-¿Y pino?- preguntó Bill apenas llegando a la zona. Miro a Mabel con descontento.

-Fue a buscar algo en el sótano. Y vaya que se esta tardando. - se detuvo para pensar un momento.- Quizás la caja pesa demasiado para él... ¡Claro! Necesita ayuda. - miró a ambos gemelos curvando una sonrisa.- Bill, Will, vayan al sótano de la cabaña. Quizás incluso todavía no ha encontrado la caja. En fin, vayan rápido.  -

-Si . - dijo Will sonriendo, y su hermano sólo asintió.

Sin mas fueron adentrándose a la cabaña. Aunque tuvieron que regresar para preguntarle a Mabel donde se encontraba el sótano  ya que ellos ni sabían que existía uno.

Cuando al fin fueron informados se dirigieron al dicho lugar, y un silencio entre ellos se dio.

Abrieron la puerta y la cerraron de inmediato, adentrándose así al lugar sucio.

Caminaron e iban a gritar el nombre del castaño, aunque ya no fue necesario al ver lo enfrente de ellos con un... vestido.

Ambos Cipher se quedaron estáticos por unos segundos, el Pines parecía mirarse al espejo y dar se unas vueltas mientras sonreía de una manera que al rubio simplemente le parecía tierna, sin mencionar que el castaño se veía muy adorable y lindo con aquello puesto.

Cuando por fin Dipper se dio cuenta de la presencia de los gemelos, se quedó igual estático y se sonrojo hasta las orejas.

-¿D-Dipper?- mencionó el peli azul provocando incomodes al mencionado.

Will lo veía demasiado sorprendido. Esos eran los gustos de su hermano, admitía que Dipper no se veía mal, aunque también le causaba gracia ver lo así.  Sólo que se quedó callado y serio para no hacer sentir mal al contrario.

-¡Aw!- grito agudamente el castaño. - ¡N-No es lo que parece! - se excusó mientras se ponía nervioso y casi lloraba de la vergüenza.

Después Prosiguió a cubrirse con sus manos su cara como si aquello resolviera algo.

"Soy un tonto... ¿Cómo fue que el tiempo paso tan rápido? ¡Es mi culpa! ¡Que vergüenza!" Pensó el menor.

Will sintió un poco de pena por el castaño pero no lo culpaba del todo... aunque le parecía extraño, ¿Por qué se puso el vestido? Sería divertido escuchar su excusa. Miro a su hermano quien parecía que le brillaba los ojos de emoción o algo parecido. ¿Que le sucedía?

¿Le... estaba sangrando la nariz? Aunque era poco... por fortuna.

Bill tenía una enorme sonrisa muy extraña. Will lo pensó un momento antes de llevar acabo algo.

El oji azul chasqueo los dedos y dijo:

-Oh, m-me acabo de acordar que tengo que irme rápido. Bill será mejor que tú ayudes a Dipper con la caja. Adiós!- - levantó un pulgar para según él dar le ánimos a su hermano y que no la cagara, y sin más se fue como un ninja sigiloso.

Bill rodó los ojos haciendo un pequeño puchero, dirigiendo su mirada hacia Dipper quién temblaba y todavía permanecía con el rostro cubierto por sus delicadas manos.

"Se ve realmente lindo Así"

Respiro profundo y se acercó al castaño amablemente.

-Hey Pino...- moderó su voz y movimientos, tenía unas inmensas ganas de lanzarse contra él para abrazarle y besarlo de tal forma. Pero se contuvo. - ¿Que pasa? No debes avergonzarte... si?-

-P-Pero... ¡Estoy usando un vestido!- exclamó sin mirarlo, en su voz se notaba el pavor que sentía.

-¡Y te ves bien en eso! Muy lindo, debes sentirte orgulloso. - comentó Bill mientras ponía sus manos en los hombros del menor, quería hacerle sentir en confianza.

-No es fácil... Además un chico no debe vestir así. - dijo apenas mientras apartaba muy lentamente sus manos de sus rostro. Dejando apreciar sus bellos ojos donde amenazaban con salir unas lágrimas. Su pelo revuelto de esa forma, contando que usaba un lindo vestido corto era una vista perfecta para el rubio. Que, en cualquier momento sentía que se iba a desplomar ahí mismo.

Bill se limpio con su brazo la nariz, no se sorprendía que haya sangrado...

A no ser por que vio la atenta mirada de su Pino, que le decía que le estaba brindado su atención y que sería mejor que le contestará pronto.

-Hey Tranquilo, olvidemos estos ¿Si? No le contaré a nadie. Te lo prometo. Ni a tu hermana. - sonrió comprensivamente. Acercándose un poco más al castaño sin ser tan evidente.

-¿Cómo puedo asegurar que no me mientes?- cuestionó Pines no muy seguro de las palabras del rubio.

Bill se lo pensó un poco y miró con rapidez aquella caja donde estában los vestuarios de la obra. 

Lo que tengo que hacer por ti. Pensó mientras se mordía el labio levemente.

-Mmm... ¡Pues mírame!- dijo Bill mientras se alejaba y busca algo en especifico en aquella enorme y aseguraba que pesada caja marrón.

-¿Pero que haces...?- preguntó con menos vergüenza y curiosidad. Vio como el rubio se ponía un vestido muy grande y gastado, que suponía que era el vestuario de la abuela. Aunque se veía realmente gracioso y ridículo.- Hahahahaha... eres muy divertido. - aquellas carcagadas sonaron como un eco en la mente de Bill.

-¿Ves? Por cualquier cosa, tú también podrías divulgar que yo también use vestido. - aclaró mientras se acercaba al menor con una sonrisa confiada y un rubor muy notable. Aunque Dipper no le tomó importancia a ésto último.

-Haha, supongo que si pero... al menos tu no te ves como una chica. - agregó mientras se cruzaba de brazos, casi olvidando que tenía un vestido.

Las postura del menor eran una ternura para el mayor. Quién apenas podía formular una respuesta ante lo que le decía el castaño.

-Hey Pino, deja de pensar en eso.... -

-... Gracias Bill... - sonrió agradecido con un rubor en sus mejillas.

-E-Ehm... si, Mabel no está esperando. Cambiate y llevemos la caja afuera. -

-Bien. -

Dipper se cambio con cierta confianza, mientras que Bill observaba aquella espalda pálida y su cuerpo tan... delgado y frágil.

Dipper era demasiado...

Hermoso.

Sus caderas eran perfectas y aquel trasero... demonios. ¿Era sano que un chico de su edad pensará en esas cosas?

Cuándo Dipper al fin término y Bill igual se quitó el vestido, ambos los depositaron en la caja ordenadamente. Y entre los dos se llevaron la caja hacia afuera.

(...)

Al día siguiente, Bill caminaba por el bosque solo con aquel extraño y misterioso libro que se había encontrado la vez anterior.

Pensando lo que la hermana de Dipper le había dicho el día anterior que hiciera. Enfrente de él.

De su Pino.

-¿Confesar mis sentimientos?- se dijo así mismo recordando lo que Mabel le había dicho.

Y lo peor fue que se lo dijo enfrente de Dipper quién sólo lo miro confundido. Aunque claramente esté No sabia que se referían a él.

-Voy a matar a estrella fugaz.- dijo entre dientes enfadado.

Mientras seguía pensando por que Dipper era tan difícil de conquistar. Aunque admitía que eso era una de las grandes cosas que le gustaba del castaño. Que no se dejaba caer tan fácilmente. Eso y lo despistado e inocente que podía llegar hacer.

Pero... Bill ya no estaba tan seguro de seguir intentándolo.

Después de un rato caminando solo, regreso a la cabaña. Donde resivió la calidad bienvenida de soledad.

Su hermano y Mabel estaban en el sofá viendo pato tective, y al parecer no notaron su vaga presencia.

Pero su pregunta hizo eco:

-¿Y donde está Stan?- preguntó Bill.

-Fue al banco a cambiar un boleto de lotería. -

-Lo normal sería que primero preguntarás por Dipper. - aclaró Will sin mirarlo, más concentrado en lo que veía por la TV.

-Lo sé... ¿Creen que tenga oportunidad de que él y yo enserio podamos ser... ?-

-¡Claro que sí Bill! Ya llegaron a un beso. ¡No puedes hecharte para atrás!- dijo la castaña mirándolo determinación.

-Aunque de hecho debía ser respiración boca a boca y fue algo forzado. - comentó Will como si nada, estaba tan relajado y despreocupado.

-Cállate güey. - le dijo Mabel mientras le golpeaba con suma delicadeza su cabeza.

-Dejemos eso aún lado. ¿Dónde está? -

-¿Quién? - dijieron Will y Mabel al mismo tiempo.

-Pino. -

-¿Quién es ese?- volvieron a decir ambos con una mirada confusa.

-Ahh!!! Dipper pues. -

-Ahhh... en su cuarto. - respondió Mabel sonriendo

-Bien. -

-¿Que harás? -

-No sé. Sólo quiero verlo. -

Bill subió las escaleras hasta llegar a la habitación de los Pines donde estaba vez sólo estaba el menor de ellos.

Aquel castaño el cuál no paraba de pensar todas las noches.

-Hey Pino. -

"Capítulo 11:
Vestido"