vol. 14
Los colores naranjados rosados del cielo se mezclaban entre sí, dando una etérea bienvenida a la mañana de aquel tan hermoso día.
Todos se encontraban dormidos, o al menos la mayoría de los que habitaban la casa, pues SeungYeon parecía no haber podido cerrar los ojos desde que la noche inició.
—¿Yeon?, ¿estás despierto? — Felix balbuceó un tanto adormilado, moviéndose un poco para sentir el cuerpo a su lado —, ¿qué haces despierto tan temprano?, son recién las cinco de la mañana.
El albino se quedó en silencio en un vago intento de ignorar a su amigo, quien ya hacía estirándose en su lugar de los colchones unidos.
—Yeon — volvió a llamar, ahora un poco más fuerte que antes —. Son las cinco de la mañana, ¿no puedes dormir?
—Tengo miedo — terminó por confesar en un hilo de voz —, ¿y si YoungHyun llega?
El de ojos azules resopló para sus adentros antes de acercarse más al cuerpo del menor, esperando por abrazarlo.
—Los dos están a salvo aquí, Yeon — el aludido gimió bajito, aferrándose más al cuerpo de Felix por el temor de tener que alejarse —. Ni YoungHyun ni HeeSook van a volver a lastimarlos, ¿de acuerdo? Ellos no te harán nada mientras nos tengas a mis padres y a mí.
SeungYeon asintió aún con el miedo recorriendo por todo su ser, pues no era equivocada la idea de no haber podido dormir solo por el terror de que sus padres llegaran para hacerles daño.
—Se me ha quitado el sueño — murmuró Felix nuevamente, evitando soltar cualquier bostezo que le contradijera —, ¿quieres dormir o me ayudarás a preparar una sorpresa que tengo para HyunJin?
El albino abrió los ojos dejando ver en ellos un breve destello de felicidad :—¿Le harás una sorpresa a Hyunjin?
Felix asintió con una sonrisa.
—Sí, había estado pensando demasiado en darle algo que muestre que yo estoy interesado en él, de la misma forma que él lo está de mí.
—¿Y qué le darás? — preguntó mientras se levantaba del regazo del mayor, para dejar que se acomodara.
—Es una sorpresa, Yeon — dijo con obviedad antes de tomar de su tanque de oxígeno y levantarse del improvisado colchón —. Iré a lavarme los dientes y prepararé lo que necesitaremos en la sala, ¿de acuerdo?, recuerda que estás en tu casa, sí necesitas darte un baño puedes tomar ropa de la mía igual y sí SeungMin despierta, también dile.
El de cabellos blanquecinos terminó por asentir repetidas veces con una sonrisa, reafirmando el comentario que alguna vez escuchó de HyunJin al hablar con JeongIn.
Felix verdaderamente era un Sol para cualquiera que lo tuviera en su vida.
El alto volumen de la música hizo que tanto SeungMin como JooHyun salieran de sus respectivas habitaciones al mismo tiempo.
—Buen día, SeungMin — saludó la mujer al chico recién despierto.
—Ah, buen día, JooHyun, ¿que tal durmió?
La mayor sonrió mientras peinaba sus cabellos azabaches en una alta coleta.
—Demasiado bien, ¿tú qué tal?
—Bien también, gracias por preguntar.
JooHyun le dedicó una dulce mirada antes de acercarse a él para alborotar un poco de sus cabellos oscuros.
—Iré a preparar el desayuno, ¿te gustaría acompañarme?
—Con todo gusto.
Ambos caminaron hacia el inicio de las escaleras, disponiendo de ellas para poder bajar hacia el primer piso de la gran casa.
JooHyun abrió los ojos con sorpresa cuando vio a Felix y a SeungYeon cantando animadamente una canción mientras amasaban una extraña masa. SeungMin se acercó a su hermano para ver de cerca qué era lo que estaba haciendo.
—Lee Felix, ¿Qué se supone que le haces a mi cocina?
SeungYeon emitió un grito aterrador mientras que el rubio dejaba de amasar su masa al ver a su madre frente a él, con una expresión seria en su rostro y sus dos manos sujetadas a su cintura.
—Ah, mamá — el pecoso se empezó a reír un poco incómodo de la situación —. Bueno, verás...
—¡Es una sorpresa para Hyunjin! — interrumpió SeungYeon con una extensa sonrisa dibujada en sus labios.
Felix asintió un poco avergonzado, JooHyun estaba a punto de hablar cuando el teléfono de su hijo comenzó a sonar.
—Responde la llamada, Yeon y Min me ayudarán a calentar el desayuno que dejó tú papá y después me hablarás de eso que dijo SeungYeon.
—Está bien, mamá — el rubio terminó por decir antes de salir de la cocina, yendo directamente a la sala de estar y responder finalmente su celular.
Una sonrisa se dibujó en su rostro cuando vió el nombre brillando en la pantalla de su celular, sus dedos aceptaron rápidamente la llamada, llevando su celular a su oído.
—HyunJin, hola — habló en un tono dulce de voz, dibujando una sonrisa que HyunJin ni siquiera puede ver.
—Felix, hola — el castaño respondió desde la otra línea, de lejos se puede escuchar los gritos de varios niños y a su padre gritando —, ¿Cómo estás?
—Estoy bien, Hyun — Felix miró por detrás de su hombro, revisando que nadie lo estuviera viendo —, ¿Tú cómo estás?
—Yo estoy bien, gracias por preguntar, ojitos — pudo escuchar la risa de HyunJin del otro lado de la línea —. Bueno, llamaba para saber sí... ¿tienes planes para esta tarde?
Felix esbozó una sonrisa en sus labios tan pronto escuchó las palabras de Hyunjin en su oído.
—No, estoy totalmente libre, ¿Por qué? — sin haberlo querido, su voz salió en un raro tono que pudo adivinar que se trataba de ser un poco seductor.
—Bueno, es que yo....— HyunJin dejó de responder por el teléfono, ya que se escuchaba que le hablaba a alguien lejano en su casa —; perdón, estoy un poco ocupado. Hoy es el cumpleaños de Jinni y me gustaría saber sí ¿te gustaría venir?, Ella no me ha dejado de insistir en invitarte y siendo sincero, también tengo muchas ganas de verte, ¿Qué dices, ojitos?
El pecoso sonrió contra el teléfono, sin saber muy bien que responder, la felicidad que sentía en ese momento no se podía comparar con nada, el nudo en su garganta lo dejaba muy bien en claro.
—Le pediré permiso a mis padres, HyunJin — terminó por decir en un tono de voz un poco torpe —. Yo te afirmo en un rato, ¿Estás de acuerdo?
La risa de HyunJin se volvió a hacer presente del otro lado de la línea.
—Claro, Felix. Esperaré tu afirmativa entonces — el castaño emitió un sonido lejano de un beso —. Nos vemos entonces.
—Sí, nos vemos.
Felix terminó la llamada, llevó su celular hacia su pecho mientras sonreía extenso, los miles de sentimientos que vivían dentro de su cuerpo estaban a flor de piel.
Guardó su celular en su bolsillo y volvió a la cocina, su madre se encontraba riendo tras ser espectadora de una falsa batalla de rap entre los dos gemelos.
—¡Felix! — SeungYeon gritó con fuerza, dispuesto a llamar a su amigo —. Le gané a SeungMin en una batalla de rap. Nadie puede contra el grandioso y guapo Kim Yeon.
Felix sonrió tras escuchar las palabras de su amigo.
—Sí, Yeon, eres el mejor para el rap.
—¡Se supone que estás de mi lado, Lix!
—¡No, SeungMin!, ¡Girasol está de mi lado!
JooHyun se aclaró la garganta, dando por terminada la discusión de aquellos dos. Con una mirada seria se giró hacia los tres jóvenes, cruzó sus brazos y enarcó las cejas.
—¿Girasol?, ¿Acaso se están refiriendo a Felix?
SeungYeon sonrió un poco tímido, balbuceó un poco mientras corría detrás de su hermano, cómo sí aquello le ayudara a esconderse de la hermosa mujer que demandaba control.
—¿Entonces?, ¿Me dirán?
—Sí, nos referimos a Felix — el albino asomó su cabeza por el hombro de su hermano gemelo, JooHyun en cambio sólo siguió manteniendo su mirada intensa contra él —. ¡Todo es culpa de HyunJin!, Él no deja de darle girasoles y es pegadizo llamarle de esa forma.
—HyunJin realmente está interesado en su hijo, JooHyun.
SeungMin y SeungYeon se miraron entre sí, mantenían sonrisas sarcásticas en sus rostros, provocando con sus palabras que las mejillas de Felix se enciendan poco a poco.
JooHyun apartó la vista de los gemelos, ahora interesándose más en su hijo, que tenía la mirada abajo, evitando que alguien pudiera ver el calor en su rostro.
—Desde la primera vez que vi a HyunJin aquí en mi casa, supe que él realmente estaba interesado en Felix — la mujer volvió su mirada al guisado que calentaba sobre la estufa —. Apuesto que él fue quién te llamó, ¿No es así, Fefe?
El pecoso alzó la mirada al fin cuando escuchó la voz de su madre llamándole.
—¿Eh? — soltó un poco desconcertado, ladeó sus ojos hacia sus amigos, SeungYeon parpadeaba con un encanto falso y simulaba pintar sobre un lienzo, gracias a ellos supo que su madre hablaba de HyunJin —. Ah, sí.
SeungYeon soltó un chiflido, mientras sus manos tomaban a su hermano de los hombros y lo zarandeaba de un lado a otro.
—Aún recuerdo cuando mi DoWoon cocinaba postres y se los entregaba a mi amiga SooYoung, para que ella me los diera a mí. Era tan romántico, ¿Saben?
Los chicos quedaron boquiabiertos mientras JooHyun hablaba de los momentos que tuvo cuando recién había empezado a fijarse en su esposo. Sus tan alabados años de oro.
—Un día me hizo galletas en forma de vestidos, porque él sabía lo mucho que me gustaba diseñar. Él siempre fue un sueño para mí — la mujer volvió a sonreír, mientras tomaba algunos platos y en ellos servía la comida —. Anden, vayamos a desayunar.
SeungMin y SeungYeon asintieron, ayudando a JooHyun a servir la mesa, mientras Felix se quedaba quieto, a un lado de su madre.
—Fefe, siempre me ayudas a servir la mesa, ¿Pasa algo, cielo? — la mujer de cabellos negros se volvió hacia su hijo, mantenía su aura tranquila demostrando el grandioso tipo de madre que ella era.
—Bueno, yo... — Feliz tragó saliva rápidamente, se sentía nervioso estar en esa situación, especialmente porque jamás tuvo que pedir permisos, la mayoría de las veces sus padres eran quien lo obligaban a salir —. HyunJin me ha invitado a la fiesta de su sobrina y bueno, me preguntaba sí tú, ¿Podrías darme permiso para ir?
JooHyun lo miró de soslayo, su expresión era fría y parecía poder leer todos sus pensamientos con sólo prestar un poco de atención a sus facciones. Una sonrisa apareció repentinamente en sus labios gruesos.
—Claro, Felix. Te daré dinero para que puedas irte en el metro, yo me quedaré con SeungMin y SeungYeon — la mujer tomó de las mejillas a su hijo, dándole un leve apretón en esas áreas pecosas del adolescente —. Ah, pero cuando vuelvas, no quiero que te quejes cuando ese par te robe a tu madre.
Felix simplemente se dedicó a reír, sabía perfectamente que su madre lo adoraba a él y también a sus amigos revoltosos. Ese par de gemelos también se habían robado los corazones de sus padres.
—Muchas gracias, mamá, no llegaré tarde.
—Está bien, Felix. Regresa con cuidado — JooHyun caminó hacia la salida de la cocina para pasar al comedor —. Ven a desayunar pronto, Fefe. Se va a enfriar.
—¡O me comeré tu comida!
—Kim SeungYeon, no debes ser así de irrespetuoso con quienes son amables contigo.
La voz relaja de SeungMin y los chillidos de SeungYeon no se hicieron esperar. Con una sonrisa curvada en sus labios, Felix envió su afirmativa a la invitación de HyunJin, después simplemente fue a desayunar con su madre y sus amigos.
La gente en el metro había optado por llegar en momento exacto que él decidía viajar hacia la casa de HyunJin. La gente se encontraba abarrotada en el angosto lugar, dando a entender que el transporte se encontraba en su hora pico.
Felix simplemente se mantenía parado en su lugar, no se movía siquiera, pues pensaba que con el mínimo movimiento en falso, terminaría siendo aplastado. Y no sólo él, su tanque de oxígeno también se vería envuelto en su problema.
Sus respiraciones eran leves, sus cánulas nasales le ayudaban completamente a qué pudiera estar un buen rato sin toser. Aunque eso no evitara que uno de sus famosos mareos le atacara.
Cerró los ojos e inhaló profundamente cuando sintió todo su mundo girarse. Se mantuvo con su mano apoyada a uno de los barandales de los asientos, esperando no llamar suficientemente la atención.
Sus pies de pronto se volvieron débiles y las bocanadas de aire que inhalaba se hicieron constantes. Varios de los pasajeros que iban sentados en los asientos del metro, se levantaron para ayudar a auxiliarlo.
—¡Abran paso!, ¡No se amontonen mucho! — una mujer de cabellos rojizos gritaba en toda su extensión. Su delgada mano tomó a Felix del brazo y le ayudó a mover su tanque de oxígeno para cuando le brindara su apoyo para sentarse —. Por favor, eviten amontonarse mucho, el chico necesita aire.
Felix simplemente comenzó a toser desesperadamente, el repentino sonido seco y forzado que emitía lograba alterar a cualquier pasajero. La mujer de cabellos rojizos se mantenía a su lado, mientras ele extendía un pañuelo para que pudiera limpiarse.
El pecoso simplemente volvió a inhalar y exhalar en movimientos lentos, esperando que su cuerpo dejara de estar tenso y por fin su respiración se regulara.
—Gracias — fue lo único que pudo pronunciar hacia la mujer mayor que se encontraba a su lado, aún con la voz un poco entrecortada.
—No es nada. ¿Te encuentras un poco mejor? — los ojos marrones de la mujer se quedaron detenidos en su rostro, pero contrario a lo que pensó, aquella mirada marrón no le incomodaba en lo absoluto.
—Sí, me siento mejor, gracias por ayudarme — el rubio esbozó una sonrisa directamente hacia la mayor, que parecía bastante amigable.
Ninguno de los dos volvió a hablar, tal parece que dicho incidente quedó atrás pues todos los pasajeros volvieron a sus respectivos asuntos. Felix jugaba con sus dedos, de vez en cuando miraba a la mujer de cabellos rojizos, queriendo decir algo más pero su miedo por hablar a personas desconocidas, le consumía.
—¿Quieres decirme algo? — la voz femenina le hizo sobresaltar en su lugar, cuando sus ojos azules se posaron en la dueña de esos cabellos rojizos como una manzana, pudo sentir la calidez de esos ojos marrones. Iguales a los de una madre.
—Bueno, yo... — Felix suspiró un poco antes de asentir y hablar —. Yo de verdad le agradezco mucho su ayuda, creo que tener tanta gente alrededor me hizo tener un ataque. Además, usted no estaba en la necesidad de ayudarme, realmente gracias.
—No tienes nada que agradecer, desde que te vi un poco mareado quise ayudar, pero no sabía sí debía meterme o no. Soy Lee SunMi, es un gusto.
—Lee Felix, el gusto es mío.
Ambos se quedaron callados por un instante, el ambiente era menos tenso que antes, Felix realmente se sentía un poco mejor de que aquella misteriosa mujer le ayudara.
—La verdad, Felix, me recuerdas mucho a mi hijo — el aludido se giró en dirección a SunMi, que hablaba tan serena que le daba una sensación de calidad —. Mi hijo tiene asma, y tal vez no es la misma enfermedad que tú tienes, pero cuando te vi, mi instinto me pidió que te ayudara, porque es algo que me encantaría que alguien hiciera con mi pequeño. Él tiene seis años.
El rubio sintió una sensación de calidez inundar su corazón, ningún desconocido jamás le había dicho unas palabras tan reconfortantes, lo cuál le hizo sonreír.
—Estoy seguro que su hijo es muy fuerte — una sonrisa se esbozó en los esponjosos labios del adolescente —. Me diagnosticaron EPOC* cuando tenía tan sólo siete años. La mayoría de la gente que es diagnosticada con EPOC tienen antecedentes de fumadores, pero existe un 30% de personas cómo yo, que jamás fumaron. Lo que me provocó la enfermedad fue la deficiencia de alfa-1 antitripsina*. Mis padres de verdad se esforzaron por tener un hijo, lástima que cuando yo nací, en lugar de darles felicidad, sólo causé tristeza.
—No creo que hayas causado tristeza a tus padres, Felix. Se nota que ellos realmente quisieron tener un hijo, todos los padres amamos a nuestros hijos sin importar qué. Estoy segura que tus padres te aman por sobre todas las cosas. Jamás pienses lo contrario, de seguro eres un Ángel para ellos.
SunMi se levantó de su asiento tan pronto la próxima estación se nombró, Felix imitó su acción, llegando a estar frente a frente una vez más.
—Yo...— Felix suspiró mientras asentía —. Muchas gracias, SunMi, de verdad usted ha animado mi día.
—No hay de qué, lo hice con gusto.
El metro se paró en la estación a la que recién llegaban, SunMi ayudó a Felix a cargar con su tanque de oxígeno, mientras esté sostenía el regalo que llevaba para la fiesta de la niña, así ambos saliendo juntos.
—Te deseo una vida llena de éxitos, Felix. Te mereces todo lo bueno.
El adolescente sonrió cuando la mujer mayor le sonrió con cariño, acomodó su bolso y finalmente ella partió con su propio camino. Felix sonrió, ahora creía que existían Ángeles sin alas rodando por el mundo.
Cuando llegó a la casa de HyunJin, podía escuchar un par de canciones infantiles inundando los oídos de cualquiera que pasaba por ese vecindario. Suspiró un poco, en su ropa llevaba varias veces limpiando el sudor en sus manos. Se encontraba tan nervioso.
Finalmente se armó de valentía y tocó el timbre, al cabo de unos minutos una mujer de apariencia alegre abrió la puerta. Ella iba vestida con un vestido de color rojo y un sombrero en forma de caramelo.
—Hola, ¿Puedo ayudarte? — el rostro de la mujer se le asemejaba a alguien, pero simplemente no podía identificarla en ese momento.
—Eh, yo...— aclaró su garganta antes de demostrar su más grande sonrisa —. Un gusto, soy Lee Felix, HyunJin me invitó.
De pronto el rostro de la mujer se iluminó más de lo que creía, ella hacía una reverencia antes de extenderle la mano.
—Hwang YeJi, soy la hermana mayor de HyunJin — ahora Felix comprendía por qué aquella mujer se le hacía tan parecida, era la hermana de HyunJin —. Anda, pasa, HyunJin está en el jardín con los niños.
Felix le agradeció, tomó su tanque de oxígeno y entró por toda la extensión del gran pasillo de la entrada. Cuando pareció llegar a lo que era la sala de estar, YeJi llegó a su lado, mientras le señalaba que la siguiera.
Después de caminar por un rato, finalmente llegaron a la parte trasera de la casa, era un jardín extremadamente grande. Podía ver a varios niños corriendo de un lado a otro, había un gigante inflable con forma de Hello Kitty y las decoraciones con el mismo estampado.
—¡Felix!, ¡Estás aquí! — HyunJin lo abrazó tan pronto lo vio.
Felix correspondió el abrazo, sin darse cuenta de la vestimenta de HyunJin.
—Hola Hyun, ¿Dónde está Jinni?, Le he traído un obsequio.
El castaño negó mientras le sonreía :—No te hubieras molestado, ojitos. Deja le hablo.
HyunJin se alejó de él por unos cuantos segundos, de pronto una niña de cabellos caramelos se acercó a él. Ella llevaba un vestido negro con unos cuantos detalles rosas, llevaba un sombrero similar al de un bufón y tenía dos corazones negros pintados en sus mejillas.
—¡Príncipe Felix!, ¡Eres Cinnamaroll!
La niña lo abrazó fuertemente, Felix asintió sin entender por completo a lo que se refería la menor.
—Te he traído un obsequio, muchas felicidades, Jinni.
—¡Muchas gracias, príncipe Felix!
La niña tomó el obsequio y después se alejó para seguir jugando con sus amigos. El rubio se giró hacia HyunJin, quién parecía retener una risa.
—HyunJin, ¿Por qué ella me llamó la Cinnamaroll?, ¿De qué estaba hablando?
El castaño negó mientras se acercaba al pecoso, su brazo pasó por sus hombros y con su brazo le enseñó toda la decoración de la fiesta.
—Jinni es fan de Kuromi, la viste, ¿No?, Era su disfraz. Ella pidió que toda su fiesta fuera con la temática de los personajes de Sanrio. Mírame, soy Pompompurin.
Felix le miró sin entender. HyunJin llevaba un sombrero color café en su cabeza, su playera era de un color amarillo no tan claro, unos tirantes color café, al igual que su pantalón y sus zapatos.
—Y bueno, creo que Jinni creyó que eras Cinnamaroll. Mira, deja te muestro una foto.
El de ojos verdes tomó la mano del contrario, guiándolo a una decoración donde se encontraban todos los personajes que HyunJin mencionaba. Sus mejillas se pintaron de color carmesí cuando se dio cuenta que efectivamente, el se había vestido como el llamado Cinnamaroll.
Llevaba unos pantalones rectos de color blanco y una camisa color azul cielo. Una chaqueta blanca cubría su torso del frío y hacía conjunto con sus converse del mismo color. Para finalizar, sus ojos oceánicos parecían darle una apariencia igual a la del mismo personaje. HyunJin soltó una carcajada cuando tomó una diadema con un par de orejitas de conejo y las puso en su cabeza. Definitivamente era Cinnamaroll.
—¡HyunJin! — protestó cuando vio que su pintorcito se reía de cómo se veía con esas orejitas esponjosas.
—¡Perdón, ojitos!, Pero de verdad te ves tan...
—¡Cinnamaroll!
Unas voces infantiles llamaron la atención de ambos. Seis niñas junto a la festejada habían hecho presencia, con un sólo niño también. Felix los miró un poco confundido cuando vio a todos los infantes atentos a sus movimientos.
—Príncipe Felix, mira, son mis amigos — Jinni jaló al pecoso de la manga de su chaqueta —. Ella es JiWoo, JinSol, SeolYoon, Lily, HaeWon, KyuJin... — señaló a cada una de las niñas, que todas iban vestidas de un personaje distinto : Pochacco, Bad Badtz-Maru, My Melody, Hello Kitty, Keroppi —. Ah, y HyeongJun — terminó por mencionar al niño que completaba a los LittleTwinStars.
—Se ven todas muy bonitas, Jinni — mencionó el rubio, acariciando con suavidad el cabello de la festejada.
—¡Vamos a jugar, príncipe Felix!
El aludido apenas iba a hablar cuando sintió pequeñas manos jalando de su ropa, cuando se giró a ver a HyunJin para pedir por ayuda, era demasiado tarde. Todos estaban jalando a Felix hacia el gigante inflable.
—¡Hwang YunJin!, ¡No te lleves a mi cita! — se quejó HyunJin con un puchero.
YeJi llegó a su lado mientras se reía al ver a Felix rodeado de un círculo de niñas y un niño, que cantaban totalmente felices.
—Yo creo que Jinni tiene algo en contra de nosotros los Hwang, te quitó a tu novio y a mí me quitó a mi esposa.
HyunJin se giró hacia YeJi, podía verla burlarse de que su pequeña hija había sido más astuta para pasar tiempo con el de ojos azules.
—Felix no es mi novio.
YeJi llevó una paleta hacia su boca e hizo una expresión de fastidio, yéndose a otro lado del jardín. Ella sabía algo que él no.
EPOC* : Enfermedad pulmonar obstructiva crónica. Es una enfermedad pulmonar inflamatoria crónica que causa la obstrucción del flujo de aire de los pulmones. Los síntomas incluyen dificultad para respirar, tos, producción de moco (esputo) y sibilancias.
Deficiencia de alfa-1 antitripsina* : Es una afección en la cual el cuerpo no produce suficiente cantidad de AAT, una proteína que protege de daño a los pulmones y al hígado. Esta afección puede llevar a que se presente EPOC y enfermedad hepática (cirrosis).
holaa, lamento muchísimo tardar tanto tiempo en actualizar, tuve un mes muy difícil, el capítulo siempre lo dejaba a medias, en un principio tuve un bajón cuando me enteré de la salida de jinni de nmixx, se dan cuenta que es uno de mis personajes y sí me dolió:(
además tuve que trabajar, ayudar en mi casa, etc. espero darles más actus en lo que entro a la escuela, es mi último semestre y realmente quiero tener un buen desempeño.
otra cosa, he dejado una imagen en multimedia cómo referencia de los personajes de los que hablé de jinni, jeje.
por último, me gustaría decirles que he hecho un grupo para interactuar con todas las personitas que me leen, así que sí les gustaría estar, el link estará en mi biografía e igualmente lo publicaré en mi tablero de mensajes, espero pueda verles ahí.
gracias por esperarme. espero hayan tenido felices fiestas, les adoro mucho!<3
edit: wattpad no me deja publicar links, aquí está el grupo por sí quieren meterse, gracias<3
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