열일곱; Diecisiete
J. Jungkook
Había pasado una semana desde la discusión con YongSun. Una semana en la cual no habíamos intercambiado ningún tipo de palabra.
Al día siguiente de nuestra discusión, ella le había pedido a Minah que intercambiara de ligar con ella, y eso hizo; ahora mi compañera de lugar en Minah y no YongSun.
El sábado, aunque lo negara, esperaba que apareciera en mi puerta con su sonrisa y sus estupideces. Incluso ChooHe y Myung habían preguntado por ella todo el fin de semana.
Si no hubiera visto a mis compañeros tomar sus cosas y salir corriendo del salón, no hubiera sabido que era la hora del almuerzo. ¿Cuando sonó el timbre?
Tomé mis cosas y salí del establecimiento. No quería ir a la cafetería y ver cómo YongSun reía con esas chicas que siempre la iban a buscar.
Me dirigí al lugar donde solía frecuentar desde que llegué, el gran sicomoro del patio, donde pasaba las tardes como YongSun.
Agh, ¿Por que todo me recuerda a esa chica entrometida?
Casi al llegar, me detengo en seco mirando a la persona que está frente a mí.
YongSun levanta su cabeza y por un momento hacemos contacto visual, pero ella lo rompe y rápidamente se levanta provocando que todas las cosas que están en su regazo caigan al fino césped que rodea el árbol.
A pasó rápido me dirijo a la chica que recoge sus cosas torpemente, ¿Tan molesta está conmigo?
- YongSun- le llamó, pero no hay respuesta alguna; ella sólo sigue recogiendo sus cosas. Me arrodillo junto a ella y estoy apunto de tomar un bolígrafo que se encuentra un poco más lejos pero ella lo coge antes de que incluso lo toque. Mete todo dentro de su bolso y se levanta para salir de ahí. Pero yo la detengo sosteniéndola por la muñeca- YongSun, ¿No me hablaras?
- ¿Acaso vas a explicarme?- espeta tan bruscamente que yo me sorprendo ya que nunca había utilizado ese tono con nadie, al menos desde que yo la conozco no le ha hablado así a nadie.
- No- respondo frío. ¿Por que debería decirle? No quiero que me tengan lástima, no otra vez.
- Bien, adiós Jungkook- dice soltándose de mi agarre.
Siento como la furia recorre por todas partes dentro de mí preguntándome de por qué sólo se comporta de esa manera conmigo.
Y eso es lo que exactamente le grito mientras ella me da la espalda caminando.
- ¿Por que sólo eres así conmigo, he? ¿Por que cuando esas chicas te molestaban no les respondías de la misma manera que a mi?
YongSun se da media vuelta y se devuelve hacia mí con sus mejillas rojas de furia.
- ¿POR QUÉ? ¿ENSERIO ERES TAN ESTÚPIDO? ¡ELLAS NO ME IMPORTAN, TU SÍ!- de un momento a otro se tambalea hacia atrás pero se repone rápidamente y cierra con fuerzas sus ojos- Tú me importas- dice antes de irse y dejarme
-literalmente- sin palabras.
Le importaba a YongSun, já. ¿Por que le importaría a ella? A diferencia de mi, ella lo tenía todo. No necesitaba un problema como yo en su vida.
Sólo me digne a verla entrar al colegio ¿Que más podía hacer? ¿Correr tras ella? No, yo no le rogaría para que volviera.
Conecté los auriculares y le puse play a la música en aleatorio para escuchar la canción que saliera. Abrí mi bolso y saque el libro que estaba leyendo desde que me mudé a Seúl, pero como últimamente no había tenido tiempo para leerlo, por pasar los días con cierta persona, lo había dejado de lado.
Iba por la mitad del capítulo que estaba cuando me percaté que no había estado atento a nada de lo que había leído. Pensé que quizá lo que me estaba distrayendo pero a los minutos de haberme sacado estos aún seguía distraído.
" Aveces confundimos querer estar solos, con la necesidad de estar con la persona adecuada. "
¿Por qué saqué el libro más cursi? Y lo más importante ¿Por qué esa maldita frase me recordaba a Kim YongSun?
Bruscamente cerré el libro que tenía en mis manos y lo deje a un lado. Tomé mi cabeza y revolví mi cabello. Al hacer esto nuevamente ese nombre pasó por mi cabeza, YongSun corría mi flequillo cada vez que tenía oportunidad.
Joder, nunca debí haberle hablado, nunca debí haberla llevado a casa, nunca debí defenderla, y nunca debí acercarme tanto a ella.
No me di cuenta que era la primera chica en la que he pensado en todo el día, la única que ocupa mi mente.
Kim YongSun, ¿Que haz hecho conmigo?
El timbre resonó en mis oídos sacándome de mis pensamientos, y a mi pesar me dirigí a mi salón.
Cuando llegué, la antipática profesora estaba dentro, pero para mi suerte solo me dio una mirada furiosa acompañado de un "Entre rápido, joven Jeon". Todos los pares de ojos se posaron en mi, menos los de YongSun que miraban su cuaderno como si fuera lo más entretenido de la vida. Tomé asiento junto a Minah y saqué mis libros.
Para que decir que presté atención a lo que decía la profesora, si no lo hice. Sólo pensaba en la última palabra que había dicho la chica antes de marcharse.
Perdido en mis pensamientos, no me di cuenta que cierta persona están frente a mi, hasta que mi compañero de banco me codeó haciendo que mirara hacia el frente.
La profesora estaba con la misma mirada que me había dado al entrar, quitó sus gafas de pasta negras de su rostro y dijo: - Señor Jeon, ya que usted está tan pendiente de mi clase, ¿Quien fundó al Academia de Antenas, cuando, y quién asistió ahí? Si no responde o su respuesta es incorrecta, se le descontarán 10 puntos de su examen, el cual no creo que pase si sigue así.
¿Recuerdan lo que les dije? Es una vieja amargado y antipática.
- La fundó Platón en el año 387 a.C aproximadamente, y a esa academia asistió Aristóteles a estudiar filosofía al rededor del 367 a.C- Respondí dejando literalmente a mis compañeros con la boca abierta y a la profesora sin palabras- Si, creo que pasaré el examen- dije levantado amabas cejas y mirando hacia la ventana.
No me sentí ni orgulloso ni mal por dejar tan anonadada a la cuarentona que tenía de profesores que titubeaba al decir cualquier palabra después de mi magnífica respuesta.
Nuevamente me giré para fijar mi vista al frente, encontrandome con la mirada de YongSun. Amabas se conectaron por milisegundos antes de que ella se posicionara derecha.
Pasó la hora de filosofía más lento de lo normal y yo sólo me dediqué a mirar lo que se veía a través de los ventanales o a dibujar en el cuaderno que tenía en mi mesa.
Ocupé tres hojas escribiendo cosas sin sentidos o simplemente haciendo líneas de un lado a otro.
De vez en cuando la profesora me fulminaba con la mirada pero yo no le prestaba atención. ¿Que es lo peor que podía hacer? ¿Mandarme a detención? No lo creo, no si quería conservar lo poco y nada de dignidad que le quedaba luego de su estúpida pregunta.
Por fin, el tan anhelado timbre sonó y todos tomaron sus cosas -que habían guardado anticipadamente- para salir lo mas rápido de la aburrida clase.
Al final sólo quedaba yo y YongSun que estaba apunto de salir, así que tomé mis cosas lo mas rápido que pude, y por segunda vez en el día la sujete por su muñeca recibiendo una mirada mezclada entre confusión y furia.
- ¿Quieres saber sobre mí?- dije sin esperar su respuesta- Está bien, te lo diré todo.
~ • ~
Uuuuh, en el próximo capítulo se aclararán alguna de sus dudas
¿Tienen algunas teorías de lo que pasa en la vida de Jungkook?
Si este capítulo llega a m
de 16 ★ y tiene muchos comentarios, subo el otro capítulo.
Si no... Se esperan otra semana XD
[ Dale ★ a este Jungkook de 20 años]
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top