Junto con una camisa blanca y una capa marrón. Pero enseguida él se la quitó para ponérsela a la rubia y con ello taparle su rostro por la capucha

-¿Dónde está Punzie?¿Dónde estamos?

-Luego te lo explicaremos. Y Punzie está en camino - dijo el albino sacando la cabeza por la puerta del establo. De repente la abrió.

Elsa dio unos pasos atrás al ver como tres caballos entraban en aquel lugar guiados por Flynn y Aster,que al igual que Jack llevaban ropa bastante extraña. Elsa suspiró y tapó su rostro. Todo era demasiado confuso para ella. Todo eso no tenía ningún sentido.

Elsa pegó un enorme chillido al ver a Rapunzel

-T-tu....-murmuró retrocediendo

-Lo sé, Elsa,cálmate - le dijo la chica caminando hasta ella

-¡Tu pelo!-gritó -¡Eres rubia! ¡Y-y ...lo tienes largo!

-Lose...todo tiene explicación pero...

-Ahora no hay tiempo- le interrumpió -Hay carteles de Se busca con un retrato parecido al de Elsa...ya la están buscando-dijo Flynn mientras ayudaba a Punzie a subirse encima de uno de los caballos. Elsa quitó las manos de su rostro y les miró

-¿Me buscan? ¿A mí? ¿Por qué? -preguntó. Los cuatro le miraron. Aster desvío la vista. Jack acarició su nuca sin saber que responder

-Es difícil de explicar...te lo diremos lueg-

-No voy a esperar- le interrumpió la platinada- Estoy cansada de esperar ¿Dónde demonios estamos?¿Dónde está mi padre?¿Por qué estamos aquí? -gritó frustrada. Jack se iba a acercar a ella para callarle pero un alboroto fuera en la calle les llamó la atención a los cinco.

La gente estaba en mitad de la calle mirando todos al cielo

-Sale el sol...-murmuró una mujer la cual estaba en un puesto de frutas que ella misma atendía

-Esta saliendo el sol-murmuraban todos asombrados sin despegar sus miradas del cielo. Elsa frunció el ceño confusa. ¿Acaso no conocían el sol?

-Tenemos que irnos,ya- dijo Flynn de repente con urgencia. Elsa veía confusa como todos se montaban en aquellos corceles. Una mano se tendió delante de ella. Alzó la vista y vio al peliblanco montado sobre uno de los caballos agarrando las riendas y mostrándole su mano.

-Vamos-murmuró él. Elsa miró a su alrededor y suspiró antes de tomar su mano y montarse detrás del chico. Agarrando su cintura.

Los tres corceles se alejaban de aquel poblado,Elsa dio un ultimo vistazo y como la gente seguía embobada mirando sobre sus cabezas.

-Está aquí -sonrió una mujer con ilusión mirando al firmamento

Elsa seguía agarrada a la cintura del peliblanco. Llevaban como dos horas cabalgando y solo veía arboles y montes. Algún que otro río habían cruzado pero aparte de eso no se veía gran cosa.

-¿Queda mucho?-preguntó. Jack giró su rostro y le miró a los ojos

- La primera vez que viajas suele cansar un poco. Cierra los ojos,te aviso cuando lleguemos - le dijo mirando de nuevo al frente. Ella solo le hizo caso y cerro los ojos recargándose sobre aquella fuerte espalda la cual le garantizaba seguridad.

*****

-Elsa- su voz le hizo abrir los ojos y pestañear varias veces. Seguía montada sobre el caballo pero el paso de este se había vuelto más lento. Elsa miró a su alrededor. Estaban subiendo una suave colina.

Sus ojos se abrieron sorprendida al ver en todo lo alto un enorme castillo. Blanco como las nubes y enormemente majestuoso. Un pequeño pueblo estaba pegado a este y los caballos parecían dirigirse a aquellas enormes puertas que llevaban al jardín del castillo las cuales se abrieron inmediatamente.

Muchos sirvientes paseaban por aquellos extensos jardines llenos de fuentes y arbustos. Se quitó la capucha dejando su cabello platinado al aire. Todo el mundo se le quedaba mirando.

Los corceles se detuvieron al pie de las escaleras de aquel bello palacio y Elsa con la ayuda del chico bajó del caballo. Solo les siguió sacando a Olaf de su cartera y cogiéndole en brazos. Los pasillos por dentro eran enormes,majestuosos,brillantes y blancos.

Los chicos le condujeron hasta una enorme sala,donde al abrir dos enormes puertas dieron con un salón. Un matrimonio estaba sentado sobre unos sillones verdes agarrados de la mano. La pareja miró a los muchachos.

La mujer de cabellos castaños y ojos verdes sonriente y con una enorme mirada de preocupación se levantó y se acercó para abrazar con fuerza a Rapunzel. La mujer inspiró el aroma de su cabello y le abrazó con fuerza.

Elsa parpadeo varias veces confusa pues la mujer que estaba a un par de metros de ella se parecía muchísimo a su prima. A la cual estaba abrazando.

La mujer se alejó de la ahora rubia y miró a la platinada. Dio unos pasos acercándose a ella pero Elsa retrocedió

-¿Quién eres tú? -preguntó Elsa a la defensiva. A ver delante de ella a una mujer vestida como toda una reina.

La mujer sonrió

-Te pareces tanto a tu madre...-dijo Margaret con una sonrisa

-¿Conociste a mi madre?-preguntó la chica confusa agarrando su collar con la otra mano que no cogía a Olaf.

-La conozco aún...

-Mire,no se quién es usted pero puedo asegurarle que mi madre está muerta...murió cuando yo era pequeña.

-No te extraña que nunca le hayas visto,que no tengas ningún retrato de ella. Nada- Elsa miró su collar - Tu madre está viva

-Pero mi padre...- cuando pronunció esa palabra la mujer palideció.

-¿No has venido con Bruce?- la mujer miró a Flynn pero este simplemente bajó la cabeza. Margaret se llevó las manos a la boca. Su marido se acercó a ella

-Será mejor que le expliquemos todo después -le dijo en voz baja el hombre y la mujer asintió- Jack...- solo con decir su nombre el chico ya sabía que hacer.

Agarró por el codo a Elsa y sin que ella dijera nada le guió por aquel enorme pasillo hasta una habitación. Elsa se quedó mirándola atentamente

-Tienes que descansar- le dijo serio

-Pero...-

- Son órdenes del rey - dijo antes de cerrar la puerta. Elsa se apegó a ella. Mas no la abrió. Pegó si frente a la madera y suspiró. Olaf se removió en sus brazos. La chica agachó su rostro y besó al felino

-En qué nos hemos metido Olaf...

Continuará....