Era la tarde del domingo y Yoongi estaba afuera en su balcón, leyendo el periódico. Jimin no había salido todavía, así que pensó que era libre. Sorbió  su café, volteando otra página en el periódico, leyendo sobre los eventos y tragedias que ocurrieron recientemente y no tan recientemente en LA.

"Yoongi! Yo tenía razón! Esta soleado fuera!" Jimin gritó detrás de él. Yoongi gimió, poniendo su periódico abajo y poniéndose de pie.

"Jimin, que es lo que dice mi taza otra vez?"

"¿por qué eres tan gruñón todo el tiempo? Estoy tratando de animarte!" Jimin resopló, cruzando los brazos sobre el pecho y haciendo pucheros.

"tal vez porque no dejas de ser tan jodidamente molesto y me estas alertando sobre el tiempo! Jimin, no me importa dos mierdas sobre el clima, como,  no podría importarme menos. y tal vez si dejaras de pedir que me despertara en la mitad de la noche para preguntarme sobre el clima, que coño molesto! Por el amor de Dios! ". Yoongi ladró

Jimin desplegó sus brazos y su puchero se convirtió en una pequeña mueca. Su cuerpo quedó inerte y dejó caer la cabeza. Yoongi inhaló, mirando al chico de arriba abajo. Tal vez fue un poco demasiado duro.

"Jimin---  ,"

"Podemos preguntar acerca de otras cosas, sabes! ¿Te gustaría eso? Podemos hablar de la comida y L.A. y la moda y la música y podemos hablar de los días de lluvia! eso es mejor, Yoongi? Eso haría que no estés mas de malhumor?" Jimin preguntó quién estaba más feliz que antes.

"Oh, Dios mio."