Aemond no se queda con el lujo de la duda aquella noche y con su mueca más prominente irrumpió en la habitación de su hermano mayor sin quiera molestarse en tocar, el sujeto en cuestión se encontraba deshaciendo el nudo de sus botas sentado sobre la cama.

— ¿Que demonios? ¿Nadie te enseño a golpear? —Aemond no se molesto en ser sutil y se acercó directamente a Aegon.

— ¿Donde estabas?
Aquello era una amenaza, no una pregunta.

—En el mismo lugar en el que estabas tú —El mayor de los príncipes alza una ceja con una mueca divertida.

— ¿Por que le llevaste allí? —Aemond extiende sus brazos y pesca al rubio por el cuello de su camisa con tanta ferocidad que le hace poner de pie.

—Suéltame imbecil —Gruñe el mayor removiéndose y así zafándose de su agarre —Ella fue por su cuenta —Explica acomodando sus ropas —Y yo le encontré allí después de que vio lo que estabas haciendo con Alys —Confiesa y vuelve a sentarse sobre la cama para tirar de los cordones de su bota nuevamente.

Aemond da varios pasos hacia atrás pasmado por lo que su hermano ha dicho, las palabras de Aegon fueron tan dolorosas como un cuchillo cortando la piel.

— ¿Ella...?
De pronto se sentía agitado, se pasó una mano por el rostro intentando disipar aquel sentimiento de culpa.

—Ella lo vio todo —Aclara el mayor con tono tajante, el rostro lloroso de la castaña aparecía en su mente una y otra vez —Y no lucia particularmente contenta —Aclara, sus palabras no estaban ayudando al joven —
Aunque no parecía recordarlo luego —Al decir aquello Aegon no le observa, por el contrario tiene su vista puesta en sus zapatos mientras ríe —No de la forma en la que imaginas hermanito —Enfatiza antes de que su hermano le suelte un golpe puesto que ya había comenzando a avanzar de nuevo hacia el —Recorrimos las calles de seda, es todo.

— ¿Desde cuando es que se llevan tan bien? —El menor entrecierra los ojos.

— ¿Acaso importa? —Aegon frunce el ceño —Pasaste años golpeándome y gritándome por referirme a ella como un girasol desvaído —Evidencia — ¿Ahora que ya no lo hago también lo harás? —La mirada del rubio hacia Aemond es desafiante mientras que se pone de pie —Tienes suerte de que yo haya estado ahí o tu pequeño girasol se habría pasado la noche mojando la almohada con lágrimas.

—Gracias —Traga saliva con dureza constandole soltar aquello.

—Ella... No es tan desagradable —Admite —Solo es algo torpe y tonta.

Aem: Mhh...

Aegon apoya una mano sobre la espalda de su hermano —Ahora, si no te importa —Le acompaña hacia la puerta —Me voy a dormir.

[...]

Mientras Aemond no había querido participar en ninguno de los torneos, Valerys los había arrasado a casi todos en aquel día.
En ese instante se encontraba a tan toll momentos de comenzar el último mientras que preparaba a su caballo, en tanto Luke saltaba a su alrededor y Jace intentaba ayudarle en los mínimos detalles.

— ¿Casco?
Pregunto el moreno mientras ella lo sostenía en alto.

—Lo tengo.

— ¿Fusta?
Volvió a constatar Jace.

—Aquí —Ella levanta el látigo a su vista.

—Entonces ya está todo —Asegura mientras suspira con una sonrisa en los labios para acercarse a ella y tomar sus manos —Mi favor esta contigo aunque... Se que no lo necesitas para ganar —Sus ojos se observan —Lo harás de todos modos.

— ¿Y lo dudas? —Luke es quien irrumpe aquel momento separando a ambos de un tirón —Nunca había visto a un caballo moverse así —Comenta con entusiasmo refiriéndose al torneo anterior del cual había salido fascinado —Estuvo increíble.

—Tienes razón —Concreta Jacaerys observando a su prometida.

— ¿Me dedicarás tu victoria cuando ganes?
La pregunta de Luke hace sonreír a la castaña.

—De acuerdo, mi victoria será para ti —Afirma mientras procede a subir a su caballo —Los veo en la arena.

—Espera —Jace se sostiene de la crin del equino para poner su pie en el estribo e impulsarse hasta estar a la altura de la joven a quien besa en la mejilla —Para la buena suerte.

—Gracias Jace —Valerys le sonríe de forma inocente y una vez que Hace se encuentra en el suelo les saluda con la mano para comenzar a andar.

Ambos jóvenes le observan desaparecer en silencio hasta que es su hermano menor quien resopla riendo.

—Eso fue patético —El rostro de Lucerys refleja desagrado.

— ¿Tu crees?

—Si —Afirma de forma seria —Jace, van a casarse pronto y tu te sigues sonrojando cuando le tienes cerca —Luke pone una mano en su hombro —A las chicas les gusta lo hormonal, no lo tierno —Le zamarrea — ¿Por que crees que le gusta Aemond?

— ¿Le gusta Aemond?
El mayor frunce el ceño con desentendimiento.

—No es el punto —Aclara rodando los ojos —El es un hombre, y tú eres un niño —Recalca —Es hora de que seas un hombre por qué ella ya no es una niña.

BUENAS, casi me olvido de actualizar perdón jeje.
Winoooo he aquí capituliiiin.

Y bueno avisar que ya está publicado el capítulo 1 y 2 de la nueva novela El dragon de dls cabezas YYYYYY qué hay nuevos TikToks en la cuenta.

Así queeeee, espero que lo disfruten y nos vemos mañanita.