Clark miró hacia el gran mundo azul que flotaba en el espacio; sus ojos Kryptonianos perforaron las nubes que lo rodeaban, hasta que pudo ver claramente el Motor Mundial en el Océano Índico, de pie sobre él con 3 enormes garras de metal. El cielo se llenó de nubes negras y el humo generado por la máquina de terraformación comenzó a apoderarse de la atmósfera de la Tierra. Un anillo de agua de océano rodeaba la máquina, el campo gravitacional la mantenía en el aire, y rayos rojos cortaban el cielo negro, mientras el rayo azul seguía golpeando el suelo.

Parecía una tormenta del mismísimo infierno.

Sin dudarlo, Clark inició su descenso, entrando a la atmósfera con velocidad, volando directamente contra el Motor Mundial; fue un error. Las nubes negras que se formaban sobre él estaban compuestas por la atmósfera de Krypton. En el instante en que sus pulmones se llenaron con eso, sintió que su energía se agotaba, mientras un poderoso ataque de tos se apoderaba de él; no pudo seguir volando y comenzó a caer rápidamente.

Por suerte, todavía había aire de la Tierra alrededor. En el momento en que salió de las nubes negras, la atmósfera terrestre limpió su cuerpo del aire de Krypton y sintió que su cuerpo recuperaba su energía; Se detuvo en el aire y miró el Motor Mundial, antes de volar más cerca.

Como advirtió su padre, la gravedad se estaba volviendo loca a su alrededor; podía sentir la fuerza empujándolo hacia abajo y luego hacia arriba, lo que hacía difícil volar con precisión, y dudaba que algún avión permaneciera en el aire por mucho tiempo en esas condiciones. Y, como también le había advertido su padre, en el momento en que el Motor Mundial lo identificó como una amenaza, sus defensas se activaron. Al abrir un enorme contenedor en su cuerpo principal, el Motor Mundial reveló un almacenamiento masivo de geo líquido; que se transformó en un extraño tentáculo de metal, acercándose rápidamente en su dirección.

Volando hacia un lado, Clark evadió el tentáculo de geo líquido y vio su punta transformarse en una especie de garra; y en el mismo momento, otros 3 tentáculos idénticos se formaron a partir del Motor Mundial, volando contra él, tratando de agarrar su cuerpo. Clark comenzó a volar rápido, esquivando las garras de metal, subiendo y bajando, maniobrando más rápido que nunca, tratando de pensar rápido para engañar a los 3 tentáculos y mantenerse en el aire con la atracción gravitacional haciendo todo lo posible para derribarlo.

Fue entonces cuando docenas de otros tentáculos tomaron forma del Motor Mundial y lo atacaron; Eso no iba a ser fácil.

...

"Jarvis, ¿puedes verlo?" preguntó Natasha, con los ojos fijos en los monitores.

"Un momento, por favor", respondió la IA de Stark; los monitores del centro de mando del Helicarrier comenzaron a transmitir las imágenes de los satélites de Jarvis; y todos sólo podían mirar lo que sucedía en las pantallas.

Cuando Clark despegó, volando tan rápido que los satélites de SHIELD lo perdieron en cuestión de segundos, todos regresaron al interior para terminar de prepararse. El Helicarrier estaba casi en Nueva York, la nave de Clark ya estaba cargado en el Quinjet de los Vengadores y los aviones estaban preparados para atacar tan pronto como el Motor Mundial se apagará.

Pero, por lo que parece, esa última parte no iba tan bien.

Era difícil verlo debido a las nubes negras que interferían con la visión del satélite, pero lo poco que podían ver era increíble. Natasha había pensado que Clark estaba exagerando cuando dijo que él era el único que podía lidiar con el Motor Mundial; pensó, tal vez, sólo era cuestión de poder llegar a tiempo.

Ella estaba equivocada.

No solo el campo gravitacional alrededor del Motor Mundial haría imposible que cualquier arma que usaran lo alcanzara, sino que no había forma de acercarse a él. Si eso no fuera lo suficientemente malo, estaban los tentáculos de metal que acababan de brotar de el.

"Santo infierno, ¿eso es geo líquido?" preguntó Stark, con los ojos pegados a las pantallas. "¡No recuerdo que dijera que podía hacer eso!"

"Él dijo que podía tomar cualquier forma, ¿no?" dijo Steve, luciendo preocupado.

Todos los ojos en la sala estaban pegados a los monitores, desde Fury y los Vengadores hasta cada agente allí. La tensión era enorme. Si Clark fallaba ... Bueno, no tenían exactamente un "Plan B". El Consejo probablemente desataría un ataque nuclear contra ambos objetivos, que devastaría al mundo si impactara; lo cual no sería así, porque además del campo gravitacional, la nave y el Motor Mundial estaban equipados para lidiar con cosas así. Clark les había advertido.

No, ahora mismo, su única esperanza era Clark.

"Nos acercamos a Nueva York", anunció María.

...

Jessica vio que la ventana empezaba a agrietarse; junto a la pared.

"Está bien, Trish, es hora de irse", dijo, empujando a su hermana para que dejara de mirar la nave desde la ventana. "El área de los 'panqueques' se está extendiendo y está llegando aquí. Necesitamos alejarnos".

Cada vez que la nave golpeaba el suelo con ese enorme láser azul, Jessica podía sentir temblar el edificio; El sonido era horrible, con coches, edificios y personas aplastadas contra el suelo. Dondequiera que miraran, había gente huyendo, gritando, completamente desesperada por escapar de otro ataque alienígena.

Volvió a mirar a su hermana; Trish todavía estaba congelada junto a la ventana.

"¡Trish!" gritó, haciendo que ella y varias otras personas a su alrededor saltarán. "¡Vámonos ahora!"

Trish finalmente se volvió hacia ella, con una expresión de miedo en su rostro, y asintió. Sin esperar a Jessica, tragándose su miedo por el momento, aplaudió llamando la atención de todos.

"¡Muy bien gente, nos vamos!" ella gritó. "¡Dejen todo atrás y traten de mantener la calma! ¿Ven a los policías ahí abajo? Sigan sus instrucciones. ¡Vayan, vayan!"

La gente alrededor de la estación de radio pareció despertar y comenzó a hacer lo que Trish les pedía, saliendo rápidamente de la habitación. Jessica tomó la mano de su hermana y la llevó hacia la salida, siguiéndolas.

Aunque Jessica sabía qué esperar cuando saliera, ya que estaban observando esas mismas calles desde el interior del estudio, en realidad estar allí era como estar en un mundo completamente diferente. Había gente corriendo en medio de las calles, entre los autos abandonados, siempre mirando hacia atrás para mirar la amenazadora nave flotando en el cielo; Los edificios, no muy lejos de donde estaban, comenzaban a resquebrajarse, algunos ya estaban perdiendo pedazos enormes, los gritos eran incesantes.

Fue entonces, unos segundos después de que se fueron, mientras todavía miraban sorprendidos a su alrededor, que uno de los edificios al otro lado de la calle finalmente cedió. El sonido que hizo fue horrible, como si mil huesos se rompieran al mismo tiempo, y empezó a caer hacia un lado; justo donde estaban.

"¡Mierda!" exclamó Jessica, tomando la mano de su hermana y tirando de ella.

Trish quedó congelada en el lugar, pero eso no impidió que Jessica la arrastrara y corrieron para alejarse de debajo del edificio que se derrumbaba. El sol se bloqueó por un momento, la enorme sombra creció a cada segundo, mientras todo se acercaba en su dirección, pedazos del edificio rompiendo el suelo y los autos en su camino.

"¡Ay dios mío!" gritó Trish, mientras Jessica tiraba de ella, todos en la calle corriendo alrededor de ellos, gritando, algunos cayendo y quedándose atrás.

Al darse cuenta de que no había forma de escapar del edificio, Jessica se detuvo por un segundo, agarró a Trish y comenzó a correr de lado, con la esperanza de poder evadir el ancho del edificio que caía en lugar de su altura; ni siquiera se dio cuenta de que también estaba gritando cuando levantó a Trish y saltó.

El edificio cayó justo en el momento en que Jessica aterrizó en el suelo, Trish con ella, tragándose toda la calle; una nube de escombros caídos cubrió el aire. Ambas respiraban aceleradamente, ambas cubiertas de polvo y sangrando por caer al suelo; pero estaban vivas.

"Trish, ¿estás bien?" preguntó Jessica, levantándose y mirando a su hermana. "¡Trish!"

Su hermana volvió a la realidad y asintió rápidamente.

"¡Estoy bien, estoy bien! Pero esa gente ..."

"Esa gente está muerta, Trish, no hay nada que podamos hacer ahora", interrumpió Jessica, no tan contenta con la idea como parecía; pero no podían parar ahora. "Tenemos que irnos, de lo contrario, también moriremos".

Trish asintió de nuevo y Jessica la levantó. Comenzaron a correr por la calle, tratando de ganar distancia del área de la explosión antes de que cayera otro edificio; lo cual no tomaría mucho tiempo, por cómo iban las cosas.

"¡Ayuda!" una voz llamó desde cerca. "¡Por favor ayuda!"

Era la voz de un niño; Contra cada fragmento de autoconservación dentro de ella, Jessica se detuvo.

Maldito sea Clark Kent y sus actos heroicos por contagiarse a ella.

...

"¡AAAAAAAHHH!" Gritó Clark, lanzando su visión de calor contra los tentáculos Geo líquidos.

Los tentáculos comenzaron a derretirse, fusionándose; Clark los golpeó, golpeando las partes que aún funcionaban y los pedazos derretidos cayeron al océano. Pero eso no detuvo al Motor Mundial, ya que generó más tentáculos que comenzaron a seguirlo.

Clark voló rápido, evadiéndolos, sus golpes golpeaban tan fuerte que el aire alrededor de sus puños creó una explosión, interrumpiendo el campo magnético que mantiene juntas las partículas de metal. El rayo azul continuó rompiendo el suelo, abriendo las aguas del océano cuando atacó; cada vez que eso sucedía, Clark tenía que mantenerse fuertemente en el aire, porque la gravedad aumentaba; y luego, cuando el Black Zero en el otro lado del mundo respondió, devolviendo la explosión, Clark tuvo que evitar subir.

Era inútil seguir luchando así. Evadiendo los tentáculos nuevamente, Clark corrió en dirección al Motor Mundial, pasando por el medio del geo líquido, volando rápido para evitar las garras que se formaban para agarrarlo; A su alrededor, la tormenta infernal parecía empeorar, los rayos caían sin cesar.

Tenía que destruir la fuente del geo líquido, no seguir luchando contra los tentáculos.

Cuando estaba a punto de hacer contacto, el Motor Mundial liberó lo que parecía ser un océano entero de geo líquido; la enorme ola lo golpeó justo en la cara, rodeándolo por completo, moldeándose alrededor de su cuerpo con una fuerza increíble. Y luego se disparó, llevándose a Clark consigo, hasta que estuvo en medio de las nubes negras.

En medio de la atmósfera de Krypton.

El aire de su planeta natal empezó a llenar sus pulmones; comenzó a toser incontrolablemente, el aire drenando los poderes que obtuvo del sol amarillo, haciéndole imposible luchar contra el agarre del geo líquido. La fuerza de los tentáculos empezó a aplastarlo. Y luego volvió a tirar de Clark hacia abajo, la velocidad del tentáculo lo mareó.

Y lo arrojó justo en medio del rayo de gravedad.

Clark fue tragado por la luz azul mientras permaneció en el aire por un instante; luego el rayo lo derribó y la fuerza lo aplastó contra el suelo como si fuera un insecto.

...

"¡Mierda!" exclamó Tony al ver a Clark desaparecer en medio del rayo azul; esa era una afirmación con la que Natasha podía estar de acuerdo.

A su alrededor, todas las personas en la habitación estaban congeladas, sin saber qué hacer, sin saber qué pensar. ¿Cómo podría alguien sobrevivir a eso? ¿Fue este realmente el final?

Natasha apretó los puños con fuerza, negándose a creer que todo terminaría así.

"Jarvis, ¿puedes ver algo? ¿Puedes mejorar la calidad del vídeo?" preguntó Natasha.

"Mis disculpas, señorita Romanoff, pero esto es lo mejor que puedo hacer", respondió Jarvis.

"Necesitamos ... Necesitamos hacer algo", dijo Steve, con las manos también apretadas, mientras sus ojos pasaban de los monitores que mostraban a Clark a los monitores que mostraban Nueva York.

Honestamente, Natasha no podía decir cuál de ellos era peor.

"¿Debería ordenar un ataque?" Preguntó María, volviéndose hacia Fury.

Natasha se dio cuenta de que Fury estaba tan perdido como ellos, incluso si él no lo demostraba.

"El rayo gravitacional todavía está encendido", advirtió Bruce. "Si atacamos, lo único que haremos será atacar la ciudad".

"¿Y si está muerto?" preguntó Clint, mirando a Bruce; para su sorpresa, Natasha sintió un dolor sordo cuando él dijo eso. "No podemos apostar todas nuestras esperanzas en él. Si no puede hacerlo, entonces tenemos que hacer algo".

Era un pensamiento pragmático, casi insensible, pero era cierto. Si Clark ... Si Clark realmente estaba muerto, entonces los Vengadores tenían que intentar algo. El mundo dependía de eso.

"¡Esperen un minuto, veo algo!" gritó Stark, sus ojos casi tocando el monitor. "Santa madre de ... ¡Se está levantando!"

Natasha amplió la imagen, tratando de tener una idea de lo que estaba sucediendo; y allí, en medio del rayo azul, pudo ver una forma humana tratando de levantarse. La gente alrededor de la sala vitoreó por un segundo; y Natasha sintió que el alivio la invadía.

"Seguiremos esperando", ordenó Fury, deteniendo el ataque.

...

Jessica y Trish siguieron el sonido de la voz y doblaron por una calle secundaria; vieron a un niño, cubierto de polvo de pies a cabeza, con sangre congelada en la cara y las manos, tratando de levantar lo que parecía ser un pedazo del edificio que acababa de caer contra otro edificio.

El niño no podía tener más de 11 años.

"¡Por favor, tienen que ayudarme!" gritó al verlas, con el rostro cubierto de lágrimas. "¡Es mi tía, está atrapada!"

Corrieron hacia él, el sonido del rayo azul golpeando el suelo con fuerza en sus oídos; y más fuerte cada vez que golpeaba.

"Dios mío, gracias", dijo el niño, con la voz apagada por las lágrimas. "¡N-no sabía qué hacer! Yo-"

"¡Cállate niño!" Jessica interrumpió. "No tenemos tiempo. Sólo dime dónde está".

El niño asintió rápidamente y señaló hacia el edificio sobre el que se había caído el otro edificio.

"¡Ahí! Estábamos visitando la galería cuando todo comenzó. Pensamos que sería mejor quedarnos aquí, pero luego-"

"Entonces el rayo azul de la muerte se extendió y otro edificio cayó encima, ¿verdad?" Jessica volvió a interrumpir. "Como dije, no me importa. Sólo dime en qué piso".

"¡Tercero! Logré pasar por las ventanas y bajar usando la escalera de incendios, ¡Pero mi tía resultó herida! Un pedazo del edificio cayó sobre su pierna y luego la escalera de incendios se cayó ... ¡Estoy tratando de abrir la puerta, pero está bloqueada! Estoy seguro de que si intentamos unirnos, tal vez podamos-"

Jessica ya no escuchaba. Miró hacia arriba y encontró la ventana por la que había escapado el niño.

"Trish, quédate con él, ya vuelvo".

Diciendo eso, Jessica apuntó y saltó, hasta el tercer piso, cubriéndose el rostro con los brazos cuando chocó contra el vidrio con fuerza.

"¡Santa vaca!" escuchó al niño gritar desde afuera.

Jessica miró a su alrededor y evaluó la situación, tratando de moverse rápido. Todo el lugar estaba en ruinas, partes del techo se derrumbaron, las paredes rotas, los cables eléctricos chirriaban. Era una especie de pequeña galería, llena de pinturas y figuritas rotas; su pié rompió lo que parecían ser los restos de un juguete de Iron Man.

Sin embargo, el sonido que hizo al entrar alertó a alguien que estaba dentro.

"¡¿Hay alguien ahí?!" gritó una mujer y Jessica comenzó a caminar en su dirección. "¡Oh, gracias a Dios!"

La mujer estaba en el suelo, con la pierna atrapada bajo una gran parte del edificio que se había derrumbado. Todo el pasillo que conducía a las escaleras de salida estaba bloqueado por escombros; no es de extrañar que estuviera atrapada dentro.

"¡Por favor, tienes que pedir ayuda!" Continuó la mujer, mirándola. "Mi sobrino está-"

"Tu sobrino está bien, está con mi hermana", respondió Jessica, mirando el pilar de concreto sobre la mujer. "¿Estás bien? ¿Te rompiste algo?"

"No lo creo, simplemente estoy estancada", dijo la mujer. "¡Pero no puedo salir! Es demasiado pesado. ¡Necesitas que alguien te ayude!"

Jessica no respondió; en cambio, agarró el enorme pilar con las manos y empujó. Era muy pesado y ella gimió por el esfuerzo, nubes de polvo se elevaron en el aire, pero la cosa comenzó a moverse.

"¡Rápido, sal!" gritó, su voz tensa por el esfuerzo.

La mujer, que estaba demasiado sorprendida por lo que estaba viendo, pareció ponerse en movimiento; Una vez que su pierna estuvo libre, se arrastró fuera de ella, levantándose rápidamente y tomando distancia. Jessica soltó el pilar, que cayó pesadamente, levantando polvo.

"¿Cómo ... cómo diablos ...?" Intentó preguntar la mujer, mirando con asombro a Jessica.

"CrossFit, un poco de yoga ... muchas proteínas. Ya sabes, toda esa mierda de 'eres lo que comes'... Mira, tenemos que irnos", dijo Jessica, arrastrando a la mujer con ella, volviendo a la ventana desde donde ella había entrado.

La mujer, todavía mirándola sin parar, la siguió, sólo para mirar consternada la escalera de incendios caída.

"¡Oh no! ¿Cómo vamos a ...?"

Se tragó sus palabras cuando Jessica la levantó; y gritó como una loca cuando Jessica saltó. La caída tomó unos segundos hasta que aterrizaron de manera segura, pero Jessica sintió como si la mujer hubiera gritado por más tiempo.

"¡Tía May!" gritó el niño, corriendo hacia ellas, abrazando no sólo a su tía sino a ella también; Jessica estaba congelada en su lugar. "¡Gracias, gracias, muchas gracias!"

Jessica miró el rostro del niño, cubierto de polvo, sangre, lágrimas y ... mocos.

"Bien ... Está bien chico, ya suéltame", dijo, desenredándose del abrazo familiar; sólo para ser arrastrada hacia otra cuando Trish la abrazó. "¡Maldita sea!"

"¡Cállate, Jess!" Dijo Trish, abrazándola aún más fuerte. "¡Estoy orgullosa de ti, pero no vuelvas a hacer eso nunca más!"

Esta vez, Jessica no se desenredó; ella simplemente le dio unas palmaditas en la espalda a su hermana, avergonzada.

"Está bien, está bien, ya es suficiente. Tenemos que salir de aquí", dijo. "Tenemos que-"

Lo que fuera que iba a decir fue interrumpido cuando el rayo azul volvió a estrellarse contra el suelo; Los edificios a los lados de la calle en los que se encontraban, incluido el que acababa de bajar, parecieron resquebrajarse al unísono. Toda esa parte de la ciudad pareció implosionar, cuando los edificios comenzaron a hundirse en el suelo.

Jessica agarró a Trish, al niño y a su tía y los acercó, tratando de protegerlos con su cuerpo; sintió los escombros caer encima de ella y abrió los brazos, usando su espalda y hombros para desviar los pedazos del edificio que caían.

Cuando cesó la lluvia de escombros, Jessica miró hacia arriba; estaban rodeados de edificios caídos; atrapados. Y el rayo azul seguía bajando, aplastando coches y lo que quedaba en pie de los edificios, cada vez más cerca.

"¡Dios!" gritó Trish, una vez que se dio cuenta de lo que estaba pasando.

El niño y su tía miraron hacia el frente, viendo caer el cielo, incapaces de decir nada.

Y Jessica ... Tomó la mano de su hermana y le instó a Clark a darse prisa y salvarlos.

...

Clark levantó la mano, cada fibra de sus músculos le dolía mientras intentaba vencer el rayo de gravedad. Cerró los dedos en un puño, las piernas tratando de afirmarse en el suelo y el rostro contorsionado por el esfuerzo. El ruido era increíble, la luz azul brillaba más que el sol mismo, mientras el Motor Mundial dejaba caer el peso del mundo sobre sus hombros.

Levantó la vista, sus músculos temblaban, sintiendo la tensión en su cuerpo de una manera que nunca antes había sentido en toda su vida. Era tan pesado, el dolor era tan terrible ... Quería simplemente ... dejarlo ir.

Clark cerró los ojos y dejó de ver todo lo que le rodeaba.

De repente se encontraba con su padre, Jonathan Kent, frente a la nave que lo había traído hasta aquí.

"No eres cualquiera, Clark ... Y tengo que creer que fuiste enviado aquí por una razón. Todos estos cambios por los que estás pasando ... Un día ... Un día vas a pensar en ellos como una bendición y cuando ese día llegué, tendrás que tomar una decisión: la decisión de estar orgulloso frente a la raza humana o no".

Sus ojos se abrieron, trayéndolo de vuelta al mundo real; Levantó la vista de nuevo y su rostro cambió a determinación. Estaba aquí por una razón. Y finalmente vio sus Dones como la bendición que eran, porque en este momento, eran lo único que podía salvar al mundo.

Era hora de estar orgulloso frente a la raza humana.

Clark reunió todo el poder dentro de sí mismo y explotó, volando contra el rayo de gravedad. La presión contra él era tremenda, pero él nunca dudó, ignorando el dolor, ignorando el peso de todo el cielo sobre sus hombros; No permitiría que Zod destruyera su hogar.

"¡AAAAAAHHHHHGGG!"

Chocó de frente contra el Motor Mundial, atravesando el metal, sintiendo su cuerpo destruir todo, hasta que salió encima, seguido de una explosión. El rayo azul se apagó inmediatamente y todo el Motor Mundial pareció paralizarse; hasta que se partió en tres pedazos, cayendo al océano con un gemido de metal al romperse.

La parte principal comenzó a brillar mientras caía, el núcleo de energía se sobrecargó; y luego todo el paisaje fue tragado por una enorme explosión.

Clark no vio nada de eso y cayó inconsciente.

...

"¡El lo hizo!" exclamó Natasha, sonriendo, mientras todos en la sala estallaban en aplausos.

"¡Lo logró!" dijo Steve, incapaz de contener una gran sonrisa también.

"¡Sabía que podía hacerlo!" dijo Stark, animado con los demás.

"No, no es cierto", argumentó Clint, mirando la pantalla con una cara feliz.

"Está bien, tal vez no, ¡Pero lo apoye mucho!" Stark replicó.

"El apoyo moral lo es todo", coincidió Banner y Clint puso los ojos en blanco.

Por un segundo, todos parecieron olvidar toda la mala situación, el buen humor les levantó el ánimo; pero, claro, alguien tenía que arruinarlo.

"Hemos llegado", dijo Fury, mirándolos. "Ahora es nuestro turno".

Sí, el buen humor se desvaneció rápidamente.

...

"Recuerden no luchen contra ellos de frente", dijo Steve, caminando al frente, guiando a los Vengadores en la cubierta de vuelo, el viento soplaba fuerte a la velocidad a la que iban; Sería imposible incluso permanecer afuera si el Helicarrier no protegiera la cabina de vuelo con algún tipo de amortiguador de inercia que Steve no entendía, o eso explicó Tony. "Es inútil, no tenemos la fuerza para lastimarlos, recuerden eso. Evadanlos, distraiganlos, usen el entorno, usen su arrogancia. Recuerden el plan".

A su alrededor, los pilotos de SHIELD preparaban sus Quinjets, más pequeños que el que usaban, pero igual de fuertemente armados. Tony estaba completamente vestido con su traje, haciendo ajustes de último momento; Clint estaba revisando sus flechas y su arco; Natasha estaba cargando su lanzagranadas; Bruce estaba ... Bruce estaba jugueteando con sus mangas, concentrado, probablemente tratando de mantenerse al borde de la transformación pero sin perder el control demasiado pronto.

Nueva York pasó rápidamente bajo ellos, el Black Zero enorme estaba en el horizonte.

Steve miró a su equipo y a los agentes de SHIELD que lo rodeaban; señaló a los pilotos.

"Nos van a cubrir", ordenó. "No sabemos qué esperar, pero no cuenten con que sus armas causen algún daño. Su trabajo es distraerlos, sólo eso. Llevaremos el paquete".

Los hombres lo saludaron; los miró a todos, a los pilotos y a los Vengadores.

"Podemos hacerlo", afirmó, plenamente confiado en las capacidades de su equipo. "¡Necesitamos hacer esto! La Tierra depende de nosotros. Si perdemos, no seremos conquistados, seremos exterminados. Aquí no hay término medio. O ganamos o la humanidad está perdida".

El Capitán América, el soldado legendario en todo su esplendor, los miró fijamente.

"¡Y YO DIGO QUE GANEMOS!"

Todos gritaron en respuesta, vitoreando y coincidiendo con su Capitán. Sabían que podían morir, sabían que era muy probable que fracasaran; pero mientras el Capitán América los lideraba, pelearían.

Y Steve los llevaría a la victoria.

...

"¡Mierda, lo hizo!" gritó Jessica cuando el rayo azul murió, abrazando en su felicidad a su hermana, al niño y a su tía. "¡Sabía que lo haría!"

Trish se rió con ella, el alivio la llenó; Nunca había visto a Jessica tan feliz. Quizás por primera vez en su vida, alguien realmente había cumplido una promesa que le había hecho.

"¿Quién hizo qué?" preguntó el niño.

"Cla-"

"¡Nuestro amigo!" interrumpió Trish, apresuradamente, antes de que Jessica pudiera soltar la sopa; de nuevo.

"Sí, nuestro amigo", estuvo de acuerdo Jessica. "Simplemente destruyó el arma durante toda esta tormenta de mierda".

"¿Es un superhéroe como tú?" preguntó, su cara sucia mostrando asombro.

Trish sonrió ante la expresión de Jessica; y antes de que pudiera decir algo, ella lo hizo primero:

"Sí, sí lo es. Igual que ella."

La mezcla de molestia, vergüenza y un poco de orgullo en su rostro hizo que incluso todo el miedo que pasaron valiera la pena.

...

Faora-Ul no mostró emoción alguna cuando el Motor Mundial fue destruido, la reacción del impacto paralizó temporalmente los sistemas del Black Zero; Por dentro, sin embargo, estaba llena de una fría furia. Kal-El pagaría un alto precio por esto, como ella prometió.

"Los humanos se acercan", advirtió Jax-Ur, señalando el monitor de geo líquido; Allí había una réplica de su nave.

Miró a Nam-Ek.

"Destruye esa cosa", ordenó.

El gigantesco Kryptoniano asintió y se dirigió a la cámara inferior de las cápsulas.

...

Bruce siguió a sus compañeros hasta el Quinjet, preguntándose, no por primera vez, si era buena idea que él estuviera allí con ellos; al final decidió que así era. En caso de que aparecieran los Kryptonianos, él era el único que podía hacer algo contra su fuerza. Y en este caso, el "algo" que haría sería recogerlos y arrojarlos desde el Quinjet, preferiblemente junto a él.

La caída no sería agradable, pero sobreviviría; después de todo, lo sabía a ciencia cierta. Y garantizaría que el Quinjet siguiera volando, incluso si el propio Hulk se convirtiera en una amenaza.

Sin embargo, antes de que pudiera entrar, vio a Tony ponerse rígido.

"¡Algo se acerca!" gritó, sin duda alertado por Jarvis.

Todos miraron hacia arriba para ver una de esas cápsulas Kryptonianas acercándose, abriéndose todavía en el aire, y ese gran Kryptoniano cayendo justo encima de un Quinjet, convirtiéndolo en chatarra. Los Vengadores se giraron y todos levantaron sus armas.

Sólo para ser detenidos por Bruce.

"Vayanse, yo me encargo", dijo, comenzando a caminar hacia el inmenso Kryptoniano; Nam-Ek, si recordaba bien.

"¿Estás seguro?" preguntó Steve, escudo en mano, listo para pelear con él.

Bruce lo miró, sus ojos brillaban de color verde; Una sonrisa bestial arrancó su rostro.

"Oh, sí, estoy seguro."

Y no supo si fue él o Hulk quien respondió.

Bruce se volvió hacia Nam-Ek y continuó caminando; El Kryptoniano, vestido con su armadura negra, saltó del Quinjet al suelo, caminando también en su dirección. A su alrededor, los Quinjets comenzaron a despegar, volando verticalmente y luego corriendo hacia el frente, en dirección a la nave alienígena.

A Bruce no le importaba nada eso. Sus pensamientos racionales ya no estaban ahí, siendo reemplazados por pura ira. Sintió que sus músculos se ponían rígidos, sus huesos comenzaban a crecer; Hulk había sido derrotado por un Kryptoniano antes y todo lo que quería ahora era vengarse.

Comenzó a correr, sus movimientos fueron imitados por Nam-Ek; Ambos aumentaron su velocidad, con los ojos fijos el uno en el otro. Bruce ni siquiera se dio cuenta cuando comenzó a rugir, su piel se volvió verde, su camisa explotó cuando sus músculos se volvieron gigantescos, su altura cambió repentinamente y luego estaba mirando a su enemigo.

Bruce no vio nada de eso; Hulk tenía el control ahora.

Con un gruñido animal, Hulk y Nam-Ek chocaron entre sí, el sonido del impacto retumbó en el aire; El Kryptoniano también rugió, agarrándolo y logrando empujarlo hacia atrás. Perdido en su furia, Hulk usó sus poderosos músculos para mantenerse firme, sus pies rompieron el concreto.

Nam-Ek aprovechó su repentino impulso para agarrar sus brazos y girar, lanzando a Hulk contra uno de los Quinjets vacíos, su gran cuerpo dobló el metal como si fuera papel. Sin esperar a que se levantara, Nam-Ek saltó contra él, golpeándolo con todas sus fuerzas.

Una gran explosión se produjo en la cabina de vuelo.

...

Clark abrió los ojos muy lentamente. Se sentía más cansado que nunca, con sus energías completamente agotadas; Ni una sola vez en toda su vida eso había sucedido. Girando la cabeza, un movimiento que hizo que le doliera todo el cuerpo, miró al océano: el Motor Mundial estaba destruido.

Sonriendo, con los ojos casi cerrándose nuevamente, Clark levantó el brazo, tratando de alcanzar el rayo de sol que comenzaba a atravesar las nubes negras que estaban desapareciendo.

Volvió a sentir su energía regresar en el momento en que tocó la luz.

...

"¿Creen que hicimos lo correcto?" preguntó Tony, todavía mirando hacia la dirección del Helicarrier. "Quiero decir, ¿creen que el Grandote puede manejar a ese otro ... Grandote?"

Steve suspiró.

"Si alguien puede, es él".

De mala gana, Tony aceptó. Puso a Jarvis en control y se levantó, yendo al lado de Natasha, quien estaba, en ese momento, analizando la nave de Clark.

"¿Conseguiste que funcionara?" preguntó.

Natasha solo asintió y levantó un prisma negro para que él lo viera.

"Sólo tenemos que poner esto cuando estemos listos para soltarlo", respondió, mostrando dónde estaba la llave. "Entonces activará el Motor Fantasma".

"Eso parece demasiado fácil, ¿no?" preguntó Tony, mirando a su alrededor.

"¡No nos maldigas!" gritó Clint. "O algo podría-"

"Señor, una segunda cápsula está saliendo de la nave Kryptoniana", advirtió Jarvis.

"... pasar", terminó Clint, una mirada asesina tomó su expresión cuando se volvió hacia Tony.

"¡Oh diablos!" él dijo; debería haberlo sabido mejor.

"Jarvis, ponlo en la pantalla, por favor", pidió Steve y Jarvis hizo lo que le ordenó.

Podían ver una cápsula volando contra la formación del Quinjet, similar a la que acababa de aterrizar en el Helicarrier. Steve agarró su comunicador.

"Este es el Capitán América, ¡Pueden participar!" el ordenó.

Como si fueran uno solo, los Quinjets comenzaron a disparar sus misiles; Los misiles viajaron rápido, volando contra la cápsula desde diferentes ángulos, impactando todos al mismo tiempo. Una gran explosión cubrió el cielo y se empezaron a escuchar vítores de los pilotos.

Fue entonces cuando las llamas se desvanecieron, la cápsula seguía allí, volando intacta; justo en curso de colisión con uno de los Quinjets. El piloto comenzó a disparar su ametralladora contra él, las balas impactaron y fueron desviadas por el blindaje de la cápsula; no se detenía.

"¡Eyecta!" gritó Steve y el hombre obedeció.

En el instante en que se eyectó, la cápsula golpeó al Quinjet de frente, atravesándolo como si no estuviera allí, dejando solo una explosión detrás. Tony suspiró aliviado por un segundo, antes de hablar también por el comunicador:

"¡Rhodey, es hora de la Legión de Hierro!"

...

Fury estaba observando la pelea en los monitores, tratando de ignorar los enormes ruidos en su propio Helicarrier, mientras Hulk y ese Kryptoniano luchaban. Vio uno de los Quinjets explotar cuando una cápsula alienígena pasó por el medio y el piloto logró al menos eyectarse.

Y luego el cielo fue básicamente tomado por armaduras, cuando apareció la Legión de Hierro.

"Nos acercamos al enemigo, Tony", dijo el coronel Rhodes, liderando la peor parte del ataque con su traje de War Machine.

El ejército de trajes de Stark dividió su formación, volando en medio de los Quinjets, comenzando a perseguir la cápsula Kryptoniana. El piloto de la cápsula se giró y se dio cuenta de que los trajes de hierro estaban detrás de ella, aparentemente volviéndose aún más rápidos; la Legión de Hierro comenzó a disparar contra él, todo lo que tenían, desde meras balas hasta misiles, incluso usando sus repulsores.

Nada pareció siquiera rayar la cosa, ya que la cápsula se elevó repentinamente, golpeando dos trajes y destruyéndolos por completo. Deteniéndose abruptamente en el aire, la cápsula se abrió, revelando a su piloto: y, a menos que Fury estuviera muy equivocado, era la subcomandante de Zod, Faora.

Todos en el centro de comando se quedaron boquiabiertos cuando la Kryptoniana simplemente saltó de la cápsula, volando en el aire como si fuera un misil, chocando contra uno de los Quinjets; El piloto intentó eyectarse, pero Faora lo agarró y lo destrozó. Y antes de que el avión pudiera caer, saltó de nuevo, esta vez contra una de las armaduras de Stark.

"¡Jesús, ¿Están viendo eso?!" gritó Rhodes, disparando su ametralladora sin parar contra Faora.

Nadie le respondió, mientras la Kryptoniana rompía el traje, saltaba hacia su cápsula y volaba más cerca del Quinjet de los Vengadores; Las balas de War Machine no hacían nada contra ella.

"¡No dejen que se acerque!" gritó el Capitán Rogers, obviamente viendo la cápsula de Faora volando hacia ellos.

Siguiendo sus órdenes, los Quinjets giraron en el aire, volaron contra la cápsula y dispararon de nuevo. La lluvia de balas no hizo nada contra la cápsula, pero los pilotos ya sabían que no lo haría; no, planeaban golpearla con algo mucho más pesado.

Sincronizados, los pilotos apuntaron sus aviones en la dirección de la cápsula y dispararon todos sus misiles; y luego, cuando las llamas cubrieron todo, expulsaron.

Cuando la cápsula salió de las llamas, se encontró con toneladas de metal, cada Quinjet lo golpeó directamente y una explosión aún mayor llenó el aire. Fury solo pudo observar cómo las llamas se lo llevaban todo.

Fue entonces cuando el techo sobre ellos cedió y Hulk y Nam-Ek cayeron en el centro de mando.

...

Hulk gruñó cuando cayó al suelo, con el Kryptoniano encima de él. Podía escuchar a la gente gritando y corriendo, el sonido lo enfurecía aún más; poniéndose de pie, agarró al Kryptoniano y lo arrojó contra la pared.

"¡Tienes que llevarlo de regreso!" gritó alguien ... María ... a Hulk no le importó.

Ignorándola, corrió contra Nam-Ek y lo golpeó con todas sus fuerzas, haciendo un agujero en la pared y arrojándolo muy lejos, su cuerpo rompiendo todo a su paso; rugiendo, lo siguió.

...

"¿La hicimos caer?" Tony preguntó, frenético. "Rhodey, ¿tienes una imagen?"

Steve agarró su escudo y se acercó a la puerta trasera, abriéndola para poder ver; sabía que si no terminaba, las puertas no la detendrían de todos modos.

"No lo hicimos, prepárense".

Tony fue a su lado y apuntó con sus repulsores a las puertas ahora abiertas, las llamas rojas de la explosión aún ardiendo; Natasha apuntó con su lanzagranadas; Clint preparó una flecha.

Y tal como esperaba, vio a Faora levantándose de la explosión, casi volando mientras saltaba, su fuerza Kryptoniana le dio suficiente impulso para atravesar los Quinjets y alcanzarlos; se preparó.

Aterrizó dentro del Helicarrier, sus pies abollaron el piso de metal, demasiado rápido para detenerse; No es que quisiera parar. Aprovechando el impulso, Faora golpeó, un golpe tan fuerte que definitivamente atravesaría un cuerpo humano con facilidad.

Pero no el Vibranium.

Su puño golpeó el escudo del Capitán América haciéndolo sonar como una campana de iglesia; A Steve le dolían las piernas por el esfuerzo, incluso cuando el vibranium absorbió el impacto de su puñetazo. Aprovechando su oportunidad, Tony desató sus repulsores sobre ella; los rayos de energía no hicieron nada contra ella y Faora agarró el escudo de Steve, arrojándolo contra el techo cuando él se negó a soltarlo.

Moviéndose en una carrera, la Kryptoniana golpeó a Tony justo en el pecho, arrojándolo contra las paredes con fuerza. Se volvió hacia Natasha y Clint; Natasha comenzó a disparar el lanzagranadas, las bombas explotaron contra la armadura de Faora sin dejar marca. Y entonces Clint disparó su flecha.

Faora simplemente levantó la mano y recogió la flecha en el aire con dos dedos, su expresión se volvió sarcástica cuando miró a Clint.

Y fue entonces cuando la flecha explotó.

No con una bomba de tiempo, sino con algo que Tony había hecho ese mismo día. Su debilidad era la dependencia que tenían de sus cascos; no podían quitárselos, no sin sufrir el dolor de la atmósfera terrestre. Romperlos sería la solución ideal, pero carecían de potencia de fuego para ello.

Pero, como sugirió Steve, no era necesario romperlo; sólo hacer que sea muy incómodo de usar.

Entonces, cuando la flecha explotó, no explotó para intentar dañar el casco de Faora, sino para cubrirlo con una pintura negra, viscosa y muy espesa que Tony desarrolló, usando una fórmula que parecía más un super pegamento que cualquier otra cosa. La pintura negra golpeó a Faora directamente en la cara, cubriendo todo su casco, haciéndole imposible ver.

Y como no podía quitárselo ni usar la visión de rayos X mientras respiraba el aire de Krypton, estaba efectivamente ciega.

Es hora de contraatacar.

...

Hulk salió volando, su cuerpo destruyó todo a su paso, cuando Nam-Ek le golpeó la mandíbula. Sin detenerse, agarró las piernas de Hulk, girando en su lugar y soltándose; Voló hacia arriba, pasando a través de los pisos del Helicarrier como si no existieran, y finalmente salió a la cubierta de vuelo una vez más.

Se levantó, meneó la cabeza y gruñó; Nam-Ek apareció frente a él nuevamente, saltando y usando su cuerpo para cavar otro túnel. Chocaron entre sí, sus cuerpos se estrellaron con un poder extraordinario y el aire mismo se distorsionó a su alrededor.

El Helicarrier continuó volando rápido, acompañando a los Quinjets lo mejor que pudo, funcionando como una base de aterrizaje voladora para ellos; No es que a los dos titanes encima pareciera importarles. Para ellos, ahora sólo existía la pelea. Rodeando la cintura de Hulk con sus brazos, Nam-Ek comenzó a empujar, logrando levantar a Hulk mientras corría, ambos se convirtieron en una locomotora mientras destrozaban todos los aviones en su camino, seguido de explosiones.

Hulk rugió de dolor mientras le apretaban las costillas, por lo que comenzó a golpear la espalda de Nam-Ek con todo lo que tenía; sus puños abollaron su armadura, pero aparentemente no los sentía. Sin embargo, lo derribaba y sus pies se hundían en el suelo cada vez que lo golpeaba. Hasta que lo soltó, de repente, enviando a Hulk a volar contra un cañón.

La destrucción de una de las armas del Helicarrier pareció llamar la atención sobre el hecho de que el Helicarrier tenía armas; y, como si fueran uno solo, todos se volvieron hacia Nam-Ek y comenzaron a disparar, las balas cubrieron el aire.

Ignorando el hecho de que estaba en medio del fuego cruzado, Hulk gritó y corrió contra Nam-Ek nuevamente, su cuerpo también recibió disparos, las balas golpearon sus músculos y piel dura y fueron desviadas. Él ni siquiera se dio cuenta, su furia crecía aún más a medida que avanzaba la pelea.

Nam-Ek lo encontró en el medio, ambos chocaron nuevamente, sus enormes cuerpos chocaron como tanques; Las balas continuaron lloviendo sobre ellos, sin que a ninguno de los dos les importara. Y luego empezaron a darse puñetazos.

No había estrategia, ni defensa, ni táctica; fue pura brutalidad, como si nada más importara que se mataran entre ellos. Ambos solo se golpearon la cara, cada golpe sonaba como el estallido de un cañón, gruñidos y rugidos cortando el aire.

Sus puños chocaron uno contra el otro, sus dedos se entrelazaron, cada uno tratando de hacer que el otro se sometiera con pura fuerza bruta. La fuerza que estaban generando era increíble, sus ojos se miraban el uno al otro.

Ninguno de los dos pudo vencer al otro, su igual fuerza hacía imposible que la contienda continuará; A Hulk, sin embargo, no le gustaba una competencia de fuerza. Lo único que le importaba era aplastar a su oponente. Y sin sus brazos, sólo había una manera de hacerlo.

Abrió su gran boca y mordió la cabeza de Nam-Ek.

...

Tony agarró el escudo de Steve cuando se lo arrojó, usándolo para defenderse de un golpe ciego de Faora; El vibranium sonó en el espacio confinado. Aprovechando esta oportunidad, su traje liberó otra carga de tinta negra en el casco de Faora, mientras saltaba hacia un lado, devolviéndole a Steve su escudo.

En ese momento, dos trajes de la Legión de Hierro aterrizaron en el Quinjet, volando contra Faora; sin duda escuchó a uno de ellos acercándose, porque se giró golpeando, su puño desgarrando el metal. El segundo, sin embargo, no iba a atacarla; en cambio, se desarmó solo, las piezas volaron individualmente y se volvieron a ensamblar alrededor del cuerpo de Faora.

La subcomandante logró darle un puñetazo en el pecho, pero sin ver lo que pasaba no pudo defenderse a tiempo; las piezas se cerraron a su alrededor y activaron los repulsores a su máxima capacidad, volando afuera, llevando a Faora al cielo.

O intentándolo, porque en el último momento su mano logró sostener el Quinjet, sus dedos se hundieron en el metal.

Gritando de frustración, Faora agarró los guanteletes de la armadura con su mano libre y los destruyó, antes de llevarse la mano a la cara y rasgar la pintura con todas sus fuerzas; Uno de sus ojos azules les devolvió la mirada.

"Oh, no ..." dijo Tony, mientras Faora procedía a romper el resto de la armadura a su alrededor y saltar de nuevo al interior.

Clint, al verla acercarse, intentó disparar otra flecha; un gran error.

Faora, sabiendo ahora con qué estaban cargados, simplemente los esquivó, volviéndose borrosa, y luego estuvo sobre él. Ella lo empujó contra los controles, su espalda golpeó el piloto automático y lo dañó; todavía podrían seguir avanzando, pero Jarvis ya no podría pilotear el Quinjet.

Tirando de él hacia atrás, Faora le dio una patada en la pierna; Tony podía oír el hueso romperse desde donde estaba. Clint gritó fuerte, solo para recibir un revés en la cara y ser expulsado del Quinjet.

"¡CLINT!" gritó Natasha.

"¡Rhodey, atrapa a Legolas!" Gritó Tony, esperando que su amigo lo escuchara y pudiera traer a Clint a tiempo.

Steve arrojó su escudo contra Faora, golpeando su casco, pero aparte de inclinarse ligeramente hacia un lado, su escudo no hizo nada más que llamar su atención. Se volvió hacia él, empujó a Cap contra la pared, levantándolo por el cuello; y luego, con la otra mano, comenzó a hundir sus dedos en su abdomen.

"¡ARHHGG!" gritó Steve.

Pensando rápido, Tony usó su láser; no contra Faora, eso sería inútil, sino para cortar las mismas paredes del Quinjet alrededor de Cap. Cuando la pieza de acero se soltó y todo empezó a ser arrastrado hacia afuera, Tony voló contra Faora con todo el poder de su traje, estrellándose contra ella.

Faora no resultó herida en lo más mínimo, pero al menos la distrajo, haciéndola soltar por un segundo a Steve, quien rápidamente fue sacado del Quinjet.

"¡Jarvis, agarra al Capitán!" el ordenó. "¡Y trae aquí todos los trajes restantes!"

"Como usted diga, señor", respondió Jarvis, ordenando a una de las armaduras que levantara a Steve, con suerte antes de que cayera al suelo.

"Esta es la segunda vez que te interpones entre mi presa y yo", dijo Faora, volviéndose hacia él con todo su casco negro y un único y penetrante ojo azul mirándolo. "No habrá un tercera vez".

En ese momento, tres de sus armaduras aterrizaron en el Quinjet, atacando rápidamente a Faora; Eso debería darle un par de segundos.

"¡Natasha, activa la nave y lárgate!" el grito.

Dios bendiga su alma, ella no respondió; Empujando la llave hasta el fondo, la nave comenzó a brillar en azul, Natasha saltó a uno de los asientos y salió disparada. Podía ver el Black Zero acercándose.

De repente, una enorme nave Kryptoniana apareció de la nada justo detrás de ellos, lista para disparar.

...

Los dientes de Hulk se hundieron en el casco de Nam-Ek, mordiendo con cada pizca de fuerza que poseía; sus dientes comenzaron a crujir contra el metal, pero no le importó, el dolor lo hacía morder aún más fuerte. Nam-Ek duplicó sus esfuerzos para bajar los brazos de Hulk, pero fue inútil.

Poco a poco, el casco del Kryptoniano comenzó a doblarse, Nam-Ek gritaba de rabia, los crujidos de los dientes de Hulk sonaban con fuerza; y luego se rasgó, perforándolo.

La primera bocanada de atmósfera terrestre que tomó Nam-Ek comenzó a expulsar el aire Kryptoniano de su cuerpo; y luego sus sentidos se sobrecargaron. El ruido de los dientes de Hulk contra el metal era insoportable. Perdió toda la fuerza para luchar y sus brazos quedaron dominados al caer al suelo.

Entonces, Hulk procedió a aplastar a su oponente, sin que misericordia fuera una palabra que entendiera.

"¡Doctor Banner!" gritó alguien, mientras Hulk golpeaba a Nam-Ek sin parar. "¡Doctor Banner!"

Se giró, rugiendo, enojado como el infierno porque alguien lo llamaba "Banner"; era una mujer. Él la reconoció vagamente.

"Ya ganaste", dijo María, lentamente. "Doctor, usted-"

Hulk rugió aún más fuerte.

"Hulk", se corrigió, "Ya ganaste. Pero tienes que devolverlo a su nave. ¿Puedes hacer eso?"

Él solo la miró y luego se giró para patear a Nam-Ek nuevamente.

"Banner podría hacerlo", dijo de repente, y él se detuvo. "¿Acaso Hulk es más débil que Banner?"

Hulk sintió fuego dentro de él, mientras agarraba a Nam-Ek por la pierna y corría hacia María, deteniéndose cerca, mirándola desde lo alto; ella no retrocedió.

"¿Es eso lo que me estás diciendo? ¿Que no puedes hacerlo?..."

"¡HULK NO ES DEBIL!" gritó, aplastando a Nam-Ek contra el suelo mientras lo hacía.

"Entonces pruébalo", desafió.

Y lo hizo, agarrando a Nam-Ek, girándolo y arrojándolo de regreso al Black Zero, su gigantesco cuerpo abrió un agujero en el casco de la nave Kryptoniana; Justo en ese momento otra enorme nave Kryptoniana apareció sobre ellos.

No pudieron hacer nada ya que disparó contra el Helicarrier, la energía azul destruyó las turbinas de un solo disparo; comenzaron a caer sobre la ciudad.

...

Clark nunca había volado tan rápido en toda su vida, dando todo lo que tenía mientras cruzaba el cielo. La luz del sol había restaurado su energía al máximo nuevamente y estaba usando cada parte que tenía para llegar a Nueva York a tiempo para ayudar.

Miró hacia abajo, viendo la nave que Zod le robó disparar contra el Helicarrier, todo comenzando a caer sobre los edificios; Esperaba que los edificios ya estuvieran vacíos y que la gente dentro del Helicarrier pudiera sobrevivir, pero no podía ayudar ahora. No cuando Zod se estaba preparando para disparar contra el Quinjet que transportaba su propia nave, la única oportunidad que tenían contra el Black Zero.

Uno de los Quinjets más pequeños se interpuso en el camino de la nave, llamando su atención; Zod disparó contra él, destruyéndolo por completo. Y luego no había nada entre él y el Quinjet de los Vengadores.

Excepto por él.

Comenzando a caer rápidamente, Clark voló directamente contra la nave, justo cuando disparó; La energía azul pasó al costado del Quinjet. La carcasa, sin embargo, no era lo suficientemente fuerte como para proteger nave contra él.

Clark lo atravesó como si no estuviera allí, entrando a la nave y cayendo justo en frente de Zod, en la cabina. Se levantó rápidamente, con los ojos rojos.

"¡DETENTE!" gritó Zod. "¡Si destruyes esta nave, destruiras a Krypton!"

Y lo sorprendente es que parecía realmente tenerle miedo; Clark vaciló.

Sin embargo, al final, Clark no tuvo otra opción; si su elección era destruir la Tierra para recuperar a Krypton ... No fue una gran elección en absoluto.

"¡Krypton tuvo su oportunidad, Zod!" gritó, desatando su visión de calor en la cabina, cortando la silla de mando.

La nave empezó a caer del cielo.

...

Faora comenzó a golpear con furia, sus puños arrancaban el metal de las armaduras rojas que la rodeaban como si estuvieran hechas de seda. No estaban peleando, sin embargo, la estaban reteniendo, atacandola todos al mismo tiempo no para causarle daño, sino para retrasarla. Agarró uno de ellos, sus dedos se hundieron en el metal y lo separó.

Sólo para ser recompensada por lo que parecía ser una explosión de esa maldita tinta negra.

Su casco fue nuevamente pintado y una vez más quedó ciega; Faora gritó de rabia, girando tan rápido que se volvió borrosa, sus extremidades destruyeron todo a su alrededor sin que ella siquiera necesitará verlo. Jadeando de furia, se llevó las manos a la cara y se rascó la pintura del casco.

Sus ojos finalmente encontraron al que había hecho todo eso, sentado en el asiento del piloto, completamente blindado, mirándola.

"Una buena muerte es tu propia recompensa", dijo, repitiendo sus palabras, mientras lanzaba el avión contra el Black Zero.

Corriendo hacia adelante, la mano de Faora cortó el aire como una espada, arrancándole la cabeza; excepto que no había ninguna cabeza que decapitar, sino una armadura hueca.

El Quinjet golpeó el Black Zero; Un rayo azul comenzó a formarse alrededor de ambos.

Y luego la Zona Fantasma se abrió de nuevo.

Faora sólo tuvo tiempo de sentirse aterrorizada antes de que la devolvieran.

Tony había usado la distracción que le dio su Legión de Hierro para dejar su armadura para pilotar (ya que Faora había dañado el piloto automático cuando arrojó a Clint sobre él) y eyectarse del Quinjet.

En el momento en que salió del Quinjet, comenzó a mirar a su alrededor, buscando el único traje que le quedaba; el que usó para salvar al Capitán de caer y morir. Porque ahora mismo, a menos que quisiera ser arrastrado a la Zona Fantasma junto a los Kryptonianos, necesitaría alejarse volando.

Lo escuchó antes de verlo; y, liberándose de la silla eyectable, saltó. El traje se desarmó solo, cada pieza voló hacia él por sí sola y volvió a encajar a su alrededor.

"¡Jarvis, pon todo lo que tenemos en los repulsores!" Gritó al ver el Quinjet golpear el Black Zero.

Sus pies básicamente se convirtieron en un cohete cuando Jarvis usó toda la energía que tenía para sacarlo de allí. Comenzó a volar más rápido que nunca antes; y luego se detuvo en el aire, la singularidad tirando de él.

"¡Jarvis!" Gritó aterrorizado, mientras de repente comenzaba a moverse hacia atrás.

"Señor si lo impulsó más que eso no será seguro para-"

"¡HAZLO!"

Los repulsores de sus pies duplicaron su tamaño. Empezó a ganar algo de distancia, pero demasiado lento, y la singularidad iba creciendo; ni siquiera se dio cuenta que estaba gritando, cuando finalmente la nave desapareció.

Y la fuerza que lo empuja hacia atrás; Tony básicamente explotó hacia adelante, girando hacia el suelo a gran velocidad.

"¡Jarvis, intenta estabilizarme!" gritó, mientras veía Nueva York girando a su alrededor.

Sintió a Jarvis mover su armadura, usando los repulsores en su mano para frenar su caída; Fue entonces cuando chocó contra lo alto de un rascacielos.

...

Clark se levantó después de haber sido expulsado de su nave. La ciudad que lo rodeaba era apocalíptica; Edificios destruidos por todas partes, ruinas e incendios. El suelo estaba cubierto de polvo y cenizas y torres de humo negro se elevaban hacia el cielo crepuscular.

Y en medio de todo eso, Zod se quedó de rodillas.

Con los ojos fijos en él, Clark flotó en su dirección, aterrizando frente a él; Zod le levantó una mano llena de cenizas.

"Mira esto", dijo mientras las cenizas caían al suelo. "Podríamos haber construido un Nuevo Krypton en este basurero, pero elegiste a los humanos antes que a nosotros".

Clark solo miró, mientras Zod lo miraba con ojos llenos de furia.

"Existo sólo para proteger a Krypton", continuó, temblando de rabia. "Ese era mi propósito desde antes de mi creación. Y cada acción que tomo, sin importar cuán violenta o cruel sea, es para el bienestar de mi civilización. Y ahora ... Ya no existe mas. Mi alma ... ¡ES LO QUE TÚ ARRANCASTE DE MI!"

Zod se levantó y corrió hacia el frente, golpeando a Clark en el pecho con todo su poder; Clark fue enviado rebotando en el suelo, volando decenas de metros.

"Voy a hacerlos sufrir, Kal", prometió Zod, caminando hacia él. "¡Estos humanos que has adoptado, voy arrebatarte los, uno por uno!"

Clark se levantó y empezó a flotar; Miró a Zod a los ojos.

"Eres un monstruo, Zod", dijo. "¡Y voy a detenerte!"